¿Por qué no me respondes? (Privado Kayn-Heaten)

Antes de nada:

El navío marine había zarpado escasas horas atrás del cuartel general dispuesto en una de las islas del North, encaminado a cumplir su próxima misión. En teoría iba a ser algo sencillo. O al menos no lo suficientemente complicado como para mandar un segundo barco o personas más cualificadas. O esos fueron los pensamientos de Kore, quien se encontraba revisando en su "cacharro informático" (como habían nombrado algunos reclutas a su tableta) los datos acerca de la misión y sus compañeros. "Supongo que se les puede llamar así". Pensó  la pelimorada, pasando su dedo por la superficie lisa del aparato que tenía en sus manos. En la pantalla se mostraban distintos informes de las personas que se hayaban en el barco, inluido su navegante, el superior que habían asignado para que vigilase su desempeño, varios reclutas y algunos miembros de rangos intermedios entre el suyo y el más bajo.

"Oye Kore, ¿no te parece sospechoso?" La pregunta de Echo resonó en su cabeza. -Sí, es demasiado obvio que la misión tiene una segunda intención. Pero nos toca obedecer sin decir nada. Al fin y al cabo... nosotras no tenemos otro sitio al cual regresar.- Murmuró a modo de respuesta. De todos modos entre el ruido que hacían los marines yendo de un lado a otro del barco  la probabilidad de que la escuchasen hablar sola era escasa. Y aún si lo hicieran, no se le tendría muy en cuenta. Para la gente de ese barco ella era solamente su superior. Ninguno sabía, en principio, nada acerca del asesinato de Kuro y del posterior juicio realizado a Heaten... Excepto el capitán.

Al fina, decidieron que Heaten era inocente e incluso la premiaron por haber puesto su lealtad sobre la marina por encima de la persona más cercana para ella. Pero había gente que no estaba segura. Por eso necesitaban una prueba de su lealtad  y de que era capaz de liderar. "Esto es realmente molesto". Se quejó Noise y la chica asintió en silencio. En aquel momento se encontraba sentada en uno de los pasillos que llevaban a los camarotes dispuestos para ellos, con las piernas cruzadas. Nepu se encontraba en modo suspendido a su lado, como si estuviera echándose una siesta. Además, sus prendas no eran como las del resto de Marines. No llevaba con orgullo su nuevo uniforme, sino que lucía una sudadera de color negro con adornos morados y azules. Esta se abría por una cremallera al frente. Debajo llevaba una camiseta corta de tirantes y la parte superior de un bikini, también negro, hacía la función de sujetador. Ya que a los demás parecía alertarles menos que el que fuera con una prenda íntima. Como si no fuesen prácticamente iguales. También llevaba un pantalón deportivo corto, que quedaba oculto bajo la amplía sudadera.

"Oye Kore, ¿No deberíamos movernos? Ya ha pasado tiempo desde que salimos del cuartel. Podríamos estar llegando". Comentó Echo pasado un rato, a lo que ella negó.

"El capitán dijo que nos mandaría llamar. Mientras podemos estar tranquilas". Contestó, antes de acariciar a su amigo artificial.