La isla de las burbujas [Shiro - Ivan] [Privado]

Tal vez no había sido la mejor de las ideas ir a aquella isla. Es decir, un pirata con más de cuatrocientos millones por su cabeza, una isla llena de cazarrecompensas, esclavistas y gente al borde de la ley... ¿qué podría salir mal? Evidentemente todo. Tras dar unas vueltas por la zona comercial y reaprovisionarse de alcohol y sustancias algo menos legales, comenzó a notar que había gente vigilándolo. Aunque no le hubiera costado enfrentarse a ellos allí mismo, decidió que no era el mejor lugar para armar un escándolo. Había ido hacia allí para reaprovisionarse antes de irse hacia el norte, no para acabar con toda la Marina persiguiéndolo. Estaban demasiado cerca del Cuartel General como para que fuese una idea totalmente desprovista de sentido común hasta para Ivan. Así que eligió otra idea poco juiciosa pero con menos posibilidades de muerte: irse hacia la zona sin ley de Shabaody, hacia los manglares centrales.

Ahora se encontraba corriendo entre estos, con varios grupos de perseguidores. Su problema no era que tuviesen a nadie fuerte, individualmente podría despachar a cualquiera de ellos con facilidad, pero el problema es que eran muchos, bien coordinados y muy bien equipados. Justo tras pasar por debajo de una raíz escuchó un ruido a su izquierda, y una red se extendió sobre él. Frunció el ceño y localizó a través de esta al responsable, fijando su mirada sobre este. Metió ambas manos en el interior de su chaqueta mientras se encaraba a la red, y se lanzó a por esta extrayendo a Vanator de su chaqueta y lanzando una onda cortante. En lugar de cortar la red, esta se frenó y cayó hacia atrás hecha un lío. ¿Había resistido su ataque sin ser cortada? "Kairoseki" adivinó, sacando con su mano izquierda una desert eagle negra y disparando al responsable. Pese a la distancia acertó entre los ojos del cazador.

- Principiantes... ¡No os llegará con piedra de mar para derrotarme! - gritó para provocarlos.

Los escuchó llegar corriendo sobre la raíz y saltar. Eran cinco, con diferentes armas punzantes. Uno de ello llevaba una estaca, y por el brillo del metal, adivinó que las otras llevaban plata. La furia se dibujó en el rostro del Supernova, y con un grito liberó toda su Voluntad en un estallido en torno a él - ¡Es inútil! ¡Inútil! - El aire tembló y sus asaltantes salieron volando por donde habían llegado, estampándose contra el árbol, raíces o el suelo. El poder de su haoshoku se impuso sobre sus voluntades, dejándolos fuera de combate. Ivan suspiró, molesto. Le habían estado a punto de pillar con el truco del kairoseki unos auténticos novatos. Sería mejor largarse antes de que aparecieran más. Empezó a alejarse, cuando de repente captó un olor. Alguien más se acercaba, una única persona.

- ¿Otro más? Harías mejor rindiéndote que intentando tomar mi cabeza - dijo, frustrado - Puedes preguntarle a esos de allí si no me crees - dijo, señalando con la pistola a los cazadores inconscientes.

Esta vez si maldecía mi suerte de haberme metido de polizón en un barco del cual no tenia idea de donde era su rumbo pero lo había hecho para escapar de unos criminales que habían intentado asaltarme unos mees atrás en los que había tratado de conseguir maderas raras para poder hacer mi barco en los Blues siendo que, por suerte, había logrado esconder muy bien mis herramientas y mis cosas dentro de un refugio metido en el medio del bosque. Se les complicaría muchísimo encontrar ese refugio mas que nada porque estaba dentro de una cueva bajo una cascada casi en el centro del bosque que correspondían al bosque en donde me estaba alojando que era la isla de Baterrilla, cosa que me había costado demasiado tiempo y dedicación para convertirlo en un refugio seguro para cualquier persona y/o animal que pudiese encontrarme mas que nada por el propio peligro que correspondían ser los osos en esa época.

Para cuando deje de sentir que el barco dejo de sacudirse por el propio movimiento del mar y de que claramente escuche que las escotillas de embarque de un muelle no muy lejos comenzó a hacer los amarres necesarios para encallar el barco al muelle fue la señal justo para colarme entre uno de los huecos de las cañoneras y colgar del barco de tal manera que cuando cayera al agua, hiciera el menor de los ruidos posibles para no alarmar a los tripulantes del navío del cual me había colgado. Obviamente no sabia de quien era el barco o a que facción pertenecía pero era mejor no averiguarlo demasiado o de lo contrario me delataría de donde había salido dado que mi cabello claramente estaba mal cuidado por mi tiempo encerrado en las montañas y mis ropajes no estaban mejores que mi cabello siendo que claramente tenia señales de haber sido cosido en varias zonas mas con el apuro, no había traído ninguna de mis armas encima ni siquiera mi querida pistola siendo que dependería directamente de mi fuerza bruta.

Mas en esos momentos en lo que pude lograr alejarme de los muelles y donde diablos estaba, hizo que el alma se me saliera ligeramente del cuerpo debido a que sabia en parte de donde estaba y en la situación en la que me había metido dado que, con mi actual fuerza física, seria mas que una pulga en comparación al poderío de las personas que estarían circulando en Saboady mas cuando se trataba de la zona del mercado negro. Un escalofrió curso mi espalda mientras pensaba en como diablos salir de ahí sin apresado por algún esclavista, ser acribillado por algún pirata o criminal random o incluso peor, perder la vida de manera tonta tratando de escapar del lugar. La única manera era buscar un especie de transporte hacia otro de los manglares de la zona legal y poderme costearme de alguna manera el precio para poder volver a los blues mas cuando estaba por irme de la zona ilegal a la legal, una tiroteo fue lo que hizo que mi linea de pensamiento fuese dispersada y me tumbase contra un árbol para buscar algo de refugio así ninguna bala perdida me diese.

Para cuando deje de escuchar todo aquello una voz masculina de alguien mayor hizo que saliera de mis cabales siendo que eleve mis manos en gesto de que no tenia nada entre mis manos y me acerque lentamente hacia aquel hombre, cuyo parecido realmente se parecía en mi en algún sentido de la palabra pero realmente no podía decir nada por el miedo de que este me dejara igual de heridos que aquellos sujetos tirados en el suelo -Soy solo un civil que se perdió aquí.... perdón yo ya me iba, no vi nada - dije rápido mientras trataba de no ver la escena que estaba a mis pies mas el rostro de aquel sujeto realmente me sonaba de algún lado, siendo que lo primero era una mentira a medias por que si bien no tenia recompensa sobre mi cabeza que me haría ser un civil común y corriente, eso no queria decir que no formase parte de la piratería mas lo segundo realmente era verdad, ese problema no era el mio y realmente necesitaba fugarme de ese lugar antes de tener varios hoyos que no correspondían a mi persona.

De los matorrales salió un chiquillo asustado. Tenía el pelo blanco, como el suyo, y podía oler su miedo desde donde estaba. ¿Tanto le había impresionado, o simplemente era una persona en el lugar equivocado? Comenzó a excusarse torpemente, pero sus palabras sonaron poco convincentes. Había dudado demasiado, y en el momento en que habló pudo escuchar perfectamente su corazón acelerarse. Mentía, ¿pero en qué? Evidentemente en que no había visto nada pero... no, no podía arriesgarse. En el momento en que el chico albino se dio la vuelta, el vampiro se movió tan rápido que ya se había situado justo frente a él. Lo miró directamente a los ojos, ejerciendo su influencia sobre él para intentar calmarlo y hacerse sentirse confiado.

- Me parece que hemos empezado con mal pie... - esbozó una sonrisa irresistible, y alzó la mano con intención de tomarle por el mentón y hacerle levantar la cabeza, con delicadeza, casi acariciándole - no tengo intención de hacerte ningún mal. Dime, chico, ¿qué decías antes? Creo que por el miedo se te ha colado una mentira, pero que no tendrás ningún problema en contarme la verdad, ¿cierto? - ensanchó su sonrisa. Entonces se puso tenso al escuchar un sonido. Otro grupo se aproximaba, pero aún tenía tiempo para evitarlos. Tenía que tomar una decisión, y pronto. Miró hacia la espesura y frunció el ceño - Me temo que si no nos vamos pronto de aquí, habrá problemas. Ven conmigo - le tendió la mano, mirándole nuevamente a los ojos.

Si aceptaba, lo cogería en brazos y echaría a volar entre los manglares a toda velocidad, intentando perder a sus perseguidores. De hecho podría haberlos perdido antes con esa misma táctica, pero originalmente había pretendido eliminarlos para sacarse un problema de encima. Pensó en cómo en un pasado se habría quedado para eliminarlos de todos modos, y darse un festín con su sangre. Ahora se reía de aquella actitud inmadura y sin sentido. Una muerte tenía que servir un propósito; matar por matar era la actitud de un idiota. Sólo traía más problemas de los que arreglaba. Finalmente llegaron a una zona despejada, no muy lejos de la parte civilizada de la isla. Tenían a la vista el parque de atracciones, y el manglar donde estaban tenía un enorme 29 en pintura blanca en el tronco. El pirata descendió de los aires y se posó suavemente al lado del tronco. Asumiendo que su albino compañero le hubiera seguido, lo dejaría a su lado, entre él y el manglar, y se cruzaría de brazos.

- Creo que tienes alguna explicación que darme - dijo en tono serio, pero con una sonrisa.

hipnosis:

Realmente no esperaba ver a aquel hombre y no querer huir de su presencia porque claramente había recordado quien diablos era, debido a que había visto su wanted y eso me hacia sentir que mis piernas se volvían gelatina de pensar de que tenia a un supernova frente a mis ojos apuntándome con sus armas sin ningún miramiento de que yo estaba como un civil en esos momentos. Dado que si bien, podía defenderme con mis manos mas cuando estaba por dar la carrera de mi vida por mi existencia, este sujeto apareció de repente frente a mi y me tomo de esa manera el mentón que me dejo estupefacto siendo que su voz sonaba tan atrayente que no dude en cerrar los ojos apenas unos segundos en los que quede idiotizado por el perfil del hombre que tenia frente a mi, tanto así que podía sentir que algo de calor se quería acumular en mis partes bajas dado que, si bien no estaba dentro de mi rango de tipo de hombres por su edad corporal, algo en el me incitaba a complacerle todos los caprichos que este tuviese mas no sabia exactamente porque si hacia segundo atrás le tenia un pánico aterrador.

Intoxicado era la mejor definición de como estaba sintiéndome en esos momentos no fue que reaccione hasta que este me tomo por las caderas y me cargo de una manera tan vergonzosa que un gritillo de sorpresa se escapo de mis labios del asombro, sujetándome del torso de este en lo que este corría por la espesura de los manglares hasta que este mismo me dejo en el suelo en lo que yo logre apoyar mi cuerpo contra el enorme árbol, bastante mareado de todo lo que había ocurrido poco tiempo atrás. Pestañee ligeramente confundido ante la actitud de aquel hombre pero ya sin miedo me acerque hacia este y poniendome de puntas de pies, pose mis manos sobre el rostro de este para tratar de dibujarle una sonrisa en los labios de este - Un hombre tan bello como usted no deberia estar con frunciendo así el seño, se volverá viejo y eso no le hará bien a usted... - le dije a este tras dejarle de tocarle y apoyarme contra el arbol, mirando hacia otro lado con un ligero rubor en mis pálidas mejillas siendo que mordí ligeramente mi labio inferior por la sensacion de nervios que tenia encima.

-y sobre lo otro, realmente caí por error a la isla porque escapaba de unos ladrones que querían robarme y me metí de polizón a un barco pero realmente no esperaba terminar aquí... diablos realmente no se como volver - fue lo ultimo que dije tras revolver ligeramente mi cabello con ambas manos porque si bien, estaba soltando mas información de la que realmente estaba acostumbrada a liberar, algo en mi me hacia sentir que debía confiar en aquel sujeto cuya recompensa realmente era alta y ademas era perseguido por personas o por lo menos, eso ultimo había podido escuchar con mi fino oído en el transcurso de la huida en cuestión mas desde el momento de haberme apartado del mismo, nunca le volví a mirar a los ojos del supernova.

No entendía claramente porque pero trataba de ver claramente quien era esta persona y sus deseos, dado que no entendia claramente porque quiera cumplirlo mas algo internamente peleaba para salir de ese ensueñamiento y huir de la zona por la misma presencia de ese supernova, mas mi voluntad estaba siendo doblegada momentáneamente por aquel hombre cuyo parecido a mi persona era tan similar como lo Frost conmigo. Casi haciéndome pensar de que el mismo no tuviese una relación sanguínea conmigo o solo ya era la paranoia plantada por el otro hombro mas su voz y el chasqueo de su lengua hizo que saliera de mi embelesamiento acerca de que alguien se estaba acercando a nuestra posición siendo que este me había pedido que me encargara de aquellas personas que le estaban molestando.

Obviamente estaba deseoso de cumplir ese deseo pero estaba aquel código de conducta sobre asesinar, por lo que tendría que ver la forma de someterles sin matarles y por esas razones mire a mis alrededores porque no tenia manera de saber contra lo que me estaba por entrenar. Aun así, salte del árbol con rapidez y pose mi oído sobre el suelo para poder escuchar claramente aquello que se estaba aproximando hacia mi posición, notando que aquel hombre había desaparecido de mi vista no sin antes decirme el tema de distraerlos, siendo que yo tenia otras ideas de proceder porque después de todo, los bosques era casi mi terreno predilecto y sin mas había dejado su espada tirada en el suelo oculta entre la maleza, donde creí que este no se había dado cuenta de su perdida.

Mirando a mi alrededor, y denotando que el sonido proveniente eran de cascos de caballos, tome la iniciativa de buscar lianas entre los arboles y acomodarlas de tal manera que pudiesen estar a mi mano para hacer la emboscada. No tenia muchas maneras para asustar a los corceles que dejar caer sobre sus cabezas insectos como arañas y ciempiés para hacer que estos se asustaran y huyeran despavoridos por la selva, ademas de tirar a sus jinetes al suelo por esta misma razón. La simulación en mi mente sucedió exactamente como lo había pensado, habiéndole arrojado, con parte de ropas, los insectos a los tres jinetes, cuyos caballos huyeron y se perdieron dentro de la selva, mas yo aproveche para soltar un poco las lianas y acomodarlas de tal manera que les quedara enredadas en los cuellos de aquellos sujetos.

Salte del mismo árbol de donde sostenía las mismas para aplicar un peso extra, ademas de las pesadas rocas que había atado a los extremos de las lianas, para ahorcar lo suficiente a estos hombres hasta que estos quedaran totalmente inconscientes por la falta de oxigeno y terminar de tratar de quitarse la improvisada soga de sus cuellos. Me daba algo de repelús verles de esa manera pero era la manera mas efectiva que se me había ocurrido en tan poco tiempo ademas de sorprenderme que débiles habían sido estos, suponiendo que estos habían sido un grupo de exploración, mas al ver que estos seguían respirando pero completamente fuera de combate, golpee suavemente el árbol donde había visto desaparecer a aquel hombre - Estamos fuera de peligro por ahora... por cierto se te cayo esto y Diablos! - exclame eso ultimo porque realmente cuando saque aquella arma del suelo, había notado claramente la calidad de la misma cosa que era algo que nunca me hubiese imaginado ver ni en mis mas locas fantasías porque después de todo, el tiempo en mi exilio había largo y sin contar de lo costo que seria aquello, mas debía regresarsela a aquel hombre.

Aun así, el alejamiento de este me había hecho dar cuenta lentamente que no solo había ayudado a otro pirata, sino que estaba en sumo peligro por los dos flancos porque si este era perseguido, era porque algo había hecho ademas del costo Wanted que se cargaba encima que haría que cualquier cazarecompensa le buscara intensamente para tener su propio tesoro.