El poder de una gran alianza (Privado)

El día estaba nublado totalmente pero no había pinta de que fuera a llover. El viento soplaba con fuerza en aquella isla llamada Galuna. El enmascarado había elegido aquel lugar ya que no les interrumpirían. Había organizado una pequeña reunión con una banda revolucionaria al parecer solo formada por mujeres. Para él que era alguien narcisista y asexual no significaba problema pero aliarse con ellas suponía una buena ayuda contra otros. Para que vieran que no era una trampa había permitido que acudieran un número de dos miembros junto a su capitana. Lo que hacían tres personas. Dado esta situación el enmascarado conocido como Vader, había llevado consigo a uno de sus mejores hombres. Bueno no se lo había llevado pero le había avisado por lo que pronto aparecería.

Había decidido llevarse a Takeru, su espadachín y mejor guerrero en el tema del asesinato sin piedad. Desde las pruebas de su organización se había fijado en la gran habilidad del poderoso espadachín. Llevarse a alguien como él aquella reunión era una gran ventaja debido a que si había problemas podrían hacer una perfecta combinación para acabar con sus oponentes. Sin embargo si la otra banda se comportaba no se verían obligados a hacer nada. De todas formas quería saber la opinión del chico pues contaba con los miembros de su organización para muchas cosas. Había depositado su confianza en ellos. Ahora solo faltaba que todos llegaran, había llegado el primero para evitar posibles turistas y marines vigilando y no había nada por lo que estarían solos.

Ese día iba con su máscara de color naranja dejando solo ver su ojo rojizo. También tenía puesta su capucha negra, llevaba su sudadera de color negro también y su pantalón negro. En su espalda llevaba atada su lanza de doble filo. En sus manos unos guantes negros y unas botas del mismo color. Cada vez que movía sus brazos se notaba un sonido de cadena debido a su arma principal la cual estaba dentro de sus mangas camuflada. Por dentro de la sudadera llevaba una camiseta de manga larga negra también. Sus ropas eran totalmente oscuras salvo su máscara.

Su plan de conquistar todo estaba ya poniéndose en marcha y su primer objetivo estaba decidido, el reino de Saint Reia sería su primer objetivo y no iba a dudar en hacerse el líder de la isla, quería saber los objetivos de aquella banda de chicas para tratar de no meterse en ellos. Por esa regla también esperaba que ellas no se interpusieran en el camino que su maligna mente tenía planeado.

- No me esperaba que fuesen a tardar tanto. Takeru debe de estar al llegar, ya queda poco. Este mundo pronto será destruido y gobernado por las sombras y Akatsuki será su gobernante.

Dijo la figura enmascarada en un tono apagado y serio con algo de frialdad esperando a que fueran llegando los demás. Con algo de suerte les quedaría menos de media hora y por fin podrían comenzar aquello.