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Legim
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INDICACIONES OFF ROL escribió:PARTICIPANTES: Todo los integrantes de la banda. Legim, Deadpool, Uracha, Jin Surfer, Guny, Slade Wilson, Worgulv y Yuzi Read.
MODERACIÓN:
- Grupo en el que está Legim, modera Legim.
- Grupo en el que está Deadpool (Saito), modera él.
- Grupo en el que está Uracha, moderapulgarcito, él.
ORDEN: No hay. Que cada uno postee cuando pueda y respete al resto.
- DATOS:
- Legim irá a la taberna
- Uracha al muelle, luego podrá ir por las calles
- Deadpool por los alrededores de la base naval (Sin entrar) observandola para recabar información al tiempo que cumple la misión encomendada por Legim.
- Jin Surfer irá a la taberna para conocer a Legim, y/o a Worgulv .
- Guny estará por las calles o el puerto, para encontrarse con Uracha y/o Yuzi Read.
- Slade Wilson estará en la misma zona que Deadpool, es libre de hacer lo que quiera por esos lares.
- Worgulv estará o irá a la taberna, donde conocerá a Legim y/o a Jin Surfer.
- Yuzi Read estará en el muelle o por las calles, como desee, con el fin de encontrarse con Uracha y/o Guny.
PD: El objetivo es hacer que Legim, Uracha y Deadpool digan: ¡Hostia, vente a mi banda! Por lo que no molaría crear enemistades xD Piques tontos si, por ejemplo a Guny le llamaré enano seguro, pero para picarle xD
Pasaron unas semanas desde que dejamos atrás a los Sons... o más bien ellos a nosotros, ya que nosotros nos quedamos en la isla al menos dos días más por mi culpa, ya que necesitaba aún recuperarme de todo el cansancio acumulado. Deadpool, o Saito, no tenía muy claro como prefería que lo llamase, se había unido a mi banda, una nueva banda que iba a formar ahora, tras la guerra. Y por supuesto, mi fiel Uracha estaba a mi lado pasara lo que pasara.
Tras esos dos días guardamos el mineral en un lugar seguro y empezamos a partir a varias islas del mar del este, ya que buscábamos tripulantes para la banda. Sabía que no iba a encontrar aquí a un tipo demasiado fuerte, pero con encontrar a algunos de fuerte corazón y determinación, me bastaba, pero sin ningún éxito previo íbamos a la única isla que nos quedaba por visitar, Shellstown.
Shellstown era una isla que tenía el gobierno, pero además poseía una base naval bastante conocida en este mar, siendo precursora de grandes marines a lo largo de la historia. Aquí una de dos, o no encontraba a nadie, o me encontraría a multitud de locos dispuestos a jugarse la vida, algo perfecto al fin y al cabo.
Llegamos de manera disimulada en una zona muy poco vigilada para nuestra fortuna y Simurgh se rodeó en mi brazo de inmediato, acababan de llegar tres hombres a Shellstown, tres hombres muy peligrosos y que si quisieran podrían tomar el control en apenas unas horas.
- Bueno, ya hemos llegado... ya sabéis que hacer, nos tenemos que dividir y buscar personas adecuadas para la banda... ¡VAMOS! Como no logremos el objetivo juro que me cargo la base naval... aunque quizás lo haga de todas maneras jajaja
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El agente del CP caminaba por las calles de aquella isla, sin embargo caminaba bajo la forma de su segunda identidad. Portaba su máscara naranja de espirales dejando solo ver su ojo derecho, el cual era de color rojo. Su pelo era corto y moreno y se podía ver por encima de la máscara, portaba además una sudadera de color negro. Sus pantalones largos eran del mismo color y sus sandalias eran de madera y de un tono marrón claro. En su espalda llevaba dos guadañas, una roja y una blanca, de los mangos de estas, salía una cadena, cada una atada a una de las muñecas del enmascarado. Se dirigía a una taberna, había tenido un combate duro con unos marines y estaba algo cansado. Había sabido de los problemas que de la ciudad del alfa y el omega, el capullo había pasado de ir a ayudar a los demás agentes y tan solo se había largado. Con todo el jaleo que se montó según tenía entendido, le sería fácil decir que estuvo peleando algo alejado de la plaza para tener una excusa válida, ahora tan solo debía hacer una cosa y era seguir a los suyo como de costumbre.
Entró a una taberna del lugar, al entrar se dio cuenta de que mucha gente se le quedó mirando, lo normal en un tipo con cincuenta millones por su cabeza. Ahora se dirigió a la barra y se sentó en ella de forma tranquila, observaba las distintas miradas que caían sobre él. Algunas eran de asco, otras de furia y enfado, luego estaban las que mostraban miedo y para finalizar las miradas raras de los borrachos. El sitio ahora comenzó a parecerle incómodo, no le costaría mucho acabar con toda la gente del bar en poco tiempo, sin embargo ahora le entró la pereza. El camarero se acercó tragando saliva sin decir nada, era un hombre mayor de pelo grisáceo y ojos negros. Tenía barba y bigote y además vestía una camisa marrón clara y un pantalón largo negro que acababa en unos zapatos. El enmascarado entendió que el tipo estaba esperando a ver lo que pedía. Jin ladeó la cabeza unos segundos hacia la derecha observándole a través de su ojo rojizo, no podía creerse que ese hombre le tuviera tanto miedo. Se llevó la mano a la nuca y decidió usar su personalidad “tonta” por así decirlo, de ese modo podría pasar por un loco imitador.
La gente se quedó de piedra al escuchar su voz y su forma de ser, algunos suspiraron volviendo a lo suyo y otros lanzaron unas simples carcajadas. El camarero se tranquilizó y le sonrió con amabilidad poniéndole al poco tiempo el mojito. Era algo increíble, pero todos habían picado y muchos pensaron que sería un joven tratando de imitar a Jin para dar miedo. ¿Qué fue lo que hizo a continuación el moreno? El puto loco no tenía otra cosa que hacer, que tirarse la mitad del mojito por encima de la cabeza. Sus cabellos se empaparon y este mantuvo su posición tranquila. La gente se quedó mirando con la boca abierta y el camarero dio dos pasos atrás pensando qué clase de bicho raro era aquella persona enmascarada. Ahora Jin miró al camarero con su actitud actual y volvió a ladear la cabeza a un lado, acto seguido la puso normal y se quedó mirándole fijamente. Después de unos segundos comenzó a hablarle de forma tranquila y calmada, como si lo que le estaba diciendo fuese lo más normal del mundo mientras se llevaba la mano a la nuca.
La cara de aquel hombre era un poema, no sabía si echarlo o ponerse a gritar. Lo que si era cierto, es que Jin suspiró mientras se alejaba un poco de la barra y empezaba a caminar dirigiéndose a una de las esquinas. Las miradas no se apartaban de él ni un solo momento, una vez vio una mesa libre y alejada de los demás, se sentó de forma tranquila y colocó su mojito en la mesa. Después comenzó a mirar a los demás de forma siniestra como si fuera un violador del bosque antiguo o algo así. Poco a poco la gente continuaba a lo suyo ignorando a aquel tipo, eso hizo que el moreno se pusiera serio, había conseguido pasar desapercibido que era lo que le interesaba, no estaba en una isla muy aventajada para él. Ahora se cruzó de brazos en la mesa mientras se puso a pensar en sus cosas. No tenía a donde ir ahora, desde que su cabeza tenía precio, nunca se estableció en ningún sitio. Iba de un lado a otro como si de un solitario se tratase.
Se preguntó así mismo en voz alta aquella figura enmascarada mientras suspiraba, ahora se bajó un poco la máscara, quedando a la vista un poco su frente, el agujero por el que veía ahora estaba en su boca. Deslizó el líquido del vaso por el agujero bebiéndoselo totalmente para después colocarse bien la máscara y pasar la mano por el agujero limpiando las gotitas de los bordes. El sabor de aquella bebida le gustaba bastante y le relajaba muchísimo. Lo mejor de todo es que no pensaba pagarlo, cuando se aburriera seguramente saldría corriendo a toda velocidad empleando el Soru y de ese modo podría escapar del viejo barbudo sin ningún problema. Miró por una de las ventanas comprobando con total calma el cielo, las nubes se movían despacio por el azulado terreno en el que flotaban. Ahora Jin frunció el ceño mirando con algo de seriedad por la ventana, sin duda alguna ya estaba pensando en hacer alguna locura, su ojo se veía serio y no como antes.
Entró a una taberna del lugar, al entrar se dio cuenta de que mucha gente se le quedó mirando, lo normal en un tipo con cincuenta millones por su cabeza. Ahora se dirigió a la barra y se sentó en ella de forma tranquila, observaba las distintas miradas que caían sobre él. Algunas eran de asco, otras de furia y enfado, luego estaban las que mostraban miedo y para finalizar las miradas raras de los borrachos. El sitio ahora comenzó a parecerle incómodo, no le costaría mucho acabar con toda la gente del bar en poco tiempo, sin embargo ahora le entró la pereza. El camarero se acercó tragando saliva sin decir nada, era un hombre mayor de pelo grisáceo y ojos negros. Tenía barba y bigote y además vestía una camisa marrón clara y un pantalón largo negro que acababa en unos zapatos. El enmascarado entendió que el tipo estaba esperando a ver lo que pedía. Jin ladeó la cabeza unos segundos hacia la derecha observándole a través de su ojo rojizo, no podía creerse que ese hombre le tuviera tanto miedo. Se llevó la mano a la nuca y decidió usar su personalidad “tonta” por así decirlo, de ese modo podría pasar por un loco imitador.
- Jin es un chico bueno y amable. ¡Póngame un mojito bien cargado amigo de barba gris!
La gente se quedó de piedra al escuchar su voz y su forma de ser, algunos suspiraron volviendo a lo suyo y otros lanzaron unas simples carcajadas. El camarero se tranquilizó y le sonrió con amabilidad poniéndole al poco tiempo el mojito. Era algo increíble, pero todos habían picado y muchos pensaron que sería un joven tratando de imitar a Jin para dar miedo. ¿Qué fue lo que hizo a continuación el moreno? El puto loco no tenía otra cosa que hacer, que tirarse la mitad del mojito por encima de la cabeza. Sus cabellos se empaparon y este mantuvo su posición tranquila. La gente se quedó mirando con la boca abierta y el camarero dio dos pasos atrás pensando qué clase de bicho raro era aquella persona enmascarada. Ahora Jin miró al camarero con su actitud actual y volvió a ladear la cabeza a un lado, acto seguido la puso normal y se quedó mirándole fijamente. Después de unos segundos comenzó a hablarle de forma tranquila y calmada, como si lo que le estaba diciendo fuese lo más normal del mundo mientras se llevaba la mano a la nuca.
- Muchas gracias abuelito barbudo, tenía que regarme un poco, no quisiera marchitarme en un día de calor como este.
La cara de aquel hombre era un poema, no sabía si echarlo o ponerse a gritar. Lo que si era cierto, es que Jin suspiró mientras se alejaba un poco de la barra y empezaba a caminar dirigiéndose a una de las esquinas. Las miradas no se apartaban de él ni un solo momento, una vez vio una mesa libre y alejada de los demás, se sentó de forma tranquila y colocó su mojito en la mesa. Después comenzó a mirar a los demás de forma siniestra como si fuera un violador del bosque antiguo o algo así. Poco a poco la gente continuaba a lo suyo ignorando a aquel tipo, eso hizo que el moreno se pusiera serio, había conseguido pasar desapercibido que era lo que le interesaba, no estaba en una isla muy aventajada para él. Ahora se cruzó de brazos en la mesa mientras se puso a pensar en sus cosas. No tenía a donde ir ahora, desde que su cabeza tenía precio, nunca se estableció en ningún sitio. Iba de un lado a otro como si de un solitario se tratase.
- ¿A dónde podría dirigirme ahora?
Se preguntó así mismo en voz alta aquella figura enmascarada mientras suspiraba, ahora se bajó un poco la máscara, quedando a la vista un poco su frente, el agujero por el que veía ahora estaba en su boca. Deslizó el líquido del vaso por el agujero bebiéndoselo totalmente para después colocarse bien la máscara y pasar la mano por el agujero limpiando las gotitas de los bordes. El sabor de aquella bebida le gustaba bastante y le relajaba muchísimo. Lo mejor de todo es que no pensaba pagarlo, cuando se aburriera seguramente saldría corriendo a toda velocidad empleando el Soru y de ese modo podría escapar del viejo barbudo sin ningún problema. Miró por una de las ventanas comprobando con total calma el cielo, las nubes se movían despacio por el azulado terreno en el que flotaban. Ahora Jin frunció el ceño mirando con algo de seriedad por la ventana, sin duda alguna ya estaba pensando en hacer alguna locura, su ojo se veía serio y no como antes.
Yuzi Read
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Bajé del barco que me había traido allí era ya mi tercer trabajo como grumete en lo que había salido del nuevo mundo, había conocido a varias personas pero aún así seguía sin conocer tanto mundo como quería y por supuesto seguía sin encontrar banda, pero no todo era malo al menos ya había abandonado el Grand Line y me habían traido a una isla de East blue, aquí sería más fácil encontrar a bandas a medio formarse en las que pudiera unirme suponía que no sin convencer o luchar contra el capitán pero claro a mi eso me daba igual no lucharía si me decía que no y me interesase la bandalo único que tendría que hacer sería convencerle.
Miré a mi alrededor me había quedado rondando por el muelle mientras decidía si quedarme en la isla por un tiempo o volver a subirme a otro barco que me llevara a otra isla, opté por la primera opción tenía dinero suficiente para quedarme unos días en una posada, además si me quedaba en un lugar fijo esperando bandas sería más facil que si me movía buscandolas yo además el viaje había sido más largo de lo que a mi me hubiese gustado aunque por el lado bueno en aquel último viaje había conocido más islas del paraíso en las que habíamos decidido parar. De momento andé hacía donde acababa el muelle pero no salí de él, había un par de bares allí y zonas de descanso no eran los mejores pero de momento me valía pedí un refresco cualquiera no me apetecía pedir alcohol, no tenía la costumbre de beberlo si no era en eventos especiales además muchas veces su simple olor la mareaba, pagué, lo cogí y fuí a una pequeña zona de descanso del muelle, me sente en un banco bastante bien ciudado donde no había nadie, dejé a mi lado el rifle y saqué mi inseparable libreta después pasé a escribir en el espacio que había dejado para el día de hoy con su fecha "Llegada a mi primera isla del Est Blue, Shellstown. Ahora procederé a buscar banda pirata, hasta que la encuentre me quedaré en la ciudad."
Apunté la hora fijandome en el reloj grande que se veia en la pared de uno de los bares, dejé de escribir, guardé todo y me quede observando a mi alrededor vi como llegaban barcos algunos pesqueros, otros piratas, algunos solamente eran barcas pequeñas de baja calidad; la gente se movía de un lado para otro hablando, comprando pescado recien traído era un ambiente agradable aunque fuese ruidoso me sentía bien alli, decidí ponerme a leer.
Miré a mi alrededor me había quedado rondando por el muelle mientras decidía si quedarme en la isla por un tiempo o volver a subirme a otro barco que me llevara a otra isla, opté por la primera opción tenía dinero suficiente para quedarme unos días en una posada, además si me quedaba en un lugar fijo esperando bandas sería más facil que si me movía buscandolas yo además el viaje había sido más largo de lo que a mi me hubiese gustado aunque por el lado bueno en aquel último viaje había conocido más islas del paraíso en las que habíamos decidido parar. De momento andé hacía donde acababa el muelle pero no salí de él, había un par de bares allí y zonas de descanso no eran los mejores pero de momento me valía pedí un refresco cualquiera no me apetecía pedir alcohol, no tenía la costumbre de beberlo si no era en eventos especiales además muchas veces su simple olor la mareaba, pagué, lo cogí y fuí a una pequeña zona de descanso del muelle, me sente en un banco bastante bien ciudado donde no había nadie, dejé a mi lado el rifle y saqué mi inseparable libreta después pasé a escribir en el espacio que había dejado para el día de hoy con su fecha "Llegada a mi primera isla del Est Blue, Shellstown. Ahora procederé a buscar banda pirata, hasta que la encuentre me quedaré en la ciudad."
Apunté la hora fijandome en el reloj grande que se veia en la pared de uno de los bares, dejé de escribir, guardé todo y me quede observando a mi alrededor vi como llegaban barcos algunos pesqueros, otros piratas, algunos solamente eran barcas pequeñas de baja calidad; la gente se movía de un lado para otro hablando, comprando pescado recien traído era un ambiente agradable aunque fuese ruidoso me sentía bien alli, decidí ponerme a leer.
Deadpool
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Llegamos a la isla de Shellstown gracias a Simurgh, una especia de dragón mágico que cura y se convierte en brazalete (Luego dicen que Deadpool toma drogas...) Al fin de unas cuantas horas de viajes Saito pisó tierra firme.
-¡Por fin! - dijo mientras se estiraba- Esto de volar es aburrido, al menos en un barco podría a ver echo algo productivo – bostezó mientras que caminaba y se rascaba la cabeza despreocupadamente-
El capitán Legim comenzó a dar un repaso breve a lo que estuvimos hablando los dos días que nos quedamos en la playa.
-Que sii... Te traeremos nuevos zagales. Apropósito capitán, iré con mi verdadero aspecto ya que es una isla del gobierno y a Deadpool lo conocen, por lo que no mencionéis mi nombre que podríamos cagarla – se rió algo preocupado- Cuanto menos relación tenga Deadpool contigo mejor, podré servir de espía e incluso entrar en la base naval como si fuera mi casa.
Saito siguió caminado en dirección a la base naval, pasando por la zona de los mercaderes vio a un hombre mayor que vendía sake, después de un largo viaje le apetecía tomarse algo fresquito.
-Abuelo, dame una botella de sake fresquito – le lanzó una bolsita con 100 berry- Quédese con el cambio.
El hombre mayor se sorprendió al ver las 100 monedas, ya que la botella de sake costaba 5 berrys y con esa cantidad podría a verse comprado una caja. El anciano rebuscó en el cubo helado donde estaban las botellas, buscando la mas fría para dársela. Al encontrarla se la dio y le dio la gracias por lo del cambio, Saito sonrió y se marchó dándole algunos tragos al sake.
-¡Que bien sabe esto, si señor! -pensaba al recorrer la bebida alcohólica por su garganta mientras caminaba- Al cabo de un minuto caminado y bebiendo, pudo ver a un grupo de marines que corrían en formación y entraban en un edificio.
-Ya he llegado... - dijo al ver la base naval enfrente suya.-
Saito se acercó hasta la puerta de la base y se sentó en los escalones de esta, tenía que recabar información y aparte buscar nuevos miembros, pero antes quería acabar de beber aquella bebida echa por los dioses. Por lo que siguió inclinando el codo en las escaleras de la base naval mientra observaba a la gente que pasaba.
-¡Por fin! - dijo mientras se estiraba- Esto de volar es aburrido, al menos en un barco podría a ver echo algo productivo – bostezó mientras que caminaba y se rascaba la cabeza despreocupadamente-
El capitán Legim comenzó a dar un repaso breve a lo que estuvimos hablando los dos días que nos quedamos en la playa.
-Que sii... Te traeremos nuevos zagales. Apropósito capitán, iré con mi verdadero aspecto ya que es una isla del gobierno y a Deadpool lo conocen, por lo que no mencionéis mi nombre que podríamos cagarla – se rió algo preocupado- Cuanto menos relación tenga Deadpool contigo mejor, podré servir de espía e incluso entrar en la base naval como si fuera mi casa.
Saito siguió caminado en dirección a la base naval, pasando por la zona de los mercaderes vio a un hombre mayor que vendía sake, después de un largo viaje le apetecía tomarse algo fresquito.
-Abuelo, dame una botella de sake fresquito – le lanzó una bolsita con 100 berry- Quédese con el cambio.
El hombre mayor se sorprendió al ver las 100 monedas, ya que la botella de sake costaba 5 berrys y con esa cantidad podría a verse comprado una caja. El anciano rebuscó en el cubo helado donde estaban las botellas, buscando la mas fría para dársela. Al encontrarla se la dio y le dio la gracias por lo del cambio, Saito sonrió y se marchó dándole algunos tragos al sake.
-¡Que bien sabe esto, si señor! -pensaba al recorrer la bebida alcohólica por su garganta mientras caminaba- Al cabo de un minuto caminado y bebiendo, pudo ver a un grupo de marines que corrían en formación y entraban en un edificio.
-Ya he llegado... - dijo al ver la base naval enfrente suya.-
Saito se acercó hasta la puerta de la base y se sentó en los escalones de esta, tenía que recabar información y aparte buscar nuevos miembros, pero antes quería acabar de beber aquella bebida echa por los dioses. Por lo que siguió inclinando el codo en las escaleras de la base naval mientra observaba a la gente que pasaba.
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Shellstown, una apacible ciudad en medio del East blue, un día agradable, despejado y con una suave brisa que refrescaba el ambiente y arrastraba con ella las pocas nubes del cielo dándole al lugar un clima templado y acogedor. Pero algo llamaba la atención de los pacíficos habitantes de esa isla, algo que sin duda no veían todos los días, ni más ni menos que un enano.
Era increíble, a pesar de lo pequeño que era en comparación a ellos no hacía más que acaparar las miradas de todo aquel que mirase hacia el suelo, era molesto ser en cierto grado el centro de atención, pero mientras no me molestasen no habría problemas. Me encontraba en el puerto de una isla del East Blue, si, lo sé, está muy lejos del Grand Line, pero es lo que tiene viajar de isla en isla. Ya que había tenido la suerte de acabar en ese lugar tan tranquilo decidí tomarme un descanso tras el largo viaje y relajarme tomando algo frente al mar. En un paseo marítimo al lado del muelle había un par de bares y algún que otro kiosko. Me acerqué a el kiosko, salté hacia la barra y pedí una tableta de chocolate, tras eso me saqué de una bolsa unas cuantas monedas, suficientes para pagar la tableta y la dejé delante del sorprendido dependiente. Tras unos segundos de incómodo silencio por fin asimiló el hecho de que, en efecto no estaba alucinando por lo que me dio la tableta y cogió el dinero, todavía con la boca abierta por la sorpresa. Salté de nuevo hacia el suelo con el chocolate entre las manos y me dirigí hacia la barandilla del paseo marítimo. Una vez allí me situé sobre ésta, desenvolví el chocolate y abrí mi boca para disponerme a devorar ese manjar. De pronto cerré la boca y para mi sorpresa el chocolate había desaparecido, miré hacia atrás y vi a tres humanos, uno de ellos con mi comida.
- Valla, valla... ¿Pero qué es esto? ¿De verdad planeabas comerte todo ésto tu solo? Pero si es más grande que tú Jajaja. Déjame que te ayude. - Dijo el que me había cogido el chocolate con una sonrisa burlona, los otros dos comenzaron a reírse de forma estridente junto con él. Por sus pintas yo diría que eran simplemente unos vándalos o unos piratas de poca monta buscando problemas.
Por mi parte me levanté y comencé a caminar tranquilamente por encima de la barandilla con la cabeza baja y alejándome de ellos. Era impaciente, impulsivo e hiperactivo, de todas formas no solía salirme de mis casillas con rapidez. Pero había algo que me hacía estallar de forma súbita, un detonador que hacía que un pequeño interruptor en mi cabeza hiciera "Click". Si había algo que de verdad me cabreara y me hiciera estallar... Era que me quitasen la comida de entre las manos. Cuando estaba a unos metros de ellos me di la vuelta de repente, me llevé la mano a mi espalda y agarré mi escudo, el cual se desplegó cubriéndome todo el brazo. Acto seguido comencé a correr hacia ellos a toda velocidad, cuando estaba medio metro de ese desgraciado salté y le golpeé con todas mis fuerzas en la barbilla.
-Eh, mirad se va. Pobrecillo, al pequeño el han quitado el chocolate JAJAJA, vete a llorar con tu mama ena...- No llegó a acabar la frase, dado que al golpearle en la mandíbula con todo mi cabreo encima lo mandé por los aires haciendo que cayera al suelo.
Se retorcía del dolor como una cucaracha, mi golpe había hecho que se mordiera la lengua con tal fuerza que de su boca no paraba de salir sangre. Por mi parte cogí mi chocolate al vuelo y le dí un gran bocado mientras le fulminaba con una mirada de cabreo monumental. Los ostros dos retrocedieron para intentar cogerle, estaban acojonados, normal, había tumbadoa uno de ellos de un golpe.
- Oh, pobrecillo, ¿Te has mordido la lengua? ¿Nene no zabe hablad?. Escúchame bien porque sólo tendré paciencia para decírtelo una vez. Nunca, NUNCA, bajo ningún concepto, le quites la comida a un jodido enano ¿ESTAMOS?. Y ahora largo ya me habéis jodido lo suficiente el buen humor. - Dicho ésto me di la vuelta y me senté de nuevo a disfrutar de mi comida al ver que esos tres huían con el rabo entre las piernas. De todas formas no me di cuenta de que... quizás había llamado un poco (Mucho) la atención de la gente que andaba por ahí.
Era increíble, a pesar de lo pequeño que era en comparación a ellos no hacía más que acaparar las miradas de todo aquel que mirase hacia el suelo, era molesto ser en cierto grado el centro de atención, pero mientras no me molestasen no habría problemas. Me encontraba en el puerto de una isla del East Blue, si, lo sé, está muy lejos del Grand Line, pero es lo que tiene viajar de isla en isla. Ya que había tenido la suerte de acabar en ese lugar tan tranquilo decidí tomarme un descanso tras el largo viaje y relajarme tomando algo frente al mar. En un paseo marítimo al lado del muelle había un par de bares y algún que otro kiosko. Me acerqué a el kiosko, salté hacia la barra y pedí una tableta de chocolate, tras eso me saqué de una bolsa unas cuantas monedas, suficientes para pagar la tableta y la dejé delante del sorprendido dependiente. Tras unos segundos de incómodo silencio por fin asimiló el hecho de que, en efecto no estaba alucinando por lo que me dio la tableta y cogió el dinero, todavía con la boca abierta por la sorpresa. Salté de nuevo hacia el suelo con el chocolate entre las manos y me dirigí hacia la barandilla del paseo marítimo. Una vez allí me situé sobre ésta, desenvolví el chocolate y abrí mi boca para disponerme a devorar ese manjar. De pronto cerré la boca y para mi sorpresa el chocolate había desaparecido, miré hacia atrás y vi a tres humanos, uno de ellos con mi comida.
- Valla, valla... ¿Pero qué es esto? ¿De verdad planeabas comerte todo ésto tu solo? Pero si es más grande que tú Jajaja. Déjame que te ayude. - Dijo el que me había cogido el chocolate con una sonrisa burlona, los otros dos comenzaron a reírse de forma estridente junto con él. Por sus pintas yo diría que eran simplemente unos vándalos o unos piratas de poca monta buscando problemas.
Por mi parte me levanté y comencé a caminar tranquilamente por encima de la barandilla con la cabeza baja y alejándome de ellos. Era impaciente, impulsivo e hiperactivo, de todas formas no solía salirme de mis casillas con rapidez. Pero había algo que me hacía estallar de forma súbita, un detonador que hacía que un pequeño interruptor en mi cabeza hiciera "Click". Si había algo que de verdad me cabreara y me hiciera estallar... Era que me quitasen la comida de entre las manos. Cuando estaba a unos metros de ellos me di la vuelta de repente, me llevé la mano a mi espalda y agarré mi escudo, el cual se desplegó cubriéndome todo el brazo. Acto seguido comencé a correr hacia ellos a toda velocidad, cuando estaba medio metro de ese desgraciado salté y le golpeé con todas mis fuerzas en la barbilla.
-Eh, mirad se va. Pobrecillo, al pequeño el han quitado el chocolate JAJAJA, vete a llorar con tu mama ena...- No llegó a acabar la frase, dado que al golpearle en la mandíbula con todo mi cabreo encima lo mandé por los aires haciendo que cayera al suelo.
Se retorcía del dolor como una cucaracha, mi golpe había hecho que se mordiera la lengua con tal fuerza que de su boca no paraba de salir sangre. Por mi parte cogí mi chocolate al vuelo y le dí un gran bocado mientras le fulminaba con una mirada de cabreo monumental. Los ostros dos retrocedieron para intentar cogerle, estaban acojonados, normal, había tumbadoa uno de ellos de un golpe.
- Oh, pobrecillo, ¿Te has mordido la lengua? ¿Nene no zabe hablad?. Escúchame bien porque sólo tendré paciencia para decírtelo una vez. Nunca, NUNCA, bajo ningún concepto, le quites la comida a un jodido enano ¿ESTAMOS?. Y ahora largo ya me habéis jodido lo suficiente el buen humor. - Dicho ésto me di la vuelta y me senté de nuevo a disfrutar de mi comida al ver que esos tres huían con el rabo entre las piernas. De todas formas no me di cuenta de que... quizás había llamado un poco (Mucho) la atención de la gente que andaba por ahí.
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Solo los dioses sabían como demonios, Worgulv había cruzado medio mar, hacia el East blue, tormenta tras tormenta, los vientos le habían conducido a una pequeña isla, la cual estaba coronada por un gran edificio, el hombre no había visto nada igual, acostumbrado a unas edificaciones mediocres, basadas en madera y paja, características de su pueblo, eso le parecía una proeza de algún dios, el gesto se le torció al ver el símbolo, que portaban aquellos que provocaron la destrucción de su pueblo, esa proeza de algún dios pagano tenia que arder por todos sus costados.
Pero eso podría esperar el hombre estaba cansado y el barco había quedado destrozado con la travesía, aun se preguntaba como pudo soportar tantas inclemencias del mar. El hombre no estaba relacionado con la cultura de estos mares, solo esperó que tuviesen el mayor invento del mundo, los templos a sus dioses donde se servia el néctar de los dioses, mas llamado tabernas. El hombre comenzó a caminar por las calle, había un montón de gente, vestían ropas extrañas, nada de pieles, solo simple tela,lo cual el hombre encontraba muy extraño, el idioma todavía era un misterio para él, pero podía defenderse con algunas palabras que resultaban parecidas.
Al cabo de unas cuantas calles a partir del puerto, pudo captar el olor a la carne asada, dioses, tenia mucha hambre, al seguir el olor, llego a un edificio del cual se podía oír carcajadas de jubilo y ruido en general, eso le recordó a las celebraciones después de una gran batalla, el hombre había encontrado su lugar, el templo a sus dioses, emocionado entro rápidamente, y con una gran sonrisa marcando el rostro. Cuando entro esa sonrisa se le borro de la cara, había unas de mesas con unos cuantos borrachos en ellas, eso no era un templo a sus dioses, era un insulto a los grandes salones de celebración de su pueblo, donde una gran mesa, acogía a los grandes guerreros que festejaban con bebida y grandes banquete.
Worgulv aproximo a la barra, un hombre mayor con barba y bigote se le acerco, ``Desea algo....señor?´´ el hombre anciano acababa de proferir algo, que demonios acababa de decir? Worgulv no tenia ni idea, este lo miro extrañado y lo miro de arriba a abajo, sin saber que decir miro a su alrededor, buscando algo que le pudiese servir de referencia, en una mesa vio a un hombre con un plato y una cerveza en la mano, Worgulv se llevo la mano a una de las anillas del cinturón desenfundando una de sus hachas, y dirigiéndola hacia el hombre de la mesa, miro al camarero con los ojos brillantes, el camarero se quedo atónito, `` Quiere algo de beber?, comida?, cerveza?..´´, Worgulv abrió los ojos de par en par, eso si lo había entendido``Cerveza´´ profirió el hombre con una voz profunda, el camarero sonrió y sirvió una jarra de cristal, de aproximadamente medio litro al hombre, Worgulv miro la jarra, ``mas grande´´dijo con dificultad, el camarero levanto una ceja, le retiro la bebida y le trajo una jarra grande de madera, que se asemejaba a un barril pequeño, pero podría contener al menos 3 litros, el hombre satisfecho, metió la mano en su bolsa y le lanzo una moneda de oro al camarero, este al cogerla abrió los ojos, eso no era un berry pero podía costar mucho mas, era una moneda de oro puro de su pueblo, cuando worgulv se sentó solo en una mesa a espaldas de la entrada el camarero le sirvió un plato con una pata de cordero, parecía que la moneda si podía valer mas que un barrilete de cerveza, el hombre no se pregunto mucho el porque de ese obsequio, empezó a comer y a beber como un salvaje, parecía que esa actitud no llamaba la atención entre los borrachos y la gente de la taberna.
Pero mientras worgulv se estaba dando un festín, todo el mundo guardo silencio, el hombre miro por encima del hombro cual podía haber sido la causa de este repentino silencio, mirando por encima del hombro, puedo ver a un hombre con una mascara y unas armas ciertamente extrañas, cuando este pidió una bebida se la tiro por la cabeza,el hombre giro la cabeza completamente¨¨¿Que clase de herejía...oh no es cerveza, bah en ese caso no importa¨¨, pero el instinto de el hombre le avisaba, era un depredador, las hachas tintineaban en la cintura del hombre, pero worgulv se giro a su mesa y siguió con su festejo , ignorando que el hombre se había sentado en una mesa justo detrás de él, la cerveza estaba fría y nada podía distraerle de su ritual para honrar a los dioses, llenándose el papo del néctar sagrado.
Pero eso podría esperar el hombre estaba cansado y el barco había quedado destrozado con la travesía, aun se preguntaba como pudo soportar tantas inclemencias del mar. El hombre no estaba relacionado con la cultura de estos mares, solo esperó que tuviesen el mayor invento del mundo, los templos a sus dioses donde se servia el néctar de los dioses, mas llamado tabernas. El hombre comenzó a caminar por las calle, había un montón de gente, vestían ropas extrañas, nada de pieles, solo simple tela,lo cual el hombre encontraba muy extraño, el idioma todavía era un misterio para él, pero podía defenderse con algunas palabras que resultaban parecidas.
Al cabo de unas cuantas calles a partir del puerto, pudo captar el olor a la carne asada, dioses, tenia mucha hambre, al seguir el olor, llego a un edificio del cual se podía oír carcajadas de jubilo y ruido en general, eso le recordó a las celebraciones después de una gran batalla, el hombre había encontrado su lugar, el templo a sus dioses, emocionado entro rápidamente, y con una gran sonrisa marcando el rostro. Cuando entro esa sonrisa se le borro de la cara, había unas de mesas con unos cuantos borrachos en ellas, eso no era un templo a sus dioses, era un insulto a los grandes salones de celebración de su pueblo, donde una gran mesa, acogía a los grandes guerreros que festejaban con bebida y grandes banquete.
Worgulv aproximo a la barra, un hombre mayor con barba y bigote se le acerco, ``Desea algo....señor?´´ el hombre anciano acababa de proferir algo, que demonios acababa de decir? Worgulv no tenia ni idea, este lo miro extrañado y lo miro de arriba a abajo, sin saber que decir miro a su alrededor, buscando algo que le pudiese servir de referencia, en una mesa vio a un hombre con un plato y una cerveza en la mano, Worgulv se llevo la mano a una de las anillas del cinturón desenfundando una de sus hachas, y dirigiéndola hacia el hombre de la mesa, miro al camarero con los ojos brillantes, el camarero se quedo atónito, `` Quiere algo de beber?, comida?, cerveza?..´´, Worgulv abrió los ojos de par en par, eso si lo había entendido``Cerveza´´ profirió el hombre con una voz profunda, el camarero sonrió y sirvió una jarra de cristal, de aproximadamente medio litro al hombre, Worgulv miro la jarra, ``mas grande´´dijo con dificultad, el camarero levanto una ceja, le retiro la bebida y le trajo una jarra grande de madera, que se asemejaba a un barril pequeño, pero podría contener al menos 3 litros, el hombre satisfecho, metió la mano en su bolsa y le lanzo una moneda de oro al camarero, este al cogerla abrió los ojos, eso no era un berry pero podía costar mucho mas, era una moneda de oro puro de su pueblo, cuando worgulv se sentó solo en una mesa a espaldas de la entrada el camarero le sirvió un plato con una pata de cordero, parecía que la moneda si podía valer mas que un barrilete de cerveza, el hombre no se pregunto mucho el porque de ese obsequio, empezó a comer y a beber como un salvaje, parecía que esa actitud no llamaba la atención entre los borrachos y la gente de la taberna.
Pero mientras worgulv se estaba dando un festín, todo el mundo guardo silencio, el hombre miro por encima del hombro cual podía haber sido la causa de este repentino silencio, mirando por encima del hombro, puedo ver a un hombre con una mascara y unas armas ciertamente extrañas, cuando este pidió una bebida se la tiro por la cabeza,el hombre giro la cabeza completamente¨¨¿Que clase de herejía...oh no es cerveza, bah en ese caso no importa¨¨, pero el instinto de el hombre le avisaba, era un depredador, las hachas tintineaban en la cintura del hombre, pero worgulv se giro a su mesa y siguió con su festejo , ignorando que el hombre se había sentado en una mesa justo detrás de él, la cerveza estaba fría y nada podía distraerle de su ritual para honrar a los dioses, llenándose el papo del néctar sagrado.
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Vueltas y más vueltas es lo que había estado haciendo durante los dos días que llevaba en la ciudad, por lo que había podido ver era una ciudad de tamaño medio con una base naval en esta, en los días anteriores había estado memorizando las calles de la ciudad ya que no se llevaba muy buen con la justicia y no era la primera vez que le acarreaba problemas, sin embargo ese día tenía planeado hacer una locura pero que me serviría para recolectar más información de la ciudad además de una vista increíble, por la cual muchos pagarían una fortuna.
Sin más preámbulos, comencé a recorrer un par de calles para acercarme al imponente edificio, el cual estaba vigilado por algunos sitios por marines, “bueno creo que rimero daré una vuelta para ver por dónde puedo subir sin que me pillen” pensé mientras comenzaba con la vuelta de reconocimiento, una vez terminé de dar la vuelta ya sabía más o menos por donde subir “unos pocos en la entrada principal, en la parte posterior del edificio dos patrullas de unos 5, dos parejas de marines que dan vueltas a la base, en los tejados de cada planta me ha parecido contar unos 10 marines por planta, más lo que se encuentren dentro, si subo por los costados del edificio posiblemente no me vean” pensé mientras me estiraba un poco para calentar los músculos. Una vez terminé de hacer los estiramientos, fui a uno de los costados del edificio y a través de unas cajas comencé a subir a la primera planta. Tras observar que ningún guardia del piso me veía me acerqué a la fachada que me subiría a la segunda planta, de igual manera que con la primera pero sin las cajas subí y así hasta encontrarme en la azotea del edificio, donde me pude sentar a descansar un rato y observar el maravilloso mar que se extendía delante de la ciudad.
Después de un rato allí subido me entró sed, por lo que tocaba bajar de la misma forma que para subir comencé el descenso aunque este podría ser más complicado pues si hacia algo mal me mataría en el peor de los casos, tras ir con el mayor cuidado que pude y en silencio con el fin de no llamar la atención de los guardias, conseguí bajar hasta la primera planta donde me tocó evadir a un par de guardias, acabando encima de unas escaleras donde pude ver a un hombre bebiendo, sin pensarlo dos veces salté cayendo delante de aquel hombre que estaba bebiendo en ese momento, cuando me recuperé de la caída me giré hacia el hombre.
-Disculpe, ¿me podría dar un trago de su bebida?, no sé donde venden buen licor, le compensaré comprándole otra botella- le dije al hombre que tenía delante de mí.
Sin más preámbulos, comencé a recorrer un par de calles para acercarme al imponente edificio, el cual estaba vigilado por algunos sitios por marines, “bueno creo que rimero daré una vuelta para ver por dónde puedo subir sin que me pillen” pensé mientras comenzaba con la vuelta de reconocimiento, una vez terminé de dar la vuelta ya sabía más o menos por donde subir “unos pocos en la entrada principal, en la parte posterior del edificio dos patrullas de unos 5, dos parejas de marines que dan vueltas a la base, en los tejados de cada planta me ha parecido contar unos 10 marines por planta, más lo que se encuentren dentro, si subo por los costados del edificio posiblemente no me vean” pensé mientras me estiraba un poco para calentar los músculos. Una vez terminé de hacer los estiramientos, fui a uno de los costados del edificio y a través de unas cajas comencé a subir a la primera planta. Tras observar que ningún guardia del piso me veía me acerqué a la fachada que me subiría a la segunda planta, de igual manera que con la primera pero sin las cajas subí y así hasta encontrarme en la azotea del edificio, donde me pude sentar a descansar un rato y observar el maravilloso mar que se extendía delante de la ciudad.
Después de un rato allí subido me entró sed, por lo que tocaba bajar de la misma forma que para subir comencé el descenso aunque este podría ser más complicado pues si hacia algo mal me mataría en el peor de los casos, tras ir con el mayor cuidado que pude y en silencio con el fin de no llamar la atención de los guardias, conseguí bajar hasta la primera planta donde me tocó evadir a un par de guardias, acabando encima de unas escaleras donde pude ver a un hombre bebiendo, sin pensarlo dos veces salté cayendo delante de aquel hombre que estaba bebiendo en ese momento, cuando me recuperé de la caída me giré hacia el hombre.
-Disculpe, ¿me podría dar un trago de su bebida?, no sé donde venden buen licor, le compensaré comprándole otra botella- le dije al hombre que tenía delante de mí.
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¿Dónde mejor iba a estar un pirata que en su barco? En una taberna. Había elegido a posta este lugar, en estos sitios siempre me había ido bien, ya que me había podido enterar de multitud de noticias, encontrarme con muchas personas importantes, o como mínimo una diversión asegurada, una taberna nunca te decepcionará.
El lugar estaba abarrotado cuando llegué, cosa que me gustaba, pero no solía hacerme notar hasta pasado ya un buen rato allí, era conveniente centrarse primero en ver quienes o como eran las personas que estaban en el lugar para saber si puedes hacer unas cosa u otras.
La gente me podía reconocer, así que robé una capucha que estaba sobre una silla y me la puse en seguida cubriéndome el rostro con esta. En una esquina estaba un vaso vacío con hielo, mesa a la que me dirigí colocando mi mano sobre el vaso para rellenarla y llevármela a la boca nada más sentarme como si fuese un cliente normal y corriente tomando su consumición.
Pasaron vario minutos y me había podido acostumbrar ya al ambiente y observar a muchas persona, no había nadie que pareciese pirata, todos eran ciudadano normales y algunos parecían marines en su tiempo libre, por lo que no había mucho que hacer, sería hora de irse mejor. Pero no lo hice, ya que alguien particular entró en el lugar, un tipo enmascarado.
- Vaya... ¿Otro Deadpool? - Pensé con una ligera sonrisa al tiempo que me recostaba observando sus movimientos.
No me hizo falta más de 3 minutos para darme cuenta de que esa persona estaba loca de atar... o más bien quería aparentarlo... en caso de lo segundo, estaba ocultando algo, que evidentemente sería su identidad, no todo el mundo iba con mascaras a pesar de que me estoy encontrando con muchos últimamente.
El enmascarado tras el espectáculo se sentó en una mesa apartada relajado, pero su actitud parecía diferente, ahora estaba serio, sin movimientos excéntricos. No cabía duda, estaba fingiendo esa manera de ser.
Un sonido metálico sonó de fondo, este era característico para los que acostumbramos a trabajar con metales, en mi caso las espadas. No era un sonido similar a estas, pero tampoco de cubiertos o platos... en cierto modo me recordaba a mi hacha pequeña, la cual casi nunca uso, ya que es un mero recurso... pero ¿Alguien con hachas aquí? Pronto pude apreciar al portador de estas, un rubio con una piel algo diferente, sus rasgos no eran del mar del este sin duda alguna, no sabía bien de quién podía tratarse, pero sin duda era diferente al resto de los que estábamos aquí.
Lo dejé de lado por un momento y me deshacía en alcohol por el suelo, recorriendo este deprisa, como si fuese un poco de alcohol que se derramaba hasta la mesa donde se encontraba el enmascarado. Este miraba a un lado, y aprovechando esto me materialicé como humano en su lado ciego bebiendo el mismo vaso de alcohol que en la otra mesa.
- Hace algo de calor ¿Verdad?... pero desde luego no tanto como para echárselo todo directamente a la cara exagerado jajajajaja- Dije entre risas golpeándole el hombro suavemente. Al instante me puse serio mirando lo que habían varios hombres del bar cuchicheando entre ellos. -Pronto va a haber pelea... ¿Me dices antes quién eres? No te preocupes, es por conocernos nada más, no haré nada con respecto a ello seas quien seas. ¿Acaso eres un agente de la Chiper Pol? - Pregunté descarado al desconocido ya que el único enmascarado que conocía era de dicha facción.
El lugar estaba abarrotado cuando llegué, cosa que me gustaba, pero no solía hacerme notar hasta pasado ya un buen rato allí, era conveniente centrarse primero en ver quienes o como eran las personas que estaban en el lugar para saber si puedes hacer unas cosa u otras.
La gente me podía reconocer, así que robé una capucha que estaba sobre una silla y me la puse en seguida cubriéndome el rostro con esta. En una esquina estaba un vaso vacío con hielo, mesa a la que me dirigí colocando mi mano sobre el vaso para rellenarla y llevármela a la boca nada más sentarme como si fuese un cliente normal y corriente tomando su consumición.
Pasaron vario minutos y me había podido acostumbrar ya al ambiente y observar a muchas persona, no había nadie que pareciese pirata, todos eran ciudadano normales y algunos parecían marines en su tiempo libre, por lo que no había mucho que hacer, sería hora de irse mejor. Pero no lo hice, ya que alguien particular entró en el lugar, un tipo enmascarado.
- Vaya... ¿Otro Deadpool? - Pensé con una ligera sonrisa al tiempo que me recostaba observando sus movimientos.
No me hizo falta más de 3 minutos para darme cuenta de que esa persona estaba loca de atar... o más bien quería aparentarlo... en caso de lo segundo, estaba ocultando algo, que evidentemente sería su identidad, no todo el mundo iba con mascaras a pesar de que me estoy encontrando con muchos últimamente.
El enmascarado tras el espectáculo se sentó en una mesa apartada relajado, pero su actitud parecía diferente, ahora estaba serio, sin movimientos excéntricos. No cabía duda, estaba fingiendo esa manera de ser.
Un sonido metálico sonó de fondo, este era característico para los que acostumbramos a trabajar con metales, en mi caso las espadas. No era un sonido similar a estas, pero tampoco de cubiertos o platos... en cierto modo me recordaba a mi hacha pequeña, la cual casi nunca uso, ya que es un mero recurso... pero ¿Alguien con hachas aquí? Pronto pude apreciar al portador de estas, un rubio con una piel algo diferente, sus rasgos no eran del mar del este sin duda alguna, no sabía bien de quién podía tratarse, pero sin duda era diferente al resto de los que estábamos aquí.
Lo dejé de lado por un momento y me deshacía en alcohol por el suelo, recorriendo este deprisa, como si fuese un poco de alcohol que se derramaba hasta la mesa donde se encontraba el enmascarado. Este miraba a un lado, y aprovechando esto me materialicé como humano en su lado ciego bebiendo el mismo vaso de alcohol que en la otra mesa.
- Hace algo de calor ¿Verdad?... pero desde luego no tanto como para echárselo todo directamente a la cara exagerado jajajajaja- Dije entre risas golpeándole el hombro suavemente. Al instante me puse serio mirando lo que habían varios hombres del bar cuchicheando entre ellos. -Pronto va a haber pelea... ¿Me dices antes quién eres? No te preocupes, es por conocernos nada más, no haré nada con respecto a ello seas quien seas. ¿Acaso eres un agente de la Chiper Pol? - Pregunté descarado al desconocido ya que el único enmascarado que conocía era de dicha facción.
- HABLO COMO MODERADOR:
1º- No voy a moderar a todos, solo a mi grupo. Al grupo de Deadpool le moderará Dead, y al de Uracha, Uracha, evidentemente xD Yo por lo menos solo lo haré en cosa puntuales que vea necesarias para amenizar algo que haya visto o leído. Si queréis que modere algo vuestro decírmelo en un MP, pls.
2º- Para mi amigo vikingo, Worgulv:
Los clientes de la taberna cuchillean mirándote de reojo, no paran de hacerlo mirándose los unos a los otros tras verte con unas risas y asintiendo entre ellos. Quizás tengas problemas pronto...
Uracha
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Estábamos volando encima de Simurgh durante un buen rato y lleguemos a Shellstown, nada mas llegar Legim nos dio unas cuantas ordenes las cuales estaban muy claras, buscar gente y reclutarla, y antes de separarnos este dijo una frase la cual me había gustado bastante, encontráramos gente o no, puede que ataquemos la base naval de la isla.
Cada uno tomemos un camino diferente y yo puse rumbo hacia el puerto no sabia si encontraría a alguien, pero tenia tiempo de sobra, sin parar de andar observaba a varias personas que estaban en aquel lugar pero siendo sincero ninguno merecía la pena, cuando de repente, escuche un ruido y vi a 3 tíos y uno de ellos tirado en el suelo, al parecer se habían metido con un ser muy pequeño, y la verdad era la primera vez que lo veía aquella persona tan pequeña comenzó a reírse de el tío tirado en el suelo y estos se fueron corriendo.
Me quede observando al chico, aunque la verdad no sabia bien como llamarlo y seguidamente me acerque a el. -Vaaaaaya, eres tan pequeño y te has ocupado tu solo, debes de ser alguien muy fuerte dije con mi tipica sonrisa, -Si no es mucho preguntar, ¿Qué eres? No creo que seas un simple enano es la primera vez que veo alguien como tu.- dije observando como este aun comía si tableta de chocolate y esperaba alguna respuesta por su parte.
-Por cierto, mi nombre es Uracha encantado de conocerte.- dije con tono bastante agradable.
Cada uno tomemos un camino diferente y yo puse rumbo hacia el puerto no sabia si encontraría a alguien, pero tenia tiempo de sobra, sin parar de andar observaba a varias personas que estaban en aquel lugar pero siendo sincero ninguno merecía la pena, cuando de repente, escuche un ruido y vi a 3 tíos y uno de ellos tirado en el suelo, al parecer se habían metido con un ser muy pequeño, y la verdad era la primera vez que lo veía aquella persona tan pequeña comenzó a reírse de el tío tirado en el suelo y estos se fueron corriendo.
Me quede observando al chico, aunque la verdad no sabia bien como llamarlo y seguidamente me acerque a el. -Vaaaaaya, eres tan pequeño y te has ocupado tu solo, debes de ser alguien muy fuerte dije con mi tipica sonrisa, -Si no es mucho preguntar, ¿Qué eres? No creo que seas un simple enano es la primera vez que veo alguien como tu.- dije observando como este aun comía si tableta de chocolate y esperaba alguna respuesta por su parte.
-Por cierto, mi nombre es Uracha encantado de conocerte.- dije con tono bastante agradable.
Worgulv
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El hombre estaba dando buena cuenta de su comida y su bebida, no era tan buena como la de su pueblo, pero podría servir como sustituto, estaba feliz, por fin podía beber hasta saciarse, o intentarlo. La comida era buena, al cabo de poco tiempo Worgulv ya estaba royendo el hueso, y pidiendo que le rellenasen el barrilete
Mientras el hombre bebía alegre, tres hombres le miraban y cuchicheaban, mientras se sonreían entre ellos, parecía que alguien buscaba juerga, cuando estos se levantaron y se dirigieron a su mesa, el hombre ni se entero estaba muy a gusto bebiendo y cumpliendo con su credo.
Cuando una mano toco el hombro de el hombre, este se sorprendió y se giro hacia el dueño de esta, sonriente, estaba de muy buen humor, ``a que has venido aquí extranjero? ´´ Worgulv al no entender casi ni una palabra de lo que decían, sonrió y levanto su barrilete, a forma de saludo cordial, `` te estas riendo de nosotros asqueroso barbudo??´´ dijo agresivo otro de los hombres, al notar una actitud no amigable, worgulv cambio el rostro intentando calmar los ánimos, ``amigos?´´ dijo con dificultad el hombre, intentando ser pacifico con los hombres, que parecían algo ebrios ,`` tu no eres nuestro amigo escoria extranjera´´ contesto el mas grande de los tres, acompañando la respuesta con un fuerte manotazo que tiro el barrilete al suelo, que se resquebrajo y derramo todo su contenido por el suelo, mientras los otros dos lo coreaban con carcajadas, el hombre tenia muy abiertos los ojos, en dirección a su barrilete ....`` Herejía...´´ pudo balbucear el hombre, en su religión eso era un insulto a sus dioses, y uno grave. Cuando el hombre se giro su expresión era de pura furia, la mano que colgaba al lado del taburete donde estaba sentado, ya tenia agarrada un hacha. Worgulv se levanto de su asiento, era mas alto que los tipejos herejes, las dos hachas ya estaban desenfundadas, `` ooh te has enfadado grandullón´´ dijo uno mientras los tres se reían, ¨¨ por los dioses¨¨ el hombre se enderezo por completo, estirando ambos brazos en posición de cruz respecto al cuerpo, con ambas hachas apuntando al suelo, y la cabeza agachada, `` hahahahaha esta borracho, quieres bailar por unas monedas barbudo? hahaha´´ antes de que los tres hombres rieran la mofa, en un rápido movimiento worgulv doblo las rodillas hacia un lado, y giro la cintura, provocando un movimiento rotatorio, cuando el hombrecillo, que estaba mas a la derecha de los tres, se quiso dar cuenta, un hacha ya estaba hundida en su costado, la carne se corto como la mantequilla, aquellas hachas estaban hechas con el regalo de los dioses que cayo del cielo, la carne no era nada para su filo, la sangre empezó a fluir rápidamente, `` Merecéis la muerte, herejes´´ dijo el hombre mientras hacia de nuevo un giro completo hacia el otro lado, descargando ambas hachas sobre el hombre de mas a la izquierda , este con un grito se cubrió con ambos brazos, las hachas se clavaron profundamente en la carne, mientras el hombre reía, Worgulv ya no era consciente de que estaba en una taberna rodeado de gente, que podría montar un escándalo, en su pueblo no existía nada como una autoridad regidora como la marina, cada hombre resolvía sus problemas personalmente, quizás pronto descubriría las reglas del juego en este lado del mar, pero ahora el solo pensaba en una cosa, masacrar a los herejes que habían escupido a la cara a sus dioses.
Mientras el hombre bebía alegre, tres hombres le miraban y cuchicheaban, mientras se sonreían entre ellos, parecía que alguien buscaba juerga, cuando estos se levantaron y se dirigieron a su mesa, el hombre ni se entero estaba muy a gusto bebiendo y cumpliendo con su credo.
Cuando una mano toco el hombro de el hombre, este se sorprendió y se giro hacia el dueño de esta, sonriente, estaba de muy buen humor, ``a que has venido aquí extranjero? ´´ Worgulv al no entender casi ni una palabra de lo que decían, sonrió y levanto su barrilete, a forma de saludo cordial, `` te estas riendo de nosotros asqueroso barbudo??´´ dijo agresivo otro de los hombres, al notar una actitud no amigable, worgulv cambio el rostro intentando calmar los ánimos, ``amigos?´´ dijo con dificultad el hombre, intentando ser pacifico con los hombres, que parecían algo ebrios ,`` tu no eres nuestro amigo escoria extranjera´´ contesto el mas grande de los tres, acompañando la respuesta con un fuerte manotazo que tiro el barrilete al suelo, que se resquebrajo y derramo todo su contenido por el suelo, mientras los otros dos lo coreaban con carcajadas, el hombre tenia muy abiertos los ojos, en dirección a su barrilete ....`` Herejía...´´ pudo balbucear el hombre, en su religión eso era un insulto a sus dioses, y uno grave. Cuando el hombre se giro su expresión era de pura furia, la mano que colgaba al lado del taburete donde estaba sentado, ya tenia agarrada un hacha. Worgulv se levanto de su asiento, era mas alto que los tipejos herejes, las dos hachas ya estaban desenfundadas, `` ooh te has enfadado grandullón´´ dijo uno mientras los tres se reían, ¨¨ por los dioses¨¨ el hombre se enderezo por completo, estirando ambos brazos en posición de cruz respecto al cuerpo, con ambas hachas apuntando al suelo, y la cabeza agachada, `` hahahahaha esta borracho, quieres bailar por unas monedas barbudo? hahaha´´ antes de que los tres hombres rieran la mofa, en un rápido movimiento worgulv doblo las rodillas hacia un lado, y giro la cintura, provocando un movimiento rotatorio, cuando el hombrecillo, que estaba mas a la derecha de los tres, se quiso dar cuenta, un hacha ya estaba hundida en su costado, la carne se corto como la mantequilla, aquellas hachas estaban hechas con el regalo de los dioses que cayo del cielo, la carne no era nada para su filo, la sangre empezó a fluir rápidamente, `` Merecéis la muerte, herejes´´ dijo el hombre mientras hacia de nuevo un giro completo hacia el otro lado, descargando ambas hachas sobre el hombre de mas a la izquierda , este con un grito se cubrió con ambos brazos, las hachas se clavaron profundamente en la carne, mientras el hombre reía, Worgulv ya no era consciente de que estaba en una taberna rodeado de gente, que podría montar un escándalo, en su pueblo no existía nada como una autoridad regidora como la marina, cada hombre resolvía sus problemas personalmente, quizás pronto descubriría las reglas del juego en este lado del mar, pero ahora el solo pensaba en una cosa, masacrar a los herejes que habían escupido a la cara a sus dioses.
Deadpool
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Saito se encontraba bebiendo su botella de sake, cuando de repente un hombre con un traje similar al de Deadpool cayó de pie delante de él, Saito dio un brinco del suelo al ver a esta persona aparecer de la nada.
- Cof cof cof, joder... se me a ido de conducto el sake cof cof cof, por esto siempre tengo el manta activado – le costaba hablar por culpa del cambio de conducto del sake-.
El hombre enmascarado, le preguntó educadamente si podía darle un trago a su bebida que estaba por la mitad.
- Claro muchacho cof cof -le lanzó la botella- Puedes tomartela entera, creo que no voy a poder saborearla de la misma forma.
Tras recuperarse observó al hombre enmascarado, se asemejaba tanto a Deadpool que le entraba ganas de ponerse la mascara y hacer el gilipollas delante de él, pero se contuvo y prefirió preguntarle su nombre.
-¿Como te llamas? Creo que me merezco saber el nombre de la persona que estuvo apunto de matarme – sonrió – Y apropósito... ¿donde coño estabas para aparecer tan de repente? ¿Estabas en la base naval?, ¿Eres marine?- acribilló Satio con preguntas al hombre-
- Cof cof cof, joder... se me a ido de conducto el sake cof cof cof, por esto siempre tengo el manta activado – le costaba hablar por culpa del cambio de conducto del sake-.
El hombre enmascarado, le preguntó educadamente si podía darle un trago a su bebida que estaba por la mitad.
- Claro muchacho cof cof -le lanzó la botella- Puedes tomartela entera, creo que no voy a poder saborearla de la misma forma.
Tras recuperarse observó al hombre enmascarado, se asemejaba tanto a Deadpool que le entraba ganas de ponerse la mascara y hacer el gilipollas delante de él, pero se contuvo y prefirió preguntarle su nombre.
-¿Como te llamas? Creo que me merezco saber el nombre de la persona que estuvo apunto de matarme – sonrió – Y apropósito... ¿donde coño estabas para aparecer tan de repente? ¿Estabas en la base naval?, ¿Eres marine?- acribilló Satio con preguntas al hombre-
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El enmascarado continuaba mirando por la ventana de forma tranquila mientras observaba el cielo. Todo estaba demasiado tranquilo, realmente estaba aburriéndose mucho. Todavía recordaba aquella vez en la que tuvo que matar a una agente del CP5. Casi le pillaba su identidad y no le quedó otras que matarla a sangre fría, por lo menos se llevó la fruta de la que hoy día era dueño. Le había dado unos poderes increíbles y acordes a su personalidad, además le venían geniales por su situación con su apariencia de Jin Surfer. Ahora entrecerró los ojos de forma calmada, por más que pensaba a dónde dirigirse no le venía nada a la cabeza, tal vez a liarla por ahí. También pensaba en cargarse a algún criminal y pillar algo de dinero, había bastantes opciones. De hecho su mejor opción era la segunda, ahora se disponía a levantarse cuando de repente escuchó una voz a su lado. Le dijo que no hacía tanto calor para lo que hizo, pero sin duda alguna lo que más le sorprendió fueron sus últimas palabras. La mentalidad de ese tipo encapuchado era terrorífica, a la primera había adivinado que era un agente, sin embargo el enmascarado ocultaba muy bien sus emociones y externamente no se notó su sorpresa. Ahora dirigió su palabra al hombre de la capucha pues parecía una persona seria y no un idiota como los que había en aquel lugar.
- Sin duda alguna no eres un cualquiera. No pareces un marine, ellos nunca tocarían a otra persona en el hombro. – Dijo refiriéndose al toque que le había dado hacia un par de segundos, tras eso continuó hablando mientras ahora le miraba. – Mi nombre es Jin Surfer amigo, criminal de cincuenta millones, por ello no puedo dejar que sepan quién soy y uso esa forma de ser algunas veces.
Tras eso se quedó pensativo unos segundos, el encapuchado había afirmado que iba a haber pelea. No entendía como aquel hombre sabía eso, sin embargo ya era bastante extraño de por sí. Acercarse a un enmascarado y hablarle como un colega de toda la vida, realmente era despreocupado y sociable. Había acertado de lleno en lo de agente, pero era un corrupto, por lo que no se consideraba como tal. Ahora faltaba que el chico que tenía frente a sus ojos se presentara, pues sería gracioso que no lo hiciera y tan solo estuviera aburrido. Sin embargo antes de preguntarle por su nombre, el moreno supo enseguida a que se refería el encapuchado. Unos tipos estaban hablándole a un hombre que parecía un bárbaro o algo por el estilo. Este estaba tomándose una cerveza tranquilamente y aquellos hombres se estaban metiendo con él. Incluso en mitad de las ofensas, aquel gran hombre dijo la palabra “amigos” preguntándoles. Sin duda alguna no parecía saber hablar muy bien pues decía palabras sueltas y no frases. Cuando volvieron a meterse con él, Kogáto frunció el ceño mientras miraba al resto. Se levantó de la mesa observando la escena mientras apretaba el puño de su mano derecha.
Esos imbéciles no eran nadie para meterse con ese hombre que no estaba haciendo nada, salvo beber y comer como cualquier otro cliente. No fue necesario intervenir, aquel tipo sacó unas enormes hachas y empezó a eliminar a los borrachos que se estaban metiendo con él. Ahora el tipo los llamó herejes y dijo que merecían la muerte, razón no le faltaba, esos payasos se lo tenían bien merecido. Sin embargo el chico pudo ver ahora miradas de miedo y otras de odio, no iba a dejar que otro grupito se levantase y atacase a aquel hombre, por lo que ahora caminó hasta quedar a unos tres metros del bárbaro. Sacó su guadaña blanca y de un tajo partió una mesa en dos, haciendo que los platos vacios y las copas llenas de vino cayeran al suelo provocando un gran ruido y la atención de muchas personas. Por suerte no había nadie en esa mesa, ahora apuntó con su guadaña a la zona donde había más personas, su ojo rojizo observaba de forma seria y juzgadora. Además de su cuerpo comenzaron a salir llamas, como si estuviese ardiendo literalmente, sin embargo eran debido a su fruta. Era inmune al fuego, por lo que no se quemaba. La gente lo miraba aterrorizada, de repente la figura comenzó a hablar de forma seria mientras mantenía la postura seria y las llamas le prendían.
- Este hombre estaba bebiendo como todos los demás, pese a que estaba recibiendo humillaciones por parte de esos idiotas, nadie le ha ayudado. Sois todos una panda de idiotas que debería matar aquí mismo, voy a dejarlo claro. Si alguien vuelve a meterse con este hombre, no temáis de sus hachas. Temed de mi guadaña porqué juro que os partiré en dos basuras.
Tras su amenaza al resto de personas, las llamas que envolvían su cuerpo desaparecieron, además volvió a guardar la guadaña y ahora se quedó de pie. A su derecha estaba el bárbaro y a su izquierda el encapuchado de antes. Suspiró de forma tranquila mirándolos a ambos, rotando movimientos con la cabeza para poder hacerlo, después se unos segundos fue cuando habló de nuevo en un tono mucho más relajado que el de antes y totalmente tranquilo.
- En esta mierda de mundo solo hay idiotas ¿No creéis?
Dijo ahora suspirando mientras se mantenía alerta por si acaso, su haki de observación siempre iba activado, era una habilidad que había dominado. Debido a que siempre lo llevaba activado, dejó de desactivarlo y por ello lo llevaba siempre así. Lo siguiente que hizo fue cruzarse de brazos para de esa forma esperar la contestación de alguno de los otros dos, sentía curiosidad por ambos. La gente miraba al enmascarado de forma extraña, antes parecía un payaso de circo y en un segundo había acojonado a la mitad de la taberna con su guadaña y aquellas llamas. Sin duda Jin era alguien impredecible, una persona bastante extraña.
- Sin duda alguna no eres un cualquiera. No pareces un marine, ellos nunca tocarían a otra persona en el hombro. – Dijo refiriéndose al toque que le había dado hacia un par de segundos, tras eso continuó hablando mientras ahora le miraba. – Mi nombre es Jin Surfer amigo, criminal de cincuenta millones, por ello no puedo dejar que sepan quién soy y uso esa forma de ser algunas veces.
Tras eso se quedó pensativo unos segundos, el encapuchado había afirmado que iba a haber pelea. No entendía como aquel hombre sabía eso, sin embargo ya era bastante extraño de por sí. Acercarse a un enmascarado y hablarle como un colega de toda la vida, realmente era despreocupado y sociable. Había acertado de lleno en lo de agente, pero era un corrupto, por lo que no se consideraba como tal. Ahora faltaba que el chico que tenía frente a sus ojos se presentara, pues sería gracioso que no lo hiciera y tan solo estuviera aburrido. Sin embargo antes de preguntarle por su nombre, el moreno supo enseguida a que se refería el encapuchado. Unos tipos estaban hablándole a un hombre que parecía un bárbaro o algo por el estilo. Este estaba tomándose una cerveza tranquilamente y aquellos hombres se estaban metiendo con él. Incluso en mitad de las ofensas, aquel gran hombre dijo la palabra “amigos” preguntándoles. Sin duda alguna no parecía saber hablar muy bien pues decía palabras sueltas y no frases. Cuando volvieron a meterse con él, Kogáto frunció el ceño mientras miraba al resto. Se levantó de la mesa observando la escena mientras apretaba el puño de su mano derecha.
Esos imbéciles no eran nadie para meterse con ese hombre que no estaba haciendo nada, salvo beber y comer como cualquier otro cliente. No fue necesario intervenir, aquel tipo sacó unas enormes hachas y empezó a eliminar a los borrachos que se estaban metiendo con él. Ahora el tipo los llamó herejes y dijo que merecían la muerte, razón no le faltaba, esos payasos se lo tenían bien merecido. Sin embargo el chico pudo ver ahora miradas de miedo y otras de odio, no iba a dejar que otro grupito se levantase y atacase a aquel hombre, por lo que ahora caminó hasta quedar a unos tres metros del bárbaro. Sacó su guadaña blanca y de un tajo partió una mesa en dos, haciendo que los platos vacios y las copas llenas de vino cayeran al suelo provocando un gran ruido y la atención de muchas personas. Por suerte no había nadie en esa mesa, ahora apuntó con su guadaña a la zona donde había más personas, su ojo rojizo observaba de forma seria y juzgadora. Además de su cuerpo comenzaron a salir llamas, como si estuviese ardiendo literalmente, sin embargo eran debido a su fruta. Era inmune al fuego, por lo que no se quemaba. La gente lo miraba aterrorizada, de repente la figura comenzó a hablar de forma seria mientras mantenía la postura seria y las llamas le prendían.
- Este hombre estaba bebiendo como todos los demás, pese a que estaba recibiendo humillaciones por parte de esos idiotas, nadie le ha ayudado. Sois todos una panda de idiotas que debería matar aquí mismo, voy a dejarlo claro. Si alguien vuelve a meterse con este hombre, no temáis de sus hachas. Temed de mi guadaña porqué juro que os partiré en dos basuras.
Tras su amenaza al resto de personas, las llamas que envolvían su cuerpo desaparecieron, además volvió a guardar la guadaña y ahora se quedó de pie. A su derecha estaba el bárbaro y a su izquierda el encapuchado de antes. Suspiró de forma tranquila mirándolos a ambos, rotando movimientos con la cabeza para poder hacerlo, después se unos segundos fue cuando habló de nuevo en un tono mucho más relajado que el de antes y totalmente tranquilo.
- En esta mierda de mundo solo hay idiotas ¿No creéis?
Dijo ahora suspirando mientras se mantenía alerta por si acaso, su haki de observación siempre iba activado, era una habilidad que había dominado. Debido a que siempre lo llevaba activado, dejó de desactivarlo y por ello lo llevaba siempre así. Lo siguiente que hizo fue cruzarse de brazos para de esa forma esperar la contestación de alguno de los otros dos, sentía curiosidad por ambos. La gente miraba al enmascarado de forma extraña, antes parecía un payaso de circo y en un segundo había acojonado a la mitad de la taberna con su guadaña y aquellas llamas. Sin duda Jin era alguien impredecible, una persona bastante extraña.
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- Vamos, que usas una doble identidad ¿No es así? - Dije entre unas pequeñas risas amistosas- Lo supuse pues no eres el primer hombre que conozco con mascara y es fuerte... y pertenece a la Chiper Phol... - Suspiré mirando hacia atrás.
Dejé una pausa para que el ambiente se volviera tenso, me gustaba aplicar esos momentos en este tipo de conversaciones y que la otra persona comenzase a preguntarse cosas en la cabeza, llegando algunos a hablar mas de la cuenta por ello, sin embargo, los acontecimientos se adelantaron y la pelea comenzó. Un extranjero en un bar lleno de personas amantes de este gobierno y la marina... se veía venir.
El extranjero había enloquecido y comenzó a matar a las personas que se metían con él. Algo comprensible en parte, pero por otra era demasiado, la ira le consumió y se dejó llevar. Pero el acompañante de mi mesa no se quedaba atrás, pues saltó rápido olvidando el papel que interpretaba todo el tiempo y defendió al extranjero. Grave error, ahora sabían que no era un chico inocente y simpático.
Sin dar mas vueltas me levanté tocando el hombro de ambos, al poco de que el enmascarado se quitase de encima todas esas llamas, eran molestas a la hora de tocar su hombro, motivo por el cual no salté antes.
- Disculparnos caballeros, mi compañero antorcha y yo somos agentes en cubierto del gobierno... estamos en una misión especial para perseguir la banda mas grande del extranjero, motivo por el cual perseguíamos en silencio a dicho hombre. No por ser extranjero, como bien dice mi compañero en esta ocasión se limitaba a disfrutar de una agradable comida y ustedes le han molestado echando a perder toda la operación... a continuación, nos marcharemos de la taberna con este hombre como prisionero. Os pido que no salgáis de la taberna en 5 minutos al menos, ¡NO JODÁIS MÁS LA MISIÓN DE ESTE GOBIERNO POR PREVALECER LA JUSTICIA! - Dicho esto moví a ambos hacia fuera con una ligera sonrisa dirigida a ambos aprovechando que estábamos de espaldas a los clientes. - Tabernero, reporte esta situación en el cuartel, ellos le pagaran los posibles gastos y molestias causados.
Una vez fuera emití un leve suspiro sin detenernos, quería parar en algún callejón o algo similar, de manera que no nos viese mucha gente.
- Menuda habéis liado cabezas huecas... - Miré al extranjero y sonreí- Yo amigo, niño fuego también amigo. - Le expliqué de manera similar a como hablaba pretendiendo que entendiese que estaba seguro con nosotros.
Una vez llegado a una esquina algo oscura pero suficiente para poder vernos las caras me quité la capucha de la cabeza y miré a ambos sonrientes.
- En este mundo soy conocido como el Capitán Legan Legim, y uno de los hombres mas buscados en el mundo. - Miré a Jin sonriente. - Trata de capturarme si quieres, pero iré a matarte sin dudarlo si lo haces. Me caes muy bien, pero no me obligues a ello.
Sonriente de nuevo volví la mirada al vikingo.
- Me llamo Legim, yo soy un pirata muy buscado ¿Quieres ser mi amigo? - Pregunté tendiéndole la mano. Al poco miré a Jin con la misma sonrisa aún.- ¿Sabes de algún profesor que le pueda enseñar el idioma? Es desesperante hablar con alguien así todo el tiempo...
Dejé una pausa para que el ambiente se volviera tenso, me gustaba aplicar esos momentos en este tipo de conversaciones y que la otra persona comenzase a preguntarse cosas en la cabeza, llegando algunos a hablar mas de la cuenta por ello, sin embargo, los acontecimientos se adelantaron y la pelea comenzó. Un extranjero en un bar lleno de personas amantes de este gobierno y la marina... se veía venir.
El extranjero había enloquecido y comenzó a matar a las personas que se metían con él. Algo comprensible en parte, pero por otra era demasiado, la ira le consumió y se dejó llevar. Pero el acompañante de mi mesa no se quedaba atrás, pues saltó rápido olvidando el papel que interpretaba todo el tiempo y defendió al extranjero. Grave error, ahora sabían que no era un chico inocente y simpático.
Sin dar mas vueltas me levanté tocando el hombro de ambos, al poco de que el enmascarado se quitase de encima todas esas llamas, eran molestas a la hora de tocar su hombro, motivo por el cual no salté antes.
- Disculparnos caballeros, mi compañero antorcha y yo somos agentes en cubierto del gobierno... estamos en una misión especial para perseguir la banda mas grande del extranjero, motivo por el cual perseguíamos en silencio a dicho hombre. No por ser extranjero, como bien dice mi compañero en esta ocasión se limitaba a disfrutar de una agradable comida y ustedes le han molestado echando a perder toda la operación... a continuación, nos marcharemos de la taberna con este hombre como prisionero. Os pido que no salgáis de la taberna en 5 minutos al menos, ¡NO JODÁIS MÁS LA MISIÓN DE ESTE GOBIERNO POR PREVALECER LA JUSTICIA! - Dicho esto moví a ambos hacia fuera con una ligera sonrisa dirigida a ambos aprovechando que estábamos de espaldas a los clientes. - Tabernero, reporte esta situación en el cuartel, ellos le pagaran los posibles gastos y molestias causados.
Una vez fuera emití un leve suspiro sin detenernos, quería parar en algún callejón o algo similar, de manera que no nos viese mucha gente.
- Menuda habéis liado cabezas huecas... - Miré al extranjero y sonreí- Yo amigo, niño fuego también amigo. - Le expliqué de manera similar a como hablaba pretendiendo que entendiese que estaba seguro con nosotros.
Una vez llegado a una esquina algo oscura pero suficiente para poder vernos las caras me quité la capucha de la cabeza y miré a ambos sonrientes.
- En este mundo soy conocido como el Capitán Legan Legim, y uno de los hombres mas buscados en el mundo. - Miré a Jin sonriente. - Trata de capturarme si quieres, pero iré a matarte sin dudarlo si lo haces. Me caes muy bien, pero no me obligues a ello.
Sonriente de nuevo volví la mirada al vikingo.
- Me llamo Legim, yo soy un pirata muy buscado ¿Quieres ser mi amigo? - Pregunté tendiéndole la mano. Al poco miré a Jin con la misma sonrisa aún.- ¿Sabes de algún profesor que le pueda enseñar el idioma? Es desesperante hablar con alguien así todo el tiempo...
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Aparentemente el hombre se asustó de mi repentina aparición ya que este comenzó a toser por atragantarse con la bebida. Sin embargo, el hombre, por suerte para mí, extendió la botella para que bebiese; además de que me dio lo que restaba de ella, bajo la premisa de que ya no la iba a degustar de la misma forma que antes.
-Muchas gracias, buen hombre, siento haberle asustado le compraré una botella entera a favor por darme lo que queda, es lo menos que puedo hacer- le agradecí al hombre, bebí un trago y me senté al lado de este para relajarme un poco.
La relajación no me duró nada ya que mi acompañante me comenzó a vaciar su cargador de preguntas comenzando por querer saber cuál era mi nombre.
-Oh, disculpe donde están mis modales, yo pidiéndole bebida y ni me presento- le dije mientras me rascaba la nuca- mi nombre es Wilson, vengo de la base de la marina pero no de dentro ni me estoy escapando, es que subí a la azotea de la base, y no, no soy marine, prefiero vivir mi aventura a seguir sus ordenes, y espero no ofenderle- le respondí al hombre y bebí otro trago.
Se produjo un pequeño silencio entre los dos, no sabía de qué podía hablar con aquel tipo, que parecía que ya se había recompuesto de la tos, me levanté de mi sitio y le ofrecí la botella por si quería beber algo más.
-Y tú, ¿Qué me cuentas de ti?- le pregunté para acabar con el silencio que se había producido y movía la botella en su dirección en modo de pregunta para saber si quería.
-Muchas gracias, buen hombre, siento haberle asustado le compraré una botella entera a favor por darme lo que queda, es lo menos que puedo hacer- le agradecí al hombre, bebí un trago y me senté al lado de este para relajarme un poco.
La relajación no me duró nada ya que mi acompañante me comenzó a vaciar su cargador de preguntas comenzando por querer saber cuál era mi nombre.
-Oh, disculpe donde están mis modales, yo pidiéndole bebida y ni me presento- le dije mientras me rascaba la nuca- mi nombre es Wilson, vengo de la base de la marina pero no de dentro ni me estoy escapando, es que subí a la azotea de la base, y no, no soy marine, prefiero vivir mi aventura a seguir sus ordenes, y espero no ofenderle- le respondí al hombre y bebí otro trago.
Se produjo un pequeño silencio entre los dos, no sabía de qué podía hablar con aquel tipo, que parecía que ya se había recompuesto de la tos, me levanté de mi sitio y le ofrecí la botella por si quería beber algo más.
-Y tú, ¿Qué me cuentas de ti?- le pregunté para acabar con el silencio que se había producido y movía la botella en su dirección en modo de pregunta para saber si quería.
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POST REALIZADO COMO MODERADOR.
- OFF ROL:
Deadpool autorizó hacer esto con su personaje, Nat aceptó con la condición de la aceptación de Deadpool y una prueba de esta aceptación, la cual está aquí:
Dadpool escribió:Deadpool recapacitaba sobre su vida mientras observaba al hombre que le asustó, pensaba el porque de tantas desgracias en el mundo y la lucha contra el gobierno. Su vida se había convertido plenamente en la búsqueda de la venganza, nunca había tenido momento para hacer lo que él realmente quería, una vida normal y sencilla.
Dead se levantó y miró al hombre enmascarado diciendo que le siguiese, e inmediatamente se marchó en busca de Legim dejando al hombre solo, era fácil de encontrar ese tipo al igual que él, su intuición lo llevaba a un bar. Pero antes de llegar, lo encontró en un callejón con dos hombres más.
-Legim -dijo mientras se acercaba- Me cansado de todo, voy a empezar una nueva vida como panadero o jefe de una casa de putas – varias lagrimas surcaron por su rostro- Quiero una vida tranquila, una vida que nunca tuve. Te doy todo mi dinero y mis pertenencias, no las necesitare donde voy.
Deadpool dejó todo su dinero a los pies de Legim al igual que todas sus pertenencias.
-Suerte Legim, convertirte en el rey de los piratas- Dijo justo antes de marcharse, no sin antes señalar a Slade Wilson- Habla con él... me recuerda un poco a Deadpool... ya me entiendes.
Dicho esto, Saito partió sin mirar atrás y nunca volvio.
- Pertenencias de Deadpool entregadas. :
- Dinero: 34.831.118 berries
Objetos: Receta Suspiro De Aokiji: Frasco que contiene nitrógeno en estado líquido ( 0.2 litros), teniendo para vuestra suerte un frasco bien especializado para no congelarse. Este nada mas contactar con el aire empezara a solidifarse, por lo que tiene que usarlo o arrojando el frasco para atacar o extraerlo del bote ( forma ovalada) como si estuviese tirando un vaso de agua. Su uso se basa en la congelación de la zona tocada, pudiendo romperse sin problema alguno lo congelado
Receta Escencia De Magellan: Frasco que contiene el mayor veneno conocido, teniendo un frasco especializado para no fundirse por sus composiciones y gases tóxicos. Este recipiente contiene 0.2 litros, pero su uso ya permite atravesar cualquier cosa que se le pase de por medio, e incluso el Kairoseki. Su uso es sencillo, que consiste en arrojar el recipiente a lo que se desee dañar, o tirar el contenido, pero esto perjudicara al atacante ya que el veneno emite gases muy tóxicos
Respirador Acuático: Sencillo aparato creado por nuestra compañía. Este sinuoso objeto le permite respirar sin necesidad de oxigeno externo durante 2 post. En esos post podrás estas bajo el agua ( Para un usuario seria no moverse, pero si respirar) o en un medio toxico, permitiéndote respirar aun en estas condiciones.
Receta Bombas de Humo,Gas,Explosiva y Clavos: Aquí tenemos a vuestra disposición las recetas de como crear diferentes tipos de explosivos, siendo los mas comunes los colocado en el titulo. Con el de Humo podrá inundar toda una zona con un radio de 10 metros, permitiéndote tener todo a tu alrededor con visibilidad nula. Con el de Gas mas de lo mismo, pero ademas puedes prenderlo con fuego, causando una gran explosión a todo lo que este en la zona del gas. Con el Explosivo podrás destrozar todo en un radio de 5 metros por su poder destructivo (teniendo que prender la mecha) y obviamente el de clavos consiste en dejar un montón de mini clavos por todo el campo ( 13 metros) pudiendo impedí a tu rival atacarte desde el suelo.
Kit de Maquillaje: Este kit de pintura te permite modificar todo lo referente a tu aspecto para parecer otra persona bastante notable, teniendo una alta gama de cosas para usar. Puedes editar tu color de iris, el color de tu pelo, la tonalidad de tu pelo, puedes e incluso modificar el grosor de ciertas zonas con maquillaje. Todo esta en tu mano con este objeto. Aunque unicamente se puede emplear en retos o en capitulos. Esto te permite si eres pirata o revo entregar a otro pirata o revo por su recompensa sin problema alguno, ya que nadie te reconocerá.
Manual de canalización de espíritu:Este manual te enseña a canalizar la energía espiritual de tu cuerpo para potenciar las técnicas de combate, decantándote por un ámbito. Al nivel 23, su uso mejora y te permite crear un ataque nuevo, aunque esta mejora no sirve para potenciar el poder de la Akuma no mi. Esta canalización solo se puede efectuar una vez, por más que se compren dos el segundo tan solo decoraría al usuario.
En el caso de no poseer ninguna akuma no mi (fruta del demonio), el usuario recibirá dos técnicas al comprar y utilizar un manual de canalización.( 2 Técnicas por crear)
Excalibur: Este manual sirve para aprender una técnica de lanzamiento de ondas cortantes. El usuario de esta técnica es capaz de, haciendo un movimiento de brazo, lanzar ondas cortantes en línea recta desde donde él está y en la dirección que está apuntando.
Dial De Rayo: Este dial genera descargas eléctricas de pequeños rayos que van hacia el objetivo con un rango de cinco metros. Después de tres usos, el dial deja de ser útil.
Dial De Fuego: Este dial genera fuego, a modo de lanzallamas, que va hacia el objetivo con un rango de cinco metros. Después de tres usos, el dial deja de ser útil.
Dial De Hielo: Este dial genera nieve y hielo, a una temperatura de -4ºC, que va hacia el objetivo con un rango de cinco metros. Después de tres usos, el dial deja de ser útil.
Dial De Viento: Este dial genera corrientes de viento muy fuertes que va hacia el objetivo con un rango de cinco metros. Después de tres usos, el dial deja de ser útil.
Dial De Impacto: Absorbe impactos de hasta [AMF], y puede devolverlos como un ataque de energía onda circular, con potencia inmediatamente inferior (AF en este caso). Este dial daña ligeramente al portador cuando lanza el impacto. (si lanza un AF recibe AIF). El mecanismo de este dial queda inservible hasta terminar el combate tras disparar. Si se intenta absorber un ataque mayor al límite, el dial se destruye y queda inservible para siempre. Su uso sustituye el del movimiento de ataque.
Dial De Rechazo: Absorbe hasta un ataque de nomenclatura [AB], y los devuelve con toda su potencia, pero el que lo dispara recibe el mismo daño cuando lo lanza. El resto funciona como el dial de impacto. Si se intenta absorber un ataque mayor al límite, el dial se destruye y queda inservible para siempre. Su uso sustituye el del movimiento de ataque.
Receta Balas de Largo Alcance: Estas balas poseen un mecanismo de partición mientras son lanzada, lo que les permite en mitad del disparo irse impulsado para alcanzar su objetivo. Su sistema como se ha dicho anteriormente es por la división de cada bala en tres, pudiendo alcanzar objetivos que se encuentran a una distancia alejada. Según que arma uses te vendrá en un formato o en otro.
-Munición para Rifle: Puede llegar a alcanzar 2 kilómetros perfectamente y sin problemas. En estas balas puedes usar tu energía para hacer que lleguen incluso más lejos (4 kilómetros) pero debes tener cuidado, ya que jamás debe ser usada para corto alcance o te puede llegar a producir cosas inesperadas.
-Munición para pistolas y magnum: Pueden llegar a alcanzar los 100 metros en perfecto estado. En estas balas se le puede emplear tu energía y hacer que lleguen más lejos ( 400 metros) pero debes tener cuidado ya que la fuerza de disparo puede causarte malestares en el brazo si son mal empleado. No intentes atacar a algo cercano o puede pasar cosas inesperadas y dolorosas
Receta Balas Rapidas: Estas balas poseen una fina capa alrededor de cada uno lo que le permite que las frenadas causadas por el aire sean prácticamente nulas, pudiendo aumentar así la velocidad de cada bala el doble de lo permitido. Si se le aplica energía aumentara por 3 la velocidad. Se puede utilizar tanto para rifle como para pistolas y armas pequeñas.
Receta Balas Piricas: Balas que posee en su recubrimiento una pólvora que no es activada cuando es disparada, pero si cuando se encuentra en el aire (por el aire). Haciendo que las balas empiezen a arder pudiendo causar quemaduras si la bala impacta en el rival. Si se le mete energía puede producir que vaya más rápido la activación de la bala (corto alcance). Puede ser tanto para rifles que para armas cortas.
Receta Balas Toxicas: Balas normales y corriente pero que tienen una peculiaridad, la cual es que en la punta de las balas tienen un veneno inestable el cual nada mas impactar en el rival empieza a extenderse el virus. Los primeros efectos se notan tras un post, los cuales es empezar a ver la vista borrosa y sentirse mareado. Si el infectado no se cura ante de 3 post empezara a vomitarse y a no poder tenerse en pie (esto no implica abandonar el combate, ya que uno con buen fisico y aguante podria, pero con estos sintomas), por lo que la cura la hemos proporcionado en otras tiendas para evitar problemas innecesarios. Lo malo es que la bala es más pesada por el conteniente, por lo que solo puede ser usada a corto alcance ( 10 metros como máximo)
Receta Balas Anti tanque: Son unas balas especializadas para tener una potencia de..grosor y dureza. La calidad de las balas permiten este efecto y además que si se le impacta a algo no tan duro que le atraviese de cuajo. Pero ahora viene el pero. Estas balas pueden ser empleada tanto para rifle ( no ocurre nada, únicamente estar situado) y para pistolas, si se emplea para lo segundo debes tener una musculatura notable o usar el seimen kikan o la presión del tiro te mandara volando hacia atrás (con todas sus consecuencias)
Receta Balas de Poder: Estas balas tienen una única función la cual es aumentar sus atributos según la cantidad de energía que le metas. Al principio la bala es como una cualquiera y sin nada destacable, pero esta tiene la ventaja de absorber tu energía cuando la tienes en la mano, decidiendo tu cuanta cantidad darle:
-Nivel 1: Le das un porciento bajo de tu energía, haciendo que la bala aumente su velocidad y potencia.
-Nivel 2: Le das una cantidad mediana de tu energía, haciendo que su velocidad aumente por 3 y su potencia también, haciéndola muy rápida y dañina.
-Nivel 3: Le das una cantidad enorme de tu energía (obviamente no podrás seguir actuando como siempre) pudiendo aumentar su velocidad y potencia por 7, lo cual le hace una bala súper rápida y extremadamente dañina. El usuario al ver usado su energía no hay retroceso.
Receta Balas Triples: Balas diseñadas para una ves disparadas están se dispersen por la zona en tres sentido que prefiere el usuario. Las balas principalmente serán dirigidas hacia donde el usuario decida, pero también puede lanzarlo al azar, lo cual imposibilita al haki observador que sepa a donde irán. Las balas iran siempre a la misma velocidad, no pierden su eficacia al dividirse.
Receta Balas Gomu: Balas de goma que no atraviesa nada, pero el impacto causado a los enemigos puede causarle molestares y moretones hasta incluso graves. Aunque emplees energía de canalización la balas no atravesaran, únicamente harán mas fuerte su potencia.
Receta Conectores Neuronales: Conectores neuronales
El primero de los líquidos (azul) contiene cientos de nanobots que se instalan en el córtex cerebral en forma de “emisor” y otros tantos en la parte baja del cerebelo, concretamente en el tronco encefálico, actuando como “receptores”. El segundo vial (verde) contiene exactamente lo mismo. Gracias a esta conexión, las dos personas que se lo hayan inyectado son capaces de compartir pensamientos durante un período lapso de tiempo, ya que la sinapsis neuronal detecta los cuerpos extraños y los expulsa en poco tiempo (3 post cada uno de los dos sujetos)
Receta Componentes Vitaminicos: Hechos de, como su nombre indica, vitaminas, estos componentes aumentan la capacidad respiratoria y el transporte de hemoglobina en los glóbulos rojos, aumentando la resistencia de quien los toma a niveles casi sobre humanos, pudiendo aguantar horas y horas haciendo ejercicio físico o en combate. Tras su efecto (4 post), el sujeto sufre un gran agotamiento debido a la gran actividad celular a la que ha sido sometido.
Receta Endurecedor cutaneo: Este compuesto se dirige directamente hacia la dermis y epidermis, creando millones de uniones musculares entre ambas, fortaleciéndolas a la vez, lo que produce un fuerte endurecimiento de la piel. Aunque tiene efectos secundarios.
~ Tomar un trago endurece considerablemente la piel.
~ Tomar dos tragos hace la piel casi tan dura como la de un dragón, aunque la energía del cuerpo desciende rápidamente (El efecto dura 4 post).
~ Tomar tres tragos (a partir de tres no se aumenta el efecto), la piel es totalmente indestructible, aunque es casi imposible mantener esto más de un minuto (2 post).
Receta Rumble Balls: Las Rumble Balls son una medicina inventada por Chopper, el cual legó su receta a sus alumnos de medicina. No se sabe muy bien cuáles son los componentes que las forman, ya que es un secreto que pasa de maestros a alumnos.
Al consumir una Rumble Ball, un usuario de Akuma no mi tipo Zoan adquiere cuatro transformaciones a parte de las tres básicas, adquiriendo un total de siete (Durante 5 posts). Aunque hay ciertos efectos secundarios:
~ Si el usuario ingiere dos Rumble Balls en menos de seis horas, perderá el control sobre sus transformaciones, pasando de una a otra sin control, durante un período de tiempo limitado (5 posts).
~ Si el usuario ingiere tres Rumble Balls en menos de seis horas, se convertirá en un monstruo gigantesco prácticamente invencible. Aunque en esta forma, el usuario no es capaz de controlarse y atacará a todo y todos lo que vea, tanto enemigo como aliado. Este efecto se sabe que dura menos de tres días (Hasta final de combate, en capítulos hasta que el narrador decida).
Receta Regenerador Celular: Es una sustancia altamente etérea y cuando entra en contacto con el oxígeno de la atmósfera a penas tarda un minuto en evaporarse, perdiendo sus propiedades curativas.
Cuando este regenerador celular entra en contacto con el plasma sanguíneo, potencia la mitosis celular de las células sanguíneas en cien veces, produciendo una rápida regeneración de la herida donde se haya vertido el compuesto, cerrando en seguida cualquier herida, sea lo grande que sea.
Receta Pastilla de la Falsa Muerte: Al tomarte la pastilla roja, reduce la respiración, la actividad celular y el pulso hasta niveles ínfimos, simulando la muerte a todos los efectos, aunque este engaño es inútil contra médicos especializados (a partir de nivel 40). La única forma de “volver a la vida” es tomando la pastilla de “resurrección” (azul) en un periodo de tiempo no muy amplio (3 post como mucho. Ambas pastillas se venden juntas.
Receta Potenciadores Musculares: Se trata de un conjunto de tres pastillas (azul, verde y roja) las cuales potencian una habilidad diferente cada una.
~ Pastilla azul (potenciador de velocidad). Estimula los músculos femorales y los sóleos, agrandándolos y surtiéndolos de gran cantidad de oxígeno, por lo que se aumenta enormemente la velocidad, duplicando la velocidad de una persona normal a la hora de correr y también aumenta la capacidad de salto.
~ Pastila roja (potenciador de fuerza). Estimula los músculos bíceps, triceps, deltoides, trapecios, sartorios y flexores y extensores, agrandándolos, lo que aumenta enormemente la fuerza de un simple puñetazo o para levantar o mover objetos.
~ Pastila verde (potenciador de inteligencia). Estimula los lóbulos occipital, frontal y temporal, duplicando la velocidad de la sinapsis, por lo que aumenta la rapidez de los movimientos del cuerpo ya que desde que se piensa la acción hasta que se ejecuta se usa la mitad de tiempo que una persona normal.
Receta Secreto de Law: Cómo casi cualquier médico, Trafalgar Law también investigó en secreto una medicina que fuera suya. Tras años de investigación, consiguió un compuesto que devolvía a la vida a los que habían muerto recientemente, aunque su “vuelta” era dolorosa y no volvían totalmente recuperados, sino que necesitaba un tiempo de recuperación (2 post con un médico al lado que ayude a la recuperación).
Una vez ingerido la sustancia, el muerto vuelve a la vida, aunque al 50% de su poder y aún con las heridas que le provocaron la muerte, aunque parcialmente curadas para que dejen de ser mortales.
Receta Escencia de Skypiea: Esencia extraída del mismo centro de la isla que lleva su nombre, Skypiea. No se sabe de qué está compuesta esta esencia, sólo que se debe hacer que el recién fallecido la ingiera en poco tiempo tras su muerte (el siguiente post a la muerte), y tarda un poco en hacer efecto (2 post). Una vez ingerido, el muerto vuelve al mundo de los vivos totalmente revitalizado, como si hubiera estado dormido. Vuelve con toda la energía e, incluso, con todas las heridas curadas.
Set de ganzúas especializadas: Un set de veinticuatro ganzúas para todo tipo de cerraduras. Si eres de las.. sigilo en vez de tirar una puerta abajo, este material para ti. Unas cuantas de éstas al acabar en punta pueden servir perfectamente para acciones ofensivas, por si te descubren mientras abres la puerta
Gafas de Visión nocturnas: Un par de gafas del estilo de las de aviador totalmente de color negro, tan simple como eso. Mas al ponértelas podrás ver en la oscuridad. Adiós a gastar luz cuando te levantas a hacer una meada nocturna: con estas increíbles gafas podrás ver todo lo que ocurre a tu alrededor siempre que sea de noche. El inconveniente viene cuando es de día o simplemente hay luz, te quedarás cegata un buen par de segundos.
Den Den Mushi Negro: ¿Porque ese Den Den mushi es tan chiquito? ¿Tendra alguna utlidad? Les presento a todos aquellos espias que se precien de la calidad del espionaje este diminuto caracol creado unicamente para interceptar combersaciones que se den de un Den Den Mushi a otro sin que el otro se de cuenta alguna de ello. Con esto se puede saber que se dice en una combersacion sin que siquiera se sepa de la presencia de uno y mucho mas importante es tan pequeño que ingresa en la muñeca y se puede disimular a la perfeccion con un reloj.
Visor de Calor: Este pequeño artefacto permite a quien lo posea tener una lectura por medio del calor de su entorno. La utilidad de esto es que puee medir la temperatura corporal de una persona mostrandote donde se encuentra aun estando en la completa oscuridad o detras de una pared no muy gruesa.
Cerbatana: Pequeño artefacto que permite a una espia lanzar diminutos dardos a una distancia considerable que depende de la fuerza con la que se lo lanze. Este pequeño artefacto viene en dos versiones en las cuales unicamente cambia el estilo de dardos a usar. En el caso de los dardos venenosos que solo se pueden lanzar con esta arma el veneno es unicamente un paralizante que puede llegar a dormir al afectado si se le da en el punto correcto, como mucho el veneno tiene un efecto de dos post donde el afectado ya pierde por completo el problema que pudiera traer dicho veneno.
Bomba de Tiempo: Este poderoso artefacto es capaz de crear una explosion en un radio maximo de 100 metros teniendo incorporado un pequeño cronometro ajustable que tiene como maximo un contador de unos dos minutos pudiendo ponersele un tiempo menor de uso.
Cuerda de Piano: Un poderoso y finisimo hilo que permite cortar un sin fin de cosas debido al material de acero afilado con el que esta fabricado. A su vez este artefacto a de ser manejado con los guantes especiales que trae y mucho cuidado ya que el filo que posee puede llegar a ser muy traicionero
Bomba de Luz: Una bomba que no causa daño físico ni onda expansiva, en vez de eso libera una poderosa luz segadora por unos cuantos segundos, los afectados quedan invidentes por un post.
Bomba de Estruendo: Esta bomba libera un poderoso sonido que aturde a todos los objetivos en un área de 8 metros a la redonda dejando un efecto que dura un lapso de dos post en los cuales el aturdido comienza a recuperar levemente la audicion y un lapso de cuatro desde el momento de la explosion para recuperarlo totalmente.
Fuegos Artificiales: Perfectos distractores para un gran grupo de individuos, estos impactantes explosivos atraerán las miradas de multitudes enteras
Manual de Señuelos: Este manual explica como usar simples materiales como piedras, palos, barro, nieve o cualquier cosa que se encuentre tirado para confeccionar señuelos que imiten una forma humana o animal, con el fin de distraer o ponerle una trampa al enemigo, estos señuelos podrán engañar al enemigo mientras se encuentre a una gran distancia o la falta de luz u otro factor le dificulte una vista clara de ellos.
Pistola de Bengalas: Perfecto para pedir ayuda, distraer a alguien o dispararle a alguien con un golpe bastante fatal. Estas pistolas solo llevan dos cargas por rol sin poder cargar mas
Manual Genkidama.
Manual Puppetmaster.
Manual Explosión galáctica.
Manual Kuchiyose.
Manual Fusrodah.
Manual Prisa.
Guny
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Akuma no mi
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Tras encargarme de esos payasos me volví a sentar y comencé a devorar mi chocolate, ésta vez un poco mas ansioso y con peor humor que antes. Por suerte había logrado ahuyentarlos con un golpe y no había tenido que recurrir a mi pistola, algo que sin duda hubiera llamado mucho mas la atención y puede que hasta hiciese que llamase la atención de la marina. Cuando la última onza de chocolate estaba a punto de desaparecer dentro de mi boca una voz me llamó de nuevo la atención desde mi espalda. En un principio estaba a punto de reaccionar dando un golpe hacia atrás pensando que era otro humano intentando molestarme, pero el tono de esa voz era bastante mas calmado y amistoso. Perecía algo impresionado por que alguien de mi tamaño se hubiera encargado de esos tipos y me preguntó que era, estaba claro que en un lugar como el East Blue no estaban muy acostumbrados a la presencia de enanos.
- Para ser la primera vez que ves a alguien como yo no te equivocas. En efecto soy un enano, mi nombre es Guny, si me hubieras pillado 2 minutos antes estaría encantado de conocerte, tendrás que esperar un poco a que se me pase el cabreo. - Le dije al hombre que se había presentado como Uracha. - De todas formas es agradable que alguien te dirija la palabra, normalmente la gente de aqui solo me mira y cuchichea a mis espaldas, así que si no me equivoco no eres de esta isla ¿verdad? - Pregunté algo curioso.
Me levanté para ponerme de frente ea ese humano y de un bocado me tragué el último trozo de chocolate, ahora que lo miraba un poco mas detenidamente tenía mas pinta de ser un aventurero o un pirata que un civil, no sabría explicar porque, pero sabía que esa persona era muy fuerte, tenía suerte de que no fuera como los pringados de antes.
- En fin, eres el primer humano con el que charlo amigablemente en mucho tiempo, así que si no te importa me podrías hablar un poco mas de ti. - Dije directamente, con un tono a lo mejor algo descarado pero sincero.
- Para ser la primera vez que ves a alguien como yo no te equivocas. En efecto soy un enano, mi nombre es Guny, si me hubieras pillado 2 minutos antes estaría encantado de conocerte, tendrás que esperar un poco a que se me pase el cabreo. - Le dije al hombre que se había presentado como Uracha. - De todas formas es agradable que alguien te dirija la palabra, normalmente la gente de aqui solo me mira y cuchichea a mis espaldas, así que si no me equivoco no eres de esta isla ¿verdad? - Pregunté algo curioso.
Me levanté para ponerme de frente ea ese humano y de un bocado me tragué el último trozo de chocolate, ahora que lo miraba un poco mas detenidamente tenía mas pinta de ser un aventurero o un pirata que un civil, no sabría explicar porque, pero sabía que esa persona era muy fuerte, tenía suerte de que no fuera como los pringados de antes.
- En fin, eres el primer humano con el que charlo amigablemente en mucho tiempo, así que si no te importa me podrías hablar un poco mas de ti. - Dije directamente, con un tono a lo mejor algo descarado pero sincero.
- Off:
- siento la tardanza, como Yuzi estaba en nuestro grupo en un principio estaba esperando por ella, pero con el paso del tiempo se me olvidó XD.
Por cierto, si alguien necesita algo enviadme un mensaje a la cuenta de Adam que es mi cuenta principal.
Uracha
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Akuma no mi
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Me quede escuchando todo lo que decía aquel hombrecillo y cuando me dijo su nombre sonreí, -Es cierto que a los ojos de los demás puedes ser bastante raro, es mas yo es la primera vez que veo alguien de tu raza, pero no deberías darle ninguna importancia a lo que digan la gente sobre ti, la gran mayoría de las personas solo sabe juzgar a los demás, pero no todo el mundo se comporta igual te lo aseguro, también hay mucha gente que merece la pena conocerlas. aunque eso lo descubrirás tu con el tiempo Guny y no no soy de esta isla, estoy aquí para cumple una pequeña misión.- dije observándole
Seguidamente se levanto y se puso delante mía mientras se comía el ultimo trozo de chocolate que le quedaba de nuevo el habló con un tono mas agradable y al parecer quería saber mas cosas sobre mi me lleve la mano a la cabeza y me puse a pensar -MMMM bueno soy un pirata y estoy en esta isla para reclutar gente, mi nombre exacto es Uracha D. Azertxo encantado de conocerte, pertenezco a la banda de La Familia de Shirokami y no se que mas decirte, quieres hacerme tu alguna pregunta?.- dije aun pensativo
A continuación vinieron corriendo tres marines, y sacaron sus armas y nos apuntaron -Arriba las manos que estáis haciendo- nada mas ver a los marines comencé a reírme -Vaya, parece que has llamado demasiado la atención mejor que huyamos o nos vendrá todo el cuartel de la marina.-
dije mirando a Guny y esperando una respuesta.
Seguidamente se levanto y se puso delante mía mientras se comía el ultimo trozo de chocolate que le quedaba de nuevo el habló con un tono mas agradable y al parecer quería saber mas cosas sobre mi me lleve la mano a la cabeza y me puse a pensar -MMMM bueno soy un pirata y estoy en esta isla para reclutar gente, mi nombre exacto es Uracha D. Azertxo encantado de conocerte, pertenezco a la banda de La Familia de Shirokami y no se que mas decirte, quieres hacerme tu alguna pregunta?.- dije aun pensativo
A continuación vinieron corriendo tres marines, y sacaron sus armas y nos apuntaron -Arriba las manos que estáis haciendo- nada mas ver a los marines comencé a reírme -Vaya, parece que has llamado demasiado la atención mejor que huyamos o nos vendrá todo el cuartel de la marina.-
dije mirando a Guny y esperando una respuesta.
Worgulv
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En plena limpieza de herejes, cuando ya solo quedaba uno, un hombre enmascarado se levanto de su asiento, el hombre lo miro, otro hereje?, cuando el hombre partió una mesa por la mitad con esa extraña arma que portaba, Worgulv pensó que lo apoyaba, dijo algo amenazante al resto de la taberna, la cual guardo silencio inmediatamente, su cuerpo estaba en llamas ¨¨ que tipo de magia es esta¨¨ pensó el hombre mirando a aquel hombre enmascarado que acababa de apoyarle, posteriormente otro hombre, encapuchado, le puso un brazo en el hombro, y pronuncio su discurso a la taberna, no entendió del todo lo que dijo, pero parecía que le seguían?, el hombre prefirió ser precavido.
El hombre encapuchado saco a ambos de la taberna, parando en un callejón, miro al hombre y al hombre enmascarado, parecía que nos estaba reprendiendo, luego se presento como amigo, de una manera en la que el hombre lo capto fácilmente, parecía que el enmascarado, llamado niño de fuego, también lo era, el hombre ya estaba mas tranquilo. El hombre encapuchado se descubrió, era un hombre de pelo pálido, parecía muy alegre, se presento como Legim, un pirata buscado, `` amigo´´ asintió Worgulv frente la petición de el muchacho del pelo pálido, después sugirió algo al enmascarado, `` mi entender la mayoría,..... siento ser molestia,.... Legim´´ costo a pronunciar el hombre, `` intentare....aprender ´´ sonrió el hombre ante el hombre de pelo pálido. Worgulv guardo sus dos hachas en sendas anillas atadas en su cinturón, se miro las manos, estaban manchadas de sangre y..., el hombre callo de rodillas, el néctar de los dioses derramado, frunció el ceño, ``herejes...queda uno´´ el hombre dirigió su mano a su espalda, de donde saco una hacha mas pequeña, mirando a legim, como pidiendo permiso,`` los herejes deben morir...néctar de los dioses desperdiciado, derramado,....imperdonable´´ imploraba Worgulv ante su nuevo amigo
El hombre encapuchado saco a ambos de la taberna, parando en un callejón, miro al hombre y al hombre enmascarado, parecía que nos estaba reprendiendo, luego se presento como amigo, de una manera en la que el hombre lo capto fácilmente, parecía que el enmascarado, llamado niño de fuego, también lo era, el hombre ya estaba mas tranquilo. El hombre encapuchado se descubrió, era un hombre de pelo pálido, parecía muy alegre, se presento como Legim, un pirata buscado, `` amigo´´ asintió Worgulv frente la petición de el muchacho del pelo pálido, después sugirió algo al enmascarado, `` mi entender la mayoría,..... siento ser molestia,.... Legim´´ costo a pronunciar el hombre, `` intentare....aprender ´´ sonrió el hombre ante el hombre de pelo pálido. Worgulv guardo sus dos hachas en sendas anillas atadas en su cinturón, se miro las manos, estaban manchadas de sangre y..., el hombre callo de rodillas, el néctar de los dioses derramado, frunció el ceño, ``herejes...queda uno´´ el hombre dirigió su mano a su espalda, de donde saco una hacha mas pequeña, mirando a legim, como pidiendo permiso,`` los herejes deben morir...néctar de los dioses desperdiciado, derramado,....imperdonable´´ imploraba Worgulv ante su nuevo amigo
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Akuma no mi
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Todo se había calmado un poco, ahora los hombres de aquel lugar parecían haber captado el mensaje. De repente una mano se posó sobre el hombro del enmascarado, este giró la mirada preguntándose quién había hecho eso después de la amenaza. Se trataba del encapuchado, este rápidamente dijo una excusa creíble, dijo que eran agentes del gobierno en una misión y que estaban allí para llevarse al tipo de las hachas, una gotita de sudor cayó por la cabeza del moreno cuando dijo “Mi compañero antorcha” no había nombre más precioso posible ¿Verdad? a continuación habló un poco con el camarero y le dijo que informara de aquello. Al parecer la situación había cambiado un poco, de una amenaza seria con intención de destripar a media taberna, a una simple riña de parte de dos agentes del gobierno encubiertos. Al parecer los dos tenían formas de pensar distintas, sin embargo podían llevarse bien sin problema, como se acababa de demostrar en el momento en que cruzaron miradas. Aquello tenía su gracia, pero ahora no era momento de reír o algo similar. Kogáto estaba seguro de que aquel tipo encapuchado era alguien no muy normal, su forma de actuar y pensar, era muy buena para tratarse de un simple viajero ayudando a los demás fingiendo ser un agente, era como si le gustase aquello y disfrutara con aquel tipo de cosas.
Ahora los guió hasta una especie de callejón a las afueras de aquella taberna llena de idiotas. Seguramente quería hablar con ellos o algo parecido. No solo los llamó cabezas huecas, ahora dijo al extranjero que era amigo suyo, no solo eso, también dijo que “el niño fuego” también lo era. La cosa había cambiado de antorcha a niño fuego, de nuevo otra gotita de sudor cayó por la cabeza del enmascarado. De repente aquel tipo se quitó la capucha, el único ojo visible del enmascarado se abrió un poco en señal de sorpresa pensando para sí. “He oído hablar de ti, Legim.” Tras pensar eso, el peliblanco dijo ser el capitán legan legim y efectivamente uno de los hombres más buscados en el mundo, mucho más que Jin Surfer. No sabía que hacía un hombre como él, por aquella simple isla, algún motivo especial tendría. De repente el peliblanco miró al enmascarado y dijo aquellas palabras de que si le intentaba atacar le mataría y que le caía bien. Una sonrisa de lado surgió del rostro del tipo moreno, además de una suave y leve carcajada seria. Se moría de ganas de comprobar el poder del capitán, pero no era el momento, además no parecía mala persona. Simplemente se dedicó a asentir mientras escuchaba las siguientes palabras, a lo que ahora fue el moreno quién le respondió al peliblanco mientras le miraba a los ojos.
- Sería interesante tratar de capturar a alguien como tú. ¿Pero para qué? Eso solo beneficiaría al gobierno y yo quiero joderles. De todas formas tú tampoco me caes mal amigo. – Dijo ahora mientras observaba de repente al tipo de las hachas, para acto seguido volver a mirar al capitán que tenía ante sus ojos. – No, no conozco a profesores, pero la mejor forma de que aprenda es rodeado de gente que le entienda y hable como él necesite saber, además de una pequeña ayuda, no costaría mucho capitán.
De repente un tipo apareció, este iba junto a otro enmascarado, al parecer allí había más de una persona enmascarada. Un concurso de disfraces no era, muchos ocultaban su identidad, algo verdaderamente útil al parecer. De repente uno de los tipos comenzó a hablar con el peliblanco, le dijo que quería tener una vida tranquila y que se iba a hacer panadero o líder de una casa de señoritas que venden su cuerpo. Empezó a dejar en el suelo muchas pertenencias y una increíble cantidad de pasta, el moreno flipaba con todo aquello. “Joder, yo quiero ser panadero, que pila de pasta” Pensó durante un momento observando el dinero con la mirada tranquila. Además todas aquellas cosas, pudo ver los manuales de las técnicas especiales, algo que también él poseía. Se preguntaba que haría el peliblanco con todo aquello, pero ahora no era momento de pensar en aquello. Tenía que centrarse en lo que estaban, era un tema serio el que había pasado en la taberna. Al ver como aquel tipo se largaba sin mirar atrás, el moreno agachó un poco la cabeza, pareció un gran guerrero y le habría gustado luchar con él o contra él. Sin embargo eso no iba a quedar así, había memorizado su rostro y algún día le buscaría para poder hablar con él, había algo misterioso en él que le atraía sin duda alguna. Sin embargo ahora no se podía hacer nada, el chico había decidido marcharse y era su decisión. Antes dijo que hablaran con el tipo de la máscara, pero el hombre dijo “Deadpool” ese tipo… claro, el agente Deadpool del CP. Ahora lo entendía, era un increíble agente con un potencial admirable, aquel castaño debía ser o conocer a Deadpool. Todo empezaba a tomar sentido en todo aquello. De repente el hombre de las hachas comenzó a hablar, debía estar de coña, quería cargarse al último tipo. Decía que habían desperdiciado el néctar de los dioses, seguramente se refería a la cerveza que habían tirado anteriormente. Dijo que era algo imperdonable y que quedaba uno. Ese tipo era un amante de la cerveza e iba a matar al idiota que quedaba con vida, sin embargo el volver al interior podía ser algo no muy sabio. El moreno en ese momento dirigió su mirada al peliblanco de nuevo de forma muy tranquila, después de unos segundos comenzó a hablarle en un tono tranquilo y calmado con total calma en sus palabras.
- Colega, nuestro amigo aquí presente quiere cargarse a uno de los borrachos. Yo estoy con él, pero claro volver a dentro y encima matar a una persona podría ser ya demasiado llamativo. Dile tú algo que yo no quiero recibir un hachazo. – Respondió mientras se colocaba al lado del tipo de las hachas y le ponía la mano en el hombro de forma tranquila. – No merece la pena, ese idiota será castigado en el más allá cuando muera. – Dirigió su mirada a Legim esperando ayuda por parte del peliblanco.
Ahora los guió hasta una especie de callejón a las afueras de aquella taberna llena de idiotas. Seguramente quería hablar con ellos o algo parecido. No solo los llamó cabezas huecas, ahora dijo al extranjero que era amigo suyo, no solo eso, también dijo que “el niño fuego” también lo era. La cosa había cambiado de antorcha a niño fuego, de nuevo otra gotita de sudor cayó por la cabeza del enmascarado. De repente aquel tipo se quitó la capucha, el único ojo visible del enmascarado se abrió un poco en señal de sorpresa pensando para sí. “He oído hablar de ti, Legim.” Tras pensar eso, el peliblanco dijo ser el capitán legan legim y efectivamente uno de los hombres más buscados en el mundo, mucho más que Jin Surfer. No sabía que hacía un hombre como él, por aquella simple isla, algún motivo especial tendría. De repente el peliblanco miró al enmascarado y dijo aquellas palabras de que si le intentaba atacar le mataría y que le caía bien. Una sonrisa de lado surgió del rostro del tipo moreno, además de una suave y leve carcajada seria. Se moría de ganas de comprobar el poder del capitán, pero no era el momento, además no parecía mala persona. Simplemente se dedicó a asentir mientras escuchaba las siguientes palabras, a lo que ahora fue el moreno quién le respondió al peliblanco mientras le miraba a los ojos.
- Sería interesante tratar de capturar a alguien como tú. ¿Pero para qué? Eso solo beneficiaría al gobierno y yo quiero joderles. De todas formas tú tampoco me caes mal amigo. – Dijo ahora mientras observaba de repente al tipo de las hachas, para acto seguido volver a mirar al capitán que tenía ante sus ojos. – No, no conozco a profesores, pero la mejor forma de que aprenda es rodeado de gente que le entienda y hable como él necesite saber, además de una pequeña ayuda, no costaría mucho capitán.
De repente un tipo apareció, este iba junto a otro enmascarado, al parecer allí había más de una persona enmascarada. Un concurso de disfraces no era, muchos ocultaban su identidad, algo verdaderamente útil al parecer. De repente uno de los tipos comenzó a hablar con el peliblanco, le dijo que quería tener una vida tranquila y que se iba a hacer panadero o líder de una casa de señoritas que venden su cuerpo. Empezó a dejar en el suelo muchas pertenencias y una increíble cantidad de pasta, el moreno flipaba con todo aquello. “Joder, yo quiero ser panadero, que pila de pasta” Pensó durante un momento observando el dinero con la mirada tranquila. Además todas aquellas cosas, pudo ver los manuales de las técnicas especiales, algo que también él poseía. Se preguntaba que haría el peliblanco con todo aquello, pero ahora no era momento de pensar en aquello. Tenía que centrarse en lo que estaban, era un tema serio el que había pasado en la taberna. Al ver como aquel tipo se largaba sin mirar atrás, el moreno agachó un poco la cabeza, pareció un gran guerrero y le habría gustado luchar con él o contra él. Sin embargo eso no iba a quedar así, había memorizado su rostro y algún día le buscaría para poder hablar con él, había algo misterioso en él que le atraía sin duda alguna. Sin embargo ahora no se podía hacer nada, el chico había decidido marcharse y era su decisión. Antes dijo que hablaran con el tipo de la máscara, pero el hombre dijo “Deadpool” ese tipo… claro, el agente Deadpool del CP. Ahora lo entendía, era un increíble agente con un potencial admirable, aquel castaño debía ser o conocer a Deadpool. Todo empezaba a tomar sentido en todo aquello. De repente el hombre de las hachas comenzó a hablar, debía estar de coña, quería cargarse al último tipo. Decía que habían desperdiciado el néctar de los dioses, seguramente se refería a la cerveza que habían tirado anteriormente. Dijo que era algo imperdonable y que quedaba uno. Ese tipo era un amante de la cerveza e iba a matar al idiota que quedaba con vida, sin embargo el volver al interior podía ser algo no muy sabio. El moreno en ese momento dirigió su mirada al peliblanco de nuevo de forma muy tranquila, después de unos segundos comenzó a hablarle en un tono tranquilo y calmado con total calma en sus palabras.
- Colega, nuestro amigo aquí presente quiere cargarse a uno de los borrachos. Yo estoy con él, pero claro volver a dentro y encima matar a una persona podría ser ya demasiado llamativo. Dile tú algo que yo no quiero recibir un hachazo. – Respondió mientras se colocaba al lado del tipo de las hachas y le ponía la mano en el hombro de forma tranquila. – No merece la pena, ese idiota será castigado en el más allá cuando muera. – Dirigió su mirada a Legim esperando ayuda por parte del peliblanco.
Yuzi Read
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Estaba tranquilamente leyendo concentrada cuando oí ruidos a mi alrededor, pronto se rompió la calma y como me llamo demasiado la atención todo aquello, cerré mi libro y estuvé atenta a lo que pasaba. Resultó que un hombrecillo que parecía ser un enano estaba en una lucha contra otros tres hombres, según lo que decían deducí que era por un chocolate robado o algo por el estilo, el hombrecillo aunque pequeño asestó un gran golpe al hombre del medio, recuperando su chocolate y mandandole a volar, los otros dos hombres que le acompañaron salieron por patas asustados y la multitud de gente al que había llamado la atención aquel incidente se fué acercando, haciendo que el enano se quedara solo.
Me pareció bastante interesante ver a una raza tan rara como a la que el pertenecia en la ciudad así como la fuerza que poseía y si tambien el mal carácter; me pusé de pies dispuesta a entablar una conversación con él, cuando alguien se me adelanto, si no hubiese reconocido a ese alguien me habría sentado a leer de nuevo, pero le reconocí y me iba a acercar a hablar con los dos hombres cuando la marina hizo su aparición.
Casi me había olvidado de que aquello era un hervidero de marines por todos los costados, suspiré y mi odio hacia ellos actuó por mi, eche a correr por la calle arma en mano y escalé por el tejado más cercano con facilidad, una vez arriba disparé tres tiros limpios, uno impactó en la pierna del primer marine, otro en la mano del segundo y otro en el hombro del tercero, los tres retrocedieron y se fueron malhumorados dispuestos a pedir refuerzos, una vez que se fueron aproveché para descender de mi posición y acercarme a ellos ya un poco más tranquila.
-Estamos en paz, por lo de mi dinero de alubarna- Le dije a Uracha con una sonrisa.
-Me llamo Yuzi, ha sido una buen golpe el del hombre, pero será mejor que nos vayamos de aquí antes de que pidan refuerzos-
Sonreí al enano prsentandome y esperando su respuesta.
Me pareció bastante interesante ver a una raza tan rara como a la que el pertenecia en la ciudad así como la fuerza que poseía y si tambien el mal carácter; me pusé de pies dispuesta a entablar una conversación con él, cuando alguien se me adelanto, si no hubiese reconocido a ese alguien me habría sentado a leer de nuevo, pero le reconocí y me iba a acercar a hablar con los dos hombres cuando la marina hizo su aparición.
Casi me había olvidado de que aquello era un hervidero de marines por todos los costados, suspiré y mi odio hacia ellos actuó por mi, eche a correr por la calle arma en mano y escalé por el tejado más cercano con facilidad, una vez arriba disparé tres tiros limpios, uno impactó en la pierna del primer marine, otro en la mano del segundo y otro en el hombro del tercero, los tres retrocedieron y se fueron malhumorados dispuestos a pedir refuerzos, una vez que se fueron aproveché para descender de mi posición y acercarme a ellos ya un poco más tranquila.
-Estamos en paz, por lo de mi dinero de alubarna- Le dije a Uracha con una sonrisa.
-Me llamo Yuzi, ha sido una buen golpe el del hombre, pero será mejor que nos vayamos de aquí antes de que pidan refuerzos-
Sonreí al enano prsentandome y esperando su respuesta.
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El hombre al que le había ofrecido de nuevo la botella con el fresquito sake no me contestó, y tras unos momentos se levantó y se fue de donde nos encontrábamos hacia un callejón apartado, mientras se aljaba le pegue otro trago a la botella y cuando volví a mirar hacia aquel tipo se había parado a hablar con una persona de cabello blanco y después le daba unas cosas. Esto último me llamo mucho la atención pues no se solía ver a nadie dar cosas a otra persona en medio de la calle por muy apartada que estuviese “o al hombre le sobra el dinero por todos los lados, o le gusta darle a la gente cosas” pensé mientras bebía otro poco de sake, dejando la botella casi vacía.
Tras un último trago, terminé el delicioso líquido y me levanté, me volví hacia el lugar por el que el amable hombre que había compartido conmigo su bebida, y comencé a andar hacia esa dirección mientras me colocaba de nuevo la máscara. Y en unos pocos segundo me coloqué al lado del hombre de pelo blanco al que le habían dado un montón de cosas. Mi objetivo no era robarle ni mucho menos, desde lejos lo había visto y ahora de cerca me lo parecía más así que sin más preámbulos y sin hacer caso de las personas que tenía al lado suyo, se lo pregunté, pero antes le llamé la atención tocándole un hombro.
-Disculpe la molestia, mi nombre es Slade Wilson y me gustaría que me enseñase todo lo necesario para ser un cura de su doctrina- le solté al hombre de pelo blanco mientras me inclinaba en señal de respeto- seguiré todos sus pasos sin hacer preguntas y al pie de la letra.
Tras un último trago, terminé el delicioso líquido y me levanté, me volví hacia el lugar por el que el amable hombre que había compartido conmigo su bebida, y comencé a andar hacia esa dirección mientras me colocaba de nuevo la máscara. Y en unos pocos segundo me coloqué al lado del hombre de pelo blanco al que le habían dado un montón de cosas. Mi objetivo no era robarle ni mucho menos, desde lejos lo había visto y ahora de cerca me lo parecía más así que sin más preámbulos y sin hacer caso de las personas que tenía al lado suyo, se lo pregunté, pero antes le llamé la atención tocándole un hombro.
-Disculpe la molestia, mi nombre es Slade Wilson y me gustaría que me enseñase todo lo necesario para ser un cura de su doctrina- le solté al hombre de pelo blanco mientras me inclinaba en señal de respeto- seguiré todos sus pasos sin hacer preguntas y al pie de la letra.
- off rol:
- perdón por el off-rol y por el post tan corto que he enviado, pero no se me ocurría nada más brillante
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Antes de que Guny diera una respuesta apareció alguien que ya había conocido hace tiempo y apareció a lo grande, se trataba de Yuzi y esta sin pensárselo dos veces, había disparado a los tres marines que intentaba arrestarnos por la pelea de Guny estos salieron corriendo pero seguro que volverían y con refuerzos.
Pero antes de que esto sucediera ella se acerco a nosotros y con una sonrisa me miro diciéndome que estábamos en paz por lo de Alubarna seguidamente ella se presento y comenzó a hablar sobre la pelea de Guny y luego dijo exactamente lo que yo estaba pensando, que deberíamos alejarnos de aquel lugar.
-Es cierto mejor marchémonos de aquí y vayamos aun lugar mas seguro- dije mientras los tres comenzábamos a caminar, mire a Yuzi y alegremente dije -Vaya me alegro muchísimo de volver a verte como te a ido todo y por cierto tenia el problema controlado dije con intención de picarla un poco, pero muchísimas gracias, veo que tu puntería sigue siendo muy buena, pero no te lo creas mucho- mientras caminábamos observaba a ambos y por mi cabeza solo rondaba si invitarles o no a la banda.
-Por cierto, ¿Qué os trae a ambos a este lugar?- Pregunte con curiosidad.
Pero antes de que esto sucediera ella se acerco a nosotros y con una sonrisa me miro diciéndome que estábamos en paz por lo de Alubarna seguidamente ella se presento y comenzó a hablar sobre la pelea de Guny y luego dijo exactamente lo que yo estaba pensando, que deberíamos alejarnos de aquel lugar.
-Es cierto mejor marchémonos de aquí y vayamos aun lugar mas seguro- dije mientras los tres comenzábamos a caminar, mire a Yuzi y alegremente dije -Vaya me alegro muchísimo de volver a verte como te a ido todo y por cierto tenia el problema controlado dije con intención de picarla un poco, pero muchísimas gracias, veo que tu puntería sigue siendo muy buena, pero no te lo creas mucho- mientras caminábamos observaba a ambos y por mi cabeza solo rondaba si invitarles o no a la banda.
-Por cierto, ¿Qué os trae a ambos a este lugar?- Pregunte con curiosidad.
Legim
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Al fin había relajado el ambiente y el extranjero mostraba señales de simpatía y amabilidad, o eso parecía hasta que empezó a decir que debían de morir los herejes.
- Eh, eh, relájate grandullón, los herejes morirán, pero mediante un castigo divino ¿Vale? Es Dios quien debe de castigarles, no nosotros ¿Entiendes? Si nosotros los matamos por rencor, sus familiares tendrán rencor hacia nosotros, querrán venganza, y nacerá un nuevo circulo de asesinatos sin fin... lo mejor es dejarlo pasar ¿Ok? Ya se encargará Dios de darles su castigo...
Miré a los ojos del extranjero con una suave sonrisa a la vez que le guiñé un ojo.
- Además... hay castigos peores que la muerte, como la deshonra ¿No crees? Que Dios elija la muerte mas adecuada para esos herejes.
Suspiré mirando al que se presentó como Jin y tras unos segundos de debate mental suspiré nuevamente.
- Está bien... morirán, pero no aún, más tarde... ahora no podemos llamar la atención... - Dirigí mi mirada al extranjero sonriendole- Los mataremos, pero no ahora, luego.
Y en ese mismo instante, el hombre que vino con Deadpool, otro enmascarado, se presentó y pidió entrar en mi banda. Lo analicé por unos breves segundos riendo para mis adentros al ver un irónico parecido con Deadpool.
- Vaya, Deadpool buscó un sustituto lo más parecido a él que pudo ¿Eh? jajaja, se bienvenido amigo, luego te presentaré al otro compañero jajaja, y bueno, estos son Jin Surfer y el otro chico, parece ser extranjero... ¿Cómo te llamas amigo?
- Eh, eh, relájate grandullón, los herejes morirán, pero mediante un castigo divino ¿Vale? Es Dios quien debe de castigarles, no nosotros ¿Entiendes? Si nosotros los matamos por rencor, sus familiares tendrán rencor hacia nosotros, querrán venganza, y nacerá un nuevo circulo de asesinatos sin fin... lo mejor es dejarlo pasar ¿Ok? Ya se encargará Dios de darles su castigo...
Miré a los ojos del extranjero con una suave sonrisa a la vez que le guiñé un ojo.
- Además... hay castigos peores que la muerte, como la deshonra ¿No crees? Que Dios elija la muerte mas adecuada para esos herejes.
Suspiré mirando al que se presentó como Jin y tras unos segundos de debate mental suspiré nuevamente.
- Está bien... morirán, pero no aún, más tarde... ahora no podemos llamar la atención... - Dirigí mi mirada al extranjero sonriendole- Los mataremos, pero no ahora, luego.
Y en ese mismo instante, el hombre que vino con Deadpool, otro enmascarado, se presentó y pidió entrar en mi banda. Lo analicé por unos breves segundos riendo para mis adentros al ver un irónico parecido con Deadpool.
- Vaya, Deadpool buscó un sustituto lo más parecido a él que pudo ¿Eh? jajaja, se bienvenido amigo, luego te presentaré al otro compañero jajaja, y bueno, estos son Jin Surfer y el otro chico, parece ser extranjero... ¿Cómo te llamas amigo?
Worgulv
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Akuma no mi
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Los dos hombres que se hallaban ante el le decían que dios se encargaría de el hereje restante, dios? cual de todos?, el hombre de pelo blanco sugirió una idea que convenció al hombre, la deshonra, ese era un mayor castigo que la muerte, ya que si le llegaba, no seria recibido en los grandes salones de los dioses, en su festejo eterno, a Worgulv le pareció buen castigo para alguien de desperdiciaba y tiraba con desprecio, el jugo de la sabiduría y el néctar de sus dioses.
Todas sus hachas descansaban ya en sus respectivas fundas o anillas, fue en ese momento en el que se dio cuenta que un hombre enmascarado estaba algo mas alejado, y se había dirigido al hombre del pelo blando, ¨¨L...Leg...Legim?¨¨, intento repetir el hombre para sus adentros intentando recordar el hombre que se había convertido en su amigo. Este sujeto no llevaba una mascara como su otro nuevo amigo, esta no dejaba ver ningún trozo de su verdadero cuerpo, parecía embutido en cuero de diferentes colores, y había sugerido a Legim ser de su banda, `` Banda? que es un banda?´´ pregunto el hombre con gesto dubitativo, mirando alternativamente a los dos enmascarados y a Legim, si era algún tipo de grupo de bebida, el quería estar incluido.
Parecía que se levantaba algo de revuelo en las calles, parecía que las acciones acontecidas en la taberna no habían pasado inadvertidas para las autoridades de la zona, el hombre era ajeno al sistema del mundo, no sabia que era ni los marines, ni costumbres, ni formas de actuación, a si que simplemente siguió mirando a sus compañeros y al hombre enmascarado, en ese momento abrió los ojos, como si se hubiese dado cuenta de algo, ``Worgulv...Amigo?´´ dijo extendiendo su enorme brazo en dirección al nuevo enmascarado que se hallaba en escena, con una gran sonrisa que se dejaba ver tras su barba. El hombre no podía ni haberse imaginado, que podría encontrar a hombres dignos de llamarse amigos tan pronto, el gran hombre estaba feliz.
Todas sus hachas descansaban ya en sus respectivas fundas o anillas, fue en ese momento en el que se dio cuenta que un hombre enmascarado estaba algo mas alejado, y se había dirigido al hombre del pelo blando, ¨¨L...Leg...Legim?¨¨, intento repetir el hombre para sus adentros intentando recordar el hombre que se había convertido en su amigo. Este sujeto no llevaba una mascara como su otro nuevo amigo, esta no dejaba ver ningún trozo de su verdadero cuerpo, parecía embutido en cuero de diferentes colores, y había sugerido a Legim ser de su banda, `` Banda? que es un banda?´´ pregunto el hombre con gesto dubitativo, mirando alternativamente a los dos enmascarados y a Legim, si era algún tipo de grupo de bebida, el quería estar incluido.
Parecía que se levantaba algo de revuelo en las calles, parecía que las acciones acontecidas en la taberna no habían pasado inadvertidas para las autoridades de la zona, el hombre era ajeno al sistema del mundo, no sabia que era ni los marines, ni costumbres, ni formas de actuación, a si que simplemente siguió mirando a sus compañeros y al hombre enmascarado, en ese momento abrió los ojos, como si se hubiese dado cuenta de algo, ``Worgulv...Amigo?´´ dijo extendiendo su enorme brazo en dirección al nuevo enmascarado que se hallaba en escena, con una gran sonrisa que se dejaba ver tras su barba. El hombre no podía ni haberse imaginado, que podría encontrar a hombres dignos de llamarse amigos tan pronto, el gran hombre estaba feliz.
Guny
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Akuma no mi
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La conversación con el tal Uracha fue bastante breve, la marina no tardó en hacer acto de presencia, el revuelo provocado por mi anterior... acto impulsivo ha debido atraerlos, aunque bueno teniendo en cuenta la isla en la que me encuentro no es de extrañar que haya un marine en cada esquina. Parecía que estábamos en problemas, una desventaja numérica de 3 a 1 y 1/4, y yo ya me estaba preparando para combatir, podía correr y con mi tamaño no me costaría esconderme de ellos, pero Uracha me había caído bien, no le dejaría plantado. Justo antes de desenfundar mi pistola se escucharon tres tiros, al mirar a mi alrededor pude localizar su origen, una tiradora humana, bastante hábil, en a penas unos segundos había sido capaz de neutralizar a 3 marines sin matarlos... algo que seguramente fuera difícil para mi. Aquella misteriosa aliada se acercó a nosotros dirigiéndole unas palabras a Uracha, parece que se conocían de antes y elogió mi golpe de antes, pero en algo tenía razón sería mejor que nos largásemos de ahí cuanto antes.
-Gracias por quitárnoslos de encima, eres una buena tiradora. Mi nombre es Guny.- Dije con un tono agradable algo impropio de mi- Pero basta de presentaciones, larguémonos rápido.-
Mientras nos alejábamos del lugar de los hechos Uracha nos preguntó que nos atraía por ese lugar, la verdad es que ni yo mismo lo sabía, ya llevaba meses viajando sin ningún rumbo fijo.
-¿Que me trae por aquí? Es dificil de responder, soy una especie de exiliado de mi pueblo, me fui para protegerlos, desde entonces llevo vagando por los mares, viajando de isla en isla buscando un objetivo. Si he acabado aquí es por puro azar.- Expliqué mientras corría esquivando las piernas de los numerosos transeúntes que nos cruzábamos. -En esta ciudad hay marines por todas partes, yo lo tengo fácil, pero sera mejor encontrar un lugar en el que nos podamos esconder todos ¿Alguna idea?- Pregunté a mis dos acompañantes, acto seguido daba un salto para subirme al hombro de Uracha, estaba cansado de intentar evitar que me aplastasen.
-Gracias por quitárnoslos de encima, eres una buena tiradora. Mi nombre es Guny.- Dije con un tono agradable algo impropio de mi- Pero basta de presentaciones, larguémonos rápido.-
Mientras nos alejábamos del lugar de los hechos Uracha nos preguntó que nos atraía por ese lugar, la verdad es que ni yo mismo lo sabía, ya llevaba meses viajando sin ningún rumbo fijo.
-¿Que me trae por aquí? Es dificil de responder, soy una especie de exiliado de mi pueblo, me fui para protegerlos, desde entonces llevo vagando por los mares, viajando de isla en isla buscando un objetivo. Si he acabado aquí es por puro azar.- Expliqué mientras corría esquivando las piernas de los numerosos transeúntes que nos cruzábamos. -En esta ciudad hay marines por todas partes, yo lo tengo fácil, pero sera mejor encontrar un lugar en el que nos podamos esconder todos ¿Alguna idea?- Pregunté a mis dos acompañantes, acto seguido daba un salto para subirme al hombro de Uracha, estaba cansado de intentar evitar que me aplastasen.
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Akuma no mi
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