Reto - Drake vs Blauer

Límite de tiempo : Sin fecha límite.

Escenario : Karakura, la isla posee una gran variedad de vegetación rodeando al centro de la ciudad, dónde se ubica la única ciudad de la isla en la cima de una gran montaña que sirve de protección a la ciudad. La vegetación más destacable de la isla es la medicinal.



Turnos : 

Número aleatorio (1,2) : 2

1 - Empieza Blauer.
2 - Empieza Drake.

Condiciones :
-Combate sin nomenclaturas. (Vamos a probar jejeje)
-Sin muertes ni amputaciones.
-Saltos de turno cada 32 horas.
-Isla... Random!
-Si gano será mi amigo y si no pues... ¡También!

Había viajado con mi padre a una isla extraña, me había dicho el nombre, pero no estaba seguro. Habíamos ido a una ciudad, y habíamos tenido que andar mucho para subir hasta ella, cosa que no me había gustado, ni tampoco a Sombrius. Habíamos visitado un antiguo templo, unas ruinas y demás cosas pero... Me encontraba perdido...

Había llegado hasta un pequeño riachuelo con muchos árboles y arbustos, pero a pesar de esto, había un pequeño claro. No sabía que hacer, por lo que decidí sentarme en una pequeña roca junto al riachuelo, con Sombrius a mi lado. Sin saber lo que hacer, Sombrius comenzó a aullar lo más fuerte que podía, pero a pesar de ser una cría, se le podía escuchar bastante lejos.

Decidí quedarme allí sentado durante un rato, si tenía suerte quizá alguien apareciese por aquel lugar. Aquel lugar no me gustaba demasiado, pues hacia algo de calor, y eso era algo que no soportaba, quería salir lo antes posible de aquel claro...

Después de estar navegando a la deriva un rato desde que había salido de una isla desconocida que me pillaba de paso, aviste otra isla a lo lejos que estaba llena de vegetación, de árboles de todos los tamaños y clases, y parecía que estaba poblada, dado al parecido que tenía con mi isla natal decidí ir hacia ella.
Cuando llegue lo primero que hice fue dirigirme al punto donde más vegetación había y sin quererlo empecé a corretear por el bosque, dando saltos entre los árboles, observando todo lo que pasaba rápidamente ante mis ojos, entonces sin darme cuenta llegue a un pequeño claro, desde allí se escuchaba un riachuelo y decidí investigar.
Efectivamente tenía razón había un riachuelo a la derecha de ese pequeño claro y aprovechando que hacia un poco de calor me pegue un baño refrescante, en el pequeño riachuelo, cuando de repente escuche un aullido a lo lejos y fui a ver que pasaba.

Tras unos minutos de pleno aburrimiento, alguien apareció. Parecía un chaval de mi edad, pero la verdad, no lo tenía del todo claro. Sombrius, al ver a este, se pusó de un salto en pie, para posteriormente acercarse a él poco a poco. Sus dientes no estaban del todo desarrollados, pero un mordisco era un mordisco. Para evitar que mi amigo atacase al desconocido, lo sujeté por detrás, evitando así que pudiese continuar andando hacia el recién llegado.

-¡Hola!- Le dije a la vez que colocaba a Sombrius a mi lado.- ¿Qué te trae por aquí, te has perdido?

Esperaba que no fuera hostil, pues aunque llevaba mis espadas de madera junto a mí, no tenía muchas ganas de combatir, es más, no se me daba bien. Me volví a sentar en la roca, con Sombrius en mi regazo. Le acaricié el lomo dos veces, haciendo así que se relajase, y que perdiese toda la tensión provocada por el chico. Esperaba su respuesta ansioso, no me hacía plenamente a la idea de encontrarme con un nuevo amigo en una isla totalmente desconocida para mí, y probablemente, para él también.

Después de estar unos cuantos minutos caminando, ya que no conocía ni el terreno del río donde se situaba el sonido del animal que había escuchado, hace tiempo atrás.
Cuando de repente vi un pequeño claro donde había una roca y encima de ella un chico que estaba acompañado por una especie de perro lobo que en cuanto noto mi presencia se alzo de un salto, yo comprendí que era el quien había aullado  entonces se puso tenso y se ha cerco ha mi y empezó ha sacar los dientes y metí la mano en mi bolsillo para sacar mi ikupasui y  evitar que me mordiese pero en cuanto el chico que estaba ha su lado y lo cogió y lo tranquilizo para que no me mordiese.
Acto seguido el chico me saludo y aguardo ha que le respondiera, entonces le dije:
-Hola, me presentare me llamo Blauer y me encontraba dando una vuelta por aquí cuando escuche a tu perro aullar.
Después le pregunte con una sonrisa en la cara:
-¿Como te llamas?

El chico decía llamarse Blauer, y decía estar dando una vuelta por aquellos lugares... ¿Quién iba a estar paseando por allí? Había que estar loco para aquello, ¡hacía demasiada calor!

-Yo soy Drake, hijo de Drako Hyrule, estoy esperando aquí por si viene, ¿quieres una pachanga mientras esperamos?

Seguía sentado en la roca, acariciando el suave pelaje de Sombrius, aquello me relajaba mucho. Esperaba que el chico aceptara, porque si no aquello se iba a hacer muy aburrido. Escuchaba como el río fluía a mis espaldas. Los pájaros volaban por encima de nuestras cabezas e iban en bandada. Estos, eran iluminados por la rojiza luz del atardecer, en aquel momento estaba muy tranquilo, tenía unas vistas increibles.

Esperaba con ansia la respuesta del chico a la vez que chocaba los pies. A Sombrius también se le notaba ansioso, pues no paraba de mover la cola. Esperaba que no fuese muy fuerte, porque si no debería verme en la necesidad de huir, y eso era algo que no quería hacer

Después de formular mi pregunta el chico contesto rápidamente, supuestamente se llamaba Drake y su padre supuestamente se llamaba Drako hyrule, o algo así. Pero eso no fue lo que más me impacto lo que más me impacto fue que el chico me ofreció una pachanga, me reto, y lo que más me desconcertaba era que sin conocerme de nada, sin conocer mi fuerza, ni mis movimientos en el campo de batalla, lo había hecho me había retado, ¿sería más fuerte que yo?.
Después de pensarlo unos segundos y de deliberar como repercutiría aquello llegue a la conclusión de que si lo haría, esto me ayudaría a mejorar mis habilidades con la espada, mi agilidad, etc.
Entonces dije:
-Si acepto el reto
Y me dispuse a atracar:
Salto he intento de espadazo en el torso (espada de mano derecha) + intento de golpe en el suelo a modo de protección (espada mano izquierda).

El chico estaba pensando, podía notarlo por la cara de bobo que había puesto en aquel momento. Lo miraba con los ojos abiertos, a la vez que me levantaba, si se lo estaba pensando tanto, es que su respuesta iba a ser un sí, y así fue. Rápidamente, el chico dio un salto con la intención de cortarme con sus espadas de madera...¡ERAN IGUALES QUE LAS MÍAS!

Di rápidamente un paso hacia atras, evitando que me rebanase por la mitad. Caí al suelo dándome un golpe en los gluteos. Me levanté llevándome la mano a esta zona. Lo encaré a la vez que cogía de detrás de la roca mis dos espadas de madera, y tras eso me acercaría corriendo a bastante velocidad. Le lanzaría varios cortes aleatorios, con suerte alguno le daría.

A la vez de esto, mi compañero, Sombrius se acercaba desde otro ángulo, tenía intención de darle algún que otro mordisco en la pierna, o al menos, eso pensaba yo. Si al menos conseguía hacerle una herida, bienvenida fuera.

Cortes al azar con las espadas de madera y mordisquitos de Sombrius.

Después de dar estos dos golpes algo aleatorios, él chico se puso en pie y dio un pequeño paso hacia atrás esquivando así uno de mis golpes el otro no llego a nada pero me estabilizo y no me estampe contra el suelo que me hubiese dado.
Cuando ya tenía los pies sobre el suelo Drake empezó a dar torpes golpes hacia mí y su acompañante se tiro contra mi pierna intentando morderme o eso parecía, entonces di un paso atrás intentando que no me mordiese y también interpuse la espada de la mano izquierda para que no me mordiese, con el paso también evite cualquier golpe, solo uno de ellos me roco pero no me hizo nada.
Con la espada de la mano derecha, lance un golpe bajo he intente dañarle la pierna i que perdiese el equilibrio, y que quedase en el suelo para que me fuese más fácil derrotarlo
Protección con espada izquierda + golpe con espada derecha

Esquivó mi ataque usando su espada, pero no me rendiría. De repente, me intentó dar un golpe en la pierna con su espada de madera. Interpuse como pude mi espada evitando así que su golpe me diese, aquello me daría cierta ventaja sobre. Estábamos cerca, y él había empleado una de sus armas en un intento erróneo de dañarme. Si conseguía usar mi otra espada para noquear su otra espada con un fuerte choque de estas, conseguiría generar un hueco por el que penetrar su defensa.

Intentaría darle una patada, mientras que Sombrius le atacaba por la espalda con un mordisco a su brazo derecho. Era muy dificil que viese el ataque de Sombrius, pues debía emplear la mayor parte de su atención en intentar defenderse de mi ataque, tanto que, posiblemente no se percataría de que Sombrius ya no estaba junto a mí.

-No ganarás.- Le dije a la vez que agachaba un poco la cabeza y sonreía.

Tras ''nuestro'' ataque, retrocedería junto a Sombrius, esperando a ver como reaccionaba el tal Blauer.

Intento de bloquear sus espadas + Patada al estómago aprovechando el hueco generado por el choque de espadas + Mordisco de Sombrius al brazo derecho desde la espalda.

Después que atacase me bloqueo la espada con su otra espada haciendo así que nos encontrásemos en un duelo de fuerza, en el que los dos demostrábamos la mayor fuerza posible entonces se dirigió a pegarme una patada y dijo:
-No me ganaras.
Pero yo salte a la vez que me lanzaba su pierna intentando esquivarla con un salto me di cuenta que su extraño compañero estaba en mi espalda pero ya era tarde, me rozo con uno de sus dientes creándome una pequeña rozadura en el brazo pero no era nada.
Aterricé sobre una superficie terregosa y pensé (y si genero una pantalla de polvo) y después dije:
-Estas seguro.
Y entonces pegue un gran golpe sobre la tierra y genere una gran nube de polvo, que tardaría unos segundos en desvanecer, clave mis espadas en el suelo, y tire cuatro piedras para despistar a Drake y volví a coger las espadas, me situé en su espalda y di dos pasos hacia intentando darle tres cortes en forma de “X”.
Salto + golpe al suelo para generar pantalla de polvo + golpes en “X” con dos espadas

Mi rival consiguió evitar los golpes echándose hacia atras. De repente, consiguió levantar una cortina de polvo, no podía ver casi nada. Sin pensármelo dos veces, salí corriendo hacia donde estaba situado mi rival antes de aquella acción. En cierto momento, se pudieron escuchar dos sonidos a mis espaldas, estaría intentando distraerme, pues fueron demasiados breves para tratarse de pisadas, ya que no había nada por en medio.

Había conseguido salir de la humareda, y conmigo, Sombrius. Mi fiel compañero me señalaba con la cabeza algo, pero no conseguía saber el que.

-¿Qué quieres compañero?- Le dije a la vez que me ponía de cuclillas a su lado.

Entonces lo entendí, me estaba diciendo donde estaba mi rival. Con anterioridad lo había olido, por lo que ya sabía como localizarlo. Estaba dentro de la nube de humo, pero se movía demasiado, pues Sombrius se movía demasiado. No sabía que estaba haciendo, por lo que decidí alejarme de la humareda, pues así podría esperar a que se disipase algo. Si conseguía verlo, me posicionaría en posición de combate, es decir una espada en cada mano con las rodillas flexionadas, y la derecha hacia delante.

OFF:

Después de generar la humareda he intentar conseguir darle, cosa que no fue posible, me di lla vuelta con un giro de 180 grados y di unos cuantos pasos en esa dirección, ya que la humareda era todavía espesa me subí a un frondoso árbol dando tres saltos, y agarrándome a las extensas ramas que estaban pobladas por unas cuantas hojas y en unos segundos estaba en su cima que tenía un conjunto de ramas, que juntas formaban una pequeña plataforma, de las que brotaban muchas hojas.
Desde allí divise a mi contrincante y le dije, con una sonrisa en la cara:
¿Qué te ha parecido mi técnica?
Y espere su respuesta con una espada (la de la mano izquierda) en posición defensiva y la otra (la de la mano derecha) aguardando su ataque.

Me encontraba en una colina, aquella estaba llena de árboles. Estaba nervioso, bastante. No conseguía encontrar a Drake, no le había visto un pelo desde que entramos a aquella panadería, pues decía que prefería esperar fuera, y la verdad, ahora estaba perdido. Hacía ya rato había escuchado el aullido de Sombrius, su mejor amigo y fiel compañero.

Había llegado hasta un punto cercano del que provenía el aullido, y ahora me encontraba allí. Habrían pasado diez minutos, puede que veinte, pero el tiempo sin él se me llenaba de sufrimiento, no me perdonaría jamás si lo perdía.

En cierto momento, noté tres auras, y a pesar de ser débiles, las reconocía. Una de ellas era más poderosa, pero sin embargo las otras dos me resultaban familiares. ¡Eso era! Esas presencias eran las de Drake y la de Sombrius, aquello me alivió mucho la verdad. Bendito mantra y bendita la hora que decidí entrenarlo, que a pesar de ser unos meses duros, creo que fueron de los más productivos en mi vida.

Usando mi machete, Anubis, corté dos troncos de árboles por la mitad, haciendo que cayesen al suelo, en la cima de la colina. Aquello me permitía ver mejor la zona. Podía distinguir perfectamente la situación, Drake y Sombrius estaban combatiendo contra alguien el cual tenía un poder superior al suyo, pero no al mío.

-¡Drake, hijo! - Grité con todas mis fuerzas.

Intenté dejarme deslizar por las rocas, pero no resultó muy buena idea, pues miles de arañazos no muy profundos inundaron mi espalda, y parte de las piernas y brazos, pero no fue nada grave, ya que la altura no era demasiado grande. El pánico por la altura me inundó por unos segundos, pero todo se disipó al cerrar fuertemente los ojos, teniendo que guiarme por mis demás sentidos.

Me acerqué a Drake, y mirando fijamente al otro chico, el cual estaba subido en un árbol les dije:

-Venid conmigo, esto no es un lugar seguro.

Cogí a Drake de un brazo, y me lo llevé conmigo de vuelta de al barco, aquel no era lugar para alguien tan pequeño como él, ni para un marine de tal edad.

OFF:

Me encontraba en la cima de uno de los árboles del bosque mirando fijamente a mi oponente que estaba parado cuando de repente unos cuantos metros más adelante, en la espesura del bosque vi que dos árboles se cayeron de golpe, sin ningún sentido, entonces pensé que fuerza era esa que de un golpe se llevaba por delante dos grande árboles, una cosa que me dejo alucinando de repente divise la silueta de un hombre que era mayor a mí y a mi contrincante cuando de repente, el chilló el nombre de mi contrincante.
Yo me quede allí para ver lo que ocurría él era el padre de mi contrincante el cual se encontraba luchando contra mí, un duelo que ya había terminado, pero que momentos antes había sido muy intenso, pero ya no.
El hombre mayor cogió ha Drake del brazo y me ofreció la oportunidad de que les acompañase, me lo pensé unos segundos ya que no tenía nada mejor que hacer, por que no…

Hojas actualizadas.