El golem de carne contra los agentes gubernamentales

Parece que las cosas estaba a punto de cambiar no había terminado de hablar con mis compañeros cuando a lo lejos justo enfrente nuestro apareció un grupo de ghouls, no tardamos en despacharlos, pues Alwyn era realmente capaz con su rifle y babieca y yo los destruíamos en el combate cuerpo a cuerpo.  Sin costar mayor esfuerzo acabamos con ellos, estaba claro que estos soldados eran carne de cañón y eso me enfurecía, si bien soy joven sigo siendo un gigante por lo que creo que soy una amenaza mayor como para mandar a por mí estos meros soldados.

En cuanto acabamos con ellos por fin algo digno se puso al alcance de nuestros ojos. Un ser de gran envergadura completamente remendado, seguramente fuera otra de las abominaciones del rey Derian. Sin darme tiempo a reaccionar Alwyn salió volando para buscar un buen punto de disparo a la vez que me dijo que ella me cubría.

Observé como el enemigo cargaba directamente hacia mí. Le di órdenes a Babieca para que se apartase de su trayectoria y que solo interviniera para cubrirme. Me aseguré de que mi armadura estaba en buen estado y cogiendo mi tridente lo alcé en dirección al Ghoul el cual se encontraba ya a pocos metros de mi posición. Con un rápido movimiento grabé la runa Uruz automáticamente la punta del tridente se torno roja y unas llamas rojas sobresaliendo de ella.  

Cuanto estaba a punto de impactar sobre mi realicé el movimiento conocido como Kamui el cual me dotaba de una gran agilidad, gracias a él intente esquivar el golpe de mi enemigo desplazándome lateralmente para posteriormente atacar al enemigo justo debajo del brazo derecho, justo donde se encontraban las costuras de ese brazo.    

El golpe que lancé resulto ser muy efectivo pues el brazo de la mole de carne se quedó colgando del cuerpo por unos jirones de carne, si bien no había sido un golpe fatal pude haber descubierto un punto débil para acabar con él, si no era capaz de sentir dolor puede que no se diera cuenta de sus amputaciones, por lo que solo tengo que atacar a las articulaciones.

Mientras pensaba cual iba a ser mi siguiente movimiento, observe que en el lugar donde mi enemigo recibió el golpe manaba una especie de gas de color verde nauseabundo. En ese momento Babieca empezó a bufar dándome a entender que ese gas era nocivo para mí. Al volver la vista hacia mi enemigo comprendí que contra lo que estaba luchando era una abominación, un ser que no debía existir sobre la tierra y que debía ser erradicado. Si Derian ganaba la guerra estas criaturas acabaran llegando a todos los mares destruyéndolos y causando una gran devastación.

No estoy dispuesto a consentirlo, por mucho que me cueste nada acabara con mi resolución y mi voluntad, acabare contigo y ayudaré a poner fin a esta guerra.

En ese momento escuché a mi compañera Alwyn advertirme de que era posible que el gas explotara. Si bien no estaba seguro de si iba a ocurrir no quise arriesgarme así que me mantuve alerta de cara a una futura explosión. El siguiente movimiento de la mole de carne fue atacarme con todas sus fuerzas con su brazo izquierdo el cual aun se encontraba cosido a su brazo. Esta vez no pensaba esquivar su ataque, lo soportaré y contraatacaré.

Segundos antes del impacto grabé en mi pecho la runa de protección “Wunjo” la cual aumenta mi defensa corporal. Además reforcé mi cuerpo usando la técnica Tenkai.

El golpe me desplazo varios metros hacia atrás la fuerza del impacto fue suficiente para moverme una buena distancia aun con toda mi protección es probable que el golpe me dejara un buen moretón. Sin perder un segundo recupere la distancia con mi enemigo con dos pasos y apuntando con el tridente el cual aun se encontraba imbuido con la runa de fuego ataqué en dirección a las costuras del brazo izquierdo el cual debería estar recogiendo en estos momentos después de lanzarme el golpe.

Al acertar el golpe con mi tridente observe como un hueco se abrió en la cabeza del coloso de carne, para a continuación explotar. Durante una fracción de segundo llegue a creer que el combate terminó, mis golpes ardiendo y los impactos de bala de mi compañera causaron  la destrucción de ese asqueroso ser. La tristeza por no encontrar un rival digno se vio reflejada en mi rostro, pero un bufido de Babieca me sacó de mi ensoñación. El cuerpo de la abominación se empezó a inflar causando una gran explosión de restos corporales podridos y una asquerosa y repulsiva nube de gas.

Si no hubiese escuchado el aviso de mi fiel compañero seguramente no hubiera podido reaccionar a tiempo, nada más hacer contacto con mi rostro los ojos y la garganta se me empezaron a irritar, las ganas de encontrar un enemigo se fueron igual de rápido que un rayo, sin duda al maldito rey no le importaba usar los métodos más detestables para acabar con su enemigo.

Sin perder un segundo fui rápidamente a por Babieca usando el “Soru” el cual sin mi ayuda no iba a ser capaz de escapar de a explosión, recogiéndolo con mis fornidos brazos le cerré la boca con mis manos y me desplazarme a máxima velocidad usando nuevamente el mismo movimiento. Al cabo de unos segundos escuche ya fuera de la nube de humo a Alwyn la cual se encontraba llamándome.

Tranquilo amigo no dejare que nada malo te pase.

Con mi camello en los brazos y tosiendo me dirigí al encuentro de mi compañera guiándome por los sonidos de su voz.