Explorando una isla tranquila (privado)(pasado) (Luckyroo y Whiteedog)

Estábamos viajando por el Mar del Sur, era un mar donde había bastante tranquilidad, habíamos decidido ir e explorar un poco esas aguas para ver si había alguna cosa interesante. Entonces vimos una isla, se trataba de Baterilla una isla conocida ya que en ella muchos años atrás nació el legendario pirata Portgas D. Ace. Estaba impaciente por ver como era esa isla. Cuando atracamos el barco teníamos que ir todos juntos pero me despiste y me separe del grupo, me había perdido como de costumbre, así que me pude a explorar por mi cuenta. No parecía ser una isla muy grande pero estaba con mi mal sentido de la orientación y que estaba emocionado por ver aquella isla que no sabía por donde iba. Entonces tuve hambre y decidí ponerme a buscar algo de comida. Casualmente me encontré un bar así que decidí entrar y hacer algo de tiempo. Era un bar bastante pequeño, no había mucha gente y no tenía decoración muy llamativa.
- Oye jefe, trae algo de carne y algo para beber. -le dije al camarero.
- Marchando caballero. -me contestó.
Entonces me puse a esperar paciente a que llegará la comida y la bebida.

Tras mucho mirar la distribución de las mesas del bar encontré una mesa más apartada y en la que podía controlar quién se acercaba. Todas las mesas estaban vacías ya que no había ningún cliente a esa hora, pero necesitaba la máxima inimidad posible. Saqué papel y pluma y empecé a escribir:

"Informe de Fontainebleau de las Casas sobre la Isla de Baterilla:
La actividad represiva del Gobierno ha ido disminuyendo por causas desconocidas. También la presencia de la Marina ha descendido últimamente, quizá por estar centrando sus fuerzas en algún otro foco.

Estimo que es uno buen momento para intentar plantar las semillas de la revolución. Sugiero..."


En ese momento entró un cliente. Había visto y charlado con suficientes piratas en mi vida para saber que aquel era uno. De todos modos por si acaso mi viejo instinto me fallaba, eché tinta invisible en el texto y seguidamente  guardé el papel y la pluma.
Me acerqué para asegurarme. Decididamente era un pirata. Igual sabía algo sobre el descenso de las fuerzas opresoras pero debía ser cuidadoso con mis palabras, no quería que pudiese pensar que yo era un agente del gobierno o un marine sin uniforme.

- Vuestra tripulación no ha podido venir en mejor momento Le dije. - Últimamente no se ven demasiados marines ni agentes del gobierno por aquí. Se debe estar montando una buena en algún otro lugar.

Estuve en el bar, llegó la comida bastante rápido así que me puse a comer y beber tranquilamente. No había mucho movimiento en ese bar, sinceramente ya venía con la idea hecha de que el mar del Sur era un mar muy tranquilo donde no solían haber conflictos. De repente note que alguien se acercaba al a barra, no le dí importancia ya que creía que era un cliente que iba a pagar su comida, pero no fue así, escuche una voz por detrás.
- Vuestra tripulación no ha podido venir en mejor momento. Últimamente no se ven demasiados marines ni agentes del gobierno por aquí. Se debe estar montando una buena en algún otro lugar. -dijo esa voz.
Me gire y resulto ser un hombre de cuarenta años de edad más o menos, era bastante alto y por su apariencia física no parecía ser un marine, era calvo y con una barba descuidada.
- Gracias por la información, pero no nos preocupa la armada somos bastante fuertes. -le dije sonriendo.
De todas formas no podía fiarme mucho de aquel hombre tal vez podía estar trabajando en el Gobierno como miembro de algún CP. Tenía que averiguar algo sobre el para estar seguro de que no corría peligro ni yo ni ninguno de la tripulación.
- Creo que no hay gente de la armada porque este mar es muy tranquilo. -le contesté por lo que había dicho.
- De todas formas como sabes que soy pirata? Tu también eres pirata? -le dije para intentar descubrir quien era.

El presunto pirata, que no creo ni que tuviese veinte años,  lógicamente se sorprendió ante tan directa pregunta. Pese a ello la respuesta de aquel joven fue tan cauta como había sido mi pregunta. Cualquier paso en falso en una situación como aquella podía resultar fatal.
-Ningún Marine o agente del gobierno tendría huevos a decir que es un pirata. Decididamente mi instinto había acertado. Sigues en forma "Fonty" Pensé.

¿Pirata yo? Le respondí mientras reía discretamente Me temo que no. Yo también sueño con la libertad, pero  pero pretender sólo la mía es un poco egoísta, ¿No crees...? Le dije. Si ese joven era espabilado ya sabría por dónde iban los tiros. Tampoco podía ir clamando a los cuatro vientos que era un miembro de los revolucionarios. De hecho mi primera misión no era hacer un informe exhaustivo sobre la situación de la isla. Aquello era secundario. Lo principal era conseguir volver de allí sin una recompensa sobre mi cabeza. La discreción nos daba mucha fuerza. Ya llamaba un poco la atención por mi tamaño como para que encima tener mi cara en todos los pósters de los periódicos.

Ahora que creo que ha quedado más o menos claro que ninguno de nosotros somos perros represores... Añadí Tú no sabrás la causa de la poca presencia de Marines y agentes del gobierno por aquí ¿No?

Quizá era demasiado exigir a un jovenzuelo menor de edad que me diese la información que yo mismo debía obtener pero desde mi punto de vista un revolucionario era tan bueno como sus informadores lo eran.

Ese hombre me contesto que no era un pirata pero también me dijo que soñaba con la libertad pero no en la de el solo, había conocido ya a gente de la revolución con algún lema parecido sin duda alguna este hombre pertenecía a la revolución.
- Me alegra saber que no eres del Gobierno, habíamos venido a este mar a buscar algo de paz. -le dije sonriendo.
Entonces seguí comiendo y bebiendo pero el seguía interesado en saber porque no había movimiento de la armada por aquellas aguas, me preguntaba porque estaría tan interesado parecía que quisiera saberlo como si fuera un asunto de mucha importancia.
- Veras, este mar es muy tranquilos y no suelen pasar cosas graves, así que esa es la razón por la que no hay gente de la armada aquí, en Grand Line hacen mas falta. -le explique al hombre revolucionario.
Me entro curiosidad por saber que tenía planeado hacer con esa información.
- Por que tienes tanta curiosidad? No tendrás planeado atacar algún poblado, verdad? -le pregunte con bastante curiosidad mientras se me acaba la comida del plato.

Las explicaciones del joven pirata, aunque eran totalmente sinceras y veraces, no me convencían. O como mínimo no coincidían con los informes previos que teníamos sobre aquella zona. Es cierto que aquella zona no era considerada considerada como potencialmente peligrosa según nuestros infiltrados en la marina pero aún así se esperaba que hubiese un quince por ciento más de vigilancia. Pero en fin, si no podía descubrir dónde estaban, me conformaría con informar sobre lo que había visto.

-¿Atacar un poblado? Le dije con una sonrisa de sorpresa. -No, no. Jejeje. No se puede plantar una semilla de revolución a cañonazos. Mi misión es puramente de recolección de información.

Levanté la mano al tabernero y pedí otra jarra de cerveza. Vaya una misión más plácida me había tocado. Al fin y al cabo era un recién llegado.

-Por cierto, mi nombre es Fontainebleau de las Casas. Sí, es muy largo. Puedes llamarme Monje o Fonty.. Tras esto le tendí la mano en señal de amistad puesto que no veía maldad en los ojos de aquel joven pirata.

El hombre no parecía muy convencido de mi explicación sobre la escasez de gente de la armada por estas aguas, pero finalmente parecía haberlo aceptado, ya que no creo que hubiera otra explicación. De todas formas para gente como nosotros era una buena noticia ya que estábamos acostumbrados a que nos persiguieran los de la armada. El hombre me dio una pequeña explicación de que no quería la información para atacar algún pueblo ya que la revolución no actúa así.
Parecía que me había ganado la confianza del hombre, así que decidió presentarse. Dijo que su nombre era Fontainebleau de las Casas, pero podía abreviar con Fonty o llamarle el Monje. Tras decirme su nombre me estrecho su mano para saludarme con lo que yo hice lo mismo.
- Encantado, mi nombre es Løuis Toby, pero me estoy haciendo conocer como Whitedog en los mares. - le dije mientras nos saludábamos.
Tenía confianza en este hombre, ya que el haber conocido a otros revolucionarios ya sabía que ellos no son mala gente aunque su único enemigo sea el gobierno, aunque yo no podía hablar mucho de eso ya que yo era pirata.
- Bueno Fonty, vienes de muy lejos, o eres de estas aguas? -le dije por conocernos mejor.

Cortesmente el joven pirata aceptó el encaje de manos. Se notaba que era un chico acostumbrado a tratar a la gente. Finalmbente obtuve un nombre: Løuis Toby. Aquel nombre no me era desconocido, me sonaba de algo... Pero no podía recordar de qué...

-Soy de este mar, es por eso que estoy por aquí recogiendo información. Y también es por ello que sé en quién puedo confiar en esta isla: en personas como él Dije señalando al camarero. - De todos modos ahora necesito saber si hay descontento entre la gente con el gobierno mundi...
De repente me acordé:
-Josp Toby!!! Pero no puede ser!! Ese viejo verde no ha podido tener un hijo a esta edad... Dios debe de tener mil años ya...

Cuánto tiempo haría de eso? Veinte años? Veinticinco quizá?  De todos modos ni siquiera estaba seguro de que el chico que estaba frente a mí fuese el hijo de aquel viejo bribón... Pero ya no tenía más tiempo para estar allí.  

-Hijo, con gusto te contaría cosas sobre Josp Toby si es que tuviese algo que ver contigo, pero por desgracia tengo que seguir trabajando. Si quisieras acompañarme, no tendría ningún problema. No sé si sabrás defenderte, pero en principio no es una tarea peligrosa en absoluto. Le dije al Pirata mientras hacía un gesto al tabernero para que me apuntase las consumiciones.

Estaba bastante contento, había hecho un nuevo amigo y eso siempre es un motivo de celebración ya que tener amistades en el mar siempre ayuda. Me respondió a mi pregunta de si donde era, dijo que era de estas aguas del Mar del Sur. Entonces note una extraña sensación en ese hombre, me preguntaba que le pasaba, en que estaría pasando por la cabeza, igual se le habría olvidado hacer algo. Entonces dijo algo que me impacto.
- Hijo, con gusto te contaría cosas sobre Josp Toby si es que tuviese algo que ver contigo, pero por desgracia tengo que seguir trabajando. Si quisieras acompañarme, no tendría ningún problema. No sé si sabrás defenderte, pero en principio no es una tarea peligrosa en absoluto. -dijo Fonty.
- Como dices? Conoces a mi abuelo? -dije yo muy impresionado.
- Te ayudo si quieres en tu trabajo. Que sabes de el? -seguía yo con mi emoción incontrolada.
Entonces nos dirijamos hacía fuera mientras yo estaba interesado por saber que relación tenía ese hombre con mi abuelo, no sabía si lo había conocido antes o después de que me criara pero no importaba cualquier información sobre el abuelo era muy importante para mí. Al fin y al cabo tenía ganas de verle ya hace cuatro años que nos separamos y no sabía nada sobre el, me preguntaba si ese hombre podría saber en que parte de el mundo estaría.

El pirata resultó ser nieto de Josp Toby. Claro! Así sí tenía sentido todo... No se me había ocurrido, me centré directamente en que iba a ser el hijo... Aquello tenía mucha más lógica.

-Antes de que te emociones demasiado Dije al joven  -Te diré que tu abuelo y yo no fuimos los mejores amigos del mundo, ni luchamos juntos, ni nos salvamos la vida el uno al otro ni nada por el estilo. Te digo todo esto porque te veo un poco emocionado.

Indiqué al joven Toby que me siguiese por una calle con algunas tiendas. No era más que una pequeña zona comercial, con no más de una treintena de personas, pero era mejor empezar a observar una zona más o menos tranquila que exponerse en zonas más ajetreadas acompañado de un pirata que ni siquiera sabía si tenía recompensa.

-La tarea es fácil, tenemos que observar simplemente si hay descontento o injusticias provocadas por el gobierno mundial. Situaciones de hambruna, desnutrición, explotación o crímenes políticos. Le dije mientras me señalaba los ojos y los oídos  Todo parecía correcto por allí, la gente hacía vida más o menos normal y las conversaciones no podían ser más banales.  Quizá lo mejor iba a ser ir a los barrios bajos o a las zonas pobres. Volví a indicarle al nieto de Josp Toby que me siguiese.

-Con respecto a Josp Toby, defendí a uno de sus compañeros de tripulación a quien se había acusado injustamente de robar a un noble. El noble había perdido el dinero a las cartas y exigió a las autoridades que se detuviese y ejecutase a ese hombre y se le devolviese su dinero.  Cuando Toby se enteró quiso degollar al noble por infame y mentiroso. No era un hombre violento pero no soportaba ese tipo de cosas. Fui yo quien le convenció de no matarlo. Ya había quedado todo solucionado, el noble terminó confesando ante la falta de pruebas, además casualmente conocía a los tipos contra los que había jugado y el nakama de tu abuelo no pudo ser condenado. Durante las siguientes seis o siete semanas que estuvo  su tripulación en mi Isla pasé bastante tiempo con ellos bebiendo y pasándolo bien. REconozco que poco después  me sorprendió la fama de pirata temido que tenía  

Habíamos llegado a la zona pobre de Baterilla.

Lo primero que me dijo sobre el abuelo fue que no eran ni los mejores amigos, ni se habían salvado ni nada de eso, llegue a pensar que igual se había enfrentado al abuelo, pero no creo, los revolucionarios y los piratas no deberían luchar entre ellos, y el abuelo no era de los que pelea sin algún motivo importante.
Después de haberme dicho esto de el abuelo y de que yo sacara mis conclusiones, me explicó cual era la faena, y era ver si el Gobierno hacía alguna injusticia. Como en aquella zona no había movimiento, nos fuimos a la zona pobre.
Entonces me contó la historia de como conoció a el abuelo, era una historia muy emocionante ya que Fonty salvó a un camarada de mi abuelo de ser condenado injustamente.
- Entonces eras amigo de mi abuelo, es normal el es muy amigable como yo pero la única gente que le odia es la que no lo conoce. -le conté a Fonty, aunque no creo le dijera nada nuevo.
Entonces a la derecha vi de lejos a uno de la armada, no sabía que estaría haciendo pero si quería ayudar a Fonty tenía que decírselo.
- Fonty al final de la calle de la derecha hay un hombre de la armada. -le advertí.

-Tu abuelo y yo habíamos decido tomar estilos de vida distintos, yo tenía la semilla de la revolución en el corazón, pese a que en aquel entonces no pertenecía... bueno, ya sabes a qué me refiero. Le dije mientras con casi toda seguridad ponía cara de nostálgico, la cara de aquel que recuerda tiempos en los que fue feliz. - Pero aún así había una gran admiración mutua, los dos éramos buenos en lo que hacíamos. Fueron unas semanas muy divertidas.

El joven Toby pareció percatarse de la presencia de alguien que pertenecía a la armada. A falta de saber qué tipo de rango tenía, no había motivos para ponerse nervioso. Sólo había una pequeña cosa que podría precipitar los acontecimientos.

- Si no tienes recompensa sobre tu cabeza no pasará nada. Si viniera y nos Preguntase algo, somos padre e hijo de vacaciones y nos hemos perdido. Le expliqué. -De lo contrario, gírate e intenta que no te vea la cara, haz como que te atas los zapatos o algo. Intentaremos seguirle a ver qué tipo de cosas suceden por estos lares. En teoría la gente más desfavorecida se encuentra aquí.

Miré disimuladamente al marine y me quedé más tranquilo. Conocía por foto a los altos mandos de la institución y aquel hombre debía tener rango de capitán o inferior.

Marine:

Cuando le dije a Fonty lo de la presencia de el marine se puso a observar a ver de que rango, parecía que quería ser discreto me dijo que si tenía recompensa me girara y disimulara, y si no tenía recompensa que me hiciera pasar por su hijo y que había que simular que estábamos de vacaciones.
- Tranquilo no tengo recompensa, pero reconocen mi apellido y mi apodo. Así que no me nombres mientras este cerca alguno de la armada. -le advertí.
Entonces seguimos adelante, intente identificar el rango de el marine, pero para que molestarme no sabía si quiera que rangos habían, tenía que empezar a tomarme algo en serio lo de controlar un poco mas a la armada.
- Ahora que lo pienso, tu tienes recompensa? -le pregunte con un tono de voz baja para ser algo más discreto.
Entonces estábamos ya cerca del marine, el se fijo en nosotros nos miraba fijamente, tenía que hacer algo, como esta vez iba con Fonty y no iba con la banda no era necesario pelear.
-Mira que te orientas mal papa, la próxima vez me voy de vacaciones con mama. -dije haciendo algo de teatro a ver si colaba.

Me pareció  muy lógico el no llamar a Toby por su nombre, al fin y al cabo no me extrañaría que aquel viejo bribón de su abuelo hubiese cogido fama entre la marina. La discreción, mi punto débil iba a ser fundamental.

-Tal y como te dije en el bar, no tengo recompensa y es crucial que siga así. Respondí en voz baja al joven Toby. Incluso yo estaba extrañado por estar hablando casi susurrando. No era algo que hiciese muy a menudo. El ser una persona tan arrabalera me podía traer problemas y ese momento era una de esas veces.

Tras esto me di cuenta que el marine puso su vista en nosotros. Por lo visto no fui el único en comprobarlo, el joven pirata echó mano de la improvisación y nos metió a ambos en el papel de padre e hijo tal y como le había sugerido.

- Sí, ha sido culpa mía, pero no te preocupes, quizá ese joven  marine pueda ayudarnos Le respondí mientras caminaba hacia el marine.

- Lo siento, pero no pueden estar aquí. Esta zona es peligrosa Comentó el marine. Cada vez tenía más claro que carecía de rango importante.

- Lo sentimos mucho oficial. El caso es que en ningún momento nos ha dado la impresión de zona peligrosa. ¿Suecede algo?

- Lo típico, alguna pelea callejera y algún que otro alboroto y disturbio Dijo con desprecio.

Eso me interesaba, miré a Toby indicándole que habría que intentar indagar por ahí.  ¿Eran revueltas populares por una mejora en sus condiciones de vida o simples peleas de bandas o algo por el estilo?

Fonty siguió con la falsa, pero el hombre de la armada no nos dejo pasar a causa de que había alguna pelea y algún alboroto y disturbio. Fonty me indicó que quería pasar entonces me puse a pensar en algo rápido.
- Aiba! Mira donde esta Kyle si sigue adelante se meterá en la zona de los disturbios, desde luego tengo un hermano de lo más despistado. -dije intentando fingir preocupación por alguien que no existía.
Entonces el marine parecía preocupado por el "hermano" Kyle y parecía dispuesto a meterse en la zona de los disturbios.
- No se meta en esa zona iremos nosotros es nuestra responsabilidad como sus familiares, además lo sacamos y nos vamos ya, no tardamos nada. -intente convencer al marine.
Nos dio permiso para entrar ya que no quería abandonar su puesto y que alguien mas entrara pero que fuéramos rápidos y sin meternos en líos. Era nuestra oportunidad así que nos colamos y fuimos directos a buscar los disturbios, en un principio parecía una zona muy tranquila, pero conforme fuimos avanzando se oían gritos y algún que otro disparo.
Se que no tiene nada que ver, pero eres a la primera persona que llamó papa. -dije riéndome mientras seguíamos avanzando a los problemas.

El joven demostró recursos y finalmente consiguió que no s dejasen pasar.

-Bien hecho. Pero ni se te ocurra usar esos trucos con gente de más rango, no picarán tan fácilmente. Le dije, de todos modos, el joven Toby pintaba bien. Sòlo era cuestión de que fuese cogiendo experiencia.

- Calculo que tendremos unos diez, quince como mucho, minutos antes de que el marine crea que nos ha pasado algo y pida ayuda o algo para buscarnos. Eso no nos interesa. Además, debemos salir con otro "hermano" o con una excusa. Añadí.

Empezamos a andar por las calles del barrio bajo pero sorprendentemente estaba todo tranquilo. Ni rastro de los altercados y perturbaciones que había citado el marine.  

"No hay marines casi en la Isla, ni vida en la zona pobre..."  Pensé.

Miré el reloj, apenas habían pasado dos minutos desde que habíamos empezado a mirar la zona.  La mayoría de las casas tenía las paredes completamente llenas de humedades y algunas partes en ruinas. NO había apenas tiendas y en las pocas que había no se contemplaban indicios de saqueos ni robos.

- Busquemos a tu hermano en esa taberna. Le sugerí. -Entraremos y nos sentaremos a observar y a escuchar durante unos cinco minutos. Después podremos hacer alguna pregunta discreta acerca de aquello que  hayamos oído

El bar estaba en mejores condiciones de las que podría uno esperar. Una larga barra al fondo presidía el lugar. Tras ella había un camarero más o menos de mi edad. A lo largo de la sala, de unos doscientos metros cuadrados se podían encontrar varios grupos de mesas y sillas. Sonaban canciones de marineros en la vieja gramola. Aquello podría dificultar nuestra escucha.

Fuimos por la calle observando, no había pinta de parecer que hubiesen disturbios, entonces Fonty dijo de entrar a la taberna a encontrar al falso hermano y a escuchar, Fonty se preocupaba porque había música de fondo y esto dificultaría el escuchar los rumores.
- Usare mis habilidades de fruta del diablo, tengo los sentidos de un perro así que puedo oír mejor que cualquier persona. -le dije con un tono de voz bajo para no levantar sospechas.
Nos sentamos en una mesa, el servicio parecía lento, así que cerré los ojos y me concentre en los oídos.
- Dicen que esta noche hay partida de pocker, habrá que ir a sacar algún dinerillo. -escuche en una de las mesas de nuestra izquierda. Esto sin duda no nos interesaba. Escuche mas conversaciones pero ninguna me interesaba hasta que escuche una mesa de el fondo donde los tipos que habían parecían muy siniestros.
- Dentro de una hora vamos a desalojar, toda esta zona, hemos hecho un pacto con la armada y nos van a dar un buen botín. -les escuche.
Sin duda esos tipos habían hecho un trato ilegal con la armada, así que se lo conté todo a Fonty.

El joven Toby me sorprendió: resultó ser también un usuario de Akuma no mi.

"¿Así que eres un zoan, eh?"  Pensé.

En un arrebato de confianza en la juventud decidí no usar mi propia akuma no mi  y tener fe el chico. Su predisposición a ayudarme era digna de admirar.
El pirata resultó ser de gran utilidad. Nuevamente mi instinto me había llevado a tomar la decisión adecuada. Me fue transmitiendo todo lo que oía.  

-Una hora, ¿Eh? Le dije en voz lo más bajo que podía. Era más duro para mí susurrar que enfrentarme a marines y agentes del gobierno.  

Me levanté y enseñé dos dedos al camarero para que nos trajese dos cervezas. Luego miré a las mesas y me aseguré que nadie estaba prestando atención a la nuestra.

-Nos las beberemos deprisa y saldremos del barrio tal y como habíamos previsto. Llegaremos antes del cuarto de hora previsto. El camarero trajo rápidamente las cervezas y le dí unas monedas. Me la bebí casi de un trago y cambié el tono de voz a uno más serio.
-En una hora no puedo avisar a mis superiores y que éstos lleguen hasta aquí. Me tocará actuar solo. Vamos a tener que separarnos. No quiero meterte en líos chico, sé cómo las gasta tu abuelo...

Cuando informé a Fonty el pidió dos cervezas, el camarero las trajo rápidamente. Fonty decía que actuaría solo ya que no quería meterme en líos por que sabía como se las arreglaría mi abuelo y además no tenía tiempo para que llegarán sus superiores. Cuando volvió a nombrar el abuelo se me ocurrió que tenía que actuar con el con mas razón.
- No vas a ir solo, te voy a acompañar. Soy un pirata, y cuando eres un pirata significa que estas listo para morir en cualquier momento. Además si salimos en las noticias piensa que contento se pondrá mi abuelo de ver que los dos estamos bien. -le dije con la idea de que lucharía con el.

Entonces nos levantamos y nos dirigimos a buscar por donde se iba a empezar el desalojo de aquellos rufianes que había contratado la armada, pensé que llevarían algún orden, tal vez empezarían por las afueras y fueran al centro, o tal vez al revés. Entonces vi a un hombre muy sospechoso que se dirigía hacía una de las afueras. Le dije a Fonty de seguirlo disimulando ya que podría ser uno de los rufianes del bar.
- Hay que pensar como actuar, a saber cuantos serán y además no sabemos si la armada vendrá, hay que ser más astutos que ellos. -le dije mientras yo pensaba en algún plan.

En el fondo me lo imaginaba, el joven Toby se negó a abandonar la tarea en mitad de la acción.

-Paso de discutir contigo. Si quieres vente. Tú sabrás lo que haces... Le dije convencido en parte por el brillo y la vitalidad de sus ojos. -Pero olvídate de esa estupidez de salir en las noticias. Hay que ser discretos.

Toby advirtió a un tipo sospechoso y propuso establecer un plan de acción. Lamentablemente nos quedábamos sin tiempo antes de que empezaran a sospechar y encima íbamos a salir de allí sin el "hijo" perdido.

-Creo que lo mejor será abandonar "teóricamente" la zona pero a la vez  averiguar si hay alguna entrada sin controles por la que podamos acceder líbremente. De todos modos intenta recordar la cara y la forma de gesticular de esa persona. Nos vendrá bien luego. Le comenté. Había que evitar sospechas a toda costa. -Dentro de cincuenta minutos estaríamos dentro otra vez. Con un poco de suerte el turno de guardia cambiará y habrá otro soldado raso al que puedas intentar convencer o con un poco de suerte habremos descubierto un sitio por donde colarnos.

Nos dirigimos hacia el lugar en el que aquel hombre hacía guardia. Había que inventar una buena excusa. Afortunadamente, al salir era otra persona la que se encontraba allí. Habíamos entra casualmente en el margen horario en el que se cambiaba la vigilancia. Di las buenas noches al nuevo guardia para que se quedase con nuestras caras para cuando volviésemos dentro de cincuenta minutos.

Fonty dijo que lo mejor sería abandonar temporalmente la zona, también dijo de recordar todo sobre el tipo sospechoso, eso yo no lo necesitaba ya que con mi fruta del diablo podía tener el rastro de cualquier persona. Cuando llegamos a donde estaba el guardia al que engañamos con que estábamos de viaje, pero afortunadamente había otro guardia, habíamos llegado en el cambio de turno.

Entonces recordé que los tipos del bar habían hecho un pacto con la armada, eso me hizo pensar es que habría algún sitio discreto donde pudieron hacer ese pacto ilegal, ya que si pillan a la armada haciendo cosas de estas estarían en un buen aprieto. Pero pensé que alguien de la armada y un delincuente juntos nunca pasaría inadvertido.
- Hay que encontrar donde estaba el guardia de antes. -le dije a Fonty.

Por suerte me quede con su rastro así que use mi forma de animal y me puse a rastrear donde estaría. No tarde mucho en encontrarlo, me puse a seguirlo rápidamente convencido de que mi idea funcionara.

Era curioso y a la vez gracioso ver cómo rastreaba el joven Toby al guardia del turno anterior, al parecer mi improvisado compañero de misión pensaba que el contacto entre aquellos rufianes y la marina era el citado marine. Verdaderamente había resultado ser de mucha utilidad aunque aún quedaba un pequeño tema que tenía que dejar claro.

-Sé que te parecerá egoísta lo que voy a decirte  Empecé a decirle -Pero para la misión es más prioritario el que ambos, especialmente yo quedemos sin recompensa que ayudar a la gente. Es decir, si para ayudar a esa gente que en teoría quieren echar nos tenemos que arriesgar a ser "fichados" por la marina daremos marcha atrás. Son órdenes incuestionables de mis superiores. Los primeros días de unirme a la revolución hubiese pensado lo que seguramente pensaría el joven Toby en ese momento, pero ahora lo veía todo más claro y entendía perfectamente el porqué de aquella petición por parte de mis superiores.

El rastreo de aquel curioso hombre-perro nos llevó a una de las casas menos deterioradas de la zona. De hecho su entereza y estado destacaba entre las casas de aquella manzana.

"No son muy discretos" Pensé.  Entonces me señalé los oídos para que el Joven Toby agudizase su sentido auditivo a ver qué podía escuchar.

Yo mientras tanto y de forma todo lo sigilosa que un agorero como yo podía conseguir ser, decidí dar una pequeña y rápida vuelta por los alrededores en busca de otros marines. Todo despejado. Así se lo hice saber al nuevo pirata Toby con un gesto al volver a su lado. Ahora era tiempo de que me contase qué había escuchado él.

Mientras rastreaba aquel hombre de la armada Fonty dijo que no quería arriesgarse a tener recompensa, así que en caso de que nos fichara la armada daríamos un paso atrás. Sinceramente no pensaba que nos pusieran recompensa por hacer algo así, el gobierno no le pone recompensa a cualquiera, y menos por impedir esa misión un tanto ilegal.
- Estate tranquilo, no nos van a poner recompensa por esto. -le dije yo con tranquilidad.

Al fin llegamos a la casa donde parecían estar los marines, Fonty fue a mirar si habían marines alrededor. Mientras tanto yo me quede escuchando a aquellos Marines, parecía que el jefe de la operación era un tal Bili, decían que era un sargento mayor aunque no tenía muy claro que era eso.

Cuando llego Fonty me hizo un gesto de que la zona estaba despejada de marines, quería saber lo que había escuchado así que le dije lo de ese Bili y de que era un sargento mayor con la idea de que el sabría perfectamente lo que era ese sargento mayor y si era un rango muy importante o no.

- Creo que deberías ir familiarizándote con la jerarquía de la Marina, chico. Le dije al joven pirata Toby. -Para que te hagas una idea, un Sargento mayor en teoría no debería ser problema para una persona con una zoan bastante poderosa. Lamentablmente no tengo tiempo para hablarte más sobre cómo se organiza la Marina.

El problema ahora era que esa gente únicamente se había reunido y eso, gracias al cielo no era ningún delito. No teníamos pruebas contra ellos para intentar hacer nada. Que el marine de mayor rango fuese un sargento mayor me reconfortaba ya que los dos solos deberíamos ser capaces de boicotearlos sin que se enteraran. Sin embargo me preocupaba que la Marina y el Gobierno Mundial estuviese centrando sus fuerzas en algún otro lugar.
"Sólo espero que sea en un sitio en el que se encuentre alguno de mis superiores más capacitados..." Pensé.

-Ahora que sabemos que no hay nadie reforzando el perímetro, céntrate en seguir escuchando. No tenemos nada contra ellos de momento.

Necesitábamos más información y el chico perro era el más capacitado para hacerlo.

Según la breve explicación de Fonty, un sargento mayor no daría problema alguno para nosotros. Me dijo que aún no teníamos nada que los pudiera culpar, así que me limite a seguir escuchando con mis sentidos de perro.

- A ver, hay que disimular todo lo que podamos. No podemos permitirnos que nuestros superiores se enteren de esto. Además esos rufianes idiotas lo van a hacer todo por un diez por ciento de lo que vamos a ganar. -dijo una de las voces que parecía ser la de el cabeza de la operación.
- Entendido Sargento! -dijeron a la vez como unas diez voces diferentes.

No había duda de que ese sargento se traía algo entre manos y no podían enterarse sus superiores de la armada. Me preguntaba que negocio iban a hacerse con aquellas casas, pero antes de sacar conclusiones tenía que contarle esta información a Fonty.
- Te parece suficiente información? -le pregunte con esperanza de recibir una respuesta afirmativa.