Un shichibukai, una pelirroja y Azne. Negociaciones en LogueTown[Pasado-privado][Kirito-Rose-Zane] {Dom 12 Ene 2014 - 17:50}

14/07/2013

OFF Rol: Los turnos son así Rose-Zane-Kirito-Rose-Zane-Kirito...

Habíamos llegado a Loguetown una gran isla conocida para mí ya que pasé gran parte de mi infancia en ella. Me encontraba en el barco y en apenas pasasen unos minutos bajaría para ir a negociar con un shichibukai, intentaría convencerle de que dejara de perseguir a nuestra banda por la traición que le había echo Ikaru y así buscaría una alianza entre las dos bandas.

Estaba esperando a Zane a que me acompañara a negociar, pero aún así tardaba y pensé"luego dicen que los chicos son más rápidos que las chicas" y suspiré...caminaba y caminaba y seguía sin bajar, así que decidí ir a su cuarto para ver que hacía y salir de una vez ya porque no nos esperaría eternamente.

Subí directamente a su cuarto pisando fuertemente para que se me oyera y que iba enfadada y golpeé la puerta y grité:

-Zane!! como no salgas, me voy!!-grité y de pronto abrí la puerta de golpe y me lo encontré acompañado de una cortesana, no pude evitar ponerme roja y cerrar la puerta de golpe y le dije-Yo...te espero abajo...cuando acabes...

Bajé hasta cubierta y decidí esperar por el, mi pobre mente manchada por esa imagen y me un escalofrío, esperaba llegar pronto a la plaza principal que era en donde habíamos quedado.

Aún sabiendo que me llevaría una buena regañina por parte de algunos de la banda, cosa que me daba igual, conseguí meter en el barco a una gentil muchacha, la cual me prestaba unos servicios concretos cada noche a cambio de llevarla a la próxima isla dónde nos dirigiéramos además de darle algo de comer, siendo sincero resultaba muy barato, era como alimentar a un animalillo, pero recibiendo algo placentero a cambio.

El tiempo pasó muy rápido, estaba en pleno acto de regocijo acompañado de una diosa de tez clara y frontal voluminosa, cuando la voz de la segunda de abordo, apareció entre los pequeños gemidos en los que estaba inmerso. La pelirroja entró en la habitación, la miré, me miró, su gesto se puso del mismo color de su bello cabello y se fue tras decir unas palabras. –Vamos no me jodas… -Comenté llevándome la mano a la cara.

-Bueno morena, nuestra consumación acaba aquí –La deje en la cama y empecé a vestirme –Ha sido un placer, que sepas que no te olvidaré, has sido la mejor amante que he tenido y que jamás tendré –Le dije realizando la mejor improvisación teatral de toda mi vida. Una vez vestido, cogí mis katanas y salí de allí como alma que lleva el diablo.

Bajé a la cubierta y allí estaba, la dulce Rose, cuya sensualidad solo era superada por su ocasional mal genio, me puse frente a ella, seguía un poco impactada –Rose, todo esto tiene una explicación –Solté una risa de falsa vergüenza –Ella me obligó, sabes que yo soy solo tuyo, pero no soy de piedra –Guiñé un ojo -¿Dónde nos espera el sujeto ese? -Pregunté haciendo un ademán de seriedad.

30/08/2013

Me encontraba en mi camarote tumbado esperando que alguno de mis subordinados me diera el aviso de que habíamos llegado a Loguetown, isla donde tenía que encontrarme con la segunda al mando de lo Sons of Anarchy, con quién hablaría sobre la traición de Ikaru, uno de sus tripulantes. Les había dado instrucciones bastantes claras de cómo llegar a la isla por lo que no había problema en que abandonase la cubierta para descansar un poco. Mientras estaba tumbado pensaba en las palabras que me dijo el amigo de mi abuelo que me entrenó durante los dos últimos años, James. Me preguntaba dónde podría estar mi hermano perdido y cómo podría llegar a encontrarlo.

Estaba en mitad de esta reflexión cuando Saiiko tocó la puerta y después entró para decirme – Capitán, henos llegado a nuestro destino. – Me levanté y le dije, reuniros en cubierta para recibir mis órdenes. Me coloqué mi capa negra y por encima las cuatro katanas que llevaría, Elucidator, Dark Repulser, Taki y mi Ryu no Sakabato, una espada sin filo que usaba cuando no quería matar a mi adversario. Una vez colocadas las espadas en su sitio me puse el anillo en el dedo corazón y subí a cubierta a hablar con mis tripulantes sobre lo que quería que hiciesen en la isla. Miré a todos, que se encontraban en fila – Podéis liarla en cualquier parte de la isla salvo la plaza principal donde estaré en una negociación importante. Si ocurre algún inconveniente contactad con Camus y él podrá contactar conmigo por Den Den Mushi y si veo necesario le indicaré que vengáis a mi posición, pero creo que sois capaces de cuidaros por vuestra cuenta. – Dicho esto me bajé del barco y comencé a caminar por la isla rumbo a la plaza principal.

14/07/2013

Había vuelto a bajar y mientras esperaba mirando el mar Chispitas apareció corriendo por el suelo y lo cogí con la mano y le pregunté riéndome:

-¿Que pasa Chispitas?-y el empezó a moverse en mi mano avisándome de que Zane ya venía, lo puse en el suelo y se volvió a ir corriendo.

-Rose, todo esto tiene una explicación–Vi que echaba una rara sonrisa mientras me lo decía–Ella me obligó, sabes que yo soy solo tuyo, pero no soy de piedra-luego pareció cambiar de tono y volverse un poco más serio-¿Dónde nos espera el sujeto ese?

-Interesante...bueno, hemos quedado con el shichibukai en la plaza principal, junto al lado de la fuente, no tardaremos en llegar, así que vamos-dije con una sonrisa mientras cogía mis dos katanas, a las que nunca separaba de mí.

Bajé del barco y comencé a caminar despacio, mirando fijamente al horizonte, llevaba el colgante que me había encontrado puesto, lo agarré con la mano y lo miré, no lograría saber la transcripción que llevaba el anillo, tenía un secreto pero parece ser que todos conspiraban contra no revelarlo, lo apreté fuertemente y evité que saliera ninguna lágrima de mi ojo, solamente llevar ese colgante me hacía recordar la infancia que tuve así que decidí guardarlo y cuando vi que no estábamos acercando a la plaza le dije a Zane:

-Eh! la plaza ya está ahí, pero creo que aún no ha llegado-dije echando una sonrisa, desde nuestra situación se podía ver la fuente pero estaba vacía, solo paseando una anciana y un niño pequeño.

Inesperadamente la subcapitana, en lugar de reñirme por meter a una intrusa en el barco, me soltó una sonrisa tras contestar a mi pregunta. Aliviado suspiré, puse mis apoyadas en mi cinto y seguí a Rose por la pasarela de nuestro barco de camino al centro de la ciudad.

El camino estaba siendo largo, la capitana no decía palabra alguna y yo, por lo de antes, tampoco hice mucho hincapié en tener una conversación amena, era bien sabido que a mí me tiraban más dos tetas que dos carretas, pero colar a alguien en el navío era demasiado, incluso para mí. ¿Qué diría el capitán si se enterara? Quién sabe, seguramente me pondría a limpiar la cubierta, cosa que me negaría, ganándome un castigo superior. No estaba acostumbrado todavía a tener superiores, pues siempre había estado solo desde mi adolescencia, pero, como miembro de una banda, era algo a lo que tendría que acostumbrarme.

Eh! la plaza ya está ahí, pero creo que aún no ha llegado –Me dijo esbozando una sonrisa reconfortante.

“Qué ricura de niña” –Me dije a mi mismo encogiéndome de hombros y mirando hacia otro lado como si fuera la primera vez que alguien el sexo apuesto me lanzara una sonrisa.

La plaza estaba casi desierta, posiblemente por la hora que era, algunos puestos de comerciales estaban abiertos, venta de carne, verduras, frutas, pescado, armas, bares de tapas, locales de copas que estaban cerrados, de todo un poco. Empezó a venir algunos vendedores ambulantes y algunos turistas con cámaras, algo que venía que ni pintado, antes de que llegue el famoso shichibukai preferí hablar con la pelirroja:

-Rose, debimos quedar algo más tarde –Volví a echar un vistazo a la plaza –Con un poco más de gente su hubiera que huir lo hubiéramos tenido mucho más fácil, después de todo, no creo que Kirito se jugara su puesto de gatito amaestrado del gobierno por matarnos –Hice una pausa –Lo mejor será preguntar primero cuáles son sus premisas, decirles las nuestras y llegar a un punto medio entre ambas –Culminé observando cómo la gente se quedaba mirando a un sujeto que se dirigía a la plaza desde nuestras ocho en punto.

30/08/2013

Caminaba por las calles casi desiertas de la isla, algo que me beneficiaba pues si la subcapitana de los Sons decidía huir me resultaría más cómodo perseguirla. Por lo que sabía la pirata se llamaba Dark D. Rose y tenía un rasgo distintivo que haría que encontrarla resultaría bastante sencillo. Estaba preparado para todo ya que si trataban de huir podría recurrir a mi fiel amigo Ace, el cual es especialista en seguir el rastro a las personas. Debido a mi desconfianza voy ya pensando en el peor resultado posible, y este sería el fracaso en las negociaciones y que los representantes de los Sons of Anarchy huyesen.

Poco a poco me iba acercando al lugar de reunión, la fuente que se encontraba en el centro de la plaza principal, donde también se encontraban algunos puestos comerciales, como tiendas de carnes, pescados, verduras, armas, tabernas, bares y demás, pero a estas horas solo unos pocos estaban abiertos. Al mismo tiempo unos pocos vendedores ambulantes empezaban a moverse por la zona. A lo lejos veía a una pareja un tanto desacorde al ambiente, como si estuviesen ahí por otro motivo. Me acerqué con calma y desconfianza para comprobar si se trataba de las personas con las que me reuniría porque de ser así podría estar ya preparado para lo que pudiera ocurrir.

Al acercarme pude comprobar que se trataba de los piratas capitaneados por el pirata Zarlet, conocido como Colmillo Blanco. Me dirigí al lugar marcado para esperar a que se acercaran a mí para poder tratar de llegar a un acuerdo. Mientras caminaba la gente seguía a lo suyo sin prestarme ninguna atención, algo que me facilitaría evitar problemas. Cuando llegué a la fuente me senté en el borde de ésta y cerré los ojos para mantener mi mente en blanco y el espíritu tranquilo.

14/07/2013

La plaza estaba totalmente vacía a excepción de algunos comerciantes pero también era muy temprano y Zane me dijo:

-Rose, debimos quedar algo más tarde, con un poco más de gente si hubiera que huir lo hubiéramos tenido mucho más fácil, después de todo, no creo que Kirito se jugara su puesto de gatito amaestrado del gobierno por matarnos, Lo mejor será preguntar primero cuáles son sus premisas, decirles las nuestras y llegar a un punto medio entre ambas.

-Creo que es mejor, así podremos hablar sin que moleste la gente, y estoy de acuerdo contigo, espero que no lleguemos a utilizar las armas pues no quiero luchar-dije mientras íbamos hablando y ya entramos directamente a la zona principal, en realidad yo no quería hacer una lucha en medio del pueblo y menos contra un shichibukai pero quería ayudar a mi nakama, le tenía aprecio y no quería que fuesen tras el por culpa de nuestra banda; fuimos rectos hacia la fuente y vi a un hombre apoyado en su bordillo, debía ser Kirito el shichibukai. Me acerqué despacio a el y dije:

-Ya estamos aquí-dije acercándome-debes de ser Kirito¿no? Yo soy Dark D. Rose y el es Zane D. Kenshin, ¿te parece bien tratar aquí el tema o ir a un lugar más ameno? en nada empezará a llenarse esto de gente.

La plaza seguía solitaria, salvo por los comerciales, los bares empezaban a llenarse de gente que desayunaba, lo que me hizo recordar que no había comido día desde ayer en la tarde y que era hora de zampar algo, pero tenía que esperar a volver al barco –“A menos que vayamos a una taberna” –Me dije a mí mismo.

Rose emprendió la marcha hacia el sujeto que vi anteriormente, era algo extravagante debido a que vestía totalmente de negro, llevaba cuatro espadas ¿cómo demonios se usan cuatro katanas a la vez? Me pregunté, tenía interés en ello, pero a la vez no, después de todo si lo viera sería en combate y no estaba tan loco como para enfrentarme a un shichibukai. Mi amor platónico y la segunda de abordo le habló al sujeto que, antes de que pudiera responder, continué yo la conversación de Rose. –Pues claro que iremos a un lugar más ameno- comenté –No es de caballeros negociar en la calle o a la intemperie, los suyo es ir a una taberna, pedir tres jarras de cervezas y algo para picar. ¿Qué opinas moreno? –Pregunté mirándolo a los ojos.

“Bien Zane, llamaste moreno a un shichibukai, temerario no, lo siguiente” –Reflexioné segundos de después.

30/08/2013

Como era de esperarse poco tiempo tardaron en llegar los representantes de los Sons, algo bueno ya que así perdía menos tiempo en esta isla y podría centrarme en mi búsqueda más importante. La primera en llegar fue una chica de pelo escarlata la cual se presentó como Dark D. Rose a la vez que me decía que el descamisado que la acompañaba se llamaba Zane D. Kenshin. Me empezaba a mosquear por el hecho de que todos tuvieran una molesta D. suelta sin significado aparente pero no dije nada al respecto. Al poco tiempo Rose me preguntó que donde trataríamos el tema pero antes de que pudiera contestar el loco sin camiseta dijo -Pues claro que iremos a un lugar más ameno. No es de caballeros negociar en la calle o a la intemperie, los suyo es ir a una taberna, pedir tres jarras de cervezas y algo para picar. ¿Qué opinas moreno?-

No hubiese tenido problemas en contestar tranquilamente a ambos salvo por como acabó la frase de Zane, eso me molestó de sobre manera ya que sólo hubo uno que me llamó así en toda mi vida y no es alguien que me agrade. Lo miré fríamente y dije -Te recomiendo no tratarme de esa forma si no quieres que tu piel tenga el mismo color que tu pelo- Miré ahora a Rose y le dije tranquilo-Por mí no hay problema con ir a un lugar más ameno, lo único es que prefiero que dicho lugar no esté demasiado lejos por motivos que no vienen al caso.- Me levanté y de pronto a mi lado se materializó Asce, al cual empecé a acariciar mientras esperaba por la respuesta de la segunda al mando Rose.

14/07/2013

-No es de caballeros negociar en la calle o a la intemperie, los suyo es ir a una taberna, pedir tres jarras de cervezas y algo para picar. ¿Qué opinas moreno?

Cuando dijo lo de moreno le miré con una cara asesina queriendo decirle como se había ocurrido contar eso, se estaba dirigiendo a un shichibukai, así que después habló el:

-Te recomiendo no tratarme de esa forma si no quieres que tu piel tenga el mismo color que tu pelo-oí como se lo decía a Zane y la verdad yo no quería tener problemas-Por mí no hay problema con ir a un lugar más ameno, lo único es que prefiero que dicho lugar no esté demasiado lejos por motivos que no vienen al caso.

-Claro sigamos por este camino y así podremos hablar tranquilamente-comencé a caminar despacio, hacia donde fuera el camino, pero no querría esperar a hablar hasta llegar a un bar, quería resolverlo cuanto antes así que decidí sacar el tema-en cuanto al tema de Ikaru, creo que no se merece que lo persigas en mi opinión no fue una traición pero bueno lleguemos un poco más adelante y hablemos con calma.

Comentarios de prepotencias por parte del moreno, miradas furtivas por partes de la jefa, algo me decía que mi actitud no era la apropiada para una negociación como aquella. Quedándome atrás, mientras avanzábamos, escuché como Rose hablaba algo con él, pero hice caso omiso.

El cielo estaba de un azul primaveral sin nubes, que presagiaba un buen día, o eso quise creer. Al cabo de unos pocos minutos, llegamos a la taberna más mugrienta de toda la isla, pero por sus barriles tenía de la mejor cerveza del mar del este. Los tres nos sentamos de manera que nos podíamos mirar fijamente a los ojos, yo desconocía todo lo sucedido así que quería explicaciones. –Estoy aquí y no sé totalmente porqué –Comenté mirando a ambos -¿Porqué persigues al pamplinas de Ika? –Pregunté con cierta curiosidad.

30/08/2013

La mirada que le lanzó la pelirroja a su compañera demostraba que al menos uno de ellos era consciente de con quién trataban por lo que era seguro que podría haber una negociación decente. -Claro sigamos por este camino y así podremos hablar tranquilamente- Dijo la joven pelirroja que comenzó a caminar por una callejuela que si memoria no me fallaba llevaba al bar Gold Roger, un bar donde estuve hace bastante tiempo por lo que sabía que sería un buen lugar para hablar tranquilamente. La chica parecía un tanto impaciente por hablar del tema porque de pronto dijo -en cuanto al tema de Ikaru, creo que no se merece que lo persigas en mi opinión no fue una traición pero bueno lleguemos un poco más adelante y hablemos con calma.-

La impresión de seriedad que me dio la chica antes se esfumó para dar paso a un sentimiento de que ambos me estaban tomando el pelo, no puede ser que traten de convencerme de esa manera. A mi lado caminaba Ace ronroneando tranquilo pero con la mirada fija en el hombre si camiseta ya que no parecía saber cómo dirigirse a alguien que puede matarlo impunemente. En todo caso lo mejor sería hablarlo con calma en el bar. Al fin llegamos a la puerta del bar y Ace volvió a su forma de anillo y lo coloqué en mi dedo para luego entrar al local. Una vez dentro y sentados en una mesa medio rota junto a una sucia ventana de aquél mugriento y vacío bar cuando el extraño pelirrojo semidesnudo dijo –Estoy aquí y no sé totalmente porqué –Comenté mirando a ambos -¿Por qué persigues al pamplinas de Ika? –Pregunté con cierta curiosidad.

Había llegado el momento de explicar la traición, el motivo por el que persigo a Ikaru. Miré atentamente a los dos y dije Lo persigo por traición. Y puedes creer lo que quieras pero para mí abandonar la tripulación para ir otra es traición, y mi política frente a la traición es perseguirlo hasta matarlo o que me contente con su sufrimiento. No tolero la traición, es algo sin honor incluso entre criminales.

14/07/2013

Finalmente habíamos llegado al bar Gold Roger, entramos y nos sentamos en una mesa bastante estropeada. Zane comenzó a hablar y a decir que no sabía porque estaba aquí y porqué perseguía a Ika.

Yo lo miré con extrañeza, es que acaso no le importaba ayudar a su nakama, de ser así me decepcionaría pero de todas formas, kirito se puso a hablar de porque lo perseguía.

-Lo persigo por traición. Y puedes creer lo que quieras pero para mí abandonar la tripulación para ir otra es traición, y mi política frente a la traición es perseguirlo hasta matarlo o que me contente con su sufrimiento. No tolero la traición, es algo sin honor incluso entre criminales.

Sus palabras tenían razón, la traición era algo importante, pero seguro sus razones tendría.

-Estoy de acuerdo contigo al saber lo de la traición, es cierto que si a nosotros nos hicieran eso también nos enfadarían. Pero creo que habría que ver el porque de esa traición. Si Ikaru se fue, el tuvo que tener una razón, no se abandona a alguien porque si, si estuviera aquí podría explicárnoslo pero hablaré en su lugar-Ika me había mandado que le dijera mediante sus palabras, así que miré a Zane y le dije-coméntaselas Zane.-dije mientras me cruzaba de piernas en la silla.

El individuo que se hacía llamar shichibukai se encontraba furioso, la ira se le notaba en la mirada, la supuesta traición realizada por Ikaru era algo que no iba a consentir, aunque tuviera que destruir a todo el que se pusiera por delante. –“No pienso poner mi vida en peligro por un patán como Ikaru” –Me dije a mi mismo mientras escuchaba con suma atención a Rose. Esta última, haciendo gala de su arte para embaucar a los demás, consiguió pasarme todo el marrón declarando que yo había hablado con el susodicho judas al que llamábamos Ika.

-Yo no voy a andarme por las ramas –Dije mientras le hacia una señal al posadero para que trajera algo de beber –Por lo que yo he hablado con el retaco, no ha sido una traición propiamente dicha, él te tiene aprecio, te quiere como a un hermano, no obstante, se siente cohibido bajo tu sombra –El camarero trajo tres jarras de cerveza, y no dudé en coger una y beber un largo y refrescante sorbo –Como bien comprenderás ¿no? –Comenté soltando la jarra en la mesa –Por una parte le entiendo a él, en mi caso, me sería muy difícil estar al mando de alguien como tú, un reconocido shichibukai tanto por sus habilidades de combate como estratégicas, alguien tan temido por el gobierno que ha preferido tener en su bando cómo aliado, en vez de tenerlo como enemigo causando estragos… -Hago una pausa larga organizando mis ideas–Y por otra parte, también te entiendo a ti, es muy difícil encontrar a gente de fiar en estos mares, y si le das todo a alguien, le conviertes en alguien de tu familia –Hago unas comillas con los dedos al decir la última palabra –Te duele que te deje así porque así; yo no sé que haría en tu situación.

-Pero, de verdad te digo, que nosotros no sabíamos que era una especie de prófugo, vino a nosotros, nos ayudó y le acogimos como a uno mal, ¿qué culpa tenemos el resto de nosotros de su decisión? –Pregunté elevando un poco la voz, pero sin ser amenazante del todo, después de todo nos estábamos jugando algo más que salir indemnes del lugar, si todo salía bien tendríamos a una especie de aliado dentro del gobierno, y era algo por lo que teníamos que luchar.

-No sé qué piensas tú, Kirito, pero yo no pienso morir por alguien que acabo de conocer. Yo he venido aquí a intentar que recapacites, la venganza no lleva a ningún lado, o eso es lo que pienso… -Culminé esperando una respuesta.

30/08/2013

Estaba sentado en la mesa de aquél local de mala muerte esperando a ver cómo pretendían los pelirrojos convencerme de que Ikaru no me había traicionado. Mi mirada era seria y mi rostro impasivo, no toleraría bromas, tomaduras de pelo ni medias palabras, era el momento de la verdad y de poner todas las cartas sobre la mesa. Primero habló la chica diciendo ~Estoy de acuerdo contigo al saber lo de la traición, es cierto que si a nosotros nos hicieran eso también nos enfadarían. Pero creo que habría que ver el porqué de esa traición. Si Ikaru se fue, él tuvo que tener una razón, no se abandona a alguien porque si, si estuviera aquí podría explicárnoslo pero hablaré en su lugar ~ Pero lejos de hacer lo que dijo simplemente miró al chico que la acompañaba y le dijo que fuese él quien me comentara las razones. Ese gesto me desagradó mucho ya que si alguien dice que hablará por otra persona es que asumirá toda la responsabilidad y será quien hable, no mandará a otro a hablar en su lugar, eso es casi como tomarme por estúpido. Mi mirada seria se fijó ahora en el chico esperando su discurso sobre porqué debía perdonar a Ikaru. Mientras esperaba que hablase pude ver que llamaba al camarero ya que las primeras palabras que salieron de su boca me eran indiferentes por su insignificancia en el tema.

Luego prosiguió diciendo ~Por lo que yo he hablado con el retaco, no ha sido una traición propiamente dicha, él te tiene aprecio, te quiere como a un hermano, no obstante, se siente cohibido bajo tu sombra ~ dijo mientras cogía una jarra de las tres que trajo el camarero pese a que no iba a beber, si bebía todo acabaría muy mal para ellos. El chico dio un largo trago para luego hablar tras apoyar la jarra en la mesa ~ Como bien comprenderás ¿no? Por una parte le entiendo a él, en mi caso, me sería muy difícil estar al mando de alguien como tú, un reconocido shichibukai tanto por sus habilidades de combate como estratégicas, alguien tan temido por el gobierno que ha preferido tener en su bando cómo aliado, en vez de tenerlo como enemigo causando estragos… ~ Sus palabras carecían de peso de argumento para mí, si realmente ese fuera el caso me habría avisado y hubiese elegido un mejor momento para irse, no se hubiese ido de forma rastrera como lo hizo. Pese a que tenía contraargumentos de sobra para lo que me decían decidí esperar a ver si decía algo más.

Y por otra parte, también te entiendo a ti, es muy difícil encontrar a gente de fiar en estos mares, y si le das todo a alguien, le conviertes en alguien de tu familia ~En esta última palabra se puede notar un cierto tono irónico que me molesta pero el sujeto prosigue ~ Te duele que te deje así porque así; yo no sé qué haría en tu situación. Pero, de verdad te digo, que nosotros no sabíamos que era una especie de prófugo, vino a nosotros, nos ayudó y le acogimos como a uno más, ¿qué culpa tenemos el resto de nosotros de su decisión? ~ Esa pregunta sonó en un tono más alto pero lejos de ser amenazante, sería el colmo ya para ellos que querían evitar que los persiguiera hasta acabar con Ikaru. ~ No sé qué piensas tú, Kirito, pero yo no pienso morir por alguien que acabo de conocer. Yo he venido aquí a intentar que recapacites, la venganza no lleva a ningún lado, o eso es lo que pienso… ~ Esas fueron las últimas palabras de su discurso por lo que me quedé callado un momento meditando sobre cómo proceder. Miré a la chica y dije ~ Primero que todo, si me dices que hablarás en nombre de alguien no delegues esa función en un tercero, si vuelve a ocurrir daré las negociaciones por finalizadas sin tener en cuenta nada de lo dicho, no tolero la falta de coherencia entre intenciones declaradas y los actos posteriores. ~ Ahora mi mirada se centró en ninguna parte para empezar a hablar, esta vez en respuesta a los motivos de la traición de Ikaru ~ Primero que nada, el motivo de que lo trate como traición ignorando sus motivos es que fue lo suficientemente cobarde como para irse de forma rastrera sin dar la cara y dejando a la banda en una situación comprometida, lo cual me molesta ya que no me opongo a alianzas con antiguos miembros que se lo merecen. Segundo, en ningún momento iba a causar daños a personas de la banda que no sean el traidor salvo que se interpusieran, momento en el cual yo asumiría que lo apoyan y pasan a ser considerados la misma clase de calaña que un traidor. Finalmente esto está lejos de ser una venganza, ya que tengo una batalla contra otra banda pirata que si es por venganza, pero esto es simplemente para demostrar a los nuevos integrantes de mi banda que la traición no se tolera, si ahora dejo que Ikaru se vaya nadie me tomará en serio y eso no lo puedo permitir. Debió haberme explicado sus motivos en su momento, ahora ya me son indiferentes.~ A mi lado volvió a aparecer Ace, el cual se enroscó entre mis piernas y me pidió que lo acariciara, cosa que no dudé en hacer.

Seguí acariciando a Ace mientras en mi mente rondaban diversas ideas de cómo llevar el tema este de la traición, un tema complicado y delicado que debe llevarse con mucho tacto y cautela para no complicar las cosas. Mi mirada permanecía indiferente y fija en los dos pelirrojos que venían a negociar conmigo, el color de su pelo me provocaba cierta nostalgia, no sé porque ni tampoco porque me daba la sensación de que había alguien con un pelo de color similar que había logrado sobrevivir al destrozo de mi isla. En ese momento un recuerdo me vino a la mente, el recuerdo de un antiguo compañero de entrenamiento que quería ser pirata para vivir libre. Miré con seriedad a ambos y dije - Quizás exista una forma de evitar un conflicto y que nos beneficiará a todos los presentes y a nuestras respectivas bandas.- No iba de farol, algo me había hecho recordar a esa persona, y mi instinto me decía que esa persona seguía viva.

14/07/2013

Después de escuchar todo su discurso me quedé en silencio, y miré a Zane me había sorprendido gratamente su respuesta, mi pelirrojo me impresionaba cada vez más, ya no me parecía aquel idiota que había conocido aunque ahora se le tenía aprecio. Después de estar un rato pensando me centré en lo último que había dicho, el shichibukai quería demostrar que la traición no la consentía y solo debía pagarla con la muerte ¿y bien? tras una pequeña meditación se me vino a la cabeza algo que a lo mejor podría servirle.

"Supongo que si él quiere que Ikaru pague no va a poder evitarse, pero...no tendría que ser específicamente el, también podría ser otro, la cosa es que sería difícil de explicar”

Observé un poco el lugar mientras pensaba en eso, la verdad es que era interesante, aparte de ser mi primera negociación, no sabía que me depararía el destino, no estaba acostumbrada a hacer tipos de tratos con gente importante y…tampoco si saldrían bien, pero ahora debía acostumbrarme, ya que no sería la primera…ni la última.

En ese momento dirigí mi mirada hacia el shichi, y comencé a hablar calmadamente-veamos, claro que podemos evitar el conflicto, es más, yo estoy en contra de los conflictos, pero…-hice una pausa y tomé un trago de mi copa-y si, cobra la venganza con otro, es decir, ¿Por qué no hacer creer a otros que hubo un anterior miembro en tu banda que también hizo lo mismo que Ikaru?

Paré de hablar durante un momento para ver que palabras podía seguir usando, solo necesitaba saber su reacción de si le parecía bien o mal, así que decidí continuar.

-El caso es eso, culpar a otro y dejar en libertad a Ika, solo te puedo asegurar que…si nos lo hace a nosotros rendiremos cuentas con él, y yo misma me encargaré de ello… no sería demasiado bueno que lo intentase, no al menos estando yo al mando.

Con una sonrisa satisfactoria esas fueron mis palabras, me quedé mirando el ambiente con la mirada perdida, ahora solo esperaba que lo hubiese cumplido, quería sentirme orgullosa de que lo había conseguido.

30/08/2013

Estaba sentado esperando la respuesta de la pelirroja ante mi última intervención, quería saber si estaba dispuesta a escuchar lo que tenía por decir y a aceptarlo pese a que le pareciese algo injusto y beneficioso para mí más que para ella. Mis ojos no se apartaban de ella, al otro ya lo ignoraba pues apenas decía nada que no supiese desde un comienzo. La chica finalmente se dignó a hablar y dijo veamos, claro que podemos evitar el conflicto, es más, yo estoy en contra de los conflictos, pero… y si, cobra la venganza con otro, es decir, ¿Por qué no hacer creer a otros que hubo un anterior miembro en tu banda que también hizo lo mismo que Ikaru? Hubo una pausa después del pero, una pausa breve pero notable lo que indica que aún estaba dudando de si decir o no lo que dijo a continuación. Lejos de acabar ahí su discurso la joven siguió diciendo El caso es eso, culpar a otro y dejar en libertad a Ika, solo te puedo asegurar que…si nos lo hace a nosotros rendiremos cuentas con él, y yo misma me encargaré de ello… no sería demasiado bueno que lo intentase, no al menos estando yo al mando.

No pude evitar soltar una fuerte carcajada que duró unos 50 segundos hasta que finalmente pude contenerme y decir Me estás diciendo que haga lo único que detesto y encima permitir que hagas lo que no me permites hacer a mí. Hasta hoy solo había visto ese nivel de hipocresía en la marina pero tú la has alcanzado con dos simples frases. Me detuve para recuperar el aire y secarme las lágrimas que brotaron de mis ojos por las risas para luego seguir diciendo A lo que iba, no era eso lo que tenía pensado, más bien era un tratado de no ofensa, es decir, los Akai dejan en paz a tu banda y sus cercanos siempre que vosotros y vuestros cercanos hagáis lo mismo con la gente cercana a mí. Y ahora, hay una lista de gente que tendríais completamente prohibido tocar que solo os daré si aceptas este trato, sino no los comprometeré. En ese momento también pensaba en mi hermano perdido el cual seguramente seguiría vivo en alguna parte.

30/08/2013

Tras esperar por una respuesta durante casi 10 minutos sin apartar la mirada de los piratas que tenía enfrente, mi paciencia empezó a agotarse lentamente y a cada segundo que pasaba mis ganas de sangre y de acabar con esos emisarios aumentaba. La camarera parecía percibir mi carácter ya que me sirvió una jarra de sake diciendo que invitaba la casa cuando pasaba cerca de atender a otra mesa. Mi mirada estaba pasando de ser seria a ser desquiciada y sanguinaria hasta que finalmente mi paciencia se agotó junto con el sake de la jarra. Sin más me levanté de la mesa con mis katanas en su sitio y marché hacia la puerta donde me detuve y, sin siquiera darme la vuelta, dije Olvidaos de lo que os he contado, no tengo tiempo que perder esperando una respuesta que no queréis darme. Solo os recomiendo no tratar de negociar conmigo en ninguna otra ocasión ya que la respuesta será algo más que un simple no. Dichas esas palabras me fui de la taberna para a unos 10 metros de ellas adoptar mi forma completa y marchar volando de la isla.

Un shichibukai, una pelirroja y Azne. Negociaciones en LogueTown[Pasado-privado][Kirito-Rose-Zane]

Un shichibukai, una pelirroja y Azne. Negociaciones en LogueTown[Pasado-privado][Kirito-Rose-Zane] {Dom 12 Ene 2014 - 17:50}

Re: Un shichibukai, una pelirroja y Azne. Negociaciones en LogueTown[Pasado-privado][Kirito-Rose-Zane] {Dom 12 Ene 2014 - 18:19}

Re: Un shichibukai, una pelirroja y Azne. Negociaciones en LogueTown[Pasado-privado][Kirito-Rose-Zane] {Dom 12 Ene 2014 - 18:54}

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