Sorpresa amistosa / (Privado) Ikaru, Dayane, Uracha /Presente

Water Seven considerada una cuidad bastante importante por su famoso astillero, aquel lugar es recordado por haber construido barcos muy famosos, la verdad no estaba muy seguro de por que había llegado a esta isla, pero yo nunca decidía las cosas, simplemente dejaba que el viento empujase mi barca y me llevara a cualquier lugar y por alguna razón llegue aquí.

Sin dudarlo me levante y me estire, sinceramente tenia el cuerpo un poco resentido de haber estado tanto tiempo durmiendo, la verdad es que me hacia falta estirar las piernas y ya aprovecharía y comería algo cuando até mi barco me puse rumbo a el centro de la cuidad, no sabia que me esperaba en  aquel lugar, pero tampoco le daba mucho importancia, una cosa era seguro si había llegado aquí era por algo, tras caminar durante unos minutos me quede observando los puestos de algunas tiendas y cuando me disponía a comprar algo me percate de que no encontraba mi dinero con resignación di un suspiro y a continuación me  rugió el estomago.

Por que siempre me ocurre lo mismo

dije llevándome la mano a la barriga  mientras seguía rugiendome, Ya se me ocurrirá algo... dije mientras me acerque aun banco y me senté en el.

¡Lugar nuevo! Salí del barco antes de que Sam, Ruxer o Kev me lo impidiera, corrí hasta internarme en la ciudad, y empecé a curiosear todo lo que veía. ¡Cuántas cosas! ¿Cómo se llamaba este sitio...? No me acuerdo, pero bueno, da lo mismo.

Caminé por la ciudad, estaba llena de agua ¡esto era genial! Con Riu enroscada en mi torso, mi carcaj lleno de flechas para cualquier imprevisto, y mi mochila marrón llegué hasta un sitio dónde muchos hombres construían barcos. Era impresionante y me quedé observándoles un buen rato, escuché a unos hombres hablar del lugar... creo que eran... ¿astilleros? Si, algo asi. Pero bueno, a mi me daba lo mismo cómo se llamara, porque seguí observándoles embobada.

Cuantas veces habria realmente desembarcado ya e4n esta ciudad de agua...Realmente ya ni me acoraba pero la cuestion es que era un gran numero de veces.Me habia tomado unos cuantos dias de descanso entre aventura y aventura y este sitio me parecio el mas apropiado,tenia un clima agradable y a mi me encantaba el agua...aunque bueno fuese mortal para mi, pero iogualmente es bastante bonita.
Me interne en la ciudad rapidamente, me la conocia de Pe a pa y sabia perfectamente a los sitios donde debeia de ir para divertirme un rato,pero para llegar a ellos debia pasar por una zona de astilleros ya que no habia otra manera y alli siempre hay bastante gente.Aunque por suerte hoy nop era el caso, solo habia gente trabajando pero pocos civiles que digamos...aunque He de decir que me fije en una persona en especial, en una joven que parecia tener un aspecto de ilusionada, como si nunca antes hubiese visto la ciudad,desde lo lejos me la quede un rato mirandola,algo embobado y despues continue mi paseo, aunque con curiosidad por saber quien era esa chica...

Continue andando unos minutos hasta que llegue a unos puestos de la ciudad,la verdad es que tenian cosas bastante interesantes y hoy si traje algo de dinero...Aunque finalmente nada me intereso de verdad y segui caminando hasta que de nuevo me fije en otra persona...aunque esta vez era por que la cponocia de hace ya bastante tiempo, Era el Pirata Uracha, que estaba sentado en un banco con una cara...que como decirlo...se le podia ver perfectamente que tenia un hambre que se moria...Me acerca a el y le salude:

-Jejeje que coincidencia encontrarte por aqui Uracha jajajaj ¿Que tal te va todo?

Tras sentarme en el banco y estar mirando al suelo de repente escuche una voz familiar la cual conocía bastante bien, -Jejeje que coincidencia encontrarte por aquí Uracha jajajaj ¿Que tal te va todo?- se trataba de Ikaru la verdad hacia tiempo que no le veía y esto saco una sonrisa en mi rostro.

Sin dudarlo me levante y mientras sonreía dije -Pues aquí estoy muerto de hambre ¿y a ti? ¿como te va todo Ikaru?- dije mientras le di un pequeño golpe en el hombro -Por cierto me dirigía al astillero, ¿quieres venir y mientras hablamos?-

le pregunte mientras volvían a rugir mis tripas a lo que seguidamente yo comencé a reírme...

Riu siseó suavemente, intentando llamar mi atención. Había pasado un extraño chico que se me había quedado mirando... O eso me dijo Riu, porque sinceramente, yo estaba demasiado interesada en el trabajo de esos hombres, era realmente impresionante cómo fabricaban esas piezas... me recordaban a las kujas... Trabajaban en equipo.

Riu continuó siseando tonterías, así que la ignoré, ya que lo que hiciera ese extraño me traía sin cuidado, pero que haya llamado la atención de Riu de esa forma me intrigaba... Pero daba lo mismo. Los desconocidos, desconocidos son, y así se quedan. Por lo menos por mi parte.
Riu continuó observando al chico, que se había reunido con otro, y ahora los dos estaban hablando tranquilamente. Sólo me giré un momento y luego volví mi vista al trabajo que realizaban los astilleros. Al menos ellos no parecían hacer distinciones por los colores de pelo de los demás, o por sus nombres... Suspiré. Riu continuó observándoles, medio aburrida y yo continué asombrándome de lo extraños que pueden llegar a ser los hombres, incluso en su trabajo.

Despues de preguntarle eso y saludarle, note como alzo la vista y me miro sonriendome,entonces yo mostre tambien otra amplia sonrisa mientras que escuchaba como me decia que estaba bien pero como ya supuse anteriormente, estaba muerto de hambre.Seguramente seria por que se le habria olvidado el dinero o algo como solia hacer muchas veces jajaja.Despues me pregunto que que tal estaba yo mientras que me daba un pequeño golpe en el hombro con un tono amistoso a lo que yo le respondi alegremente:

-Pues la verdad es que voy bastante bien ultimamente, algun que otro descuido como siempre pero nada importante jajajaja. La verdad esperaba encontrarme con un dia tranquilo aqui jajaja a si que me parece bien la idea de que vayemos a dar un paseito por el astillero, conozco un sitio donde se come de muerte jajaja, yo invito jajajaj.

Sus tripas sonaron...y al igual que el yo tambien me puse a reirme durante un rato mientras que comence a andar...Pero de nuevo me volvi a fijar en esa chica extraña que se quedo embobada con los astilleros...no se por que pero me daba el presentimiento de que la conoceria dentro de poco...

Tras darle el golpe amistoso en el hombro hablo, -Pues la verdad es que voy bastante bien ultimamente, algun que otro descuido como siempre pero nada importante jajajaja. La verdad esperaba encontrarme con un dia tranquilo aqui jajaja a si que me parece bien la idea de que vayemos a dar un paseito por el astillero, conozco un sitio donde se come de muerte jajaja, yo invito jajajaj.

Nada mas terminar de hablar le di un fuerte abrazo -Me as salvado la vida estaba muerto de hambre- a lo que seguidamente me sonaron las tripas y ambos comencemos a reírnos, a continuación ambos comencemos a caminar y cuando pasemos por los astilleros una estaña chica llamo curiosamente mi atención, esta tenia una serpiente encima de ella la cual nos estaba mirando, aunque la chica parecía muy emocionada al ver como trabajaban las personas en el astillero,

-Antes de que vayamos a comer quiero hacer una cosa Ikaru-

Mientras me acerque a la extraña chica y ya a su lado dije mientras sonreía -Es increíble ¿verdad?- dije mientras ambos observábamos a las mismas personas...

Riu continuó mirando a aquéllos dos chicos, y yo continué observando a los hombres trabajar, pensativa.

Entonces Riu se removió, incómoda, y se metió dentro de la mochila.
Una milésima de segundo después ya estaba escuchando la voz de un chico sonriente a mi lado.

-Pues si... Me impresiona la fuerza y el trabajo en equipo que tienen.-le devolví la sonrisa, y continué observando. Riu salió de mi mochila, y le siseó al chico, desconfiada. Le lancé una mirada de reproche a la serpiente. Eso era de mala educación.

-Discúlpala, por favor,-dije mientras me dirigía al chico.- no le gustan mucho los desconocidos.

Riu continuó observando al joven, aunque al menos paró de sisearle. ¿Qué voy a hacer con una serpiente tan maleducada?