El verdadero destino de una espada [Pasado-Privado] (Max & Bat)

El país de Wano era un lugar que e querido ir desde la primera vez que me habían contado sobre su existencia, lleno de sumarais tan poderoso, guerreros legendarios de este estilo de lucha se encontraban en ese lugar. Cuando llegue a la isla lo primero que logre ver fue que era un lugar bastante tradicional con muchas decoraciones antiguas como si estuvieran celebrando alguna clase de evento. Kimonos y Katanas era lo único que veía en las vestimenta de las personas, hasta las mujeres portaban katanas. "Así que las mujeres también son samuraís." Fue lo que pensé pues no estaba acostumbrado a que la mayor parte de las mujeres porten una arma samurai con la gran cantidad de machismo que hay en este mundo era algo muy extraño ver algo como eso.

-Me pregunto donde habrá algún lugar para hospedarse algunos días aquí. (No tenia intención de marcharme en un solo día, así que empece mi búsqueda por un departamento u hotel)

Camine durante varios minutos viendo a todas partes por si me cruzaba con algún edifico para quedarme algunos días, aunque en el País de Wano era difícil orientarse. Me detuve en mitad del camino, mire hacia el cielo y pude notar que estaba nublado aunque solo fuesen nubes blancas casi inofensivas podrían convertirse en nubes de lluvia en un parpadeo. "Tendré que darme prisa." Mojarme era algo que no quería así que en un momento a otro acelere el paso mientras intentaba preguntar a la gente que pasaba donde podría encontrar lo que ando buscando. Uno de ellos amablemente me dijo que en un bar no muy lejos de aquí podría encontrar esa información, pues en ese lugar se reúnen muchas personas que vienen de turismo por unos días. Era un lugar perfecto donde preguntar, acelere el paso y me fui directo hacia esa taberna.

-Espero que aya alguien que sepa donde esta el lugar para hospedarse. (Dije mientras en frente de mi logre ver aquel bar que andaba buscando)

Cuando entre al bar este no estaba lleno pero tampoco estaba vació, eran muy pocos para mi gusto. Me dirigí hacia la barra y me senté allí pidiendo algo de café con leche. Estuve esperando para analizar la situación, de todas formas no iría a una persona directamente preguntándole sobre la dirección a un lugar. Conozco a muchas personas que se molestan por un comportamiento similar, simplemente me relajare y esperare a que algo o alguien pase por ahí. Aunque sea algo aburrido tener que esperar en ese lugar tenia mi café con leche que me había dado el hombre de la barra el cual paso a limpiar una copa tras otra lentamente.