Katherine LeSang, la asesina. [Ficha - Cazadora]

Exp:  0

Nivel: 1

Nombre: Katherine Le Sang

Apodo: Kat, Kather.

Edad: 20

Sexo: Mujer

Raza: Humana

Rango/Empleo: Aspirante

Rango social: Alto.

Descripción estilo de lucha:
-Nombre: The dance of the death.
-Ejecución:

Kat tratará de atacar por sorpresa al rival (preferiblemente por la espalda) y degollar o clavar una de sus dagas para provocar una herida mortal o muy grave. Si no es capaz de ejecutar su movimiento lo que hará será herir al rival con rapidez priorizando en órganos como el corazón, pulmones, estómago… Siempre intentará provocar la mayor cantidad de daño en el menor tiempo posible.

A más se alargue el combate con menor frecuencia atacará pues comenzará a analizar los movimientos del rival. De todas formas mantendrá el patrón de combate principal valiéndose de su rapidez. Es un estilo de lucha que busca acabar los combates antes de que tan siquiera puedan ver el rostro de su asesino a pesar de que muchas veces no lo consiga.

Al ser muy ofensivo provoca que quien lo ejecute no posea muy buena defensa y debido a la falta de costumbre seguramente ni lo intente. Al estar en constante movimiento y tratando de golpear al enemigo sería fácil predecir y contraatacar. Además de que eso deja al descubierto bastantes puntos débiles y con el paso del tiempo estos se harán más notables.

Descripción física:

Es una chica no muy alta pues mide 1,65. Complexión delgada, músculos bastantes definidos y tez pálida. Sus ojos son de color gris y suelen llamar bastante la atención. Sus labios son bastantes finos y su piel fina y suave con rasgos bastante femeninos. La nariz es pequeña y elegante como el resto de su rostro. El cabello de Katherine es de color castaño, muy liso y que le llega hasta la cadera. De vez en cuando lo recoge en una coleta pero no es lo habitual.

En cuanto a forma de vestir suele llevar un top sin mangas verde oscuro que deja su ombligo al descubierto, una chaqueta larga militar y pantalones a juego. También tiene costumbre llevar botas de montaña marrones altas. En su brazo izquierdo lleva un brazalete de tela verde con un círculo rojo y un lobo blanco en él. Su madre se lo entregó como distintivo familiar. Únicamente los LeSang poseen dicha “insignia”.

Físico:

Alineamiento:

Caótico neutral

Descripción psicológica:

Solitaria, distante y fría. Esas son las palabras que más le gusta oír a Kat sobre ella misma. Una asesina que no necesita apoyo de nadie, que no tiene corazón, despiadada como ella sóla. Pero la verdad se aleja mucho de ello. En realidad siempre trata de ocultar que tiene sentimientos por miedo a que alguien consiga “entrar” en ella. No quiere encariñarse con nadie y debido a su trabajo es un deber el evitar que eso ocurra. De hecho odia admitir que pueda sentir algo. Le asusta mucho el llegar a ser dañada emocionalmente y por ello no desea ni amistades, ni nada similar. Esto es en parte al entrenamiento recibido. En su obsesión por no sentir nada ha llegado desear únicamente dañar a los demás como si eso fuese a alejarla de su humanidad.

Alejándonos más de cómo es en por dentro y centrándonos en lo externo es una mujer con mirada tranquila y rostro serio. Trata de mantener esa imagen de “dureza” ante todo el que ponga su vista sobre Kat. No le importa herir a nadie, tanto físicamente como emocionalmente. Incluso disfruta de ello.

Gustos:

Adora las armas cuerpo a cuerpo y bien afiladas. A pesar de que únicamente use dos dagas ella es una gran amante y fan de las espadas, mazas, cuchillas de todo tipo, etc. Nunca dudaría ni un segundo en poder apreciar la calidad y usarlas a pesar de no saber manejarlas.

El color rojo de la sangre. Simplemente le encanta. Tal vez por ser entrenada para matar ha desarrollado un “amor” por este fluido debido a su relación con la muerte y, hasta ahora, con un trabajo bien hecho. No llega al punto de obsesión y mucho menos atracción de ningún tipo ante esto pero sí le agrada bastante.


Las emociones fuertes de casi cualquier tipo: una buena pelea, deportes extremos, etc. Una de sus pasiones es sentir la adrenalina por todo su cuerpo. Estas cosas suele hacerlas en soledad, por no decir que siempre es así.

Los retos. No hay cosa que ella ame más que los retos. Una misión difícil o un combate complicado sólo harán que su interés por este aumente más y más. Pero lo que ella en verdad busca es superar sus limitaciones e impresionar a quienes no la creyesen capaz de hacer algo así.

Otra cosa que hace y que le gusta es fumar. Siempre lleva algún puro o pitillo guardado en una cajetilla en el bolsillo del pantalón. Incluso tiene peleado fumando y eso hace ver lo mucho que le gusta hacerlo.

Desagrados:

Detesta a las personas inocentes. No puede verlas ni en pintura. Muchas veces se tiene cuestionado cómo personas tan manipulables siguen viviendo hoy en día. Si fuese por ella acabaría con todas las que fuesen así.

No le gustan nada sus sentimientos ni sentir y mucho menos si hay una persona externa relacionada con esto. Le parece que es una molestia y una debilidad demasiado grande como para permitírselo. No desea que nadie pueda chantajearla ni dañarla por una estupidez así.

No traga a la gente que está totalmente en contra del tabaco. ¿De verdad a esas personas les importa lo más mínimo lo que los demás hagan o dejen de hacer? Ella, como fumadora y amante de ello no le hace la más mínima gracia que haya gente insultando sus gustos de una forma tan gratuita.

Pasarse mucho tiempo encerrada en un edificio sin hacer nada. Es una mujer a la que le gusta caminar y moverse y por ello estar quieta no es de su especial agrado. No es hiperactiva pero a veces lo parece.

Los ruidos fuertes molestan mucho a Katherine. No soporta los gritos si no son de dolor ni tampoco la música de este estilo. Le parece algo que hacen simplemente para fastidiar a quien lo escuche.

Habilidades:

Tiene mucho equilibrio lo cual le ayuda a caminar sobre superficies estrechas como podría ser una cuerda, por ejemplo. También dificulta que sea derribada.

Kat sabe cocinar bastante bien. A lo largo de su vida a tenido que hacerlo para su familia prácticamente de forma diaria. Por ello se podría considerar que tiene unas nociones básicas de cocina y que podría mejorar bastante si se pusiese a ello.

Se le da bastante bien el sigilo y perseguir a gente sin ser detectada. Claramente no tiene pulida esta habilidad y no está ni cerca de ser perfecta pero es mejor que nada, sin duda alguna.

Katherine sabe leer los labios y es una habilidad que le ha servido en algunas misiones para poder saber las conversaciones ajenas sin tener que escucharlas.

Torpeza:

No es capaz de mantenerse en pie sobre el hielo. Está muy poco acostumbrada a esto por lo que para ella es bastante difícil no caerse o resbalar.

No controla su ira y ello puede ponerla en situaciones realmente peligrosas. Sobretodo si alguien que es más fuerte que ella la provoca y terminan en una pelea.

La música se le da fatal y tampoco sabe cantar. Las artes no son su punto fuerte precisamente y menos algo en lo que se necesite armonía y “que suene bien”.

Se le da bastante mal hacer amistades debido a la poca empatía que tiene. Cuando tiene que colarse en lugares disfrazada suele meterse en un papel pero ella, sin fingir, no sabe hacer eso.

Profesiones:

Principal: Asesina.

Secundarias: Domadora, espía y sastre.

Banda: Ninguna.

Armas: Dos dagas.

Historia:

Todo comenzó una tormentosa noche de invierno. Como en muchas historias que se cuentan por el mundo ella nació en el hogar de sus padres llorando y gritando. Estaban tan contentos de tener una pequeña. Tenía tanto futuro como cualquiera de sus hermanos o incluso más. Su salud era perfecta y parecía no tener ningún problema físico ni psicológico.

Durante los primeros meses fue cuidada con cariño y amor pero cada vez se hacían menos cargo de ella. Sus hermanos se ocuparon de ella y de sus cuidados y cuándo comenzó a hablar ya mostró interés en las armas y el asesinato. Vivía en una enorme mansión decorada con armas de muchos tipos y cuadros siniestros pues representaban los asesinatos cometidos por sus padres.

El mayor de los hermanos, Zack, fue quien le entregó su primera daga y enseñó a la joven Katherine a usarla con tan sólo dos años de edad. Aprendió mostrando mucho interés y ya ansiosa por tener una misión pero, claro, era demasiado pequeña para ello. Su hermano mediano, Jack, la adiestró en el sigilo y para poder colarse en los edificios. Al parecer Kat poseía un don para ello. O quizá simplemente fuese que le ponía demasiado empeño en ello.

Debido a que sus habilidades no cesaban de aumentar durante los años y para su edad destacaban demasiado. A los 7 años fue encomendada su primera misión: Asesinar al presidente de una compañía. No era muy difícil ya que era relativamente nuevo y no poseía demasiada seguridad pero tampoco era inexistente. Katherine cogió sus dos dagas y se dispuso a infiltrarse en el edificio principal donde seguramente este hombre estaría en su despacho.

Escaló el edificio hasta el tejado. No fue difícil ya que poseía escaleras hasta este en el exterior. Era algo absurdo, sí, pero estaban ahí y Katherine las aprovecharía. Una vez arriba buscó la forma de entrar. Había, cómo no, una puerta que llevaría al interior pero estaba cerrada y era demasiado… Obvio y normalucho. Quería algo más emocionante aunque no mucho más original… Encontró un conducto del aire y debido a su tamaño podía colarse perfectamente por él.

Una vez en el interior buscó un lugar en el que salir a los pasillos para poder guiarse de alguna forma y terminar en el despacho. Terminó en un cuarto de limpieza algo pequeño para su gusto. Abrió la puerta lentamente por si alguien se encontraba al otro lado pero por suerte estaba completamente vacío.

Comenzó a recorrer los pasillos escondiéndose de vez en cuando en zonas oscuras o tras algunas esquinas. Finalmente llegó a la puerta del despacho. Entrar de frente podría ser peligroso… ¿Pero a quién no le gusta un poco de acción? Abrió la puerta rápidamente y fue corriendo hacia el escritorio desenfundando una de sus dagas. Al ver al presidente se la lanzó atravesando el corazón de este. Se acercó y la sacó admirando su primer asesinato. La verdad es que había sido fácil. Demasiado fácil. Veía la sangre manchar la blanca camisa que llevaba el hombre de mediana edad y con el pelo negro.

Cuando se disponía a irse del despacho alguien le dio un fuerte golpe provocando que atravesase los cristales de la ventana y cayese del edificio hasta la azotea de un edificio cercano y de menor tamaño. Se hizo bastante daño pero no de demasiada gravedad y gracias a dios no se rompió ningún hueso. Cuando Jack y Zack se enteraron de esto fueron a buscarla y la llevaron de vuelta a la mansión.

Un médico privado atendió a la pequeña Kat. A pesar de que físicamente estaba bastante el golpe provocó que perdiese la memoria y su coordinación. Decían que volvería a recuperarla pero no se sabía bien cuando. Permaneció en cama durante mucho tiempo, meses, hasta que se sintió capaz de volver a caminar.

Todo allí era demasiado extraño. Sobretodo por el hecho de que le resultaba familiar pero era incapaz de reconocer los pasillos, los cuadros e incluso sus propias armas. Era una molestia increíble y desagradable a partes iguales. Jack y Zack trataban de ayudarle a recordar pero por el momento parecía no mejorar.

Tras un año sin saber nada sobre sí misma (salvo por las historias que le contaba su familia) los recuerdos comenzaron a regresar a su mente. Comenzó a dolerle la cabeza a causa de aquello pues fue muy rápido y repentino. Tras volver decidió comenzar de nuevo a entrenar y recuperar su destreza física y sus habilidades ya que por culpa de aquel tiempo que pasó sin hacer casi nada las había perdido.

Esta vez no dejaron que hiciese ninguna misión hasta que pudiesen comprobar que era totalmente capaz de reaccionar ante casi cualquier cosa. De hecho, por culpa del miedo a que volviese a suceder estuvo durante años, muchos años, con entrenamientos intensivos. Ni cuando parecía estar preparada para una misión le dejaron. Necesitaban saber con certeza que no fallaría.

Así estuvo hasta los 20 años entrenando sin descanso y siendo preparada para ser la mejor asesina conocida. Tal vez fuese excesivo por parte de sus padres (y de hecho lo fue) pero aquellos entrenamientos sirvieron no sólo para mejorar sus capacidades físicas sino también para las psicológicas. También la adiestraron para no sentir nada y por ello una asesina despiadada. Aunque en cierto modo aquello también le provocaba muchas inseguridades cuando sonreía o se sentía triste pensando que no era digna de llevar el apellido de su familia.

Sus ansias de matar pero no de meterse en problemas mayores le llevaron a buscar una forma de poder hacerlo con alguna excusa ante los marine y ser una cazadora le pareció la mejor opción.

Mar de origen: El Paraíso.

Pertenencias: Las dagas que usa. Fueron de su madre.

Botín de partidas: Nada.

Sueños: Matar a una persona importante (no necesariamente la más importante) por facción: Un ciudadano, un CP,  un pirata, un marine, un cazador, un científico y un revolucionario. Y por matar sirve en un duelo a muerto y no necesariamente por “asesinato”.

Ficha corta para mi gusto y la historia no cuenta mucho sobre porque de la personalidad, me esperaba algún cambio interesante.

De todas formas, puedes pasar por el censo y el registro de físico.

En cuanto a lo de leer los labios, irá junto a espía (es decir, no serás una profesional haciéndolo, pero conforme avances en profesión lo aumentarás, siempre que elijas la sub adecuada).

Cambio la profesión "ingeniero" por "domador" ya que la primera fue cambiada y ya no me parece que encaje con el personaje. Como aún soy nivel 1 y no hice nada con la profesión mencionada creo que no debería haber problema alguno. ^^

Aceptado

Disculpad, me gustaría hacer un reinicio de personaje. Me dijeron que pusiese la petición aquí.