[Rol moderado] (Sinclair) Una decisión a contrareloj.

Ahora mi vida era como si de una brújula se tratará, yo fuera la aguja y la fuerza que la mueve el destino, mi destino era incierto y todo fue por tomar una decisión que, aunque fue arriesgada y difícil, no fue tomada a la ligera.

Dicha decisión fue abandonar el lugar al que había pertenecido desde que aquel día en el que en orange town, empezó una nueva vida para mí. En ese lugar conocí a gente que me acogió en su gremio de cazarrecompensas, con ellos había vivido grandes cosas y grandes momentos.

Siendo esto así quizás alguien se preguntará porque deje un lugar en el que me sentía acogido y querido, pues fue por una sencilla razón. Desde hacía meses, no tenía el nivel de acción y aventuras que quería, y aunque si bien es verdad que, a pesar de esto pasaba grandes momentos con el gremio, eso no era suficiente para mí, además, lo cierto era que habíamos estado perdiendo miembros poco a poco hasta solo quedar 3.

Bueno, dejémonos de recuerdos y trasladémonos al momento presente. En estos momentos navego en una pequeña barca con vela que adquirí, junto con algunas provisiones y agua que compré con parte de los berrys que tenía ahorrados. Como no tenía ni idea de navegación pues este campo, no está dentro de mis campos de conocimiento, procuré que la barca tuviera una vela, para que al menos se moviera mientras hubiera viento. No se cuánto tiempo llevaba navegando, pero el tiempo acompañaba y aun me quedaban provisiones, asique aún iba bien. Aunque quizás lo que se refería al clima, hablé demasiado pronto…

De repente, unas nubes grises comenzaron a cubrir el cielo, primero solo caían unas pocas gotas, pero pronto comenzó a llover con más fuerza y comenzó una tormenta que, aunque no parecía muy violenta, preferí adoptar mi forma hibrida de ángel y coger las provisiones que me quedaban por si en una de las embestidas del mar, se ponía en peligro mi vida abandonar el barco y salir volando, pero por suerte fue una tormenta corta y no hizo falta salir volando. Tras un par de horas navegando, si se le puede llamar navegar a salir de un lugar y que los vientos te lleven a su merced, avisté primero solo una mancha en la lejanía, a medida que me iba acercando podía ver que se trataba de una isla de considerable tamaño y, solo cuando estaba a pocos metros de ella descubrí que se trataba de Water 7, una isla enorme, conocida como la ciudad de los canales y famosa por sus astilleros. Cuando llegué a un muelle bajé de mi barca cogí las pocas provisiones que me quedaban  después de tres días de viaje y me fui adentrando en aquella enorme isla.

Parecía todo tranquilo, pero a medida que me iba adentrando en la isla, había más y más marines correteando por todos sitios, no parecían altos mandos solo reclutas. Sabía la posible razón de esa situación, ya que cuando empecé mi viaje, escuché que un pirata con una gran recompensa estaba pululando por Grand Line y, mas concretamente, se sospechaba que estaba en Water 7, asique en ese momento, decidí intentar ayudar a la justicia a capturar a ese pirata, pero antes  me acerque a un marine y, aunque sabía perfectamente lo que ocurría le pregunté:

- Oiga buen hombre ¿Me podría explicar porque hay un despliegue tal de marines en esta isla.

A cada paso que das te adentras más y más entre la multitud de la ciudad, que aunque a primera vista parece poca, es suficiente como para que tengas que esquivar de vez en cuando a alguna persona para que no choquen contigo.

- ... -El marine te mira de arriba a bajo con aversión, como si fuersa un intruso que se entromete en asuntos que no le interesan.- Estamos buscando a un pirata peligroso desde hace mucho tiempo, y por fin hemos dado con él. Solo nos falta darle caza, así que no te metas en donde no te incumbe, chaval. -Tras responderte se da media vuelta y se va.

Aún sin una respuesta clara sigues andando en línea recta hasta llegar a un cruce de caminos. Tras girar en una de las esquinas te sorprende una persona que choca contigo, pero parece que tiene prisa y ni se disculpa; llevaba una larga capa y capucha de color negra que te impidió poder verle la cara, pero te quedaste con que tenía el pelo azul. En un instante pierdes de vista la capucha negra entre la multitud y sigues tu camino.

A lo lejos, tras unos minutos caminando, ves como un joven de pelo castaño, gran musculatura y solamente con un pantalón corto sale de un bar de la zona. Le identificas al momento de un Wanted que habías visto días antes. Crees al instante que se trata de la persona de la que tanto se hablaba por todos lados.
 

joven castaño:

Puedes avisar a los marines y que se encarguen ellos, o hacerlo tú mismo puesto que no ves a ningún marine por los alrededores de aquella calle. Si decides ir tú tienes el factor sorpresa de tu parte, su wanted no era muy elevado, pero aun así no tienes idea del alcance de su poder


OFF: Siento haber tardado en postear, a partir de ahora intentaré postear lo más rápido posible ^^. Por cierto, ten en cuenta en todo momento que tu pj es cazador y que no tiene intención de ser pirata, así que lo que busca es dinero (?)

Aquel marine se limitó a mirarme con desprecio y a decirme que no me metiera en asuntos que no me importaban. Lo que acababa de pasar me había mostrado dos cosas. Una era que quería capturar a ese pirata antes que aquellos marines a modo de venganza por haberme tratado con desprecio y otra que tenía una forma menos de conseguir información de aquel pirata, lo único que tenía era la imagen grabada del pirata que buscaba, pues lo había visto en un par de carteles de “Se busca” antes de encontrarme con aquel marine desagradable.

Solo tenía una imagen, una imagen que vi en el cartel la de un hombre corriente, ni siquiera un nombre, ningún rasgo característico, solo un hombre descamisado, musculoso y con el pelo castaño. Con eso poco podía hacer, pero si era verdad que era un pirata buscado y que estaba en water 7, era muy posible que si preguntaba en las tabernas del lugar, allí supieran algo. Al ir tan absorto en mis pensamientos, casi ni me di cuenta de que había chocado con alguien, al que tras alzar la vista para ver con quien, de la persona solo identifique su pelo azul, nada más.

Seguí mi camino y en ese momento ocurrió un milagro, vi salir al pirata que buscaba de una taberna, asique decidí seguirlo a una distancia prudencial. Iba a capturarlo, pero no todavía.

Le seguí siguiendo, de repente comenzó a ir por calles desiertas, y cuando giré una esquina que él había girado hacia unos instantes, me volví un poco para atrás. Preparé mi arrow of destruction que llevaba atada en el brazo derecho y cargué las dos pistolas que llevaba en mi cinturón con unas cuantas balas píricas, un tipo de bala especial, que si no fuera porque sabía cómo crearlas no las usaría tan a la ligera. Me saqué las gafas de sol del bolsillo de mi chaqueta de cuero negra y me las puse. Con mi traje de cuero negro y mis gafas oscuras tenía un aire chulesco y gamberro que me gustaba bastante. Siguiendo con lo que vi tras esa esquina, vi como un pobre hombre le pedía unas monedas al tipo al que perseguía y el le respondía con una patada mientras le decía que no le molestara. Salí de mi escondite, le di unas monedas a aquel pobre hombre y le dije:

- Váyase de aquí pues las cosas se van a poner muy feas

Conseguí que aquel pobre hombre se fuera, pero el pirata me pidió “amablemente” que me fuera, a lo que le dije:

- Mira chaval, no deberías hablarle así a alguien que acabas de conocer, pues si a lo mejor es cierto que solo me estoy haciendo el héroe y el chulo ante ti, también puede ser que tenga la técnica y los medios para patearte el culo. ¿No te intriga?

Después de eso, intentó darme un puñetazo, pero a pesar de lo cerca que estaba, me fue suficiente apartarme hacia un lado para esquivarlo. En ese momento me había sentido como un torero toreando a un toro.

- Vamos chaval, no me decepciones alguien que tiene un cartel de se busca debería hacerlo mucho mejor.

De repente a lo lejos y en muchos lugares de la isla comenzaron a oírse disparos:

- Vaya, vaya una de dos o los marines que están revoloteando por aquí han olido tu rastro o eres un pirata con amigos y tus amigos están jugando al tiro al marine y yo me pregunto ¿Sabes la respuesta?

Cuando le llamé pirata, algo en su respuesta, la cual en resumen fue si, me hizo pensar que no lo era y, por lo tanto estaba intentando hacerme creer que lo era, pero en ese momento en el que estaba pensando, el tipo se abalanzó sobre mi y me sepulto bajo su cuerpo, pero los brazos me quedaron libres, asique puse lo más rápido que me era posible, teniendo a aquel tipo encima, el modo lanzallamas de mi arrow of destruction y apunté hacia el, haciendo que se prendiera su ropa y, por consiguiente que empezara a moverse para intentar apagarla y cuando pude me liberé de su cuerpo rodando hacia un lado y cuando me levanté le dije sin saber si me oiría:

- Dudaste al decirme que eras pirata, asique algo me dice que es un farol y que esos disparos no son de tu banda. Ahora lo que falta saber es quien eres en realidad y rezar porque esos disparos que se escuchen sean de la marina porque si no algo me dice que estamos en problemas.

Y si era cierto, como no fueran los marines pronto descubriríamos los dos quien disparaba, pues los disparos se acercaban.

Aquel hombre tras librarse de las llamas en las que ardió cuando le ataque con mi lanzallamas, dijo tres palabras o al menos yo solo entendí tres “gobierno”, “romper” y “trato”, estas palabras me llenaron de dudas ¿Ese tipo era un agente del gobierno? Si era así y pertenecía a uno de los CP, lo mejor sería tener cuidado pues los miembros de los CP poseen técnicas de Roukosiki y son técnicas a las que no sabía si era capaz de enfrentarme a ellas. ¿Era un pirata al que el gobierno le ofreció un trato y lo han traicionado? Si era así, me daba igual lo que hubiera hecho, pues si hay algo que odio mas que a los piratas es al gobierno, ya que ellos tuvieron la culpa de aquello que me ocurrió. Desafortunadamente, perdí de vista a mi agresor y cuando volví a mirar, doblaba la esquina a gran velocidad. Así que corrí todo lo que pude hacia él y grité:

- Puedo ayudarte si estas en problemas, pera antes tengo que saber la verdad ¿Quién eres?

No paraba, no escuchaba, parecía aterrorizado y corría como si estuviera escapando de algo, Incluso corrímos delante de las narices de unos marines y no le hicieron el más mínimo caso, lo que me hizo temerme que aquellos marines no estaban allí por aquel hombre, lo cual significaba que estaban aquí por otra cosa o por otra persona. Seguí corriendo tras aquel hombre, el cuál giró una esquina y cuando yo la giré me lo encontré muerto con una herida en la espalda. Millones de preguntas que ahora con la muerte de aquel tipo quedaron sin respuesta, rondaban por mi cabeza, pero todas esas preguntas podían resumirse en dos ¿Quién era ese tipo y quien lo estaba persiguiendo?

Pero era estúpido preguntárselo pues el hombre ya había muerto, aunque siendo sinceros me daba igual si estaba vivo o muerto, si siguiera vivo habría la posibilidad de que le hubiese ayudado si el hacerlo no iba contra mis principios, de lo contrario lo había cazado, pero ahora que está muerto, me quedo con la intriga de quien era y quien le perseguía, pero podía ganar dinero si se lo llevaba a los marines de aquella isla, asique me puse en marcha.

La situación era la siguiente no podía seguir hacia delante pues la calle en la que estaba no lo permitía, pero seguí teniendo tres opciones, ir recto, volver por donde había ido o ir a la izquierda. Pensé que lo mejor sería venir por donde había ido y así, quizás me encontrará con algún marine de los de antes, cogería la pasta que me diera por aquel tipo y saldría de aquella isla, pero no lo tendría tan fácil, pues aunque pasé por el mismo sitio en el que antes me crucé con los marines cuando estaba persiguiendo a el tipo que ahora intentaba cargar y llevarlo ante la marina, no había marine alguno, asique seguí caminando por las calles de water 7 buscando a algún marine.

Seguía andando con aquel tipo muerto, cargado en mi hombro, buscando algún marine para cobrar la recompensa por su cabeza, pensaba en que el que yo cobrase su recompensa no sería muy justo pues, aunque pelee contra el yo no era quien lo había derrotado, sin embargo tampoco le haría ascos a un buen puñado de berrys. Pues eso, ande a través de calles y calles y llegué a un callejón sin salida, busqué con la mirada una forma de salir, opté por lo más normal que fue volver por dónde había venido, pero de repente encontré otra callejuela, asique fui por ella pero, nada más entrar a la callejuela, me encontré un cuerpo tirado en el suelo , pero no sabía si estaba vivo o muerto, pues no se veía nada del cuerpo porque estaba tapado con una manta, me acerque y le hablé, pero no respondió. Pensé que estaba muerto, pero de repente pude oír su leve respiración, de lo que deduje que debía estar herido, pues respiraba con dificultad, pero no sabía, ni la gravedad, ni nada de su herida, asique lo destape y vi una herida en su pecho que sangraba bastante, asique deje al tipo que llevaba cargado al hombro y me dispuse a curarle:

- Tranquilo, soy médico, puedo ayudarte, pero no llevo el instrumental necesario para atenderte, asique tendrás que creer en los milagros.

Le puse mi mano sobre la herida y de ella salió una luz blanquecina con la que pude cerrarle bastante la herida con la consiguiente disminución del sangrado, además sabía que el poder de sanación que me otorgaba mi akuma no mi, también era capaz de eliminar en gran medida el dolor de las heridas, cuando acabé de curarle le pregunté:

- ¿Quién eres? Y, lo más importante ¿Quién te ha hecho esto?

Quería saberlo, pues temía que me encontrara ante un asesino en serie, pues, aunque ya hubiera tenido una experiencia con uno en esa ocasión tuve ayuda para detenerlo, pero esta vez me encontraba solo ante el peligro.

Mi poder había funcionado, al menos para que se levantara y me hablara. Aquella persona era una joven y hermosa revolucionaria, perseguida por el gobierno:

- Enela, una pregunta-dije señalando el cuerpo que antes cargaba- ¿Conoces a ese hombre?

Mientras esperaba su respuesta observé que no solo tenía la herida que le acababa de curar, también observé que según lo que me dice tenía pocas esperanzas de sobrevivir:

- No te lo creas, yo no lo permitiré porque te voy a ayudar a salir de aquí, pero antes necesito que me digas todas las heridas que tengas, no puedo curartelas por completo, pero puedo hacer que no te duelan, porque es cierto que haré todo lo que esté en mi mano para ayudarte, pero necesito que me ayudes todo lo que puedas, pues si es verdad que te persiguen agentes del gobierno, yo solo no podré con ellos.

Ahora la situación había cambiado, iba ayudar a esa joven, aun si eso significaba no cobrar una recompensa, pues de todos los bandos que había en la isla, marines, agentes del gobierno y revolucionarios, estos últimos eran los únicos que no me habían hecho nada en la vida.

La respuesta que me dio a la pregunta de si conocía a aquel hombre que llevaba a cuestas, primero me hizo ver un poco de esperanza y luego me produjo extrañeza:

- Enela ¿me estas queriendo decir que hay alguien más en esta isla que va contra los agentes del gobierno? Si es así deberíamos buscar a esa persona ya que si va contra el gobierno, aumentaran nuestras posibilidades de salir de esta isla.

Después sacó unas pastillas azules y se las tomó, quizá dichas pastillas fueran para las otras heridas que pudiese tener y, después me dio las gracias dejando ver unos preciosos ojos azules:

- No me las des, porque como ya te he dicho te protegeré, pero tu también tendrás que luchar si es necesario ¿vale?

De repente, a mi espalda oí unas voces que llamaba a Enela rata callejera, eran tres tipos, agentes del gobierno, al que me dirigí:

- Es irónico ¿no crees?, las únicas ratas que veo aquí sois vosotros, pues vais los tres contra esta pobre chica y encima está herida, asique piensa bien antes de hablar.

Me coloqué al lado de la chica, pues quería protegerla, pero no quise ponerme delante de ella, pues si lo hacía seguramente un agente escondido la atacaría por la espalda:

- ¿Sabeis?, probablemente esta chica haya hecho cosas terribles y por eso la perseguís pero si tengo que elegir entre ayudar al gobierno o ayudar a una revolucionaria, elijo a la revolucionaría, pues a diferencia de al gobierno, a los revolucionarios no les odio.

El que parecía ser el jefe de aquellos tres tipos del gobierno, le cambio la cara y quitó momentáneamente, aquella estúpida sonrisa de su cara y me dijo que si me creía el defensor de los desfavorecidos y que parecía que ya había elegido mi destino a lo que le respondí:

¿Sabes? Quizás yo en su día también fui, como tu lo llamas, un desfavorecido más concretamente un esclavo pero ¿Sabes de quién fue la culpa? La culpa fue de los que teóricamente son los buenos, los que imparten justicia y si me salve fue gracias a una banda de piratas. Asique ¿te extraña que me ponga de parte de una revolucionaria?

Mientras decía esto dos de sus hombres se lanzaron contra mí, para atacarme, por suerte Enela me quitó a uno de los dos de encima, pero eso no quitaba que el otro se acercara a mí a gran velocidad, asique activé mi arrow of destruction en modo lanzallamas, apunte al tipo y de mi arma salió una gran llamarada dirigida a la cara de aquel tipo.

El joven le quemó la cara al hombre que a su vez se prendió fuego toda su ropa, comenzó a gritar y dar vueltas hasta que cayó al suelo muerto.

 -¡¡Chs!! Maldito bastardo, sabrás que acabas de convertirte en enemigo del Gobierno ¿No? Ahora ya puedo ir contra ti con todos mis hombres.

El hombre hizo otra señal y mandó al resto del escuadrón a por vosotros, aproximadamente unos quince hombres mas, podeis huir o bien plantarles cara, pero eso solo te convertirá en alguien todavía mas buscado, la decisión es tuya.

Al tipo que le disparé con el lanzallamas, primero ardió y luego murió, desde ese momento y según las palabras de el que parecía el jefe de aquellos hombres me dijo que en ese mismo instante me había convertido en enemigo del gobierno:

- Ese hecho poco me importa, ya odiaba al gobierno y, ¿Sabes? No temo al gobierno ni a nadie.

Después mando al resto de sus hombres a por mi y Enela. Con tres habíamos podido pero, ahora había mandado a 15 hombres. Tenía dos opciones o escapar con Enela volando y arriesgarme a que aquellos hombres estuvieran entrenados en el Roukosiki y que la supuesta ventaja que tenía sobre ellos no sirviera y que pudieran darnos alcance, aunque escapara por aire. O luchar 2 contra 15 y que probablemente perdiéramos contra ellos. Aunque de pronto se me ocurrió una idea, si es cierto que era arriesgada, si funcionaba tendríamos ventaja. La idea era utilizar la forma completa de mi akuma y una de las cosas que pasaría era que de mi cuerpo saldría una gran cantidad de luz de brillo elevado y, quizás así pudiese cegar momentáneamente a esos hombres, asique abracé a Enela y le susurre que cerrará los ojos, y después comenzó mi transformación en mi forma completa, con ella la musculatura de mi cuerpo y mi altura aumentaron con lo que mi camisa se rasgó, suerte que no pasó lo mismo con mis pantalones ni con mi chaqueta y mi cuerpo empezó a brillar intensamente, tanto que iluminó por completo todo el callejón. A continuación, no esperé, ni siquiera a ver lo que había pasado y salí volando lo más rápido que pude. Esa acción no era de cobarde, sino una estrategia para, si nos volvían a encontrar quizás tendríamos que luchar contra menos hombres, pues muy probablemente, se dividiesen para buscarnos, cosa que muy probablemente pasaría, pues llevaba en brazos a una revolucionaría fugitiva y yo había calcinado a un hombre del gobierno.

El moviemiento de Sinclair cegó a todos los que estaban en aquel callejón dandoles a el y a la muchacha un tiempo precioso para escapar, tras unos minutos de recuperación, los agentes del Gobierno habían recuperado la vista lo suficiente para poder continuar la persecución.

 -¡ El que me traiga la cabeza de ese hombre será recompensado con 100.000 Berries, a por ese cabrón!

Tras la orden, los agentes se separaron y comenzaron a buscar por todas las calles que podían, con ese rango de alcance, no tardarían mucho en encontrarlos a no ser que se ocultasen o escapasen de la isla, el tiempo juega tanto a favor como en contra de Sinclair, cuanto mas tiempo pase en la isla mas agentes le buscarán.