Reto - Asder vs Hitode

Límite de tiempo : Sin fecha límite.

Escenario : Shellstown, isla de una única ciudad bajo vigilancia de la Marina por medio de una base naval. Es el punto de partida ideal para todos los marines recién alistados. En su cuartel marine.



Turnos : Empieza Asder

Condiciones :
-Exp común.
-Con posibilidad de muerte.
-Sin saltos de turno.

¿Por qué me habría mandado Katrina a destruir un barco lleno de pescado, antes de morir? Según ella el pescado había sido conseguido en sus dominios, así que si alguien debía lucrarse, era ella, pero no lo podría hacer si no estaba viva y… Da igual, yo tenía que cargarme todo lo que pillara por delante y después ya pensaría que hacer. Quizás llorar un poco por su muerte o algo.

Pude ver el barco desde el final de la calle donde me encontraba, se veía bastante transitado. En fin, tenía que cumplir órdenes, así que cogí carrerilla, haciendo que la gente que estaba por aquel lugar se apartara antes de que la arrollara. Cuando estuve a unos pocos metros, me lancé contra el barco, haciendo un hueco en el casco de este y hundiéndolo. Dado que había caído al agua con este, salí al cabo de un rato, satisfecho por un trabajo bien hecho.

Mientras Asder disfrutaba de aquel delicioso pescado, un tipo extraño apareció. Empezó a correr hacia el barco donde vendían pescado y lo arrolló como si nada. El Shichibukai se cabreó. Toda la comida estaba desperdiciada y en el mar, hundiéndose. Se fue a lanzar al agua, pero recordó que no podía nadar. "Mierda... Toda la comida desperdiciada..." Tras pensar decidió mirar al culpable, con una vena en su cuello hinchada. Apretó ambos puños que empezaron a iluminarse levemente y chasqueó la lengua.

- Mi padre me dijo una vez: No desperdicies la comida. Tú, maldito bastardo, acabas de hacerlo. Vas a pagar por tu error.

Tras aquellas palabras lanzó un puñetazo al aire, dirigido hacia aquella persona. Una explosión de un radio de 30 metros apareció, abriendo las aguas como si de Moises se tratase. Tenía una gran potencia y iba con intenciones de acabar con aquel tipo. No iba a dejarle que se saliese con la suya.

Veo a un hombre acercarse a gran velocidad hacía mi, sus manos brillaban y era casi imposible alejarse de su trayectoria. Entonces vi lo que estaba pensando hacer, una enorme explosión en mí torso. No podía notar el calor, pero sabía que me estaba quemando las piezas de titanio que eran mi cuerpo. Intenté pararlo con mi haki armadura, pero esto parecía inútil, pues la explosión ya me había impactado. Suspiré, como último acto antes de morir, y pensé en que al menos había conseguido cumplir mi misión.

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