Mecha-J
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Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Exp: 0.
Nivel: 1.
Nombre: Johnny Dunn.
Apodo: Mecha-J.
Edad: 24.
Sexo: Masculino. (Por el Momento.)
Raza: Humano Ciborg.
Rango social: Bajo.
Descripción estilo de lucha:
-Nombre: “Orden”
-Ejecución: Simplemente es el termino que añade delante a la mayoría de sus acciones, suele ser debido a la invención de procesar todo como si de una maquina se tratase y así una vez procesado y activado, ejecutarlo.
Descripción física: De figura alta, rondando los 2 Metros (1,98m). Lo poco humano que le queda a la vista es su característica media melena rubia brillante y bien cuidada, por lo demás su rostro es una mera cascara metálica que cubre todo trozo de carne visible hasta la altura del cuello de su camisa lo cual oculta rastro humano, en un lateral tiene una llave de cuerda simulando una oreja. Hablando de su rostros cabe destacar su boca y ojos, ambos “ficticios”, lo primero es simulado por una parte de metal blanco el cual es móvil simulando a la perfección una boca a la hora de ingerir alimentos, no articulado a la hora de hablar. Lo segundo es sustituido y cubierto por unos faros los cuales no dejan visible el interior. Su vestimenta es prácticamente la misma siempre, simulando los colores de la Marina. Por ultimo están sus manos, brillantes y esbeltas manos roboticas perfectamente diseñadas para un uso completo y cómodo.
Antiguamente (Y posiblemente debajo de la máscara queden resquicios de esta apariencia): Era un chico muy atractivo con una barbilla definida y unos fantásticos ojos azules, sus manos eran alargadas, suaves y finas.
Descripción psicológica: Es una persona con un cerebro completamente dañado por un trauma, a causa de un accidente en el pasado (Véase Historia) se cree que es un robot de los pies a la cabeza, actuando como tal: procesando ordenes, actuando como una base de datos y... ¿Porque no? Recibiendo algún “cortocircuito mental”. En ocasiones, muy raramente, recibe “brotes” de emociones, o lucidez, lo cual aflora en su interior por unos instantes su “personalidad humana” hasta que el dolor, o bien su locura, hacen que vuelva a su forma de actuar cotidiana.
Gustos: Los Chips, las actualizaciones, la tecnología, los libros de Ciencia Ficción y ejecutar el programa Justicia.exe (Busca y persigue una Justicia justa).
Desagrados: Los pantallazos azules, las caídas de tensión, los errores de programación, la lluvia/mar/agua (Dice que le daña su sistema) y sobretodo el abuso de la ley, la desobediencia y la criminalidad.¡Ah! y a la humanidad
Habilidades: Es un atleta tanto en cuerpo como en mente el cual puede simular a la perfección el papel de robot sin notar algún resquicio de humanidad, pese a sus manos metálicas es un buen combatiente con espada lo cual aprovecha su pesado movimiento para ocasionar golpes más devastadores. Es buen cocinero, limpiador y sobretodo un gran lector.
Torpeza: Es bastante torpe a la hora de recomponerse de un ataque lo cual es ocasionado tanto por su simulación como por el peso extra. Es bastante despistado y en muchas ocasiones insensible.
Profesiones: Devastador // Médico // Cocinero.
Flota: Ninguna de momento.
Armas: Judgement: Espada medieval de doble filo con una empuñadura extravagante en la cual esta inscrita la palabra “Justicia”.
Implantes Ciborg:
1.“Mascara de la Condena”: Esta “máscara”, por no nombrarla casco ya que cubre también la parte posterior del cráneo, abarca toda su cabeza hasta la parte más baja del cuello dejando únicamente salir al cabello. Por el momento dispone de dos funciones básicas sin contar la de darle una voz robotica (Con un toque de eco/metalizado) :
- La primera son los ojos, los cuales son unos focos (Similares a los focos de las prisiones).
- La segunda la boca, esta tienes dos funciones: la principal es la de emitir como si de un megáfono se tratara, variando su tonalidad haciendo que esta pueda llegar a ser bastante elevada. La secundaria es la de grabar, o “memorizar”, información para después emitirla (función de grabadora).
2.”Mano Izquierda- Ley”: Mano robótica con la función de lanza-redes, tienes dos tipos de lanzamiento:
- El primero, a corta distancia, consiste en el lanzamiento de sus dedos en forma de red, estos atrapan a su presa y tienen la función de recogerse, entre ellos se despliega las juntas de la red, ideal para atrapar de forma sencilla.
- El segundo, lanzamiento a larga distancia, requiere de recarga ya que solo dispone de un solo lanzamiento a la vez, su muñeca se dobla “abriendo” el conducto de su muñeca, en este se encuentra un “cañón” de potencia media.
3.”Mano Derecha- Orden”: Mano robótica con la función de cañón, rellenando los cargadores situados en la parte baja de la muñeca derecha puede lanzar todo tipo de munición (dentro del limite de obertura de sus dedos) la cual es lanzada al abrirse sus dedos por la falange.
Historia:
"¿Porque?...¿Porque a mi?..." eran las primeras palabras que le pasaron por la cabeza al joven Johnny mientras se encontraba tendido en el suelo. ¿El escenario? Una mansión inmensa adornada por las llamas, el aun derrumbado chico estaba frente a ella con lagrimas en sus ojos sin apartar la vista del violento fuego que estaba consumiendo esa casa.
Sí, así es, era su casa, pero no creáis que aquello era lo que le importaba al chico, ¿Una casa en carbonizada? Al infierno con ella él lo que buscaba era una señal, un movimiento dentro de ella que demostrara que sus padres estaba bien.
La gente solo paraba a cuchichear entre ellos sobre el incidente ocurrido, nadie quería realmente involucrarse. El chico se calló, la gente que allí se encontraba hizo lo mismo viendo la reacción venidera del joven, las violentas llamas no callaron ni cesaron... “AYUDAAAAAAA” Chillo desgarrándose la voz, prolongando lo máximo posible su grito de desesperación e intentando que no cesara.
Una mano golpeo firmemente su hombro apretando este para confortarle – Tranquilo...- Le susurró la voz antes de que el pequeño se desmayara por el sofoco. Despertó en el Hospital de la Ciudad, no había nadie a su lado, no había nadie con él, mala señal...
Pero recobró de nuevo la esperanza cuando giró su cabeza y pudo distinguir al otro lado de la cortina que separaba su cama con la habitación una figura bastante robusta. -¡Papa! - Gritó de forma tan alegre que casi derrama allí mismo de nuevo unas lagrimas, al correr la cortina se paro atónito ante lo que allí se encontró, se trataba de un completo desconocido para él.
Este hombre con unas vestimentas que pudo reconocer a simple vista, las de un marine, estaba allí sentado llorando mientras sostenía una foto con sus manos, el pequeño, asustado, se acercó lentamente para ver la foto que sostenía pues dicho hombre la miraba fijamente mientras sus manos temblorosas la apretaban con una gran fuerza. Colocó su mano en el hombro del desconocido y asomó su rostro por encima del hombro para poder analizar aquello, se trataba de un retrato de su familia: Su madre, su padre y él.
Era una foto que él conocía pues estaba en el recibidor de su casa, aquella casa que se había quemado, antes de poder reaccionar y analizar la situación el desconocido pronunció unas palabras que le llegaron a lo más profundo de su alma – Lo... lo siento...- Ahora ya todo estaba claro... la situación había sido explicada con una simple frase.
Johnny quedó en shock, tembloroso se quedo en pie sin saber que hacer o que decir, pero una vez más todo fue calmado con un gesto, el desconocido fortachón se puso en pie y abrazó al chico con gran fuerza contra su pecho – Llora hijo... lora todo lo que quieras- Y así fue como el chico se pasó abrazado a un desconocido durante horas llorando sin cesar.
Hagamos un salto en la historia ya que la recuperación fue algo lenta, nos encontramos unos años posteriores al accidente, en la casa de huérfanos de la ciudad con un Johnny más fuerte tanto físicamente como de espíritu. Este se encuentra en el comedor del orfanato sirviendo comida a una gran cantidad de chicos y chicas de distintas edades pero más pequeñas que él.
Aquel desconocido del pasado, ahora ya un gran mentor para el ya no tan pequeño Johnny, entró en el comedor con un gran golpe en la puerta mientras soltaba una grandisima carcajada. Johnny con una gran sonrisa en su rostro dejo la cazuela y fue corriendo hasta donde se encontraba el anciano, mientras algunos niños se quejaban de que tenían hambre.
Antes de intercambiar cualquier palabra el viejo golpeó firmemente el hombro del chico y apretó firmemente, aquello reconstituía por completo a Johnny. Invitándole a pasar los dos se sentaron a comer, una vez terminada su tarea de servir a los demás niños, como era habitual cada cierto tiempo entre ellos para que aquel hombre le contara grandes historias sobre la Marina y la Justicia que a Johnny tanto le apasionaban.
Aquella vez fue diferente, solo cabe decir que aquella conversación acabó con un asombro enorme de Johnny, no fue otra si no la de proponerle que se uniera a la Marina como un subordinado suyo. Habia estado esperando el momento de pelear por la Justicia, por los demás desde niño...¡Ah! Se me olvidaba, cabe decir dos cosas muy importante en esta historia: La primera, el padre de Johnny era un gran Marine que en su momento lucho codo con codo con el nuevo maestro de este. Lo segundo, el incendio fue obra claramente de pirata, ¿Que esperabais? Resentidos piratas que odiaban al padre de Johnny por sus años de servicio a la Justicia.
Volviendo al presente, nuestros dos inseparables amigos, maestro y alumno, ya iban camino al barco de el primero en busca de embarcarse en aventuras. Pasaron los meses y otra tripulante se les unió, esto era un alivio pues ser el novato no es nada agradable. Al principio esta nueva tripulante, una chica que parecía venir de alta clase, le pareció algo repelente pero no tardó en cogerle mucho cariño y tratarla como a una hermanda de sangre.
Los dos formaban equipo codo con codo para mantener el barco operativo, no hacían trabajos muy de “riesgo”, pero hacían trabajo necesarios y útiles. Allí comenzó a interesarse por el cuidado y tratamiento de los heridos y por su pasado hobby, la cocina.
Pasaron los meses y esta pareja estaba de los más feliz navegando a su modo pero claro, no todo puede ser paz y amor, no en esta historia. Un cañonazo hizo desestabilizarse a todos los tripulantes del barco y dar la alarma de “Ataque Pirata”, horrorizado Johnny salió de la cocina lo más rápido que pudo hacia su camarote, del cual recogió su espada y sin pensárselo dos veces tomó rumbo a la cubierta.
Todo estaba en llamas... de nuevo las llamas, un shock despertando traumas del pasado hizo bloquear el cuerpo del chico, quedando inmóvil en mitad de un ataque enemigo... Un enemigo no tardo en percatarse de la facilidad de esa muerte, una sangre nueva que se quedaba bloqueada en mitad de su primer abordaje, patético...
El pirata a paso firme y con una sonrisa de oreja a oreja se iba aproximando cada vez más a Johnny, este seguía sin poder mover un musculo de cuerpo, lo contrario, arrojo de forma asustadiza su espada al suelo. - Ya eres mi...- Fueron las palabras del corsario antes de recibir un ataque con un gran martillo de alguien que se encontraba en la espalda del inmóvil chico. De nuevo, una mano se postro en su hombro, apretando fuertemente hizo que este reaccionara de forma milagrosa, con un ágil movimiento recogió su espada y estableció la posición de espalda contra espalda con su maestro.
Todo era un caos, las llamas no se detenían y frente a ellos solo podían ver enemigos, estaban rodeados. Entre todos ellos, los cuales formaron un circulo al rededor de las ultimas personas en la cubierta salió uno mucho más alto y por consecuente más peligroso, era el capotan de esa panda de desgraciados...
Armándose de un orgullo que no debería haber despertado Johnny intento atacar de frente a aquel mastodonte, pensó que si lo derrotaba delante de sus hombre fácilmente se rendirían ante ellos. Lo siguiente que vino fue un martillazo en sus costillas mientras que un inmenso "¡IDIOTA!” hacia eco a lo largo de todo el navío. Tuvo muy mala suerte con el aterrizaje, aunque no era difícil que eso pasara, pues calló en mitad de las llamas apoyando sus manos en mitad de su epicentro para poder levantarse rápidamente, giró lo más veloz que pudo su cuerpo mientras tosía por aquel molesto humo.
Aquello que vio superaba con creces el dolor ocasionado en sus manos, su maestro estaba de rodillas ante aquel gigantesco pirata con una gran estocada que cruzaba todo su cuerpo. Es ese preciso momento, Leah apareció en la cubierta, los dos marines heridos la contemplaron con miedo, pues no debería estar allí. Un unánime “¡HUYE!" gritado por los dos dio por entendido que esa chica era importante para los dos moribundos lo cual aprovechó aquella gigante figura para arrojarla al mar de un puñetazo...
El fuego volvió a inundar la escena pues era lo único que conseguía romper el silencio ocasionado allí, maestro y aprendiz se miraron y aquella mirada... valía más que mil despedidas. -La dejo en tus manos...- Fue lo ultimo que dijo el viejo mientras se ponía con sus ultimas fuerzas en pie y arrollaba a todos los piratas que se interponían en el camino entre el Mar y Johnny, solo había un único enemigo que no pudo apartar, el fuego, pero eso no impidió que Johnny con aquel mismo valor que le invadió anteriormente corriera para lanzarse ante las llamas y poder llegar hasta su objetivo, Leah.
Algunos aseguran que en aquel barco murieron todos los tripulantes menos una joven muchacha, contando a Johnny como una de las bajas pues lo siguiente fue el despertar de una “Maquina de la Justicia”. No se sabe como pudo conseguirlo, no se sabe el por que lo consiguió, peroJohnny, carbonizado de manos y rostros acabó en una Isla cercana con una ilesa y salvada Leah... pero los traumas que aquel día recibió, los recuerdos que aquel día creó... hicieron que Johnny Dunn muriera en aquel navío y despertara por encima de su persona otra, con un mismo objetivo, con un mismo futuro... pero sin la esencia humana.
Actualmente y gracias a los científicos, ingenieros y doctores de la Marina esta maquina obtuvo un nombre “Mecha-J” y junto a Leah se dispone a cumplir un sueño, un sueño... y una cacería.
Mar de origen: Isla de Dawn – East Blue.
Pertenencias: Un libro titulado “El niño que quería ser de verdad”.
Botín de partidas: Ninguna.
Sueños: Como Robot quien sabe cuales son sus sueños, ser un niño de verdad, acabar con la raza humana, estar programado “a la ultima”... Pero como humano quizás, y solo quizás, tenga la voluntad de volver a ser algún día el mismo. Algo que comparten los dos sin duda es llevar a cabo el sueño de su anterior Maestro, una Justicia pura.
Referido por: Nadie.
Nivel: 1.
Nombre: Johnny Dunn.
Apodo: Mecha-J.
Edad: 24.
Sexo: Masculino. (Por el Momento.)
Raza: Humano Ciborg.
Rango social: Bajo.
Descripción estilo de lucha:
-Nombre: “Orden”
-Ejecución: Simplemente es el termino que añade delante a la mayoría de sus acciones, suele ser debido a la invención de procesar todo como si de una maquina se tratase y así una vez procesado y activado, ejecutarlo.
Descripción física: De figura alta, rondando los 2 Metros (1,98m). Lo poco humano que le queda a la vista es su característica media melena rubia brillante y bien cuidada, por lo demás su rostro es una mera cascara metálica que cubre todo trozo de carne visible hasta la altura del cuello de su camisa lo cual oculta rastro humano, en un lateral tiene una llave de cuerda simulando una oreja. Hablando de su rostros cabe destacar su boca y ojos, ambos “ficticios”, lo primero es simulado por una parte de metal blanco el cual es móvil simulando a la perfección una boca a la hora de ingerir alimentos, no articulado a la hora de hablar. Lo segundo es sustituido y cubierto por unos faros los cuales no dejan visible el interior. Su vestimenta es prácticamente la misma siempre, simulando los colores de la Marina. Por ultimo están sus manos, brillantes y esbeltas manos roboticas perfectamente diseñadas para un uso completo y cómodo.
- Apariencia:
Antiguamente (Y posiblemente debajo de la máscara queden resquicios de esta apariencia): Era un chico muy atractivo con una barbilla definida y unos fantásticos ojos azules, sus manos eran alargadas, suaves y finas.
- Antigua apariencia:
Descripción psicológica: Es una persona con un cerebro completamente dañado por un trauma, a causa de un accidente en el pasado (Véase Historia) se cree que es un robot de los pies a la cabeza, actuando como tal: procesando ordenes, actuando como una base de datos y... ¿Porque no? Recibiendo algún “cortocircuito mental”. En ocasiones, muy raramente, recibe “brotes” de emociones, o lucidez, lo cual aflora en su interior por unos instantes su “personalidad humana” hasta que el dolor, o bien su locura, hacen que vuelva a su forma de actuar cotidiana.
Gustos: Los Chips, las actualizaciones, la tecnología, los libros de Ciencia Ficción y ejecutar el programa Justicia.exe (Busca y persigue una Justicia justa).
Desagrados: Los pantallazos azules, las caídas de tensión, los errores de programación, la lluvia/mar/agua (Dice que le daña su sistema) y sobretodo el abuso de la ley, la desobediencia y la criminalidad.
Habilidades: Es un atleta tanto en cuerpo como en mente el cual puede simular a la perfección el papel de robot sin notar algún resquicio de humanidad, pese a sus manos metálicas es un buen combatiente con espada lo cual aprovecha su pesado movimiento para ocasionar golpes más devastadores. Es buen cocinero, limpiador y sobretodo un gran lector.
Torpeza: Es bastante torpe a la hora de recomponerse de un ataque lo cual es ocasionado tanto por su simulación como por el peso extra. Es bastante despistado y en muchas ocasiones insensible.
Profesiones: Devastador // Médico // Cocinero.
Flota: Ninguna de momento.
Armas: Judgement: Espada medieval de doble filo con una empuñadura extravagante en la cual esta inscrita la palabra “Justicia”.
- Arma:
Implantes Ciborg:
1.“Mascara de la Condena”: Esta “máscara”, por no nombrarla casco ya que cubre también la parte posterior del cráneo, abarca toda su cabeza hasta la parte más baja del cuello dejando únicamente salir al cabello. Por el momento dispone de dos funciones básicas sin contar la de darle una voz robotica (Con un toque de eco/metalizado) :
- La primera son los ojos, los cuales son unos focos (Similares a los focos de las prisiones).
- La segunda la boca, esta tienes dos funciones: la principal es la de emitir como si de un megáfono se tratara, variando su tonalidad haciendo que esta pueda llegar a ser bastante elevada. La secundaria es la de grabar, o “memorizar”, información para después emitirla (función de grabadora).
2.”Mano Izquierda- Ley”: Mano robótica con la función de lanza-redes, tienes dos tipos de lanzamiento:
- El primero, a corta distancia, consiste en el lanzamiento de sus dedos en forma de red, estos atrapan a su presa y tienen la función de recogerse, entre ellos se despliega las juntas de la red, ideal para atrapar de forma sencilla.
- El segundo, lanzamiento a larga distancia, requiere de recarga ya que solo dispone de un solo lanzamiento a la vez, su muñeca se dobla “abriendo” el conducto de su muñeca, en este se encuentra un “cañón” de potencia media.
3.”Mano Derecha- Orden”: Mano robótica con la función de cañón, rellenando los cargadores situados en la parte baja de la muñeca derecha puede lanzar todo tipo de munición (dentro del limite de obertura de sus dedos) la cual es lanzada al abrirse sus dedos por la falange.
Historia:
"¿Porque?...¿Porque a mi?..." eran las primeras palabras que le pasaron por la cabeza al joven Johnny mientras se encontraba tendido en el suelo. ¿El escenario? Una mansión inmensa adornada por las llamas, el aun derrumbado chico estaba frente a ella con lagrimas en sus ojos sin apartar la vista del violento fuego que estaba consumiendo esa casa.
Sí, así es, era su casa, pero no creáis que aquello era lo que le importaba al chico, ¿Una casa en carbonizada? Al infierno con ella él lo que buscaba era una señal, un movimiento dentro de ella que demostrara que sus padres estaba bien.
La gente solo paraba a cuchichear entre ellos sobre el incidente ocurrido, nadie quería realmente involucrarse. El chico se calló, la gente que allí se encontraba hizo lo mismo viendo la reacción venidera del joven, las violentas llamas no callaron ni cesaron... “AYUDAAAAAAA” Chillo desgarrándose la voz, prolongando lo máximo posible su grito de desesperación e intentando que no cesara.
Una mano golpeo firmemente su hombro apretando este para confortarle – Tranquilo...- Le susurró la voz antes de que el pequeño se desmayara por el sofoco. Despertó en el Hospital de la Ciudad, no había nadie a su lado, no había nadie con él, mala señal...
Pero recobró de nuevo la esperanza cuando giró su cabeza y pudo distinguir al otro lado de la cortina que separaba su cama con la habitación una figura bastante robusta. -¡Papa! - Gritó de forma tan alegre que casi derrama allí mismo de nuevo unas lagrimas, al correr la cortina se paro atónito ante lo que allí se encontró, se trataba de un completo desconocido para él.
Este hombre con unas vestimentas que pudo reconocer a simple vista, las de un marine, estaba allí sentado llorando mientras sostenía una foto con sus manos, el pequeño, asustado, se acercó lentamente para ver la foto que sostenía pues dicho hombre la miraba fijamente mientras sus manos temblorosas la apretaban con una gran fuerza. Colocó su mano en el hombro del desconocido y asomó su rostro por encima del hombro para poder analizar aquello, se trataba de un retrato de su familia: Su madre, su padre y él.
Era una foto que él conocía pues estaba en el recibidor de su casa, aquella casa que se había quemado, antes de poder reaccionar y analizar la situación el desconocido pronunció unas palabras que le llegaron a lo más profundo de su alma – Lo... lo siento...- Ahora ya todo estaba claro... la situación había sido explicada con una simple frase.
Johnny quedó en shock, tembloroso se quedo en pie sin saber que hacer o que decir, pero una vez más todo fue calmado con un gesto, el desconocido fortachón se puso en pie y abrazó al chico con gran fuerza contra su pecho – Llora hijo... lora todo lo que quieras- Y así fue como el chico se pasó abrazado a un desconocido durante horas llorando sin cesar.
Hagamos un salto en la historia ya que la recuperación fue algo lenta, nos encontramos unos años posteriores al accidente, en la casa de huérfanos de la ciudad con un Johnny más fuerte tanto físicamente como de espíritu. Este se encuentra en el comedor del orfanato sirviendo comida a una gran cantidad de chicos y chicas de distintas edades pero más pequeñas que él.
Aquel desconocido del pasado, ahora ya un gran mentor para el ya no tan pequeño Johnny, entró en el comedor con un gran golpe en la puerta mientras soltaba una grandisima carcajada. Johnny con una gran sonrisa en su rostro dejo la cazuela y fue corriendo hasta donde se encontraba el anciano, mientras algunos niños se quejaban de que tenían hambre.
Antes de intercambiar cualquier palabra el viejo golpeó firmemente el hombro del chico y apretó firmemente, aquello reconstituía por completo a Johnny. Invitándole a pasar los dos se sentaron a comer, una vez terminada su tarea de servir a los demás niños, como era habitual cada cierto tiempo entre ellos para que aquel hombre le contara grandes historias sobre la Marina y la Justicia que a Johnny tanto le apasionaban.
Aquella vez fue diferente, solo cabe decir que aquella conversación acabó con un asombro enorme de Johnny, no fue otra si no la de proponerle que se uniera a la Marina como un subordinado suyo. Habia estado esperando el momento de pelear por la Justicia, por los demás desde niño...¡Ah! Se me olvidaba, cabe decir dos cosas muy importante en esta historia: La primera, el padre de Johnny era un gran Marine que en su momento lucho codo con codo con el nuevo maestro de este. Lo segundo, el incendio fue obra claramente de pirata, ¿Que esperabais? Resentidos piratas que odiaban al padre de Johnny por sus años de servicio a la Justicia.
Volviendo al presente, nuestros dos inseparables amigos, maestro y alumno, ya iban camino al barco de el primero en busca de embarcarse en aventuras. Pasaron los meses y otra tripulante se les unió, esto era un alivio pues ser el novato no es nada agradable. Al principio esta nueva tripulante, una chica que parecía venir de alta clase, le pareció algo repelente pero no tardó en cogerle mucho cariño y tratarla como a una hermanda de sangre.
Los dos formaban equipo codo con codo para mantener el barco operativo, no hacían trabajos muy de “riesgo”, pero hacían trabajo necesarios y útiles. Allí comenzó a interesarse por el cuidado y tratamiento de los heridos y por su pasado hobby, la cocina.
Pasaron los meses y esta pareja estaba de los más feliz navegando a su modo pero claro, no todo puede ser paz y amor, no en esta historia. Un cañonazo hizo desestabilizarse a todos los tripulantes del barco y dar la alarma de “Ataque Pirata”, horrorizado Johnny salió de la cocina lo más rápido que pudo hacia su camarote, del cual recogió su espada y sin pensárselo dos veces tomó rumbo a la cubierta.
Todo estaba en llamas... de nuevo las llamas, un shock despertando traumas del pasado hizo bloquear el cuerpo del chico, quedando inmóvil en mitad de un ataque enemigo... Un enemigo no tardo en percatarse de la facilidad de esa muerte, una sangre nueva que se quedaba bloqueada en mitad de su primer abordaje, patético...
El pirata a paso firme y con una sonrisa de oreja a oreja se iba aproximando cada vez más a Johnny, este seguía sin poder mover un musculo de cuerpo, lo contrario, arrojo de forma asustadiza su espada al suelo. - Ya eres mi...- Fueron las palabras del corsario antes de recibir un ataque con un gran martillo de alguien que se encontraba en la espalda del inmóvil chico. De nuevo, una mano se postro en su hombro, apretando fuertemente hizo que este reaccionara de forma milagrosa, con un ágil movimiento recogió su espada y estableció la posición de espalda contra espalda con su maestro.
Todo era un caos, las llamas no se detenían y frente a ellos solo podían ver enemigos, estaban rodeados. Entre todos ellos, los cuales formaron un circulo al rededor de las ultimas personas en la cubierta salió uno mucho más alto y por consecuente más peligroso, era el capotan de esa panda de desgraciados...
Armándose de un orgullo que no debería haber despertado Johnny intento atacar de frente a aquel mastodonte, pensó que si lo derrotaba delante de sus hombre fácilmente se rendirían ante ellos. Lo siguiente que vino fue un martillazo en sus costillas mientras que un inmenso "¡IDIOTA!” hacia eco a lo largo de todo el navío. Tuvo muy mala suerte con el aterrizaje, aunque no era difícil que eso pasara, pues calló en mitad de las llamas apoyando sus manos en mitad de su epicentro para poder levantarse rápidamente, giró lo más veloz que pudo su cuerpo mientras tosía por aquel molesto humo.
Aquello que vio superaba con creces el dolor ocasionado en sus manos, su maestro estaba de rodillas ante aquel gigantesco pirata con una gran estocada que cruzaba todo su cuerpo. Es ese preciso momento, Leah apareció en la cubierta, los dos marines heridos la contemplaron con miedo, pues no debería estar allí. Un unánime “¡HUYE!" gritado por los dos dio por entendido que esa chica era importante para los dos moribundos lo cual aprovechó aquella gigante figura para arrojarla al mar de un puñetazo...
El fuego volvió a inundar la escena pues era lo único que conseguía romper el silencio ocasionado allí, maestro y aprendiz se miraron y aquella mirada... valía más que mil despedidas. -La dejo en tus manos...- Fue lo ultimo que dijo el viejo mientras se ponía con sus ultimas fuerzas en pie y arrollaba a todos los piratas que se interponían en el camino entre el Mar y Johnny, solo había un único enemigo que no pudo apartar, el fuego, pero eso no impidió que Johnny con aquel mismo valor que le invadió anteriormente corriera para lanzarse ante las llamas y poder llegar hasta su objetivo, Leah.
Algunos aseguran que en aquel barco murieron todos los tripulantes menos una joven muchacha, contando a Johnny como una de las bajas pues lo siguiente fue el despertar de una “Maquina de la Justicia”. No se sabe como pudo conseguirlo, no se sabe el por que lo consiguió, peroJohnny, carbonizado de manos y rostros acabó en una Isla cercana con una ilesa y salvada Leah... pero los traumas que aquel día recibió, los recuerdos que aquel día creó... hicieron que Johnny Dunn muriera en aquel navío y despertara por encima de su persona otra, con un mismo objetivo, con un mismo futuro... pero sin la esencia humana.
Actualmente y gracias a los científicos, ingenieros y doctores de la Marina esta maquina obtuvo un nombre “Mecha-J” y junto a Leah se dispone a cumplir un sueño, un sueño... y una cacería.
Mar de origen: Isla de Dawn – East Blue.
Pertenencias: Un libro titulado “El niño que quería ser de verdad”.
Botín de partidas: Ninguna.
Sueños: Como Robot quien sabe cuales son sus sueños, ser un niño de verdad, acabar con la raza humana, estar programado “a la ultima”... Pero como humano quizás, y solo quizás, tenga la voluntad de volver a ser algún día el mismo. Algo que comparten los dos sin duda es llevar a cabo el sueño de su anterior Maestro, una Justicia pura.
Referido por: Nadie.
Invitado
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Gran ficha. Espero ver al bueno de Johny en acción en un futuro, e incluso capturar en equipo a algún pirata. ¡Juntos acabaremos con la maldad del pantallazo azul!
Para poder obtener color deberás realizar el siguiente registro:
Censo del foro
Pon los siguientes datos en tu firma:
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