Steve
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Límite de tiempo : Sin fecha límite.
Escenario : Karakura, la isla posee una gran variedad de vegetación rodeando al centro de la ciudad, dónde se ubica la única ciudad de la isla en la cima de una gran montaña que sirve de protección a la ciudad. La vegetación más destacable de la isla es la medicinal.
Turnos :
- Número aleatorio (1,2) : 1
2 - Empieza Rebeka.
Condiciones :
- Al menos empezar con ropa en el primer post.
- Zorreos a niveles insospechados.
- 18 tras esto. (?)
- Ah, si, claro, sin muertes ni amputaciones.
Invitado
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Annya estaba caminando por la dichosa isla en busca de algo entretenido pero nada. Árbol, árbol, árbol, ¡oh, mira por donde, otro árbol! Comenzaba a ser realmente molesto. Tropezó con unas raíces de uno de los dichosos miles que había y cayó al suelo manchando su vestido Gothic Lolita de seda importada. No era algo que la agradase. Se levantó obviamente enfadada y vio a lo lejos como una gran casualidad un enorme edificio en el cual ponía "Aguas Termales". La joven corrió hacia el complejo sin pensárselo dos veces y entró.
Se dirigió a los vestuarios para, no sé, coger una toalla y no ir desnuda al agua. Allí haba varias chicas pero todas muy normalitas.... Huh, no tenía nada que envidiar a esos enromes pechos que portaban algunas, parecía que por el peso de esas enormes esferas se iban a caer al suelo de ccabeza.
Por fin con su toalla annya se dirigió a un lugar apartado. Al ver que no había nadie dejó caer la toalla y se metió en el agua. Pra sorpresa de muchos llevaba por debajo un bonito bañador turquesa y las cartas estaban escondidas por todas partes. Se metió en el agua y cerró los ojos, disfrutando de la paz y tranquilidad.
Se dirigió a los vestuarios para, no sé, coger una toalla y no ir desnuda al agua. Allí haba varias chicas pero todas muy normalitas.... Huh, no tenía nada que envidiar a esos enromes pechos que portaban algunas, parecía que por el peso de esas enormes esferas se iban a caer al suelo de ccabeza.
Por fin con su toalla annya se dirigió a un lugar apartado. Al ver que no había nadie dejó caer la toalla y se metió en el agua. Pra sorpresa de muchos llevaba por debajo un bonito bañador turquesa y las cartas estaban escondidas por todas partes. Se metió en el agua y cerró los ojos, disfrutando de la paz y tranquilidad.
- Notas:
Me saco las aguas del chichi, ¿vale?
Invitado
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Karakura... Aire de montaña, frescor entre laderas, aguas termales... Es justo lo que necesito desde hace semanas. Ahora en serio, ¿Cuándo me pareció buena idea meterme en un bote a navegar con el inepto de Derek? En serio, si no fuera por este balneario ahora mismo estaría ya desesperada. Más, quiero decir. Llevaba hasta hace media hora unos seis días sin lavarme el pelo, tres días con la misma blusa y, lo más importante, no he tenido tiempo de darme un masaje de pies. Menos mal que esta isla sabe lo que una chica necesita.
Una vez me dan mi masaje de pies acompañado de una taza de té con exceso de azúcar, estoy por fin lista para salir, pero... ¿A quién no le gusta darse un baño en aguas termales? La piel lo agradece, y si hay más chicas por ahí, los ojos también. Tal vez haya algún muchacho y todo, aunque en los baños mixtos no hay más que abuelos. Supongo que tendré que conformarme con chicas esta vez, aunque tengo mis necesidades, y hace demasiado que nadie las cubre. ¿Estaré empezando a envejecer? Cojo un albornoz blanco y me dirijo a los vestuarios. No tengo mucho que dejar, tan sólo mis pendientes y mis horquillas, ya que todo el dinero que tenía lo gasté en entrar, y todo lo de valor lo está guardando Derek, aunque no me fío mucho de él, lo mejor será que vuelva pronto. Pero por otro lado... Aquí hay chicas. Bueno, si roba algo ya lo recuperaré. Al fin y al cabo en ese botecito no hay mucho espacio donde esconder nada.
Paso las manos a mi espalda, tratando de desabrochar mi sujetador, pero parece que se me ha enredado con el pelo. Se lo pediría a alguna de las mujeres que hay por aquí, pero todas tienen una cara de fracasadas que de sólo acercarme me inhibe toda la libido. Sin embargo hay una chiquilla de pelo negro que sale hacia la piscina. Parece algo tímida, pero tiene cierto aire de interés. Me termino de quitar los pantalones ceñidos y me dejo las braguitas de encaje. Sería ridículo llevar un sujetador de encaje sin completar el conjunto, vaya, y me pongo el albornoz por encima. ¿Le dejo ventaja? No, ya ha tenido bastante.
Paso a pasito salgo, cubierta desde los hombros hasta las rodillas, y me doy cuenta de que me he dejado los tacones puestos. ¡Bravo Rebeka! Bueno, mirando el lado positivo, si algo podía mejorar mi culo son estos preciosos zapatos negros. ¿Eso que lleva es un bikini aguamarina? No, más bien parece turquesa. Se ha metido en el agua, y yo voy detrás. Me coloco a su espalda con calma, caminando elegantemente, y me quito el albornoz mientras le dirijo una sonrisa inocente, aunque no me vea. Muy despacio, me siento a la orilla del agua y meto los pies. Me noto débil, pero con suerte esta chica me dará fuerzas.
-Perdona- digo ahora con mi voz más amistosa-. Se me ha enganchado el pelo al sostén. ¿Me ayudas?
Una vez me dan mi masaje de pies acompañado de una taza de té con exceso de azúcar, estoy por fin lista para salir, pero... ¿A quién no le gusta darse un baño en aguas termales? La piel lo agradece, y si hay más chicas por ahí, los ojos también. Tal vez haya algún muchacho y todo, aunque en los baños mixtos no hay más que abuelos. Supongo que tendré que conformarme con chicas esta vez, aunque tengo mis necesidades, y hace demasiado que nadie las cubre. ¿Estaré empezando a envejecer? Cojo un albornoz blanco y me dirijo a los vestuarios. No tengo mucho que dejar, tan sólo mis pendientes y mis horquillas, ya que todo el dinero que tenía lo gasté en entrar, y todo lo de valor lo está guardando Derek, aunque no me fío mucho de él, lo mejor será que vuelva pronto. Pero por otro lado... Aquí hay chicas. Bueno, si roba algo ya lo recuperaré. Al fin y al cabo en ese botecito no hay mucho espacio donde esconder nada.
Paso las manos a mi espalda, tratando de desabrochar mi sujetador, pero parece que se me ha enredado con el pelo. Se lo pediría a alguna de las mujeres que hay por aquí, pero todas tienen una cara de fracasadas que de sólo acercarme me inhibe toda la libido. Sin embargo hay una chiquilla de pelo negro que sale hacia la piscina. Parece algo tímida, pero tiene cierto aire de interés. Me termino de quitar los pantalones ceñidos y me dejo las braguitas de encaje. Sería ridículo llevar un sujetador de encaje sin completar el conjunto, vaya, y me pongo el albornoz por encima. ¿Le dejo ventaja? No, ya ha tenido bastante.
Paso a pasito salgo, cubierta desde los hombros hasta las rodillas, y me doy cuenta de que me he dejado los tacones puestos. ¡Bravo Rebeka! Bueno, mirando el lado positivo, si algo podía mejorar mi culo son estos preciosos zapatos negros. ¿Eso que lleva es un bikini aguamarina? No, más bien parece turquesa. Se ha metido en el agua, y yo voy detrás. Me coloco a su espalda con calma, caminando elegantemente, y me quito el albornoz mientras le dirijo una sonrisa inocente, aunque no me vea. Muy despacio, me siento a la orilla del agua y meto los pies. Me noto débil, pero con suerte esta chica me dará fuerzas.
-Perdona- digo ahora con mi voz más amistosa-. Se me ha enganchado el pelo al sostén. ¿Me ayudas?
Invitado
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Annya estaba realmente relajada con los ojos cerrados. Había paz y tranquilidad. Pensaba en lo suyo, en maneras de timar a la gente en el casino principalmente. Entonces algo rompió el silencio: los pasos de una mujer acercándose. La crupier abrió sus ojos y buscó la fuente del ruido. Una vez encontrada comprobó que se trataba de una chica rubia, bastante atractiva a decir verdad. Cuando Annya fue bajando la mirada se fijó entonces en sus pechos descomunalmente grandes o al menos para ella ya que aún estaba en dessarrollo... Desvió la mirada rápidamente y volvió a lo suyo.
Cuando la chica se acercó a Annya le pidió ayuda par desenganchar su pelo del sujetador, ¿en serio? ¿Podía aquello ser más vergonzoso? Claro que sí. Mientras le desenganchaba el pelo tratando de ayudarla la parte superior de su propio bikini se desabrochó y se quitó al completo. Como acto reflejo se hundió hasta el cuello en el agua y trató de buscarlo cerca, pero se tuvo que mover un poco hasta encontrarlo. Miró de reojo a la rubia.- ¿Me ayudas a ponerlo...?- Dijo con cierta timidez.
Cuando la chica se acercó a Annya le pidió ayuda par desenganchar su pelo del sujetador, ¿en serio? ¿Podía aquello ser más vergonzoso? Claro que sí. Mientras le desenganchaba el pelo tratando de ayudarla la parte superior de su propio bikini se desabrochó y se quitó al completo. Como acto reflejo se hundió hasta el cuello en el agua y trató de buscarlo cerca, pero se tuvo que mover un poco hasta encontrarlo. Miró de reojo a la rubia.- ¿Me ayudas a ponerlo...?- Dijo con cierta timidez.
Contenido patrocinado
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.