Ashura
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
El dia de la revolucion habia llegado. Habia dejado señalada esta fecha en el calendario como el momento de mi vida en el que todo cambiaba, la primera vez que el heroe revolucionario emprendio su viaje para derrocar al gobieno, el-
- ¡¡Uaaaaahhh!! ... -bostece ampliamente mientras me desperezaba en la litera, me rasqué en el peludo pecho debido a un pequeño escozor mañanero y me estiré las patas tanto como pude. Momentos antes fui alertado por los miembros del barco en el que viajaba, un pequeño carguero de la Armada Revolucionaria que se dedicaba a dejar a los reclutas del South Blue que debian partir en diferentes misiones por todo el mar. Yo estaba asignado a una de ellas en la isla de Õkyū mazushī, donde acompañado de otro de los reclutas mas novatos tendria que infiltrarme por un canal hasta la antigua guarida de una banda donde, al parecer, se estaba tejiendo una red de trafico de drogas muy potente que se expandia por todo el el oceano. "Bueno..." pense mientras de un salto me incorporaba y aterrizaba en el suelo, recogiendo mi ropa y perezosamente colocandome dentro. "Creo que tenia que presentarme en la cubierta... Que asco de organizacion... Hacerme madrugar para trabajar, menuda trato a sus subordinados... ".
Con un caminar pesado y triste, cogi mis armas y las enfunde a ambos lados de la cintura. Sali del camarote silbando una pequeña cantinela mañanera que se asemejaa mucho a cualquier paso militar, todos monotonos, marcando bien los pasos, sin espacio para la creatividad y el divertimento. Asi era como me sentia por dentro. Pero sin duda era un pequeño precio a pagar con tal de conseguir mi objetivo, adentrarme en el submundo gracias a los contactos que la Armada me proporcionaria y acceder a la informacion necesaria para conseguir "La Rosa Eterna". Asi que, al fin y al cabo, esta solo era la primera de muchas otras misiones con ningun otro sentido mas que el tocar un poco las narices al Gobierno Mundial. Finalmente llegue hasta la cubierta donde uno de los superiores esperaba a los reclutas para dar las ultimas instrucciones y presentar el grupo, o en este caso, el duo que se encargaria de la infiltracion.
- ¡¡Uaaaaahhh!! ... -bostece ampliamente mientras me desperezaba en la litera, me rasqué en el peludo pecho debido a un pequeño escozor mañanero y me estiré las patas tanto como pude. Momentos antes fui alertado por los miembros del barco en el que viajaba, un pequeño carguero de la Armada Revolucionaria que se dedicaba a dejar a los reclutas del South Blue que debian partir en diferentes misiones por todo el mar. Yo estaba asignado a una de ellas en la isla de Õkyū mazushī, donde acompañado de otro de los reclutas mas novatos tendria que infiltrarme por un canal hasta la antigua guarida de una banda donde, al parecer, se estaba tejiendo una red de trafico de drogas muy potente que se expandia por todo el el oceano. "Bueno..." pense mientras de un salto me incorporaba y aterrizaba en el suelo, recogiendo mi ropa y perezosamente colocandome dentro. "Creo que tenia que presentarme en la cubierta... Que asco de organizacion... Hacerme madrugar para trabajar, menuda trato a sus subordinados... ".
Con un caminar pesado y triste, cogi mis armas y las enfunde a ambos lados de la cintura. Sali del camarote silbando una pequeña cantinela mañanera que se asemejaa mucho a cualquier paso militar, todos monotonos, marcando bien los pasos, sin espacio para la creatividad y el divertimento. Asi era como me sentia por dentro. Pero sin duda era un pequeño precio a pagar con tal de conseguir mi objetivo, adentrarme en el submundo gracias a los contactos que la Armada me proporcionaria y acceder a la informacion necesaria para conseguir "La Rosa Eterna". Asi que, al fin y al cabo, esta solo era la primera de muchas otras misiones con ningun otro sentido mas que el tocar un poco las narices al Gobierno Mundial. Finalmente llegue hasta la cubierta donde uno de los superiores esperaba a los reclutas para dar las ultimas instrucciones y presentar el grupo, o en este caso, el duo que se encargaria de la infiltracion.
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