[Privado/Pasado] Dos Cazadores destinados a matar [Kinji/Shizuo] {Dom 9 Jun 2013 - 22:40}

Me encuentro paseando por las calles de Villa Fucsia ya desde hace dos días, siendo mi principal objetivo el encontrarme con mis viejos queridos “amigos” para darles una buena tunda por todo lo que ha pasado en mi infancia en este pueblo. Al menos se que si estos aun se encuentran alardeando de lo fuerte que son por la zona, seré el primero en acercarme y decirles que me digan eso a la cara, ya que lo que no voy a permitir es que en lo que estoy por mi pueblo recordando todo lo que me ha pasado, y así mejorar en mis dotes físicos, sea el ver como unos niños malcriados se encuentran presumiendo de ser los más fuertes de las zonas. Aunque si mal no recuerdo ahora deberían tener unos veinte o veintidós años, ya que desde que me fui de esta isla han pasado ya unos diez años.

Mi actual posición es en un banco de la zona. Donde mi cuerpo ha optado por descansar tras recorrer la zona un par de veces, ya que aun en todos estos días no he encontrado presencia alguna sobre los chavales que se han metido conmigo de pequeño, por lo que aun me queda tiempo para buscar sus nefastos cuerpos y darles una tunda de reencuentro.

Llevo actualmente mi traje típico, siendo un traje de camarero con pajarita negra con unos pantalones negros bastantes grandes. Además llevo unas botas de las mismas tonalidades y unas gafas de sol azuladas en mi pelo despeinado de tonalidades amarillas, siendo un peinado que siempre me agrada tener. Ahora solo me queda fijarme en todo el entorno y esperar a ver si alguno se caracteriza con los recuerdos que aun poseo en mi mente, quien solo espera encontrar alguno de estos y destrozar sus cuerpos.

Me encontraa sentado en la barra de una taberna de Villa Fucsia bebiendo un poco de sake mientras descansaba del largo viaje que me llevó a aquella isal, a aquella villa en concreto. Bebía el sake tranquilo hasta que un tío empezó a armar barullo pavoneándose de que le pegó una paliza a veinte tíos al mismo tiempo. Ese tipo de cosas me tocaban las narices así que me levanté y caminé hacia él y le dije que parara pero éste se negó así que le pegué una patada lanzándolo fuera de la taberna.

Salí tras él y dije

Tú, pedazo de escoria, deja de vacilar sobre algo que no deberías ni haber hecho y empieza a tratar mejor a los demás.

Tras decir esto me dí la vuelta y empecé a caminar en dirección a la Montaña Corvo con la intención de encontrar algún bandido que asesinar para librarme de la tensión que le causó el imbécil de la taberna.

Mi cuerpo se apoyo ligeramente sobre la estructura del edificio que se cierne detrás de mí dejando que así mis pies puedan estirarse por completo y un leve suspiro salga de mis labios al encontrarme en aquella pose cómoda, de la que muchos suelen utilizar para ejercitar sus músculos y poder estirarse como dios manda. Al menos con esto consigo que mi pésimo tamaño sea bien aprovechado y poder en cierta medida estirar los huesos y demás zonas de mi cuerpo.

De pronto cuando ya voy a proceder a reincorporarme puedo ver como de la puerta del edificio pegado hacia mi sale un tipejo volando, a lo que mis ojos se giran levemente para observar dicha escena mientras reincorporo mi posición a una menos llamativa. Aun en el proceso de desencoge puedo ver como otro chaval más joven a mi parecer que ese tipejo sale del local, empezando a decirle no se qué rollos sobre algo que no debe haber hecho y cosas por el estilo, a lo que un gesto medio dubitativo se hace presente. No entiendo una mierda que está pasando, pero en cierta manera me gustaba la actitud de aquel joven, por lo que me quede observando dicha escena mientras presiento como este empieza a alejarse, siendo de mi presencia como el tipejo empieza a reírse y desenfundar una pistola para apuntar al cometido.

Yo sin dudarlo apenas me levanto a toda prisa y haciendo un giro en el aire levanto mi pierna derecha, la que sin dudarlo empiezo a descender sobre el hombro del sujeto, quien es corrompido por el golpe y su brazo es torcido. Esto además de provocar un gran dolor a aquel sujeto puedo presenciar cómo este empieza a gritar por el causante golpe, a lo que yo correspondo posicionando mi único pie libre sobre su cabeza.

-Si quieres atacar a alguien que sea cara a cara gilipollas. No consiento a los rastreros como tú que van atacando por la espalda-digo esto último escupiéndole en el rostro, para luego apretar mas con el pie que estaba sobre su hombro, lo que debería hacerle mas daño.

Estaba caminando tranquilamente camino a la Montaña Corvo cuando escucho el sonido característico de una pistola cuando la preparan para disparar. En ese momento desenfundo mi Ryu y Tora y me giro para apuntar al sujeto que previamente apaleé y para mi sorpresa estaba en el suelo apuntándome con una simple pistola. Cuando preparo ambas pistolas para disparar veo como un chico rubio despeinado le pega una patada en el hombro provocándole como mínimo un dislocamiento del hombro por la fuerza con la que le golpeó mientras que el cobarde que me iba a atacar por la espalda gritaba desesperado de dolor. El rubio le pisa la cabeza con su otro pie para intentar callarlo mientras dice

Si quieres atacar a alguien que sea cara a cara gilipollas. No consiento a los rastreros como tú que van atacando por la espalda

Esa frase dice mucho de él pero el escupitajo en el rostro del indefenso gilipollas que me iba a disparar decía aún más. Mientras el rubio le presionaba el hombro con más fuerza yo caminé con tranquilidad hasta donde estaban ambos y con una sonrisa cruel y una mirada siniestra apunto a su entrepierna con mi pistola Ryu y disparo sin contemplaciones. Después miré al rubio y le dije

No hacía falta que ayudaras, si intentaba dispararme habría reaccionado a tiempo y le habría matado de un tiro.

Continúe apretando el hombro de aquel sujeto con suma destreza. Dejando que el hueso de su zona empezase a crujir por la fuerza con la que estaba apretando y su cuerpo siguiese moviéndose en dirección recta mientras el brazo sigue desplazándose poco a poco en sentido contrario, lo que conlleva a que poco a poco la zona del hombro esté más cerca del suelo y por ende mas dislocado. Esto a la par que sus gritos dejan una situación en estos momentos muy adversa a lo que me esperaba, ya que no pensé que en este día iba a acabar atacando a un simple gordaco y este andaría mostrando tales gritos antes de poder oír el desencaje de sus huesos, y poder reír de forma sanguinaria.

Ante todo estos pensamiento un ruido de disparo se hace oíble en la zona, lo que me lleva a parar con el apretón de sus huesos para poder girarme poco a poco y poder percibir con mis ojos dorados como el chaval que había despojado a este tío del local, ahora se encuentra disparando con su pistola a su entre pierna, lo que acaba por inercia que el hombre mueva su cuerpo en busca de su seguridad, pero al estar mi pie aun en su hombro acaba por dislocárselo del todo mientras sus gritos por el dolor acaban cesando con su vida.

-Joder. Si es que digo que aquí todo acaba con un bing bang-le suelto mientras levanto mi pie de aquel cuerpo y me revuelvo el pelo para mirarle-Es que no soporto ver a la gente que se chulea por su fuerza o se cree dioses en este indeciso mundo lleno de gobernantes.

Estiro mis manos hacia el cielo dejando que los dedos se rencuentren con sus hermanos y puedo abarcar la zona aérea con este movimiento, del que consigo estirar mis huesos de toda la zona del brazo y por ende conseguir sentir un gustito por poder aliviar dichas contracciones que se suelen dar al estar mucho tiempo parado o sin ejercitarla como debe ser.

Nada más acabar con esto vuelvo a dejarlas en su sitio y haciendo una pose de camarero (movimiento hacia atrás con uno de los pies y un saludo formal) me dirijo hacia aquel chaval que parece que le gustaba arrasar a sus enemigos de la misma forma que yo, pero yo por mi parte no utilizo armas de fogueo, sino utilizo los dones naturales que me ha dado este mundo.

-Y por cierto. Mi nombre es Shizuo y me gusta esto de conocer gente no tan chulesca como esta que ha sido destronada de este mundo. ¿Puedo tener el honor de saber su nombre?

Al parecer el joven estaba torturando al idiota que saqué a golpes del bar mientras yo me acercaba a dispararle. El joven rubio se había dedicado a apretar con fuerza su pie contra el hombro del desgraciado mientras este gritaba de dolor. Poco a pocolos huesos del brazo y del hombro se fuesen separando poco a poco. Dicha separación es sumamente dolorosa y es una tortura muy cruel pero poco eficaz.

Yo le hubiese metido agujas entre los dedos y las uñas para que así su dolor fuese aún mayor pero con pocos riesgos de que muriese por ello. La única forma de morir que causaría esa tortura es un fallo cardíaco por el dolor exceso de sufrimiento del cuerpo lo que causaría una sobrecarga del sistema nervioso. Tras disparar me empecé a alejar del cuerpo mientras el rubio decía algo que no me importaba por lo que no le hice ni caso. Mientras caminaba pude escuchar como el rubio se estiraba pues sus huesos sonaban por el entumecimiento, algo característico de cuando no mueves esa parte del cuerpo durante mucho tiempo. Acto seguido al mirar de reojo vi al tipo del pelo rubio despeinado y con aspecto de camarero hacer una especie de reverencia antes de acercarse y decir

Y por cierto. Mi nombre es Shizuo y me gusta esto de conocer gente no tan chulesca como esta que ha sido destronada de este mundo. ¿Puedo tener el honor de saber su nombre?

Algo raro de verse, alguien presentándose cordiale y educadamente. Miré al extraño y dije

Mi nombre es Kinji, encantado.

Tras terminar de presentarme de forma caballerosa hacia aquel sujeto que se disponía a alejarse de la presencia del crimen, puedo comprobar cómo este tiende a girar su cuerpo y brindarme con su nombre, a lo que yo únicamente correspondo volviendo a posicionarme nuevamente de forma estática y mirándole de forma alegre. A todo esto empiezo a unir mis manos entre sí para hacer crujir cada uno de los dedos de mi mano y así aliviar estos dolores que me suelen dar en las zonas más usadas por un luchador como yo, a lo que únicamente correspondo terminando de hacer dichos movimiento y intentar decir algo para calmar el ambiente.

-Bueno. Ya que nos hemos presentado seria de mala gana el no continuar con una conversación más idónea. ¿Qué le ha traído a esta isla Kinji? Yo ando precisamente para abarcar hechos pasados en mi vida, pero supongo que lo suyo será algún tema más preciso y completo-digo a esto último alejándome del cuerpo mientras cojo su pistola y la guardo en uno de mis bolsillos.

Con un gesto un tanto cordial le invite a seguirme a caminar por la zona y alejarnos de la zona, con lo que evitaríamos dar explicaciones a la gente que se dispusiese a comprobar el cuerpo ahí tirado y además podría oír la historia del por qué este buen pistolero se encuentra en esta zona donde no hay que digamos muchos piratas de altos nombres. Aunque puede que su meta no sea esa y solo ande paseando aquí por sumo gusto, pero como no se que se traerá entre manos lo mejor será hacerme pasar por un simple ciudadano y no dar ningún apego a mi Akuma no mi, de la que no se qué poder tiene, y así poder pasar un buen día aprendiendo cosas de este buen hombre.

Tras presentarme el sujeto se quedó quieto mirándome alegremente según mi parecer. Al poco rato une sus manos para así crujir todos y cada uno de sus dedos, una mala costumbre de algunos luchadores que no saben que eso no es bueno para las articulaciones pues las debilita y al acabar me dice

Bueno. Ya que nos hemos presentado seria de mala gana el no continuar con una conversación más idónea. ¿Qué le ha traído a esta isla Kinji? Yo ando precisamente para abarcar hechos pasados en mi vida, pero supongo que lo suyo será algún tema más preciso y completo~ Mientras me dice esto se aleja del cuerpo cogiendo su pistola y guardándola en su bolsillo, algo que a mi parecer le es inútil a un luchador como parece ser él.

Con un gesto un tanto cordial me invitó a seguirle a caminar por la zona y alejarnos de la zona, con lo que evitaríamos dar explicaciones a la gente que se dispusiese a comprobar el cuerpo ahí tirado y además podría contestarle a la pregunta de qué me traía a esta zona donde no hay que digamos muchos piratas de altos nombres. Nos alejamos tranquilos del lugar hasta estar cerca de la montaña corvo y los bosques que la plagan, momento en el que empecé a responderle a su pregunta

Pues he venido aquí por motivos personales ya que tengo cuentas pendientes con los bandidos de esta montaña. Hace tiempo traté de entregar a algunos que según había oído tenían recompensa pero no lo pude hacer porque me interrumpieron algunos marines que intentaron detenerme creyendo que era un bandido más.

Dije mientras entraba al bosque tranquilo.

[Privado/Pasado] Dos Cazadores destinados a matar [Kinji/Shizuo]

[Privado/Pasado] Dos Cazadores destinados a matar [Kinji/Shizuo] {Dom 9 Jun 2013 - 22:40}

Re: [Privado/Pasado] Dos Cazadores destinados a matar [Kinji/Shizuo] {Dom 9 Jun 2013 - 23:21}

Re: [Privado/Pasado] Dos Cazadores destinados a matar [Kinji/Shizuo] {Dom 9 Jun 2013 - 23:58}

Re: [Privado/Pasado] Dos Cazadores destinados a matar [Kinji/Shizuo] {Lun 10 Jun 2013 - 21:03}

Re: [Privado/Pasado] Dos Cazadores destinados a matar [Kinji/Shizuo] {Jue 13 Jun 2013 - 20:38}

Re: [Privado/Pasado] Dos Cazadores destinados a matar [Kinji/Shizuo] {Jue 13 Jun 2013 - 22:46}

Re: [Privado/Pasado] Dos Cazadores destinados a matar [Kinji/Shizuo] {Miér 26 Jun 2013 - 0:12}

Re: [Privado/Pasado] Dos Cazadores destinados a matar [Kinji/Shizuo] {Miér 26 Jun 2013 - 15:05}

Re: [Privado/Pasado] Dos Cazadores destinados a matar [Kinji/Shizuo] {}