Buscando información, pelea [Dave, Karl & Dan](Pasive Voice)

Escenario: Marineford
Isla inmensa donde se encuentra el Cuartel General de la Marina, se compone por un pueblo en toda la isla y lsede principal de La Marina. Aquí habitan los rangos más altos de la organización militar junto a sus familiares.

Turnos: Dan - Dave - Karl - Dan - Dave - Karl

Me tocaba esta vez hacer papeleos, Arabel me había mandado hacer un informe sobre la misión anterior y del objeto extraño que nos encontramos. Era un objeto muy raro, no paraba de mirarlo, me quedaba bobo cuando lo miraba un segundo, era como si me hipnotizase, al ver que me había pasado varias veces lo tapé con un trapo que había en la mesa.

En ese momento entró un marine preguntándome por el informe, le dije que me faltaba poco, cuando en realidad había empezado. El marine asintió y se fue, cerrando la puerta de madera. Volví a mi trabajo, empecé a escribir todo lo que nos había empezado, desde que entramos en la isla hasta que salimos de ella con el objeto, la verdad era interesante ese trabajo, estaba bastante entretenido.

El primer informe era rápido y fácil, al terminar el primer informe me puse con el segundo, empezando por la caracterización física del objeto, el problema era ver sus características de poder, si tenía no claro, eso me parecía algo menos entretenido, le tenía algo de miedo. Empecé a escribir un poco y lo dejé, decidí seguirlo después. Salí de la habitación y me fui a dar una vuelta por el pueblo.

Estos días me centraba solo en obtener información sobre aquellos piratas, quería ser de ayuda al grupo que se encargaba del caso de los científicos, aunque no tenía intención decirles ninguna información, ya que no confiaba plenamente en ellos, solo confiaba en Dan.

Aunque encontrase información valiosa, me procupaba por no saber como iba la misión. Ese mismo día iba a ir a otra isla, pero la preocupación me hizo ir a Marineford, donde se encontraría Dan y su grupo. Dejé el barco amarrado, empecé a caminar por allí, hasta llegar al pueblo donde vivían los familiares de los marines.

Todo estaba lleno de gente, de marines e incluso de un alto mando. En verdad me había perdido por todo aquel lugar infernal, me deprimía un poco estar allí. Por el camino, algunos marines se postraron delante mí y me preguntaron cosas.

Marines: ¿Te podemos ayudar en algo? ¿Te has perdido?

Les puse cara de no tener muchos amigos (cosa que era cierta), les dije que si que me había perdido, no encontraba el cuartel general.

Marines: Te podemos acompañar, ¿a quien buscas?
Dave: Busco a mi amigo Dan Benett, quería preguntarle una cosa.
Marines: No lo conocemos, lo siento, pero te podemos llevar a algún alto mando, posiblemente te puedan ayudar.
Dave: Muchas gracias.

Karl se hallaba en aquel momento en Marineford. Pocas veces había ido al cuartel general de los marines, era un lugar realmente impresionante y de muchas posibilidades para alguien espabilado y de pocos escrúpulos como Quimera. La corrupción era inherente a la burocracia, y la burocracia era necesaria para mantener la estructura interna de la Marina. Para un oficial corrupto como él, era un paraíso. Sin embargo no solía ir porque aunque aumentaban las posibilidades de hacer fortuna, también el riesgo, y él era precavido. Además al ser su área de actuación habitual un mar periférico como el East Blue, no solía verse obligado a ir a Marineford. Respondía ante la autoridad naval de Loguetown habitualmente. Otro detalle que al marine le gustaba de Loguetown es que había menos abundancia de altos rangos y allí era como un pez gordo en un estanque pequeño. En Marineford no era nadie. Las historias de sus hazañas habían llegado hasta allí, y su valía era reconocida. Pero la fama no lo era tanto. Un simple Oficial Técnico con algo de gloria a sus espaldas no era algo impresionante comparado con la gran cantidad de Vicealmirantes, Capitanes, Comodoros, Contraalmirantes y demás rangos elevados presentes en el cuartel.

Su motivo para estar allí era dar parte de sus últimas actividades y formalizar su vuelta al servicio tras dos años desaparecido. Además así acompañaba a su protegido, Dan Benett, el cual tenía asuntos pendientes en el cuartel general. Karl mucho se temía que ahora que pertenecía a la Unidad Oceánica iba a pasar muchas horas en aquella isla más a menudo de lo que hubiese deseado. Suspiró. Estaba dando una vuelta por el pueblo tras varias horas visitando oficinas y tras aguantar la reprimenda del Almirante Irvin la Vega en persona. Karl aguantó con entereza mientras este le decía que su acto podía considerarse casi una traición. Había solicitado un permiso de seis meses y no había aparecido hasta dos años y varios meses después. Por ello la Marina del East Blue había perdido a una de sus principales bazas y los piratas habían vuelto a aumentar. Lo que más le molestaba era que aquel Irvin era más joven que él. "Algún día te destronaré. Me haré más fuerte y seré Almirante."

Reflexionaba sobre esto cuando escuchó a alguien mencionar que buscaba a Dan Benett. Se acercó al chico que hablaba con varios reclutas y cabos. Estos, al ver a Karl hicieron el saludo militar y permanecieron firmes. Entre los rangos más bajos si que había un gran respeto hacia el famoso ex-capitán de la Brigada Disciplinaria. Su misma presencia ya lo infundía. Era un hombre alto y muy corpulento, con una barba espesa y de color castaño que le cubría el contorno de la cara. Llevaba el pelo peinado hacia atrás, y la chaqueta de oficial con el distintivo que indicaba su rango. Se fijó en el joven que había preguntado por Dan.

- Decidme, ¿por qué buscáis a Dan Benett? Si así lo queréis, os llevaré ante él, civil.

El pueblo era maravilloso, edificaciones bien construidas de primera calidad, el ambiente que se respiraba era agradable, la gente solía salir a dar una vuelta por el pueblo en días soleados o en días no problemáticos, ya que bastante había sufrido el cuartel general. Por el camino recordé que me habían dicho cosas importantes, serían importantes, pero mucho menos que la importancia que le daba al caso de los científicos, donde no sabía nada de el tema, podría ser que no supiesen nada o que no les apetecía contármelo, me iba a enterar de todas maneras.

Todo era serenidad y tranquilidad, la gente hasta te saludaba, te conocían, era como si estubiese en un pueblo pequeño, una aldea, donde todo el mundo se conoce. El día era soleado y algo caluroso, no era habitual ese calor en estas fechas, pero que se le iba a hacer, no conocía ningua técnica para cambiar el tiempo, ni tampoco a nadie que pudiese cambiar el tiempo a placer, podría existir, pero no era algo que tenía que investigar de inmediato.

El pueblo tenía muchas calles que conectaban con otras, en verdad de todo el tiempo que llevaba en Marineford como marine aún me perdía por el pueblo, era estresante cuando me pasaba eso. Por mitad del camino, en otra calle que se encontraba más alante pude ver a Karl y a Dave, me sorprendió la visita de Dave a este lugar, ya que no le gustaban mucho los marines y al tener a Karl delante no iba a ser bueno que lo tubiese mucho tiempo ahí.

Al verlos no dudé ningún momento  en acercarme, todo iba normal, hasta que llegué a un trozo donde no podía seguir, era como si un muro invisible hubiese aparecido ahí por arte de magia. Miré por otro lado por donde salir, era igual, no se podía pasar, miré a mi alrededor, la gente seguía haciendo sus cosas, parecía que no se habían dado cuenta de que estaban encerrados, en ese momento...

¿?: No podrás escapar de aquí joven, eres mi presa y me vas a ayudar, quieras o no.

Aquellos marines me iban a acompañar cuando de repente un tipo apareció, los dos marines saludaron. Aquel tipo parecía poderoso, me daban escalofríos, y era lo que faltaba, tener a un supuesto tipo con un cargo alto delante mía, odiaba esas escenas, pero tenía que comportarme.

- Decidme, ¿por qué buscáis a Dan Benett? Si así lo queréis, os llevaré ante él, civil.

Ese tipo parecía conocer y saber donde se encontraba Dan, además no quería darle información sobre la misión.

Dave: Dan es mi amigo y quiero encontrarlo para preguntarle unas cosas nuestras.

Miraba con desprecio a ese hombre, no me gustaba nada, por sus pintas parecía el típico matón de barrio. Los dos marines se fueron sin decir nada, seguramente tendrían algo importante que hacer que estar cumpliendo órdenes de un tiparraco como ese.

En aquel momento escuché una voz, era una voz que me resultaba familiar, pero no llegaba a recordar. Miré por todos lados con cara de preocupación, no sabía de donde venía esa voz, pero parecía que solo la escuchaba yo, como si me hablasen a través de la mente: "No podrás escapar de aquí joven, eres mi presa y me vas a ayudar, quieras o no".

No sabía si eso era obra de aquel marine o de un maniático, tenía que averiguarlo lo antes posible. En ese momento me giré al marine y empecé a hablarle con la misma cara de antes.

Dave: Pasa algo raro en la isla, acabo de escuchar una voz, no se donde proviene, pero tengo un mal presentimiento.

Dejé de mirarlo y caminé un poco hacia el norte, al poco tiempo me choqué con algo, como una prisión invisible, un muro, me caí al suelo, mi cara era totalmente de asombro, para enmarcarlo en una pared, no entendía nada de lo sucedía.

Karl miró con el ceño fruncido al joven. El chico le miraba mal, y no le gustaba su actitud. De repente le vio ponerse una expresión facial extraña y dijo algo de una voz. Comenzó a caminar pero chocó contra algo y se cayó hacia atrás. Karl se acercó a la zona, pero notó una fuerza invisible que le impedía seguir avanzando. Vio unos metros más allá a Dan, aparentemente retenido por la misma fuerza.

- Mira, me da igual lo que sea que me retenga. No tengo tiempo para esto.

El brazo derecho de Karl se volvió totalmente negro y comenzó a desdibujarse y moldearse como si fuese de arcilla. De repente tomó forma de un poderoso mazo de guerra. Karl alzó su brazo-arma mientras lo recubría de haki armadura y golpeó la barrera.

- ¡Kuro no Arm: Hammer! [Haki armadura]

La barrera pareció ceder durante un momento, pero resistió. Karl frunció el ceño más aun y cerró los ojos, concentrándose. Su brazo comenzó a cambiar de nuevo y volvió a su aspecto normal. "Necesitaré algo más contundente". De repente los músculos de su brazo derecho comenzaron a aumentar de tamaño y tensarse. Era hora de ponerse serio.

- ¡Master Sokudan, Impact Point!

Se escuchó un sonido como de algo rompiendo y Karl comenzó a trastabillar hacia delante, por el impulso que llevaba su puñetazo. Recuperó el equilibrio, y comenzó a caminar, medio corriendo, hacia Dan. Le indicó con gestos que se agachase. Ahora que sabía que esa barrera era algo físico, podía recurrir a otros métodos. Sus brazos se recubrieron de energía azul cortante, como si fuesen filos de espada rodeando sus brazos. Atacó el lugar donde se suponía que debía estar la barrera con un tajo cruzado.

- ¡Assasin Sokudan: Living Swords!

Me estaba poniendo nervioso, no sabía que hacer, al escuchar esa voz, el pánico entró en mi, no sabía como proteger a la gente en ese momento. En ese momento saqué mi martillo y empecé a dar golpes a la barrera, pero no podía romperla, tras un cierto tiempo dando martillazos, podía notar que cedía diminutamente.

Al rato, me dirigí a un sitio donde pusiese ver a Karl y a Dave, a ver si se daban cuenta y me ayudaban, cuando les vi, Karl estaba atacando a la barrera, el primer intento no le funcionó, lo volvió a hacer con más potencia, al final rompió la barrera. Se estaba acercando donde me encontraba y me hizo gestos, unos gestos raros que bajase o algo parecido, al final después de unos segundos pensando me di cuenta, me agaché en ese momento.

creó un tipo de ondas cortantes para tirarlas a la barrera, pero de repente esos tajos solo le dieron al aire, por arte de magia ya no había nada. En ese momento delante de mi apareció un hombre, un tipo con una máscara extraña, su pelo estaba recogido con una coleta. Me miraba fijamente mientras lentamente me apuntaba con un arma, una pistola de toda la vida. Me disparó, dándome de lleno en el lado derecho del pecho, me echó para atrás cayendo al suelo.

¿?: Me gusta tu habilidad chico, así que me la voy a quedar.

En ese momento desapareció y apareció de la nada detrás de Karl, le disparó también, lo mismo hizo con Dave; volvió a desaparecer y apareció flotando en el cielo.

Todo era dubitativo, no entendía nada. El marine forzudo al ver a Dan dentro empezó a atacar la barrera que había, la primera vez no pudo romperla, pero a la segunda se la llevó por delante. Entró, yo le seguí. Después se acercó a Dan y este se agachó, no entendía que iba a hacer.

Cuando le vi algo extraño en las manos me agaché, no entendía su ataque, pero era mejor hacer lo que hizo Dan. Al final el ataque se perdió por el espacio. En aquel momento ,apareció un tipo raro con máscara y con el pelo recogido, dijo que quería el poder de Dan, así que le disparó. Me quedé sin aliento al ver eso, no podía creer que le hubiesen disparado, me quedé quieto mirando a Dan como caía al suelo, por lo menos el dolor lo controlaba, me acerqué a él para auxiliarle. Cuando llegué pude ver que no tenía nada para taparle la herida, me quedé pensando.

Al final me quité la bufanda y se la puse alrededor de la herida, haciendo presión para que la sangre no saliese, al poco tiempo la bufanda blanca se tiñó de rojo. Me levanté para ver el panorama, me pude ver al tipo enfrente mía, me estaba apuntando. Disparó, iba a esquivarlo cuando me vino a la cabeza en segundos que detrás estaba Dan, no quería que le volviesen a disparar, así que no me quité de donde estaba, la bala entró, pero no pasó nada malo. Vi donde había penetrado la bala y cuando quise mirar al frente el tipo había desaparecido de allí.

Activé el mantra para saber donde se encontraba, lo encontré, estaba en el cielo flotando.

Cuando vio desaparecer al tipo, supo que estaba en peligro. Todos sus sentidos se pusieron alerta y se recubrió de haki armadura por su acaso. Efectivamente, escuchó unos disparos, notó unos golpes en su espalda y el ruido de unos casquillos cayendo al suelo. Dan estaba herido, pero el maleducado de su compañero estaba ileso y fue a ayudarle. Karl miró a los aires y vio al extraño individuo flotando. El marine comenzó a levitar también y se alzó unos cuantos metros hasta estar a su altura.

- Has cometido un terrible error viniendo hasta aquí - le dijo Karl, serio - Estás en mitad del cuartel general de la Marina. Si no te derroto yo, lo hará algún alto rango.

El marine extendió su brazo derecho hacia un lado. De repente este se volvió negro, empezó a moldearse y adoptó forma de una espada larga negra. Esta se envolvió en filos de energía de color azul que extendieron su filo y la hicieron más cortante. Karl se puso en posición en el aire, observando a su rival. Repentinamente avanzó hacia él sin aviso previo, como para atacarle. Se frenó en el aire y trazó un corte hacia él.

- ¡Battle Cutter!

Su corte generó una onda de energía que se dirigió a una gran velocidad hacia el extraño. Mientras Karl sacó un den den mushi con su mano izquierda.

- ¿Almirante la Vega? Soy el teniente segundo Lion D. Karl. Tenemos un pirata en el pueblo. Estoy a punto de entablar batalla con él. Solicito refuerzos.