El Nacimiento de la Ventisca.

Richard nació hace 18 años en una de las partes más profundas del Red Line, en una aldea llamada Aldea del Vendaval. Allí tuvo una infancia más o menos feliz, por lo menos hasta los 10 años. Alrededor de los 6 años, su padre empezó a instruirle en el arte de la espada, pues vio que tenía potencial para ser un buen espadachín. También empezó a enseñarle a controlar sus emociones de la misma manera que el abuelo de Richard le enseñó a él, pues en su familia era común que la gente naciese con un exceso de energía que se liberaba al experimentar emociones negativas muy intensas con resultados catastróficos. De la misma manera le enseñó a controlar esa misma energía y usarla a su favor, pero era muy complicado y aun a día de hoy le resulta difícil. A los 8 años perdió a su madre y siendo inocente como era, quiso crear algún aparato para revivirla, pero no fue capaz, aunque de ahí empezó a interesarse en la ciencia y en la tecnología, lo cual marcó su vida entera.

A los 10 años, una banda de piratas atacó su poblado, arrasando con todo y matando a cualquiera que se opusiera. Su padre luchó contra ellos llevándose a muchos por delante, pero ni siquiera él pudo evitar la muerte. Una bala le acertó en el hombro del brazo donde llevaba la espada y a partir de ahí todo le fue cuesta abajo. Siguió luchando pero pronto perdió el otro brazo y le destruyeron una pierna con un cañonazo. El capitán de la banda decidió humillarle antes de matarle y le obligó a arrodillarse ante él, poniéndole después el pie encima de la cabeza sin dejar de reír. Aquello fue más de lo que Richard pudo aguantar. Cogió su espada de entrenamiento de madera y, llevado por la ira y el poder que esta le proporcionaba, fue corriendo hacia aquel desgraciado que se atrevía a humillar a su padre. Algunos piratas trataron de detenerle, pero fue inútil. Los noqueó a todos de fuertes golpes en puntos débiles (por mucha fuerza que tuviera, tenía complicado lo de matar a gente con una espada de madera) y siguió corriendo. Cuando llegó a donde estaban dio un salto y, dejándose llevar por la inercia del impulso y por la fuerza de su ira, golpeó el cuello del capitán de la banda con una fuerza sobrehumana, dejándole sin respiración tiempo suficiente como para morir.

Después se dirigió a su padre tras ahuyentar a los demás piratas, y, con los ojos llenos de lágrimas, tuvo su última conversación con él:

-Richard, hijo mío… Te dije que te escondieras… -dijo, respirando con dificultad y escupiendo sangre.

-Ya lo sé, padre… Pero no podía soportar ver cómo te humillaban estando al borde de la muerte…

-Da igual… Lo hecho, hecho está… Así, al menos podré tener una última conversación contigo antes de morir…

-¡No, tu no te vas a morir, no puedes morir, te cuidaré, pero por favor no te mueras!!-dijo atropelladamente mientras lloraba.

-Hijo… A todos nos llega la hora alguna vez… Ahora debes ser fuerte… Haz que me sienta orgulloso de ti…

-De acuerdo, padre…-contestó, tragándose las lágrimas.

-Dos últimas cosas… Te entrego esta espada, lleva generaciones en nuestra familia… Parece una espada normal, pero tiene cualidades especiales... Está muy afilada y es muy resistente... Tiene cualidades especiales que están descritas en este pergamino... En él se encuentra gran parte de la historia de nuestro pueblo...-mientras hablaba, le entregó la espada y el pergamino.

-Gracias padre. La cuidaré.

-También te hago entrega de esto -dice mientras le entrega un medallón de oro con un águila pintada. -Es el sello de nuestra familia, que acredita que eres de una clase social alta, y que tendrás que enseñarle a tu tío en la Ciudad Roja, cerca de la capital Red Line para que esté seguro de que eres tú. Quiero que vayas con él y estés por lo menos 2 años antes de irte a la capital.

-De acuerdo padre.

-Quiero que cojas tus pertenencias más valiosas y quemes la casa, para que no puedan encontrar información de nuestra familia…

-¿Para qué la iban a usar?

-Podrían encontrarte fácilmente, pues sabes que hay algunos libros con información de nuestra familia… Por último… Quiero que sepas… Que siempre te he querido, Richard, hijo m…(la última palabra se quiebra en su boca y muere).

-¡Padre! ¡No! ¡Padre! ¡NOOOOOOOOOOOOOO! -gritó y lloró, liberándose de su agonía.

Tras cumplir los últimos deseos de su padre, se marcha, dejando atrás su infancia y viéndose obligado a madurar rápidamente para sobrevivir en un mundo lleno de bandidos, piratas y caos. Cogió provisiones de toda la aldea, que le servirían para un par de meses y se llevó materiales para reparar lo que se le rompiese.

No había caminado mucho cuando se encontró con un problema. Le asaltó un grupo de bandidos:

-Entréganos todo lo que tengas, niñato, y no te haremos daño.
- ...
-¿No entiendes lo que digo? Te la estás jugando.

Entonces, el jefe de los bandidos saca una espada de hoja curva, mientras Richard sigue caminando. La reciente pérdida de todo cuanto tenía le otorga una frialdad pasmosa y, sin que su enemigo se de cuenta, va preparando la espada de su padre.

-¡Te vas a arrepentir, criajo!

El jefe lanza un mandoble hacia Richard, pero este recuerda su entrenamiento y esquiva sin problemas el ataque, mientras aprovecha el desequilibrio del otro para sacar su espada y asestarle un golpe en el costado derecho.

-¡Cómo te atreves...!
-¿No sabes callarte?-dice mientras esquiva sus ataques.
-Vaya, por fin hablas. No te hagas el chulo por estar esquivando mis ataques.

Richard responde a su próximo ataque con un giro completo hacia la derecha y hacia la espada de su oponente, provocando una colisión. Tiene menos fuerza al tener solo 10 años, pero también por eso mismo sorprende a su rival al realizar ese movimiento, con lo cual se echa un poco para atrás, momento que Richard aprovecha para lanzar un golpe ascendente a la empuñadura del arma de su rival, lanzándola por los aires y dejándole desarmado. Inmediatamente después le pone la hoja de su espada a la altura del cuello. Tras esto, se da la vuelta y sigue su camino, mientras el resto de bandidos lo miran sorprendidos.

-A ver si no tengo que aguantar más cosas así... -piensa.

30 minutos después, Richard hace una parada. Consultando el mapa que lleva dice:

-A ver... Si sigo todo recto debería encontrarme una aldea... No tengo muchas ganas de pasar por allí, pero no hay más remedio...

Richard, resignado, se come un cacho de pan que se trajo y mira a ver si calculó bien la cantidad de provisiones que iba a necesitar:

-Bien, en teoría, esto debería llegarme para todo el viaje...

Sigue caminando durante un rato. De repente, le llega un olor a quemado. Richard echa a correr y se encuentra la aldea devastada:

-Malditos...-Richard ve la destrucción que hay y trata de controlar su ira.-Cálmate, debes concentrarte, a lo mejor hay supervivientes...

Richard busca entre los escombros y de repente escucha un gemido muy débil. Se concentra y va en la dirección del sonido. Llega a una casa en ruinas y deduce por el sonido que dentro de las ruinas hay un espacio vacío en el cual hay alguien. Un paso en falso y la casa se derrumbará, acabando con su vida.

-Maldita sea... Tengo que tener mucho cuidado... La única solución es usar la energía de la furia... Pero como salga mal, adiós... ¡Tengo que intentarlo!

Richard se concentra y empieza a reunir la energía. Al rato logra crear una esfera de energía, suficiente para destruir los escombros.

-A ver... Tengo que apuntar a la parte superior de los escombros...

Lanza la esfera con cuidado y por suerte acierta más o menos en el sitio adecuado. Los escombros se destruyen y el espacio vacío queda al descubierto. Richard se acerca y ve a un niño de 5 años. Ha perdido el conocimiento y está muy débil. Es difícil que sobreviva.

-Tsk... Demasiado tarde... Está muy débil, le deben quedar minutos de vida... Malditos piratas... -dice mientras piensa que va a hacer.- Lo mejor será dejarlo ahí, es imposible salvarlo.-mira alrededor y deduce que el ataque debió de ser reciente- Será mejor que me vaya, ahora mismo no estoy en condiciones de enfrentarme a esos desgraciados.

Richard se va, tratando de concentrarse en el viaje que tiene por delante y sintiéndose impotente. Por la noche hace una parada y traza una ruta en un mapa que cogió en su casa. Tras eso le echa un vistazo al pergamino de su padre:

-HISTORIA DE LA FAMILIA FROST:

Nuestra familia comenzó hace siglos, cuando la raza humana empezó a concentrarse en ciudades. El fundador de la familia, Buster Frost, era un hombre de mucho prestigio en lo que actualmente es la Red Line. Era el jefe de un equipo de investigación científica que había en aquel entonces. Se dedicaban a desarrollar y mejorar herramientas primitivas, para acelerar diferentes procesos de producción y consolidar aquella civilización primigenia. Por motivos desconocidos, tuvo que abandonar la ciudad y acabó fundando una pequeña aldea con su familia y algunas personas que fueron exiliadas. Buster uso sus conocimientos para ocultar la aldea, que es esta en la que vivimos.

Para defender la aldea, empezó a desarrollar primitivas espadas, adelantándose a su época, e instruyó a todos los ciudadanos en ese arte, instaurando la esgrima como tradición. Tras hacer todo esto, se dedico a forjar una espada especial, que se pudiera imbuir de diferentes elementos. Salió en un viaje con 6 personas y las fue dejando a cargo de unos templos elementales que solo las personas que fuesen de su familia pura, sin mezclas, podrían ver. Estos seis templos están por toda la Red Line, y forman una línea recta por todo el continente. Los 6 elementos son:

-Fuego: La hoja se recubre de llamas y aumenta la temperatura en un pequeño área a su alrededor. Esto se potencia si se tienen los seis elementos, otorgándole la capacidad de lanzar llamaradas y crear corrientes de fuego de diversas formas.

-Hielo: Lanza cristales de hielo y crea pilares sobre el agua. El bonus otorgado por los seis elementos le permite lanzar ondas de viento que congelan lo que tocan.

-Electricidad: Lanza pequeñas descargas al impactar. Dado que la empuñadura es aislante, estas descargas se dirigen a la espada del rival y se quedan ahí durante un tiempo antes de ir a su cuerpo. Su bonus elemental hace que caigan rayos en el sitio al que se apunte, pero tiene mucho retroceso.

-Tierra: Permite crear pilares de tierra en cualquier orientación y anular poderes eléctricos. El bonus elemental permite provocar deslizamientos de plataformas de tierra para desplazarse más rápido.

-Oscuridad: Permite lanzar proyectiles de tinieblas que confunden y aturden al enemigo, hasta el punto de dejarlo sin visión durante un período corto de tiempo. El bonus elemental permite crear unas tinieblas en un radio de 5 metros que provocan desesperación a la gente, ralentizan el movimiento y anulan la visión. Es un atributo de doble filo. Si no tienes suficiente poder y fuerza de voluntad, las tinieblas podrían despertar tu lado oscuro y poseerte, por lo que se recomienda que sea el penúltimo elemento en atribuir a la espada.

-Tiempo: Este atributo ralentiza el paso del tiempo para el resto del mundo, permitiendo dar muchos golpes en lo que para uno es poco tiempo. El bonus elemental ralentiza aun más y permite viajar uno o dos segundos en el tiempo, para evitar golpes o anticiparte.

Esta espada fue creada para defender y vengar nuestra familia en el caso de que se extinguiera. Richard, ese momento ha llegado. Usa bien la espada.

-Vaya... Interesante... Quizás debería visitar el Templo del Hielo antes de visitar a mi tío, pero no creo que tenga la fuerza necesaria... Todavía no. Bueno, en marcha. Aun me queda un tiempo antes de llegar a Ciudad Roja.

Dos meses y algunas peleas más tarde...

Richard llega a Ciudad Roja, una bulliciosa metrópolis en la que es difícil no morir. Sobre todo si tienes acreditación de noble como un medallón con el símbolo del águila y eres un niño aparentemente desarmado. Pero Richard no se fía de nadie, por lo menos no de buenas a primeras. Gracias al mapa de la ciudad, encuentra un atajo a la casa de su tío y se mete por un callejón. En él, hay un bar de mala fama en toda la ciudad por tener los clientes más brutos e imbéciles de la zona. Mas Richard lo desconoce, y aunque lo supiera, no le importaría. Lleva un rato caminando cuando se da cuenta de que dos borrachos le siguen. Richard sigue caminando como si no lo supiese y los lleva hasta un callejón sin salida en el tendrá ventaja. Echa a correr hacia la pared mientras dice:

-¿No sois conscientes de que las cosas nunca son lo que parecen? ¡Necios!- Richard apoya un pie en la pared mientras desenfunda la espada que le legó su padre. Sin disminuir su impulso, apoya el otro pie y pega una voltereta hacia atrás, colocándose en la retaguardia de los borrachos. Éstos, sorprendidos, se dan la vuelta, justo a tiempo de ver como Richard les da con la parte plana de la hoja en el cuello, dejándolos inconscientes.

-Nunca subestiméis a nadie. Podría ser lo último que hicieseis.

Richard se dirige a la casa de su tío y llama a la puerta con recelo. Su tío abre la puerta y Richard pregunta:

-¿Eres Gorun Frost?

-En efecto, ese soy yo. Y tú, ¿quién eres?

-Soy tu sobrino Richard.-dice mientras le muestra el medallón.

-¡Richard! ¡Cuánto tiempo sin verte!

-¿Nos hemos visto antes?

-Sí, pero cuando eras un bebé.-dice su tío, riéndose.- ¿Qué pasó? ¿Por qué estás aquí?

-Tengo malas noticias, tío. Unos piratas han arrasado la aldea. Solo quedé yo. Mi padre me dijo antes de morir que estuviese aquí contigo dos años antes de dirigirme a la capital de Red Line.

-Pasa dentro y cuéntamelo.- Gorun parece muy afligido.

[...]

-Y eso fue lo que pasó.

-Vaya... Supongo que tu padre quería que acabase de adiestrarte en el arte de la espada y despertase y entrenase el Haki de Observación oculto en ti...

-¿Haki de observación?

-Sí. Es una cualidad de nuestra familia, en todos los Frost puros existe ese Haki. Nos permite sentir las presencias a nuestro alrededor y anticiparnos a las acciones de nuestros rivales. También nos permite saber su nivel de poder.

-Vaya, no tenía ni idea.

-Y también debería de hablarte del séptimo poder de la Espada Elemental... Pero eso sera cuando llegue el momento.

-¿Séptimo poder? Interesante... Es cierto, parece que haya algo borrado en el pergamino.

-¿Estás bien, Richard? Has perdido muchas cosas recientemente...

-... Estoy bien, tranquilo. No puedo dejarme superar por mis sentimientos, tengo que seguir, para que mi padre se sienta orgulloso de mí.

-Bien dicho. Descansa hoy, mañana empezaremos el entrenamiento. Lo primero sera despertar tu Haki.

A la mañana siguiente...

-Bien, Richard, para despertar tu Haki tienes que concentrarte mucho. Este será el entrenamiento de la primera mitad del primer año. Por la mañana te sentarás ahí y te concentrarás todo lo que puedas para percibir la energía de tu alrededor. Una vez lo logres, lo incorporaremos al entrenamiento de la tarde, que será esgrima, con la espada de tu padre y lecciones para dominar los elementos y que cuando llegue el momento, sepas usarlos.

-De acuerdo, tío, haré lo que pueda.

-Calculo que tardarás 12 semana en despertarlo del todo y las otras 12 para entrenarlo. Quizás lo logres antes, en cuyo caso mejor.

[...]

-Esto es complicado, tío...

-Claro, ¿no sabes que todas las cosas útiles son difíciles de obtener? Tienes que ser paciente, Richard.

-De acuerdo...

A la tarde...

-Bien, Richard, te voy a enseñar un estilo de pelea con la espada muy útil. Soy el último Maestro existente de esta técnica y como tal, con ella puedo desarmar a casi cualquier espadachín en cuestión de segundos. Es una técnica llamada Kōrizādo, basada en la velocidad de ataque, los reflejos y una calma glacial. Intenta atacarme con tu espada.

-Entendido.

Richard se lanza a por su tío con cuidado, pero agresivamente y trata de golpearle con el filo de la espada, pero cuando parece que lo va a conseguir, Gorun, que hasta entonces no había hecho nada, bloquea rápidamente el golpe y ejecuta un serie de movimientos a una velocidad pasmosa. Richard se sorprende, pero no baja la guardia y trata de bloquear todos los que puede. En un momento dado, la insistencia y la velocidad de los ataques provocan que Richard se descuide por cansancio, rompiendo así su defensa. En menos de un segundo, Gorun engancha la guarda con su espada y lanza la de su sobrino por los aires.

-Como has podido comprobar, es muy eficaz. Si te enfrentas a un rival con poco aguante físico o a una de esas personas que confían solo en sus músculos, podrás derrotarlos fácilmente. Para esto quiero que despiertes el Haki de observación. Es esencial, tanto para contrarrestarla como para usarla. Tras el primer cuarto del tiempo que pasarás conmigo, dedicarás el segundo a mejorar el Haki, diseñar y crear dos espadas para este y otro estilo de lucha que te enseñaré. Para este segundo, sería útil que tuvieras el Haki de Armadura, por la fuerza que se necesita para dominarlo, pero es una cualidad poco común en nuestra familia. Mas si lo posees, se despertará cuando entrenemos ese estilo, en el segundo cuarto.

-De acuerdo, tío. Es una técnica muy interesante y creo que ya sé que espada crearé para ella...

Siguieron entrenando. Cada día que pasaba, Richard era mejor y empezaba a dominar el Haki de observación. Al final de las doce semanas, lo dominaba al nivel que su tío llamaba entrenado y ya había dominado el Kōrizādo casi a la perfección. Empezaron a ver el segundo estilo por las tardes y a trabajar en el diseño de las espadas por las mañanas. A Richard le encantaba esto último y sirvió para que su decisión de ser herrero y científico se afianzase más. También recibió nociones de medicinas, pues Gorun era más polifacético que una hidra.

-Richard, voy a empezar a enseñarte el segundo estilo, el Kaitakari. Se puede decir que es todo lo contrario al otro, pues aunque el objetivo es el mismo, romper la defensa del rival, se usan golpes lentos y demoledores en vez de la velocidad de ataque. Es una técnica de doble filo, pues la lentitud de ataque puede ser tu perdición. Además, se suele usar el poder de la ira que guardamos los Frost en nuestro interior para aumentar la eficacia, lo que la convierte en muy peligrosa. También es una buena técnica para contrarrestar al Kōrizādo, dado que sus golpes potentes y el uso de espadas pesadas permiten romper la secuencia de ataque del Kōrizādo y la defensa a la vez. Trata de atacarme.

-A ver si se notan los frutos de mi entrenamiento.-dice Richard con una sonrisa de satisfacción.

Blishard empieza tanteando, con algunos amagos y vigilando. Gorun había cogido un mandoble, así que tendría que tener cuidado. Lanzó un mandoble para compensar la diferencia de peso entre las espadas, pero su tío lo repelió con un golpe fuerte que lo desequilibró; se recuperó rápido y lanzo una serie de ataques. Gorun los esquivó y lanzó 3 golpes lentos pero potentes. Con el primero rompió su ataque, con el segundo, lo desequilibró y rompió su defensa y con el tercero mandó su espada por los aires.

-Bueno, ya has comprobado lo eficaz que es. También es un arma de doble filo, debido a la fuerza necesaria para usar las espadas. Y me ha parecido ver características del Haki de Armadura. Cuando bloqueé tu ataque, no te caíste, a pesar de la fuerza de mi contra. Esto será interesante...

-Tío, ¿podemos empezar a diseñar las espadas?

-Claro, ¿que tienes pensado para el Kōrizādo?

-Tengo pensado usar la técnica de laminación con aluminio, para lograr una espada ligera, que se pueda usar a una mano y permita lanzar muchos ataques en poco tiempo. Y para el Kaitakari tengo pensado hacer una aleación de fundición y plomo brillante, para darle peso, y una hoja cilíndrica, para aniquilar cualquier defensa que pueda tener el rival.

-Es una buena idea, adelante. El resto del tiempo que nos queda, entrenaremos el Haki de Armadura, harás las espadas y entrenarás con ellas, además de aprender sobre los elementos y sus cualidades.

Richard se fabricó las espadas con éxito. Empezó a luchar contra otras personas que Gorun iba eligiendo y empezó a ganarse el sobrenombre de Blishard por la frialdad, la impasibilidad y la velocidad con la que derrotaba a sus rivales. El tiempo pasó rápidamente y tras el tiempo estipulado por su padre, decidió que se pondría en marcha hacia la capital. Ya dominaba el Haki de Armadura al mismo nivel que el de Observación y dominaba muy bien las tres espadas, además de una daga que le regaló su tío para combates a corta distancia. A la hora de la despedida, Gorun le reveló todo lo que sabía acerca del séptimo elemento:

-Richard, he de decir que estoy muy orgulloso de ti. Tienes un don especial para la esgrima y para el aprendizaje.

-Muchas gracias, tío. Estos dos años fueron contigo fueron muy buenos. Si alguna vez tengo un problema, acudiré a ti.

-Antes de que te vayas a la capital, te revelaré todo lo que sé sobre el séptimo elemento. Se conoce como Poder Dorado o Fuerza Divina. Se dice que la ubicación del templo le será revelada al poseedor de la Espada Elemental cuando consiga los 6 elementos y esta Fuerza potenciará varias veces el poder de la espada, que adquirirá un aura dorada a su alrededor y podrá usar los 6 elementos por separado o combinados unos con otros. También le dará la capacidad de lanzar ondas de energía y su poder se duplicará cuando se use contra los rivales del poseedor. Sobre la localización, se dice que no está en Red Line, pero no sé mucho acerca de ello.

-Vaya... Muchas gracias, tío. Antes de ir a la capital, pasaré por el Templo del Hielo para atribuirle ese elemento a la espada. Después iré a la capital para ser científico.

-Hasta la próxima, Richard. Espero tener buenas noticias de ti pronto. Sigue tus ideales, nunca dejes que nadie te obligue a hacer algo que no quieres. Y que el odio no te impida aprender algo de tu rival.

-De acuerdo, tío. Hasta la próxima. Si no te vuelvo a ver, que sepas que nunca olvidaré estos dos años.

-Y toma, diez millones de berries para tu sustento. Dales buen uso.

-Gracias, tío. Adiós.

Richard comenzó su viaje hacia el Templo del Hielo. Allí tuvo que derrotar a varios magos, de los pocos que quedan en el mundo, que dominaban el hielo y eran los guardianes de su esencia. Tras esto, consiguió el elemento del hielo y un descendiente de los sabios fundadores de los templos imbuyó la espada con él, convirtiéndola en la Espada Glacial. Esto contribuyó al sobrenombre ya mencionado y Richard/Blishard Frost empezó a hacerse conocido por la Red Line como un espadachín muy talentoso para su edad. Cuando llegó a la capital, tenía 16 años, edad suficiente para trabajar y pidió una entrevista con un científico conocido como Profesor Álamo Enríquez, que le impuso como condición para ser auxiliar que hiciese un informe de una Akuma no mi que le habían enviado recientemente. Richard, lógicamente, aceptó.

-Conque tengo que hacer un informe de esta Akuma... Bueno, primero pondré la forma y el color, después, para realizar un informe más completo, me la comeré.

INFORME SOBRE LA AKUMA NO MI:

-Nombre: Kami Kami No Mi.

-Tipo: Paramecia épica.

-Aspecto: Es esférica, de color blanco, con protuberancias semejantes a pequeños tentáculos.

-Habilidades: Tras comerla, he pasado por un rato doloroso y he notado como me salían protuberancias de la cabeza. Me he mirado y son como tentáculos. Parece que puedo crearlos y usarlos a voluntad, pero están hechos de algo bastante más resistente que el pelo normal y son más gruesos. Es bastante útil. También puedo darle otras formas a mi pelo. He hecho un análisis y parece que están hechos te muchas células capilares, por eso son más resistentes y fuertes. Puedo lanzar proyectiles de diferentes formas, por lo que es muy versátil. También lo puedo retraer y que se confunda con pelo normal.

-Inconvenientes: Como toda Akuma, no me deja nadar. Además, parece que si se mojan este material que forma los tentáculos y el resto de cosas que cree, pierdo fuerza y me debilito. Si me cortan los tentáculos y las demás creaciones, pierdo velocidad, resistencia y fuerza, pero los puedo regenerar.

Tras entregar el informe, Richard fue aceptado y comenzó con el que sería el trabajo de su vida.

Peticiones: