Un nuevo encuentro [Bale D. Edward y Liam Waterson]

Estaba a punto de zarpar, me despedí de mi familia y de mis amigos, a los que echaría de menos, y preparé mi barco, el West Sky, para zarpar. Cuando zarpé empecé mi viaje gritando a los cuatro vientos:

"¡Viviré mi mayor aventura, y me convertiré en el futuro Rey de los Piratas!".

Una vez en alta mar, me entraron dudas sobre adónde ir a buscar miembros para mi tripulación, "Los Piratas del Cielo", llamándose así por el nombre de mi barco, y porque no me sentiría un aventurero de verdad hasta que visitase una isla en el cielo. Como no se me ocurría ningún lugar específico, decidí ir a la isla Lavengre, de la que había oído hablar, pues su carne y su comida eran conocidos en todo el West Blue, y yo, como buen amante de la carne, no podía evitar querer pasar por allí, como "recorrido gastronómico" (sólo quería comer carne en grandes cantidades), y, con suerte, encontraría con alguien que quisiera unirse a mi tripulación. Así que, con más ganas de comer que de conocer nakamas, puse rumbo a la isla Lavengre.

Una vez atisbé la la isla en el horizonte, mi estómago empezó a rugir cuan león airado, pues llevaba dos días de travesía en los que me tuve que preparar mi propia comida, cosa que ni me gusta ni se me da bien en absoluto. Dada la prisa que tenía, manejé el barco y lo dispuse de modo que fuera lo más veloz posible, y llegué a la isla en un santiamén, anclé el buque en una cala apartada al este de la isla, desde la cual no era difícil llegar al puerto. Nada más desembarcar, me dirigí como un relámpago hacia el puerto y busqué el restaurante más próximo, en el cual entré y pedí el especial: un delicioso pastel de carne, ¡Ñam un pastel de carne!, pensé, así que me pedí doce. Cuando lo estaba comiendo regocijándome en su sabor y textura, noté que hubo un portazo, No sera nada... me tranquilizé a mi mismo y seguí comiendo el pastel, poco después vi a un hombre que se sentaba a mi lado y pedía una copa de vino y el especial, Tiene buen gusto pensé, cuando me terminé el doceavo pastel, no pude evitar gritarle al cocinero:

¡ESTE PASTEL ESTÁ BUENÍSIMO!

En el mismo momento en el que yo gritaba esto, el hombre que estaba a mi lado gritó:

¡Puajjj! ¡Este pastel está asqueroso!

Nuestras miradas se cruzaron

Toque: Hasta estar lista la corrección de vuestras fichas no podéis rolear. Buenos días.

BIEN, AHORA QUE NUESTRAS FICHAS ESTÁN CORRECTAS (CREO), PODEMOS ROLEAR, NO?

Falta ue tu compañero postee en los registros.

Ya lo he hecho, Podemos ya??

¡¡¡¿¿¿Que acabas de decir???!!!

Gritamos los dos al unísono, me sentí un poco extraño, estábamos muy bien coordinados, aunque no podía creer el mal gusto que tenía ese hombre. Ahora que me había fijado en él, me di cuenta de que era rubio, de piel pálida un poco pigmentada por el sol. Calculé que tenía unos veinte años, tenía un porte noble, creo que en su día lo fue, aunque estaba claro que era pirata, nadie más iría vestido con unos ropajes tan poco comunes en la isla ni se pelearía a gritos con otro hombre sólo por el sabor de un pastel de carne.

¡¡¡¿¿¿Es que acaso no tienes papilas gustativas???!!!

Volvimos a gritar al unísono, esta vez ya era incómodo, pues llevábamos ya tres seguidos, su mirada cambió, parecía enfurecido, yo me sentía igual, y sus ojos me miraban con aire desafiante, yo aceptaría el reto, si tenía tripulación o no, ése hombre era un pirata, y yo necesitaba un poco de reputación, así que derrotarlo me daría a conocer entre la marina, y si tenía tripulación, mejor, así más razones por las cuales ponerle precio a mi cabeza. No tenía intención de perder nada más empezar mi camino, así que derrotaría a cualquiera que se pusiese delante de mí.

¡¡¡¿¿¿Es que buscas pelea???!!!

Esto ya era el colmo, pues ésta ya era la cuarta vez, si iba a haber pelea, estaba preparado, estaba al 100% de energía tras los doce pasteles de carne, podría mantener el "Rapid Fight" durante todo un combate al máximo. si no lo conseguía con eso, siempre contaba con mis "Bale Rifles" para acabar con mi enemigo.

¡¡¡PUES SÍ!!!

Habíamos quedado al anochecer, en un prado entre el bosque y la colina en la que pastaban las vacas. Como tenía tiempo, me acerqué a mi barco y recogí mis objetos para el combate: los guantes negros (los cuales esperaba que dieran nombre a mi apodo en un futuro), y  los brazaletes láser, el último prototipo desarrollado, tendría la posibilidad de probar su eficacia en un duelo real, estaba emocionado. También era el primer combate serio al que me enfrentaba desde que tenía ocho años, cuando volví de la isla salvaje, allí todo era peligroso, todo me quería matar, y por esa razón me volví más fuerte. Ahora, nueve años más tarde, me volvía a enfrentar al peligro real de un combate. Mi oponente era desconocido, lo poco que sabía era: era un pirata, quizás del West Blue o, con suerte, del Grand Line, así podría practicar para lo que llegase en mi viaje; probablemente un espadachín experto, pues me fijé en que llevaba una espada, aunque también podía ser que diera golpes con el guantelete que llevaba en su mano izquierda, tenía que tener cuidado.

Cuando tuve preparados todo mi equipamiento, me dirigí hacia el lugar del duelo. Llevaba los guantes y los brazaletes puestos, los Bale Rifles en sus fundas y sus cargadores en los bolsillos de la parte interior de mi sudadera. Hacía un poco de frío, aunque no me molestaba, si cerraba la sudadera perdería mucha movilidad y la necesitaba, pues el Rapid Fight no solo necesita energía, sino que mucha, mucha libertad de movimiento.

Llegué al lugar indicado un poco más pronto, pues así podía analizar el campo de batalla y ver en qué podría apoyarme. En cuanto llegó mi oponente le saludé con un: Que lento has venido ¿Acaso tienes miedo de perder?

Él me respondió: Como si necesitara usar ambas manos para derrotar a un chiquillo como tu...

Ése tipo me irritaba un montón, no sólo era su mal gusto para la comida, sino que además era un chulo. Nos dispusimos en el campo de batalla y ...

¿Cuando quieras?

Lo de que estuviéramos tan coordinados también me irritaba bastante, era demasiada coincidencia. Aun así me dispuse en mi pose de guardia, la pierna izquierda extendida hacia adelante y la derecha flexionada hacia el lado, los brazos a la altura del pecho y un poco separados del cuerpo, era una pose un poco rara, y si desplazaba un poco alguna de las piernas llegaba a ser incómoda, pero era mi pose, además, habitualmente hacía que el contrincante frunciera el ceño y bajase su guardia por unos instantes, que podía aprovechar para lanzar el primer ataque. Esta vez no funcionó... <<¡¡Cachis!!>>.

Estaba a punto de realizar el primer movimiento cuando algo me interrumpió, al principio no lo reconocí, pero luego me di cuenta de que era un aullido, sonó bastante cerca, entonces mis recuerdos saltaron en mi cabeza, la isla Lavengre no sólo era conocida por su carne de vaca, sino por las Lágrimas de Ninfa y ... los lobos..., no recordaba exactamente qué tenían de especial esos lobos, pero sí sabía que solían atacar a las vacas y a los humanos que se encontraran...

¡¡Lobos!!

De repente, siete lobos saltaron por encima de de los árboles del bosque y se lanzaron hacia nosotros, dando una vuelta, como si quisieran darnos un coletazo... entonces las vi, siete colas en forma de hacha descendían hacia nosotros. Enseguida me puse en acción, al igual que mi antiguo oponente, pues ahora tenía asuntos más urgentes, detuve cuatro hachazos con los brazaletes y los desvié, de reojo vi como el "rubito" desviaba los otros dos hachazos con su espada, parecía de gran calidad, y luego los dos gritamos:

¡¡¡ESPALDAS JUNTAS!!!

Nuestra coordinación nos sirvió para mucho en ese momento, hicimos lo que acabábamos de decir, yo desplegué mis Light Guns y las cargué con munición perforante. Enseguida apreté los gatillos y moví mis brazos para que las balas diesen a los cuatro lobos que tenía delante. Grité para acompañar mi ataque:

¡¡¡LIGHT GUNS!!! ¡¡DRILL BULLETS!!

Ataque usado: Light Guns (AF)

Mi ataque funcionó, aunque no tan bien como me hubiera gustado, las balas perforantes habían penetrado en la piel de todos los lobos, pero sólo dos cayeron muertos. Mientras esto pasaba, oí al Rubito desenvainar dos espadas, Así que usa el nitoryu, tiene dos buenas espadas el Rubito me dije a mí mismo, miré hacia atrás y vi como cruzaba sus brazos y se movía a gran velocidad, cortando a los tres lobos que tenía delante diciendo: ¡¡Corte Doble!!.

Dos gruñidos me hicieron volver la mirada hacia mis dos nuevos oponentes, éstos se estaban abalanzando sobre mí otra vez con sus colas de hueso en forma de hacha. Replegué las Light Guns mientras volvía a mi pose de guardia, pero esta vez me agaché diciendo: ¡¡Rapid...; con un rápido movimiento salté con gran impulso y asesté dos puñetazos a las cabezas de los lobos, finalizando el golpe diciendo: ...Punch!! ¡¡Double!!.

Ataque usado: Rapid Punch (AID)

Los lobos quedaron inconscientes al instante, cuando aterricé me volví para ver como iba el Rubito con los que le quedaban. Vi a dos lobos muertos, y el tercero tenía las patas mutiladas y aullaba de dolor, parecía que le doliera más de lo que debería, igual la espada del Rubito tenía alguna especie de veneno. Bueno, tendría que vigilar con eso, cuando descubriera qué era, por el momento, nos miramos a los ojos...

Peleas bien...

Otra vez volvíamos con lo de hablar a la vez, ya estaba harto.

¡¡¡QUIERES DEJAR DE HACER ESO!!!

¡¡¡¡¡¡¡PARA!!!!!!!

¡¡¡HYAAA!!! ¿¿¿¡¡¡Donde están los Lobooos!!!???

Un grupo de unos siete hombres de la isla Lavengre salieron del bosque con una escopeta cada uno, parecía que intentaban cazar a los lobos, en cuanto vieron los cuerpos inconscientes y muertos de los siete que nos atacaron exclamaron: ¿¿¿¡¡¡CÓMO!!!??? ¿¿¿¡¡¡PERO QUIENES SOIS VOSOTROS DOS!!!??? ¿¿¿¡¡¡HABÉIS DERROTADO A LOS LOBOS!!!???

De nada

Me llamo Liam Waterson y estaba a punto de combatir en un duelo cuando estos lobos se metieron en mis asuntos

Pues yo soy Bale D. Edward, su rival en el duelo y ¡El hombre que se convertirá en el futuro Rey de los Piratas!

Todos me miraron, algunos con temor, el Rubito, Liam Waterson, me observó sorprendido y se puso a reír y dijo con tono irónico...

¡¡JAJAJA!! ¿Rey de los Piratas? He conocido a vagabundos de Mocktown que podrían hacerte picadillo con una mano a la espalda.

¿¿Eres del Grand Line?? ¡¡Pues únete a mi tripulación y lo conquistaremos juntos!! Me vendría bien un espadachín como tu... ¿Qué me dices... Te apuntas a una gran aventura?

No me esperaba la respuesta que me dio, fue una proposición muy repentina y muy alocada, pero ese hombre era del Grand Line y tenía habilidad para el nitoryu, aparte de dos espadas muy buenas. Y aceptó, aceptó unirse a mi tripulación. No cabía en mi de la emoción. ¡Bien! Uno más y ya seremos oficialmente una banda me dije a mi mismo.

Todavía nos falta un miembro.

Esta vez ya no me molestó, pues nuestra coordinación nos serviría de mucho si formábamos una banda juntos, la verdad es que parecíamos dos personas hechas una, siempre haciendo las cosas a la vez, o casi siempre. Me parecía mentira que nuestros caminos se cruzaran en un momento tan óptimo. Y ya tenía pensado nuestro nombre:

¡¡¡Seremos los Sky Pirates!!!

Ante la confusión sobre nuestras respuestas, los isleños que habían venido no habían reaccionado, ahora mismo estaban llorando, parecía que lloraban de alegría.

¡¡GRACIAS SKY PIRATES!! ... Sniff... ¡¡GRACIAS POR ACABAR CON LOS LOBOS!! ... Sniff... ¡¡OS HAREMOS UNA FIESTA PARA AGRADECÉROSLO!!

¿¿Fiesta?? ¡¡Genial!!

Estuvimos toda la noche bebiendo y comiendo, celebrando que los lobos habían sido derrotados, a mí no me parecía tan importante el motivo, el combate no había sido difícil, pero la comida de isla Lavengre estaba buenísima, hasta Liam encontró algo que le gustó.

Cuando acabó la fiesta, guié a Liam hacia mi barco, en cuanto lo vio, algo cambio en su cara, parecía que le recordase a algo, sobretodo no dejaba de mirar el mascarón de proa en forma de halcón peregrino...

Esa historia era muy conmovedora, la verdad, ya pensaba yo que parecía un noble, pero lo de su halcón...

¿Cómo se llamaba tu halcón?

Feather... ¿Por qué lo preguntas?

Pues a partir de ahora este barco no se llamará West Sky como lo llamaba yo, ahora se llamará ¡¡Feather, West Falcon!!

Justo en ese momento uno de los isleños se aproximó al barco y nos gritó: ¡Cuidado con el Rey marino de la isla! ¡Viene a esta cala cada tres días y su última aparición fue hace tres días!

Mmmh... ¿Rey Marino?

En ese momento, a unos treinta metros de la costa, el agua empezó a revolverse. Momentos después, la cabeza de una gallina emergía del agua y luego el cuerpo, y por último... ¿Una cola? Esa gallina no tenía patas, tenía una cola de pez en su lugar. Esto me dejó un poco chocado, pues era gigantesca.

¿Te encargas tú, capitán?

Me gustó que me llamase, capitán, me dio importancia y seguridad.

Sí

Me subí a la torre del vigía, desde allí tendría mejor ángulo de tiro. Desenfundé uno de mis Bale Rifles, el de la funda derecha, y comprobé la munición que llevaba, balas normales. Saqué el cargador y cogí uno de los de mis bolsillos de la sudadera, munición explosiva, lo cargué y me dispuse a disparar. Le coloqué una mira óptica que había creado siguiendo unos diseños de mi padre, pues necesitaba ver de lejos. Apunté hacia su cabeza, a uno de los orificios nasales del pico, disparé.

¡¡¡BALE RIFLE!!! ¡¡¡BOMB BULLET!!!

La bala dio en el objetivo, justo como había calculado, pasó a través de su orificio nasal, supongo que impactó en la cavidad nasal, donde explotó y daño la médula del Rey Marino, matándolo al instante y de manera indolora.

Ya tenemos provisiones para una semana Le comenté a mi nakama

Ataque usado: Bale Rifles (AI)

Me las apañé para cargar a la gallina-pez en el barco, era enorme. Cuando ya lo tuvimos todo preparado, los isleños nos lo agradecieron otra vez, pero no teníamos tiempo para fiestas, Liam atisbó unos buques de la Marina a lo lejos, así que teníamos prisa.

¿Y bien capitán, cuál es nuestro próximo rumbo?

Allí donde encontraremos a nuestro futuro nakama... ¡¡Él todavía no lo sabe, pero está a punto de unirse a la banda del futuro Rey de los Piratas!!

Zarpamos rumbo al horizonte, hacia la aventura, el viento era nuestra energía, las olas nuestro corriente sanguíneo, el timón nuestro corazón y nuestro barco, el Feather, nuestra libertad.