Cuarenta y dos penumbras a todo color [Finalizada]

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Nivel: 1

Nombre: Rebeka Kelvin Ao. Sí, con K. No soy ni como esas vulgares Rebecas con “C” que necesitan una letra de fonema cambiante, ni como las otras que, por incultura o por lo que sea, necesitan poner “ck”. ¿Qué pasa? ¿No saben elegir una sola consonante? ¡Me saca de quicio!

Apodo: Muy a mi pesar, gracias a mis apellidos, hay quien me llama Cacao: “Mira, es Rebeka K. Ao ¡Qué gracioso!” Panda de imbéciles… Pero bueno, en un mundo de estúpidos, ¿Qué importa cómo me llamen? A veces en citas a ciegas me hago llamar "42 penumbras", por hacer la gracia.

Edad: 18 años

Sexo: Mujer

Raza: Humana, aunque entre mi hermano Derek y yo hay un salto evolutivo bastante claro.

Rango/Empleo: Escritora. Principalmente ciencia ficción, aunque mi primer libro publicado fue “Cuarenta y dos penumbras a todo color”, un relato erótico acerca del becario Christopher Rainbow, que tuvo una serie de escarceos con la titánica empresaria Annabeth Iron. Cuando lo leo a día de hoy me pregunto cómo ese bodrio pudo vender tanto.

Rango social: Medio-Alto

Descripción estilo de lucha: ¿Luchar? Sí, bueno, un poco. De pequeña me apuntaron a natación junto a mi hermano, lo que se resumía en una pelea constante por quién se llevaba el churro de la piscina. Fue en una de estas peleas cuando, arreándole con él para demostrarle que aquel día me tocaba a mí, me di cuenta de que era más gratificante atizar con un arma que nadar, y me apunté a la escuela de esgrima de Dresrossa, donde aprendí un estilo de lucha que, aunque intento utilizar poco, con el salvaje de mi hermano no me queda más remedio que entrenar.
-Nombre: Danza espada
-Ejecución: Es un estilo bastante sencillo, que básicamente se basa en la velocidad para aumentar mucho la efectividad de un ataque. Todo esto es gracias a un Impulso, gracias al que la aceleración efectiva se incrementa notablemente. La combinación básica es comenzar con un impulso y terminar con un Corte, aunque también se usan movimientos basados más en Fuerza ataques de Demolición, sin olvidar nunca la seguridad del propio cuerpo, ya que para ganar, una buena Protección es vital.
Si hubiera que definir el estilo de una manera más formal podríamos decir que es una esgrima rápida, basada en la típica esgrima renacentista, de espada larga y daga de vela, aunque esta última no se suele utilizar, pues impide el Relevo de una mano si es herida. Estilo casi acrobático, elegante, pone en jaque las defensas de mucha gente con golpes rápidos y letales, como una Ventisca de ataques afilados. Un Tornado de golpes que convierte la lucha en una constante pesadilla para cualquier rival. La verdad, esto es lo que decían los maestrillos, pero yo me quedé con la síntesis: Se pincha con la punta y se corta con la hoja.

Descripción física: ¿Mi físico? Bueno, podría resumirlo en perfecta, pero tal vez quieras algo más, ¿No? Pero imagina que no digo nada más. Sólo por un momento… Podría ser morena, castaña, rubia, o tener el cabello de cualquier tono de fantasía. Mis ojos podrían ser grandes, pequeños, redondos o rasgados, y mi mirada podría ser inquisitiva, indiferente, cálida, y mil cosas más… Podría tener el pecho que tú quisieras y mis curvas se amoldarían a lo que tú puedes llegar a entender como perfección. Cada centímetro de mí te causaría escalofríos tan sólo de pensarlo, y no voy ni a contarte qué sucedería si tu mente dibujara mis labios dándote un beso, si mis dientes brillaran bajo una tímida sonrisa mientras tú, encandilado, me miras como hambriento ante un pastel de ambrosía. ¿Quieres que siga? Si te dijera que puedo ser todo lo que tú quieras de mí te estaría mintiendo; Sin embargo, ahora que ya te has dado cuenta de que una palabra mía vale más que mil imágenes, puedo continuar.

Mi cabello es rubio, de un tono dorado claro, habitualmente suelto en una larga melena que desciende en capas por mi espalda y un flequillo diagonal que muchas veces cubre mi ojo izquierdo, aunque a veces lo dejo al descubierto, pues mis pupilas alargadas dan a mis ojos dorados un aspecto felino bastante atractivo, aunque muchas veces uso lentillas. Otros ojos para ver el mundo. Suena maravilloso, ¿No crees? La verdad es que estoy ligada al tono amarillo, que lo tiene hasta mi piel clara, ligeramente bronceada, y a veces una se harta. No me malinterpretes, adoro mis ojos, pero a veces se hace tan monótono verte en el espejo un día sí, y otro también… Un pequeño cambio puede hacer mucho. A veces incluso me pongo unas pequeñas horquillas con forma de orejitas (aunque en parte es para combinar con Lu, mi zorro negro).

Mi cara es ovalada, aunque con tendencia a la redondez, como si de una niña recién entrada en la pubertad se tratara. Tengo los labios finos y delicados, pero carnosos. Muchas veces se puede ver una sonrisa en mi cara, una mueca de alegría, de felicidad, de placidez. Soy como una niña, de nariz algo chata y una mirada sincera (o eso cree la gente). Al fin y al cabo ser una niña tiene muchas ventajas, ¿Verdad? Ser adorable, mona, que no te tomen en serio… Simplemente por una cara bonita y un escote abultado te vuelves invisible; A nivel intelectual, quiero decir. La gente se preocupa más de tenerme contenta para que me quite la ropa que de escuchar mis palabras. ¡Lo cual es genial porque me regalan ropa! Gracias a los chicos que he conocido (a espaldas de Derek, que siempre lo estropea todo) mi armario está lleno de ropa, mi habitación de flores y yo de dulces y chucherías.

Me gustan en especial las ropas negras y azules, ajustadas. No es, al contrario de lo que pueda parecer, para realzar mi figura, curvilínea y esbelta. No lo necesito. Simplemente me gusta, en cierto modo, la calidez de la tela rozando constantemente mi cuerpo, dándome un cariño que POR CULPA DEL IMBÉCIL DE DEREK muchos chicos no me llegan a dar.

Por hacerte un resumen, que estoy segura de que te has perdido. Soy la típica rubita guapa que derrite con su mirada, de sonrisa blanca y adorable. Grandes pechos que desatan la imaginación masculina (y femenina, que la mía también la liberan, para qué negarlo) y figura envidiable. La típica muñequita sin cerebro a la que tratarías de conquistar un fin de semana cualquiera y olvidarías antes de que se fuera de tu cama, con una diferencia: Yo ya no me acordaré de ti antes de entrar a ella.

Y luego está cómo voy por mi casa. Básicamente en ropa interior, aunque con chaqueta. Es muy divertido ver cómo Derek se desespera y me grita que así no salgo, y además es sumamente cómodo. Nadie quiere tener que llevar pantalones en su casa, y si tienes unas piernas largas y bonitas, lo menos que puedes hacer es darles el capricho de estar libres el tiempo que puedan, ¿No?


Alineamiento: Neutral Puro. A ver cómo explico esto. Aguanto a Derek, por lo que soy buena. Pero me encanta chincharlo, así que también soy mala (o eso dice él). Por otro lado, me dan igual esas guerras absurdas entre humanos, peces y demás engendros de la creación, tan sólo quiero vivir, sentir y escribir mis libros. Si tengo que quebrantar la ley a veces no me da miedo hacerlo, vaya, si me sirve de algo. No sé si a eso se le puede llamar Neutral, pero así soy yo, una rubia tonta que no sabe cómo determinar su moral.

Descripción psicológica: Por dentro… Me ahorraré por ahora la palabra perfección. Digamos simplemente que soy el siguiente eslabón de la genética (no como mi hermano). Inteligente, guapa, y lo más importante: Soy dos centímetros más alta que él. ¿Infantil? Sí, un poco, ¿Pero a quién le importa? Mi hermano es peor, un cabeza de chorlito que intenta impedirme hacer lo que me gusta, y ni siquiera lo consigue. Ese patán es incapaz de hacer nada a derechas, aunque le tengo cariño. ¿Pero por qué me haces hablar de mi hermano? ¡Estamos hablando de mí!

Bueno, si me lo preguntas, soy una persona extrovertida, bastante simpática y me divierto haciéndome la tonta. ¿Necesitas saber algo más? Tal vez no te hayas dado cuenta de mi amor propio, aunque es imposible. Entre tú y yo, es algo que intento ocultar delante de la gente, porque rompería el papel tan delicado que intento cumplir de “Chica coqueta e idiota”. ¿Me gusta tener que hacer eso? Bueno, no mucho, pero a veces hay que sacrificar unos gustos por otros, y si necesito en ciertos momentos parecer una chica frágil prefiero eso a que sepan cómo soy realmente. A veces una mujer debe ser… Misteriosa, pero sin que sepan que lo es. Tal vez eso al mismo tiempo revele una cierta inseguridad por mi parte al creer que puedo llegar a necesitar esto pero, en realidad, no es necesidad. Sólo se me arruinaría la diversión. Y no me gusta que nada me arruine la diversión.

Si seguimos con la infinita lista de adjetivos que pueden definirme, hiperactiva es una de las primeras que habría que decir. De pequeña hasta se plantearon medicarme, pero constantes actividades y el amor que sólo una madre puede dar hicieron de mí una niña que se desarrolló con bastante normalidad, y aunque con su muerte me volví un poco “intratable” descubrir los libros con todo lo que hacen sentir, con todo lo que te hacen pensar… Vaya, que soy una devoradora de libros. Bueno, en realidad de todo lo que dé placer. Algunas sustancias, algunos chicos… Cosas de las que una chica inocente como yo no debería hablar, ¿Verdad?

Poco más puedo añadir a lo ya dicho más que decirlo todavía más claro. Me gusta el sexo. Mucho. He llegado a pensar que era una adicción, pero no lo siento como una necesidad, aunque sin duda calma mi necesidad de hacer ejercicio constante.


Gustos: Aquí viene otra palabra: Literatura. Ahí hay de todo: Amor, sexo, deporte, aventuras y fantasía. ¿Te puedes creer que he llegado a leer sobre gente que tenía poderes mágicos salidos de la nada? En un libro no hay límites, tan sólo tu propia imaginación, e incluso si careces de ella un libro te hará soñar. Me encanta soñar, es tan mágico, tan único… Cuando duermo es como flotar, volar, nadar y correr al mismo tiempo. ¿Podría haber algo mejor? Cada libro es un sueño nuevo, y cada nuevo sueño es un libro que algún día escribiré. Es chachi.

Veamos… Espera que miro en mi cuaderno… Aquí está. Al parecer me gustan los chicos y las chicas. Hay una anécdota muy graciosa con esto, y es con una tal Anna. Derek y yo compartimos novia mientras ésta no se fue de la isla. A decir verdad, se fue de la isla porque no sabía entre cual decidirse. Claro que Derek no sabe nada de esto. ¿Os imagináis cómo se pondría don “Los chicos sólo quieren ESO” si le digo que yo era el chico de su primer amor? La verdad es que no quiero ni imaginarlo, aunque por otro lado su cara roja mientras sus orejas se transforman en chimeneas se hace una visión agradable. Sin embargo, lo mejor será estarse callada, es un sensiblón a veces y podría llorar si se lo cuento (aunque tampoco es raro, llora por muchas cosas).

La verdad es que no hay muchas más cosas que me gusten y que no haya ido mencionando ya, aunque como síntesis lo dejaré bastante claro: Libros, sexo, deporte, ciencia, sexo. Soy consciente de que he dicho sexo dos veces, gracias.


Desagrados: Legim: Así de simple. La mayoría de las cosas me dan bastante igual, pero a este tipo le tengo verdadera ojeriza, por tres motivos principales:

El primero es que tiene cara de pervertido, como si fuera a conquistar Momoiro cualquier día y declararse la reina del lugar. La verdad es que cada vez que lo recuerdo en mi mente tiene un nuevo complemento (Un abanico, maquillaje, un Kimono… ah, que eso es de base). Además su pelo es como el de mi tía abuela Renata. No soporto a esa vieja.

El segundo es que en su maldito afán por hacerse rey de las marilolas, o lo que sea que hacen esos piratas de sexualidad tan dudosa, decidió capturar Dresrossa. Por su culpa mi padre murió, aunque tampoco es algo que me desagrade demasiado. Mi padre siempre me crio como a un niño, y, por si no ha quedado claro por mi cabello, mi cara reluciente y mis tetas, soy una mujer, y me gusta que me traten como tal. Me estoy desviando… Eso, que Legim mató a mi padre. Y no, no soy como el maldito Íñigo Montoya. Derek sí.

Y el tercer motivo, y más importante: Cuando intenté hacerme la niñita para dar pena… ¡Pasó de mí! Es decir, si aún tenía alguna duda sobre sus maneras, ahora estoy segura. Odio que pasen de mí, sentirme ignorada, sea si me hago la idiota o si estoy explicando algo. Soy guapa y lista, ¿No merezco que me haga caso un piratucho de medio palmo?

En resumen, odio a Legim, a mi tía abuela, a los okamas y que me ignoren. Todo lo que no he mencionado además me es indiferente. No, no me gusta más cierta comida, ni odio tal sabor. Me da igual si es negro o blanco si sabe trabajar, y me es completamente igual que Derek se dedique a espantar a los chicos que me gustan. Bueno, eso último no me gusta, aunque gracias a él me hacen más regalos. A veces hace cosas útiles el pobre.


Habilidades: ¿De verdad es necesario que las diga? Si están a plena vista, vaya. Seducción, y hacerme la tonta. Son las mejores habilidades que una mujer puede atesorar. ¿Soy anticuada, retrógrada, o algo por el estilo? No, pero sé dónde está mi lugar en este mundo. Los hombres necesitan sentirse fuertes, y ahí está mi poder. Dejar que me posean, cuando en verdad yo soy la dueña de cada acción que realizan, la reina de cada centímetro que tocan. Sólo pueden hacerlo por fruto de mi generosidad, y me colman por ello. ¿Manipuladora, se dice? Sí, es una buena habilidad. Pero se me dan más cosas bien, vaya. Al fin y al cabo, puedo manipular a Der sin necesidad de recurrir al sexo. ¿Qué esperabais? es mi hermano, aunque... Esos ojos... ¡Deja de distraerme! Cuando hablo de sexo a veces digo tonterías, vaya. Se me da bien la música y el baile, la esgrima, cocinar con arte y muchas más cosas. ¿Has leído la definición de habilidad? Te lo dejo aquí, porque seguro que no lo tienes claro:

Habilidad.
(Del lat. habilĭtas, -ātis).
1. f. Capacidad y disposición para algo.
2. f. Gracia y destreza en ejecutar algo que sirve de adorno a la persona, como bailar, montar a caballo, etc.
3. f. Cada una de las cosas que una persona ejecuta con gracia y destreza.
4. f. Enredo dispuesto con ingenio, disimulo y maña.
5. f. Característica referida a Rebeka Kelvin Ao.

Para resumir, se me da bien escribir, novela real o fantástica, y disfruto con ello, casi tanto como de la música y el baile, dos cosas que me apasionan y, obviamente, se me dan bien. Por algo practico cada día, y, gracias a ello, soy bastante flexible. Esto es bueno sobre todo para chinchar a Derek, que no se sabe lamer el ombligo. aunque siempre intenta fastidiarme con esa tontería de chuparse el codo. Un día le voy a meter un codazo y se va a enterar de la relación codo-lengua.

Torpeza: No me sé chupar el codo con mi propia lengua. Eso es todo.

Profesiones: Espadachina, Científica, Ingeniera Robótica, Médica

Banda: Nada por el momento.

Armas: Una espada de acero de buena hechura, mi propio cuerpo y mis uñas. La gatita sabe arañar...

Miau.

Historia: ¿Qué puedo decir de mí que no os haya contado Derek? Para empezar, supongo que sabréis que nacimos a la vez. Bueno, yo nací tres minutos antes, pero él siempre obvia ese detalle. Desde que nacimos siempre peleamos, aunque en el fondo nos queremos. En el fondo de un estanque, pero nos queremos. En fin, que me lío. Desde que nací fui una niña muy activa, eléctrica casi. No paraba en todo el día entre correr, gritar, saltar, brincar, gritar más, saltar mientras gritaba, gritar mientras corría y todas las combinaciones posibles e imposibles de esos cuatro factores, aunque nadie le daba mucha importancia. Yo tan sólo era una niña con muchas energías y un mundo por explorar.

Aunque no era sólo una niña con muchas energías, era una niña con un gran exceso de energía, una hiperactiva. Y aquí entra mi madre, que tenía un ojo siempre puesto en todas partes, apuntándome a toda clase de actividades propias de señoritas de mi belleza y alcurnia (literalmente mi madre decía eso, no me culpéis). Natación para tener una espalda algo más ancha, ballet para tener un cuerpo más definido y curvilíneo, atletismo y, en los últimos meses de su vida, me apuntó a esgrima. Crecí feliz hasta ese día, y casi me descontrolé a partir de entonces. Mi madre iba a todas partes conmigo, hacía todo a mi lado y me acompañaba cada vez que yo necesitaba quemar más aún. Podéis imaginaros lo que supone para una niña perder a su madre tan pequeña, pero aún es peor cuando tu madre es tu vida. Yo me volví bastante reservada, y empezó mi evolución hasta lo que soy ahora. Derek también evolucionó hasta, a día de hoy, ser imbécil.

Al tiempo que me hacía reservada crecía, y obviamente mi cuerpo evolucionaba. Se podría decir que yo era la típica niña que pasaba el día en actividades, y cuando acababa se ensimismaba en un libro. Pero sin embargo mi cuerpo era de "muñequita". Comencé a atraer a algunos chicos, y aunque a Derek no le gustaba la idea y a mí en un principio me ruborizaba, descubrí lo que era el sexo. Tal como lo digo suena bastante mal, así que ya aclaro que no fue con él.

Con el descubrimiento del sexo más posibilidades vinieron a mi mente, entre ellas que las chicas también eran guapas, y una de ellas era realmente atractiva. Vecina recién mudada, Anna apareció en mi vida. Estaba saliendo con Derek, aunque también estaba ansiosa por experimentar los mismos placeres que yo buscaba y ofrecía (a espaldas de Derek, claro), y durante un buen tiempo tuvimos una relación que, si bien no era muy extraña, tampoco era precisamente sana. Bueno, eso me dijo Anna antes de abandonar Dresrossa para siempre, que no era sano para ella salir con dos hermanos a la vez. Pero lo importante es eso, que Anna se fue y yo perdí a una de las mejores amantes que he conocido. Según tengo entendido Derek también la conoció, aunque no tan a fondo como yo lo hice. Tal vez haber perdido a aquella chica influyera para mal en Derek, que dejó de comer (y, admito, llegó a preocuparme) durante días e incluso lo intentó semanas. Yo llegué a pensar que quería adelgazar para ligar más, pero verlo sin afeitar durante varios días me hizo ver que estaba deprimido en serio. Y mi padre, que era muy especialito él, decidió que era buena idea regalar animales modificados genéticamente a niños púberes para que Derek pasara su depresión. ¿El lado positivo? Tengo a mi preciosa Lu, una zorrita negra con anillos amarillos. A veces me siento mal creyendo que es el único ser en este mundo con el que he llegado a empatizar, aunque más por cómo suena que por otra cosa. "Sólo empatizo con una zorra negra" en muchos sitios provocaría malas respuestas, aunque según mi psicoanalista sólo demostraba que sufría ciertos trastornos psicopáticos, aunque me dio bastante igual. Me importa un bledo lo que opine una estafadora de tres al cuarto, soy perfecta y punto. La cuestión es que sabiendo eso, que soy fría, despiadada, calculadora, y todas esas cosas, sólo podía hacer una cosa: Disfrutar de la vida y "sobrellevar" mi existencia carente de sentimientos. Aunque soy capaz de sentir ira y frustración (si llego a no conseguir algo, cosa que nunca sucede), pero ahora no te interesan estas cosas. Estamos hablando de mi historia, no de mi mente.

La cuestión es que, pasando los años, Derek superó a Anna y yo me hice "popular" en ciertos ambientes, tanto sórdidos siendo trofeo de los gallitos del lugar como siendo la flor de la vida intelectual de Acacia. Tener una doble vida tan opuesta como complementaria me colmó, en todos los aspectos, de bienes. Intelectualmente aprendí los fundamentos de la mecánica clásica y el método científico, que en gran medida ayudó a mejorar mi escritura, aunque tuve que darle ciertos toques para evitar convertir mi sello en la factoría de libros estúpidos del Naturalismo. Mientras tanto Derek decidió que quería ser pirata, lo cual era una gran estrategia de ligue. Aquellas mallas marcaban todo su cuerpo, y muchas chicas se derretían por él. Si no hubiera sido mi hermano reconozco que tal vez me habría mostrado débil con él, como una presa. Se cree un cazador, aunque en realidad no es más que un gatito que ronronea cuando intenta rugir, e incluso se cree que tiene habilidad para escaquearse de mí. Sólo salía por ahí porque yo no se lo quería impedir. Pero es bueno que se crea útil en algo el chiquillo, y hacerme la dormida para que pudiera salir de casa "sin que yo me enterara". Esto me servía muchas veces para escaquearme yo, pero vosotros Shh, que Derek me mataría si se enterase. Bueno, intentaría matarme, porque dudo que pueda.

La cuestión final es que, tras unos años, con la guerra de Loguetown y todo eso, un pirata sin lugar en el mundo decidió conquistar mi tierra. Ese al que llaman Legan Legim, un hijo del demonio que siempre apestaba a alcohol. Obviamente este tipo no vino solo. Se trajo una legión de samuráis del país ese con nombre de mierda de pájaro (Guano, o como se diga) y provocó una guerra. Si quería una casa podría haberla pagado vendiendo las armas de su ejército, y... ¿Adivináis quién fue el gran patriota que murió defendiendo a su pobre pueblo? Sí, mi padre, un científico sin la menor idea de cómo se maneja un arma. Dicen por ahí que Legim lo mató en persona, aunque viendo cómo me dejó Derek la espada la última vez que me la cogió no dudo que se hiciera un segundo ombligo involuntario. Pero en fin... Intentando detener la guerra (y, obviamente, sacar algo de provecho) intenté seducir a Legim (Obviamente Derek no sabe esto. Odia a Legim, y me mataría. O lo intentaría por lo menos), pero me dijo que me fuera a mi casa, y me llamó niña. ¡Niña! Nunca me había sentido tan humillada por un hombre. ¡Me había rechazado! ¡A mí!

La razón de por qué escribo ahora mi historia es porque, cabreada, Derek me dijo de abandonar la isla, con la promesa de algún día recuperarla. No me interesaba lo más mínimo la isla, pero ver que de verdad deseaba ser pirata me hizo verlo por primera vez como un hombre maduro, y lo seguí. Hoy en día me dedico a escribir su historia, la historia del futuro rey de Dressrosa, Derek Kelvin Ao, el demonio de ojos rojos.

Mar de origen: Nuevo Mundo (Dresrossa).

Pertenencias: Mi armario de ropa, lleno hasta arriba. También tengo unos cuantos libros, mi pluma estilográfica de plata, hojas en blanco, lencería de encaje... Todo lo que una escritora tan activa debería tener, vaya.

Botín de partidas: Nada de momento.

Sueños: Bueno, si he de decir la verdad... No tengo ningún sueño en especial. Disfruto de la vida tal y como es, y nunca he tenido una meta que no haya logrado alcanzar. Supongo que tal vez mi sueño es ayudar a Derek a cumplir los suyos, ya que ese inútil con gorra roja no sería capaz de hacerse ni un huevo frito, pero no sé, nada me atrae realmente. Tal vez sentar la cabeza, pero hasta que complete mi libro de aventuras marítimas (y conozca la cama de al menos bastantes hombres más), creo que seré incapaz de sentar la cabeza.

Lu:

Buenas, soy El Lobo y hoy voy a ser tu corrector.

Historia: 2,5 de 2,5. Una historia bastante entretenida de leer, extensa y no se me ha hecho pesada, además muy original aunque lastima que el sexo no fuera con Derek (¿)
Psicología: Una chica que adora el sexo…mmm… bueh pues es algo muy original pues la verdad es que no muchos pjs femeninos del foro son así, lo que da bastante originalidad y demás. 2,5 de 2,5.

Descripciones: Perfectamente me imagino al personaje, ambas bien extensas y bien explicativas. 2 de 2.

Ortografía: Nada que decir 1 de 1.

Habilidades y Torpezas: 0,5 de 1. Habilidades geniales, torpezas, es super original pero me da que no es suficiente para la máxima nota ¿lo entiendes verdad? XD

Originalidad: 1 de 1. Un Pj muy original aunque pobre Legim…

En total esto suma un 9,5. Puedes pedir cualquiera de los siguientes:

Akumas:
- Paramecia- 7´5
- Zoan normal - 8
- Zoan prehistórica - 8'5
- Logia etérea - 9
- Zoan mitológica - 9'5
- Akuma legendaria - 10*

*Se deberá sacar un 10 de nota para poder acceder a una de las akumas más poderosas de la serie, como la Pika Pika no mi. También se incluyen en este tipo Akumas potencialmente OP (Overpowered), como la logia de sonido.

*Los nombres de las Akumas deben de ser bisílabos. En ciertos casos el Staff se reserva el derecho a cambiar el nombre a una Akuma (Tiger Tiger por Neko Neko modelo tigre, por ejemplo)

Cyborg:
- Comenzar como humano con una parte cyborg - 7,5
- Comenzar como cyborg - 8,5

Byónicos:
- Comenzar como humano con parte biónica - 7,5
- Comenzar como biónico - 8,5

Razas:
- Humanos y Skypianos- cualquier nota
- Brazos largos y piernas largas- 6
- Enanos- 7
-Animales parlantes- 7
- Gyojin grado 1* - 7´5
- Gigante - 8
- Gyojin grado 2* (peces venenosos y tiburones) - 8´5

Cualquier petición, ya sea de akuma, parte cyborg, o cualquier otra cosa a la que se tenga derecho por nota de ficha debe ser hecha antes del primer rol. Una vez has comenzado a rolear, pierdes el derecho a pedir nada por nota de ficha si no lo has hecho antes.

Una nota igual o superior a 9 da una oportunidad a su creador de modificarla para mejorarla. De otra forma, algunas fichas serán sometidas a votación del staff podrían recibir la misma oportunidad o una nota que el staff decidiría.

Un usuario con multicuenta puede solicitar que no le sea corregida su ficha, y se apruebe sin más. Los nuevos usuarios deben de tener la ficha aprobada (Nota 5 o más) para comenzar el rol.

Si no estás de acuerdo siempre puedes pedir una segunda moderación.

Saludos.

Muchas gracias por la nota. Quería hacer un personaje adorablemente odioso, y creo que más o menos me ha salido. Respecto a las torpezas... Tenía que elegir entre fidelidad al personaje o la nota, así que en eso ha quedado xD

En fin, pido un implante biónico para mi zorro en lugar de para mí. Ya lo puse en la ficha, pero es bioluminiscencia en las patas, orejas y frente (de luciérnaga), activables a voluntad por Lu (no podré controlarlo en combate).

Y mi Akuma, quisiera solicitar la Chitan Chitan no mi (Titanio Titanio no mi). Es Una Akuma no mi del tipo Logia que, a pesar de ser un elemento sólido, gracias a su ductilidad, elasticidad y maleabilidad puede ser tomado como un semifluido. Esto significa que en su forma elemental podrá moverse con normalidad.

Dicho esto, propongo la tabla:

Chitan Chitan no mi:

Aceptado y Bienvenida a OPD.

Pasate por los censos y disfruta del rol.