[Ficha]Sasazuki Eishi "Majin Tentei"

Sasazuka  Eishi

Datos Básicos

■ Experiencia: 0

■ Nivel: 1

■ Nombre: Sasazuka Eishi

■ Apodo: Majin Tentei

■ Edad: 23

■ Sexo: Hombre

■ Raza: Humano

■ Rango: -

■ Rango Social: Medio

■ Alineamiento: Caótico Maligno

Akuma no mi

Descripción Física

Un joven alto, de 2,20m de altura de contextura fibrada, se nota que se entrena, que cuida su cuerpo. Tiene un peso total de 120Kg de puro músculo, pese a su peso no tiene problemas a la hora de moverse, todo lo contrario, es bastante ágil y veloz comparado con el promedio de su tierra natal, donde el que más corre, aparte del joven Sasazuka, es la mitad de lento que él. Su cuerpo está bien preparado debido a sus intensos entrenamientos y sus fuertes exigencias a la hora de entrenar.  El detalle más característico de este joven es su mirada, una mirada fría, calculadora, que muestra que está dispuesto a cualquier cosa con tal de conseguir lo que pretende. Esto junto a sus dientes afilados como cuchillos le dan un aire demoníaco al joven de ojos verdes circulares con un color intenso, tanto que da la sensación de que está formando círculos de diferentes tonalidades de verde. Estos orbes son los causantes de su mirada decidida, nadie le aguanta la mirada en su isla natal, no saben hasta qué punto son ciertos los rumores. Su cabeza es de rasgos finos y elegantes, lo que cuadra con sus labios y su nariz de cadencia delicada y sutil, como si de un modelo se tratara. Sus brazos y piernas son bastante largos, pero no llegan al punto de sobrepasar lo humano. Su cabello está peinado de una forma curiosa, cayendo de forma igual a los lados y en la parte posterior, el la cual también forma una caída en cascada, con mechones terminados en punta con pequeños adornos con forma de pirámide de color dorado. Pero su flequillo y la parte frontal de su pelo es de color negro, cayendo formando una especie de M con los mechones y con un pequeño mechón en la parte central del rostro, a la altura de la nariz, que cae hasta el final de la misma, mientras que los mechones laterales están a la misma altura que el resto de los mechones, incluso un poco más largos.

Viste de forma elegante, con un espléndido traje con diferentes tonalidades de azul, pero predominando el azul royal. La parte superior del mismo es una especie de americana con las solapas interiores dobladas hacia fuera, uniendo las solapas de la zona del cuello con las de la zona del torso con unos adornos de igual forma y color que los del pelo, esta parte se cierra con cuatro botones dejando la parte del pecho abierta, mostrando un pañuelo blanco que cubre toda la zona y oculta la camiseta interior de color negro que porta Sasazuka, las mangas de esta americana le cubren el brazo hasta las muñecas. Los pantalones siempre a juego con la americana y de un diseño casual-formal con un par de líneas en los mismos. De calzado usa unos zapatos negros de estilo italiano. Cubre sus manos con un par de guantes de color negro, igual que los zapatos.

Descripción Psicológica

Sádico, cruel, asesino y vengativo….Pocas palabras que describen al hombre del suburbio de la isla de los demonios…

Su mente retorcida amante del dolor ajeno y de la sangre de sus víctimas, oírlas gritar de dolor, suplicar por sus vidas y hacer que supliquen la muerte. Trastornado es considerado el sociópata más despiadado de su barrio y de la isla, su mente no conoce el perdón ni la piedad. Creció sin consciencia, solo piensa en su bienestar y su beneficio. Sabe que para lograr algo tiene que esforzarse, pero no hará nada que le desagrade por ello, siempre buscará sentirse cómodo y por ello siempre mata a alguien, sino no es feliz. Su mirada es fría y calculadora, pero no demuestra ni la mitad de la frialdad de su alma, puede asesinar a una mujer embarazada sin sentir el menor remordimiento. Pero tampoco es un descerebrado, sabe que hay momentos en los que la vida propia es más importante que acabar con la de otro, por ello siempre procurará estar en una situación de seguridad y pocas veces hará alguna estupidez. Tiene una fascinación con la sangre, tal que siempre que acaba con la vida de alguien embotella su sangre para usarla más delante de ser necesario. En algunos casos llega incluso a beberse la sangre de sus víctimas, no tiene perjuicios con ninguna especie, raza o sexo, mata a todos por igual, para él solo hay una diferencia: Le gusta o no le gusta.

Por ello siempre se le ve solo, con un aura tenebrosa a su alrededor, es apasionado por el conocimiento, lo usa todo para acabar con la vida de alguien y sacarle el mayor provecho a su cuerpo sin vida posible.

Datos de Combate

■ Armas: Kusarigama

■ Profesiones: Asesino - Cocinero - Médico - Ingeniero Robótico

Información Profesiones:

■ Estilo de Combate:  Majin Martial Arts(Artes Marciales Demoníacas): Estilo de lucha que mezcla diversos estilos de combate cuerpo a cuerpo y con diversas armas. En cuerpo a cuerpo destacan el uso de los inmortales de wu-shu, el muay boran, el aikido y el Brasilian Jiu-Jitsu. Esta etapa de pelea emplea su fuerza física y movimientos poco previsibles al emular un borracho, golpes potentes con nueve puntos(codos, rodillas, espinillas puños y cabeza), emplear la fuerza del contrario en su contra y el uso de inmovilizaciones.

Luego adapta esos estilos al uso de diferentes armas, casi todas contundentes y con poco filo.

Datos de profundización

■ Habilidades: La torura, es su mejor baza, no tiene rival en ese ámbito, es capaz de sacar información a cualquiera que se le plante como contrincante. Análisis, su faceta fría y calculadora le permite analizar cualquier situación, por compleja que sea. Ejercicio físico, es algo que se le da bien de forma innata, no tiene problemas en hacer ejercicio. Trabajos de fuerza e inteligencia, ambos se le dan de maravilla debido a su alto intelecto y a su gran capacidad de análisis. Velocidad, es un hombre veloz, normalmente se entrena corriendo grandes distancias huyendo de enormes criaturas por lo que la velocidad es algo que se destaca en sus capacidades.

■ Torpezas: Socializar, debido a su forma de ser hacer amigos se le da realmente mal, más que nada porque cree que todos son simples marionetas para cumplir sus metas y objetivos. Las críticas, no se le da bien criticar algo sin destruir la moral y el alma de la persona que sufre la crítica. Aceptar consejos, no es algo que se le de bien, cree que es el único que sabe el camino a seguir, por lo que no hace caso a nada que le diga alguien a modo de consejo. Respetar las puertas y paredes, debido a su aversión por la privación de la libertad suele romper toda puerta que ponga no pasar, prohibido el paso o cosas por el estilo, y en ocasiones rompe paredes también.

■ Gustos: La sangre y el dolor ajeno, le encanta ver una persona sangrar y sufrir un dolor insoportable, por ello se dedica a causar el mayor dolor posible a la vez que recolecta sangre de sus víctimas. El olor a muerte, el olor de un cuerpo en descomposición o el olor que él asocia a alguien que va a morir le encanta, por ello siempre se le verá con una sonrisa cerca de un lugar lleno de cadáveres. Matar, le encanta matar, por ello siempre matará a alguien, no puede estar mucho tiempo sin causar una muerte. La lealtad, pese a su faceta psicópata y asesina aprecia a los que son leales, sobre todo a sus principios. El sabor agrio.

■ Disgustos: La paz, un entorno lleno de paz es aburrido y carente de entretenimiento para Sasazuka. La piedad, palabra que no se encuentra en el diccionario del joven Eishi, no es capaz entender el motivo de ser piadoso, cuando el dolor ajeno es lo mejor del mundo. La privación de la libertad, no es algo que le agrade, más bien le causa náuseas y malestar ser privado de la misma, cree que todos tienen derecho de ser lo que sin y hacer lo que quieran hacer.

■ Sueños: Encontrar la receta mortal, una receta que traiga la muerte a todos. Encontrar el ingrediente más agrio que haya.

■ Pertenencias: Un frasco con sangre de Majin Capibara.

■ Mar de Origen: Nuevo Mundo

■ Botín de Partidas: Nada

Historia

Majin Island, una isla de grandes dimensiones, con una forma peculiar, similar a un animal de grandes colmillos y profundos ojos. La boca es la única bahía que hay en la isla y los colmillos son pequeños cabos que salen de la costa de las bahías, los ojos son dos lagunas muy profundas y de un color rojo intenso. El agua de esas lagunas es de ese color, no se sabe el motivo ni si hay como cambiarlo. Pues cerca de una colina de la isla, en las orillas de la laguna que hace de ojo derecho trascurre el inicio de esta historia…

Una noche oscura, la luna de sangre impera en el cielo nocturno, una mujer grita de dolor en las orillas del lago, sus gritos son de pánico y dolor, algo horrible debe de estar sucediéndole, la verdad es que sí le está ocurriendo algo terrible, un hombre está tratando de asesinarla, sin tener en cuenta el hecho de que la mujer está embarazada y seguramente a punto de dar a luz, pues ella yacía en el suelo mucho antes de la llegada de ese sujeto. La voz de la mujer es aguda, como si se estuviera desgañitando. De pronto el hombre saca una navaja y corta la barriga de la mujer, ignorando por completo las súplicas y los llantos de la chica. En ese acto deleznable y cruel como si mismo, deja al aire un bebé de ojos verdes intensos, que hace que el hombre pierda la concentración, e incluso, salga huyendo, no se sabe el motivo, pero el hombre solo corría y gritaba -Demonio, un demonio ha nacido…- Nada más aparte del llanto del pequeño neonato que quedó solo junto al cuerpo de su madre que estaba perdiendo la vida poco a poco, el muchacho lo percibía pues la temperatura de su madre descendía rápidamente, por suerte un hombre que pasaba por allí le cortó el cordón umbilical. En ese momento la madre del joven susurro algo, y ese algo era el nombre del niño -Sasazuka…Sasazuka Eishi…- Fue lo último que se le escuchó a la mujer antes de que muriera y así llamó el hombre al niño…




-¡EEEEEEEIIIIIIIISHIIIIIIIII DESPIERTA!- Grita Maiko, el hombre que adoptó y salvó al pequeño Eishi recién nacido de una muerte segura mientras le lanza una serie de ladrillos para comprobar que sus reflejos están en orden y que el entrenamiento puede comenzar con normalidad. El niño se levanta alarmado y no puede evitar que el último ladrillo le golpee la cabeza dejándole un enorme chichón en su frente que solo se inflama, lejos de sangrar o abrirse una brecha como habría ocurrido normalmente. -Maiko-san, eres demasiado rudo. Un día de estos le mataré…- Dice el joven en respuesta mientras se viste con su traje azul y su pañuelo. Maiko no para de reírse mientras acaricia la cabeza de Eishi y le cura el chichón de la frente que rápidamente baja de tamaño y no aparenta tan inhumano. -Aún te queda camino para vencerme, mucho más para matarme, anda, desayunemos que hoy comienza tu rutina de entrenamientos.- Dice el hombre de aspecto cruel y despiadado mientras baja por las escaleras a una velocidad de espanto, seguido de cerca por el joven Sasazuka. Era la primera vez que Maiko le hablaba de entrenar por lo que el pequeño no sabía a lo que se iba a enfrentar de aquél momento en adelante.

El desayuno trascurre con normalidad, bromas y chistes de uno y de otro mientras ingieren alimentos que a simple vista parecen más bien venenos que alimentos. Tras terminar tiran los platos a la cubeta de la encimera para que luego limpien y salen de la casa. Maiko se adelanta y le hace una señal a Eishi para que le siga, el joven muchacho inocente y desconocedor de lo que le aguarda sigue a su salvador hasta un claro, un lugar desconocido para el muchacho pero sí familiar para Maiko. -Te quedarás aquí hasta que él venga, te espero en casa, corre más que él no aquí se acabará tu vida.- Dijo Maiko justo antes de desaparecer sin dejarle tiempo al pequeño Eishi de preguntarle quien era él, aunque no tardó mucho en saber quién era, un enorme ser, similar a una capibara, pero del tamaño del ayuntamiento de Tokyo, sale de entre los grandes árboles de la isla y empieza a perseguir al joven de cinco años que empieza a correr, aquél bicho tiene una velocidad asombrosa para su tamaño, alcanzando al muchacho en poco espacio, por suerte en aquella ocasión la distancia entre la casa y el claro no era muy grande, y aquella criatura no se apartaba del bosque, así que cuando el bosque terminó el animal volvió a esconderse. -Maldito animal psicópata, casi me mata ese bicho Maiko-san.- Recrimina el niño con una voz rota y fría, su personalidad ya quebrada por la situación en la que nació ahora es peor. Tras una risa la única respuesta de Maiko fue que el muchacho se dirigiera a la cocina a preparar la comida, que la tarde volvería al mismo entrenamiento. El chico bajó la cabeza y se puso a cocinar, algo que aprendió a hacer bastante bien debido a que siempre cocinaba él.




-¡EEEEEEEIIIIIIIISHIIIIIIIII DESPIERTA!- Grita Maiko, el hombre que adoptó y salvó al pequeño Eishi recién nacido de una muerte segura mientras le lanza una serie de ladrillos para comprobar que sus reflejos están en orden, para seguir con la segunda etapa del entrenamiento. El joven no tarda en apartarse de la trayectoria de todos los ladrillos y lanzarle uno de vuelta al hombre que está junto a su puerta. Ahora, a sus 10 años, es el chico más rápido de su isla, pero no convive con los demás niños, su vida está versada en el entrenamiento que le impone su maestro así que tampoco le importa mucho esa referencia que le hace su maestro. -Maiko-san, vamos a la cocina, que te prepararé el desayuno comilón psicópata- Dice el joven mcuhacho mientras se viste con su traje azul y se coloca los zapatos y los guantes. Poco tarda en bajar y hacer un desayuno digno de reyes con unos pocos ingredientes que tiene en la cocina. -Maiko-san, ¿qué entrenamiento comenzaremos hoy?- Pregunta Sasazuka con una voz fría y calculadora, pero con un toque cálido que tiene con ese hombre por todo lo que ha vivido con él. -Hoy entrenaremos tu fuerza, será tu nueva rutina por los próximos días hasta que yo te avise.- Responde Maiko mientras come una de las tortas preparadas por su aprendiz y con un tono cálido, como el de un padre a un hijo.

Tras el desayuno se marcharon, pero esta vez a un edificio cercano a la casa, donde un enorme caparazón de piedra reposaba en el centro rodeado por varios de tamaños muy variados. -Eishi-kun, el entrenamiento será ir levantando repetidamente todos y cada uno de los caparazones de esta sala, uno tras otro y mientras no puedas levantarlos todos cien veces sin detenerte entremedias no pararás de entrenar. Aquella del centro pesa un total de 75Kg las demás son más livianas, comenzarás por las exteriores que pesan 2Kg cada una.- Dijo Maiko antes de que el niño de apenas diez años se pusiera a levantar caparazones con repeticiones hasta donde su cuerpo soportaba. Así pasaron los días, y el chico no logra más que terminar dos de los caparazones…Así pasaron los tiempos y nada…




-¡EEEEEEEIIIIIIIISHIIIIIIIII DESPIERTA!- Grita Maiko, el hombre que adoptó y salvó al pequeño Eishi recién nacido de una muerte segura mientras le lanza una serie de ladrillos para comprobar que sus reflejos están en orden, para seguir con la segunda etapa del entrenamiento. El joven no tarda en apartarse de la trayectoria de todos los ladrillos y lanzarle uno de vuelta al hombre que está junto a su puerta. Con la fuerza que obtuvo en los cinco años de entrenamiento el hombre no tiene más remedio que apartarse, pues de tratar de detenerlo acabaría rompiéndose la mano sin remedio. -Maiko-san, vamos a la cocina, que te prepararé el desayuno comilón psicópata- Dice el joven mcuhacho mientras se viste con su traje azul y se coloca los zapatos y los guantes. Poco tarda en bajar y hacer un desayuno digno de reyes con unos pocos ingredientes que tiene en la cocina. En esa ocasión Maiko tenía un aspecto serio, casi taciturno. Eishi lo percibió y se sentó delante de su mentor con expresión seria, esperando las palabras del hombre que tenía por maestro. -Eishi, no puedo seguir entrenándote, tendrás que buscar la forma de fortalecerte, aprender a emplear tus capacidades físicas por tu cuenta, pues mañana ya no podré hacer nada más.- La mirada de Eishi se vuelve pétrea, sin mostrar signos de llanto o cualquier otra debilidad, siguiendo las directrices de su maestro. -¿Por qué Maiko-san?- Pregunta el muchacho con la voz más fría que había puesto en toda su vida, ahora a los quince años. Tras un suspiro y una mirada fugada el hombre alza la mirada y mira a Eishi a los ojos. -Un hombre llamado Vak me envenenó anoche en una fiesta, calculo que mañana amaneceré muerto, no te forzaré a buscar venganza, pero haz lo que tu corazón te dicte con esta información…- Respondió el hombre para probar el magnífico desayuno de su aprendiz por última vez. Pasaron las horas y se fueron a dormir, Eishi durmió malamente pensando en las palabras de su maestro, su padre, y al amanecer el joven se dirigió a la habitación de Maiko, encontrándolo muerto…-Te vengaré Maiko-san, nadie me detendrá hasta que Vak esté muerto…- Dijo el joven para salir a la isla buscando formas de luchar, pasando así seis años vagando de dojo en dojo aprendiendo diferentes estilos de combate, así por seis años hasta la actualidad…