[Privado]Aventuras en Water Seven[El Joker y Beliar]

El Joker se encontraba en Water Seven, disfrutando de un agradable dia y pensando haber si podría robar algún barco. Desgraciadamente era bastante inviable que pudiese hacer tal cosa. Así que fue a buscar a un carpintero que le gustase su visión del caos. Estaba pensando en hacer su propia banda. Fue a la parte donde están los famosos carpinteros de Water Seven, llegó y solo vio a gente en sus cabales. No vio en absoluto ningún loco. Se sintió decepcionado, parecía que se había equivocado de isla, allí desde luego solo había gente  honrada, de hecho creo que ni siquiera hay un manicomio en la isla. Según iba pensando todo esto se iba desanimando aún más. Se sentó decepcionado y triste. Entonces apareció una niña que le preguntó que porque pareciendo un payaso estaba tan triste. El Joker no estaba de humor y le dijo simplemente que no había encontrado un carpintero apropiado. Entonces la niña le dijo que si a lo mejor hablaba con el jefe de la empresa de carpinteros él le podría ayudar. Entonces la niña le señalo la mansión donde tenía el despacho aquel jefe de la empresa. Entonces con una sonrisa maléfica se le ocurrió robar allí y que al fin y al cabo a lo mejor no había sido un total desperdicio ir a aquella isla. Entonces se puso en marcha para ir a aquella mansión, llegó a aquel lugar y empezó a pensar como iba a entrar a allí discretamente.

Water Seven la ciudad destacada por su avanzado conocimiento en la carpintería, siendo de lo mejor que podías encontrar en el Gran Line y desde luego eso a mí me fascinaba. A lo mejor algún día cuando pudiera tener mi propio barco e incluso mi tripulación al mando vendría a este lugar para que realizasen la mejor carpintería náutica, pero para eso aun quedaría bastante tiempo. Este día me encontraba caminando con cierta tranquilidad con el grupo de marines como uno más junto con un capitán que comandaba este pequeño escuadrón, no iba a mentir no somos nadie, por ahora claro. Paso a paso avanzábamos, ondeando mi alargada gabardina rojiza con el símbolo de la Marina en mi espalda, con el brazo izquierdo sin estar colocado en la manga como es normal sino por fuera y posada sobre la parte que cierra la gabardina, como si fuese el vendaje típico de un brazo dañado, pero es por comodidad propia. Alcé un momento la vista hacia el cielo para dirigir la mirada al sol a través de mis gafas de sol redondas, admirando con mi ojo izquierdo aquel cielo despejado. –Hoy será un buen día…- Murmuraba en voz baja, mientras me había detenido y el grupo de Marines seguía su avance, no tarde mucho para reanudar mi marcha y alcanzarlos.

Imagen de Auron:

¿Cuál era el motivo de mayor presencia Marine en Water Seven este día? Al parecer el presidente, jefe o líder; lo que fuese el que gobernara en aquel lugar, nos informó de que comenzó a establecerse una especie de mercado negro en la carpintería, donde se sospechaban de una serie de nuevos integrantes en el cuerpo trabajador, aunque no existían pruebas, pero para eso vinimos aquí. –Bueno chicos aquí nos dividimos, Ali tu irás a los muelles habla con los trabajadores, Tilmon tu que tienes una cara de confianza busca información en las tabernas, Auron tu eres bastante serio así que ve a hablar con el jefe de los carpinteros, yo iré a hablar con el manda mas de Water Seven. En dos horas nos reunimos en la plaza central.- Daba las órdenes el Capitán del grupo llamado Riki, se basó en las cualidades y personalidad del grupo. Todos respondieron asintiendo con la cabeza, por lo que igualmente yo lo hice, emprendiendo camino directo para dirigirme hacia el edificio central de los carpinteros.

El Joker seguía planeando la forma de entrar en aquel lugar para robar cuando se dio cuanta de que la presencia de marines poco a poco iba en aumento. Entonces decidió dejar lo de robar en aquel lugar por un momento y decidió averiguar porque motivo había tanto marine por la isla.Entonces vio a un tipo que al principio él no sabía que era de la marina, el tipo llevaba una gabardina rojiza en la que detrás llevaba el símbolo de la marina. El Joker no se dio cuenta de esto hasta que este tipo pasó por su lado y vio el símbolo en su espalda. Entonces se le ocurrió preguntarle, ya que era de la marina y lo sabría, el porque de que la actividad de la marina hubiese aumentado tanto. Se acercó a él y le dijo con utilizando sus propios modales:

-Muy buenas agente, le importaría decirme ¿porque hay tantos marines en la zona?

Obviamente había muchas posibilidades de que aquel tipo no le respondiese. Pero a él le daba igual ya que seguramente iba a adivinarlo de una forma o de otra. Si algo le ha enseñado el caos es que las cosas se pueden conseguir de muchas maneras pero nunca sabes cual va a ser la que te de resultado. Antes de dejar responder a aquel tipo le dijo algo que no era por hacerle la pelota ni nada por el estilo simplemente le parecía gracioso que pensase que le estaba haciendo la pelota:

-Por cierto, me gusta su gabardina le favorece mucho.

Cada paso que daba se hacía de escuchar el resonar de mis botas contra el suelo, siendo escuchado en todo el ambiente debido a mi imponente altura, caminaba en solitario por las calles de Water Seven mientras la gente se hacía a un lado por la mera impresión al verme, también las dos espadas que colgaban detrás de mi espalda, siendo una de ellas de gran tamaño, imponían mucho. Además de la clara apariencia frontal con las gafas de sol, una cicatriz en el ojo derecho y el cuello alto de la gabardina tapando toda la boca. Incluso llegaba a ser gracioso, por el mero aspecto podría ser confundido por un oficial pero realmente no era gran cosa, sino un soldado raso más en la institución Marine.

Las calles me llevaron finalmente al último transito donde me dirigiría a la puerta principal del edificio del jefe de los carpinteros para atravesar el extenso jardín. Sin embargo ante mis ojos pude contemplar una persona algo peculiar con un rostro y maquillaje semejante al de un payaso de circo o de cumpleaños, no le hice mucho caso pues simplemente mantuve el silencio en mis labios; es extraño pero no era quien para juzgar esa apariencia al público. Pasé por su lado aunque unos pasos más alejado de él escuché como dicha persona llamaba mí atención llamándome agente. Detuve mi caminar y giré todo mi cuerpo hasta quedar de medio lado, quedando aquel sujeto a mi izquierda y mirar a través de mis gafas de sol su aspecto más detenidamente y atento a sus palabras, no respondí inicialmente ante su llamada de atención. Mantenía una seriedad en mi rostro propia de mi personalidad, hasta que decidí responderle. La cuestión podía ser algo delicada ya que no podía desvelar las verdaderas intenciones del motivo de mayor presencia Marine en la zona, pero comprendía aquel ciudadano curioso pues no era normal esta situación viendo caras nuevas aparte de los Marines habituales de Water Seven. –Simplemente pasamos por aquí para reponer provisiones y seguir nuestro curso hacia los mares.- Respuesta sencilla, corta y posiblemente creíble para cualquiera; no desvelaba el verdadero porqué pero tampoco actuaba de una forma grosera al ciudadano ya que eso sería descortés y maleducado, impropio de mi aunque otros lo hubiesen hecho, no todo el mundo es igual. –Le agradezco el cumplido ciudadano, si no le es molestia debo marcharme- De una forma bastante educada, aunque chocante para la apariencia amenazadora que solia ser malinterpretada. Continué mi camino para dirigirme hacia la entrada.

La cancela de doble hoja de color gris, se encontraba abierta de par en par, era un edificio donde todo aquel podía entrar de manera pública, aunque también es la casa del manda mas de los carpinteros y solicitar una audiencia con él era bastante complicada a no ser que fuese de suma importancia como atender a alguien de la Marina. Empujaba lentamente con la diestra que portaba el guante para abrir la puerta y avanzar con tranquilidad hacia el mostrador, donde se encontraba una linda mujer rubia que atendía a todo aquel que podía, por el momento nadie había que atender por lo que sería rápido. –Buenas, soy Auron de la Marina me gustaría hablar con el jefe de los carpinteros.- Posaba la diestra sobre el mostrador y miraba fijamente a la fémina. -¿Tiene usted cita?- Amablemente respondía la mujer. –Es importante.- No necesitaba decir mucho mas, no había cita que valiera para atender a la Marina. –Oh, bueno… en ese caso lo llamaré.- Descolgó el Mushi de su lado para comenzar a efectuar llamada hacia el director o jefe de los carpinteros…

El Joker se creyó por completo la respuesta de aquel marine, ya que porque no iba a creérselo. Era mas o menos normal que usen a los marines para recoger provisiones y esas cosas. Entonces el marine se fue hacía el edificio donde momentos antes El Joker estaba planeando robar. Vio que aquel tipo entró como si nada por lo que al parecer en aquel sitio podía entrar cualquiera. Pero obviamente con todos los marines presentes y con los guardias que seguramente había iba a ser imposible robar nada aunque se pudiese entrar por la puerta. Al Joker se le ocurrió una idea, lo que hizo fue ir tras un marine el cual estuviese solo, aunque le costo encontrarlo por fin vio a uno que se había perdido de su grupo y andaba por ahí solo. Entonces El Joker fue por detrás y con un golpe seco en la cabeza le dejo inconsciente. Entonces cogió al marine y fue a lo alto de un edificio cerca de donde él quería robar que casualmente era donde se había metido el marine con el que había hablado. Entonces le tachó con pintura roja el símbolo de la marina y puso una gran cara sonriente. Entonces le ató las manos y le colgó de las mismas del tejado siendo visible a todo el mundo que pasaba por allí. Con esto pretendía que allí se acercasen muchos de los marines que había en el edificio así que antes de que mucha gente lo viese se dirigió a la parte de atrás del edificio en el que quería robar. Empezó a escalar por la parte trasera para llegar al despacho del "jefazo", llegó a la ventana y antes de entrar vio a mucha gente observando al marine que estaba colgado y que ya se había despertado. Entonces miró por la ventana y vio que al jefe de los carpinteros le llamaban por que al parecer un tipo quería hablar con él, por lo que se propuso a entrar.

Aquella mujer quedaba con el interlocutor del Mushi en la oreja, mientras sonaba continuamente para que lo cogiese, viendo que tardaba un poco, dicha mujer se giró para mirarme y sonreír. –Jeje, parece que está algo ocupado, a ver si lo coge- Ante aquellas palabras y esa sonrisa disimulada para fingir agrado, arqueé la ceja izquierda hacia arriba siendo fácil de ver al sobrepasar el filo de las gafas de sol, como si me extrañara o importara bien poco.

De pronto muchos de los guardias que eran contratados como seguridad privada y a su vez algunos marines, comenzaban a correr con armas en mano bajando escaleras, de la planta superior a la actual, subiendo de las plantas inferiores y saliendo de entre los pasillos de esta misma planta para salir raudos por la puerta principal. Quedé algo perplejo siguiendo con la mirada aquel grupo de personas, que eran claramente visibles y audibles pues armaban buen jaleo. No dije palabra alguna ni si quiera me molestaría en preguntar pues irían a realizar alguna labor específica, como que a lo mejor atracaron un banco o a saber, yo vine a hablar con jefe y con él hablare. Aunque al parecer se trataba de un hombre colgado de un edificio vecino, pero yo no lo sabía ya que no lo veía ni le prestaba mucha atención por las ventanas.

Por fin, el jefazo cogió el Mushi y respondió a la recepcionista, pues esta se incorporó rápidamente. –Señor, un Marine solicita poder hablar con usted ahora, dice que es urgente… aja… aja… de acuerdo, se lo diré.- Tenia una breve conversación con dicho jefe, hasta que acabó colgando el Mushi y dirigió su mirada hacia mí. Yo me presenté tranquilo e inamovible, manteniendo la atención en aquella mujer a través de las gafas de sol. –Tiene tiempo libre estos momentos, así que puede atenderle, tercer piso, final del pasillo y la puerta que se encontrara de frente- La mujer daba el victo bueno de que podía verlo y las indicaciones necesarios para saber llegar al despacho. Asentí con la cabeza sin dar respuesta verbal alguna, era persona de pocas palabras, y comencé a caminar para dirigirme hacia allí.

Con el resonar de mis botas en cada paso como si fuese un eco en el edificio, subiría las escaleras correspondientes, recorrería el pasillo que dijo la mujer y una vez llegase al final de aquel pasillo, levante el puño derecho y di unos dos toques a modo de señalar mi llegada para entrar, con la izquierda giraba el picaporte y la empujaba con intención de ingresar en la habitación…

Cuando El Joker estaba dispuesto a entrar por la ventana vio que el jefe de los carpinteros al final no salía sino que iba a recibir a un tipo en su despacho. Entonces El Joker se quedó colgado de la ventana por fuera esperando el momento oportuno para entrar. Aunque seguramente no iba a tardar mucho en cansarse de estar sujeto a la ventana. Al fin y al cabo era un tercer piso y si se caía iba a sufrir bastante daño. De momento lo único que hizo fue observar y escuchar la conversación de los dos tipos, pero para su sorpresa el tipo que recién entró por la puerta era el mismo marine al que le había preguntado en la calle. Al parecer ese día no tenía mucha suerte, ya que lo del señuelo le había salido bien ya que la seguridad del edificio había sido reducido, pero justo cuando iba a entrar aquel tipo había aparecido. Sin duda El Joker estaba empezando a perder la paciencia, de hecho nunca ha tenido mucha paciencia, aunque de momento iba a a escuchar lo que decían, pero seguramente tarde o temprano iba a tener que entrar, sigan en la sala o no. Eso a él le daba igual de hecho por una parte deseaba entrar ya, esto era porque El Joker piensa que un robo sigiloso es aburrido y es mucho más divertido si robas  a gente. Incluso a lo mejor podría conseguir algo de recompensa por su cabeza quien sabe.

Giraba dicho picaporte y empujaba la puerta para dar unos pasos al frente, adentrándome en el interior, con mi ojo izquierdo miraba de izquierda a derecha para finalmente dirigirla hacia el jefe de los carpinteros. Igualmente por su parte dejaba de atender algunos pocos papeles en el tiempo entre que colgó y llegaba para observar a quien le visitaba. -¿Qué desea la Marina por estos lares?- Se dirigía abiertamente como si quisiese ir ya al grano, quizás por tener prisa, incomodidad por recibir a la Marina o a saber. Pasaron unos segundos tras sus palabras, no dije apenas nada, simplemente continué caminando hasta posarme delante de la mesa principal de trabajo de aquel hombre. –Soy Auron enviado de la Marina- Tomaba con mi mano izquierda el asiento más cercano frente a la mesa para retirarlo y sentarme, mirando a través de las gafas de sol a aquel hombre mientras proseguía hablando. –Nos han llegado rumores de que se ha extendido una especie de mercado negro. ¿Sabes algo?- Directo como a mí me gustaba y rápido como el querría.

El jefe de los carpinteros se llevaba las manos a la altura de la boca, apoyando los codos sobre la mesa y entrelazando sus dedos. –Es posible… Hace un tiempo que lo llevo notando, han llegado cada vez mas piratas y algunos carpinteros que trabajan para mi renunciaron porque se le negaron algunas cosas que eran inmorales.- No hay corrupción interna aparentemente, pero al parecer ex trabajadores se buscaron su propio negocio. Realmente esperaba que no supiera nada, incluso me esperaba lo peor, pero esto fue mas fácil de lo que uno había pensado. -¿Dónde puedo encontrarlos?- Continuaba con la siguiente pregunta, ya tenía el motivo, ahora solo quedaba saber dónde podía localizarles. Me levantaba del asiento, para dirigir mis pasos lentamente entre el resonar de cada paso hacia la ventana (donde esta Joker), parar mirar de pasada el exterior y girarme de espaldas a ella sin prestar demasiada atención y volver a mirar al individuo para ver si me contestaba. –Tengo entendido que formaron un  taller en la periferia de Water Seven, cerca del desguace de barcos.- Mantenía la misma posición que antes, pero ya sin estar yo en frente, por lo que su mirada quedaba perdida en el infinito, preocupado seguramente.

La tensión en el ambiente podía ser palpable, el silencio se mantenía en mi, poco a poco iba a girarme nuevamente para mirar hacia la ventana, donde mantendría la mirada el resto del tiempo posible y seguramente llegase el momento en que algo del exterior me llamase la atención (pudiendo ver a Joker).

El Joker escuchaba atentamente la conversación mientras se mantenía agarrado a la cornisa. Al parecer había un mercado negro en la isla, por lo que sabía que aquel marine había mentido. Dijo que algunos carpinteros, los cuales habían pedido cosas inmorales, se habían despedido y habían montado un taller en la periferia de Water Seven. Mientras escuchaba esto cada vez le costaba más mantenerse agarrado ya que poco a poco se iba cansando cada vez más. Entonces oyó que alguien se acercaba a la ventana pero no sabía si era el marine o el jefe de los carpinteros. Entonces sin pensárselo atravesó la ventana antes de que el que se estaba acercando le viese. Entonces entró saltando por encima del que, ahora si sabía, era el marine que estaba junto a la ventana. Al aterrizar entre el marine y el jefe de los carpinteros volvió a saltar hacía la puerta para que ninguno escapara. Entonces miro a los dos y dijo:

-Bien ahora sin hacer ningún ruido tú-refiriendose al jefe de los carpinteros-me vas a dar todo el dinero de tu caja fuerte, y no me mientas porque se que tienes en este despacho tuyo una caja fuerte.-entonces miro al marine y le dijo-Tú mejor que no te muevas.

Entonces sacó una pistola y un cuchillo, entonces apuntó al jefe de los carpinteros para meterle prisa para que le diese dinero, mientras que señalaba con el cuchillo al marine mientras le decía:

-Tú ¿te vas a quedar parado ahí o vamos a divertirnos un rato?

Avanzaba con tranquilidad hacia la ventana, pero surgió un acontecimiento que pocos se esperarían ver en aquel momento, un hombre de cara de payaso que anteriormente vi en la calle atravesó cual bestia la propia ventana propinando un salto con intención de caer en mitad, entre el jefe de los carpinteros y yo. No pude evitar ver aquella entrada como una amenaza, lleve mi mano derecha a la espalda para coger el mango de mi arma llamada Falou, desenfundarla lo más rápido posible posándola entre hombro y hombro, de derecha a izquierda, flexionaba las rodillas ligeramente y alzaba el brazo izquierdo hacia arriba para sacar dicha extremidad de la manga para tomar posición de un posible enfrentamiento.

Aquel sujeto pasaba rápidamente a estar frente a la única puerta por la que se podía salir, exigía un dinero de la caja fuerte del jefe de los carpinteros, apuntaba con la pistola hacia dicho hombre y con la daga o puñal hacia mí. –Valiente por tu parte atracar a un ciudadano frente a mí, ¿O quizás sea demencia?- Con una voz seria y mirando a través de las gafas de sol a aquel sujeto, mantenía la posición flexionando las rodillas, dejaba caer mi brazo izquierdo hasta posarla sobre la rodilla izquierda. –Señor, no obedezca, simplemente escóndase bajo la mesa.- No iba a tolerar que dañase al civil y mucho menos realizar un acto delictivo delante de mis ojos, dicho jefe de los carpinteros se quedo algo pillado sin saber qué hacer ni cómo actuar, el miedo y la confusión se era de notar en su rostro.

Inmediatamente tomé partido dando un paso al frente y usando únicamente la mano derecha fui a emplear un corte vertical descendente con intención de alcanzar el arma de fuego del enemigo –no la mano- no quería dañar mas civiles pero si intentar desarmarlo, impactara o no en la pistola, mi arma blanca continuaría su curso con intención de golpear en el suelo, tenia calculado el choque para evitar que se encajara en el suelo.

El Joker contemplo como ocurría exactamente lo que él quería, que aquel marine opusiese resistencia. Le dijo al jefe de los carpinteros que no hiciese lo que le dijo El Joker. Entonces el marine se abalanzó sobre El Joker lanzando un corte con su espada en dirección a la pistola, ya que al parecer de momento solo quería desarmarle. El Joker esperaba que el marine se resistiese pero no que atacase tan rápido, por lo que el ataque de aquel marine consiguió golpearle en la pistola y quitársela, de hecho ni El Joker sabía si la pistola que le había quitado era la de verdad o la de broma. Aunque eso tampoco importaba demasiado ya que si quitaba una vida prefería quitarla con un cuchillo. Entonces según le tiró la pistola al suelo con su espada El Joker dio un salto hacia atrás sacando otro cuchillo, por lo que ahora tenía dos cuchillos uno en cada mano. Lo siguiente que hizo El Joker fue clavar sus ojos en el marine y con una sonrisa demoniaca le dijo:

-Tu pareces fuerte, no como los compañeros tuyos a los que he matado, la verdad es que me gustan los retos. Vete preparando porque esto me parece muy divertido y al "tito J" le gustan mucho las cosas divertidas.

Dijo mientras se ponía en guardia y esperaba el siguiente ataque del marine. Lo que El Joker tenía pensado es que aquel marine parecía bastante fuerte, pero seguramente él sería más rápido y más ágil. Entonces pensó que no estaría de más que ahora atacase él. Pero no se acercó solo le lanzó dos cuchillos pequeños, uno a una pierna y el otro al pecho, esto lo hizo ya que cuanto más separados estén los objetivos más le costarían pararlos, claro que esa estrategia tampoco aseguraba nada. Al lanzar los cuchillos con la anterior estrategia se quedó en guardia para ver la reacción del marine y dependiendo de esta ejecutar él su próximo movimiento.

El movimiento inicial que había efectuado por tal de desarmarle fue un éxito, lograba golpear con el filo de mi arma, el suyo de fuego –al menos así me pareció y no un juguete- no había que dudar ni hacer suposiciones, cierto es que podría haber sido una pistola de juguete o de agua, pero no podía correr el riesgo, además de lo que primero que uno piensa es que fuese de verdad y así actuaria. La pistola impactaba contra el suelo al igual que el filo de mi espada, el enemigo saltaba hacia atrás con intención de alejarse de mí, aproximadamente la distancia que nos separaría serian de 3 metros, retiraba mi arma para colocarla frente a mí en posición vertical posando la punta sobre el suelo. En cambio el payaso desenfundaba una segunda daga, manejando una especie de estilo dual en armas pequeñas.

-¿Mis compañeros muertos?- Repetía de un modo interrogante, no creía que pudiera aquel hombre haber ejecutado a mis compañeros, tenia frente a mis ojos un asesino, seguramente un pirata. –No eres más que un criminal.- Repudiaba los actos que había confesado aquel individuo. Por el momento debía de mantener la calma, mantenía agarrado con la diestra el mango de mi arma aun en la misma posición, comenzaba a flexionar ligeramente las rodillas y nuevamente inclinaba mi cuerpo al frente dejando caer la izquierda hasta posarla en la rodilla izquierda, la mirada se mantenía fija en “J” así se hizo llamar, debía de estar atento a sus movimientos, a cada momento de mi vida como Marine, trabajo que decidí dedicar mi vida; me jugaba la vida en ello.

En el momento en que podía contemplar el movimiento inicial de sus manos para llevarlas al frente como si tuviera la intención de arrojar sus dagas, engurruñí las cejas, amarré más firmemente el mango de la espada y lo desencaje unos centímetros del suelo para usarlo como posible bloqueo. Las armas pequeñas fueron finalmente arrojadas y podía contemplar cómo se dirigían hacia la zona del pecho y otra a la pierna derecha. Eleve la espada lo suficiente para que la zona cercana al mango buscara bloquear la daga que se dirigía al mango y a su vez mantenerlo en una posición en diagonal para que la punta de la espada bloqueara el que se dirigía a la pierna, a la altura superior de la rodilla. A pesar de ser dos puntos distantes en el cuerpo y difícil de bloquear a la vez, para mí no lo seria, al menos no mientras poseyera unos espadones de un tamaño considerable de al menos metro y medio, para bloquear fácil sus dagas simultáneamente.

Tras dicho posible bloqueo, elevaría mi arma con un movimiento hacia la izquierda para pasar la mano y el arma en horizontal por encima de la cabeza, empleando una especie de giro de brazo, para acabar intentando asestar un golpe de derecha a izquierda a la altura del estomago del enemigo, dando un paso alargado al frente para buscar acércame al enemigo a una distancia de dos metros, siendo que entre la distancia de mi brazo y la extensión de mi arma podría lograr realizar un tajo horizontal con la punta del arma. –Por el poder que me otorga la Marina, ofrezco tu inmediata rendición.- Palabras que mencionaría en el momento en que estuviese realizando el giro con la espada sobre mi cabeza. No le ofrecia salida de escape posible que le permitiese, únicamente la rendición y seria arrestado por las autoridades competentes, es decir… YO.

La verdad era que lo de que El Joker había matado a unos marines era mentira solo lo había dicho para provocar a ese marine y al parecer lo había conseguido. Lo que también consiguió fue bloquear las dos cuchillas que le lanzó El Joker. Su próximo movimiento fue intentar asestar un tajo horizontal en la altura del estomago del peliverde, haciendo un giro de brazo por encima de su cabeza. Parecía que El Joker no tenía escapatoria posible pero la verdad es que El Joker vio venir su movimiento bastante bien y le dio tiempo de sobra repeler el ataque. No se agacho ya que al ser a la altura de el estomago le costaría mucho más si saltase. Entonces fue lo que hizo, salto esquivando el ataque del marine y justo cuando estaba en el aire y la espada le pasaba por abajo se impulso en el momento justo en la espada del marine para saltar a su espalda y caer de pie. Todos estos movimientos fueron posibles gracias a su velocidad y agilidad. Antes de aterrizar cuando estaba encima del marine estiró la pierna para asestarle una patada en la cabeza, claro que esta patada no era demasiado fuerte ya que no le quería que le frenase para seguir con su salto. Cuando aterrizo, nada más hacerlo le lanzó a su espalda otro cuchillo pequeño, y justo después saltó hacia atrás, otra vez, para ahora aterrizar en la mesa del despacho, básicamente para tomar distancia y dependiendo de los movimientos de su oponente y de cuantos ataques suyos había acertado y como le habían hecho efecto El Joker planificaría su siguiente ataque, aunque ya estaba preparado con otro cuchillo en la mano.

OFF-ROL:

Los cuchillos fueron detenidos de buena manera, impactaba cada uno en la hoja de mi arma quedando desperdigados por el suelo. Pasaba la espada en un movimiento giratoria por encima de mi cabeza, para realizar el corte horizontal sobre el payaso peliverde, si no fuese una persona de considerable agilidad el ahora mismo estaría chupando el suelo en un charco de sangre pero aun con vida, yo siempre me aseguraba de que mis golpes no fuesen letales pero si lo suficientemente dañinos como para intentar inutilizarlos. Contemplaba como el adversario se impulsaba a modo de salto a una altura suficiente como para que la hoja de mi espada pasara justo por debajo de él, haciendo de mi espada un  trampolín para impulsarse con intención de sobrepasarme, aquello provocaría que continuara con la inercia del giro pero haciendo que mi arma descienda hasta impactar en el suelo y detenerme en seco.

-Muy ágil.- Murmuraba en voz baja a modo de alago al enemigo en cuanto podía contemplar con mis ojos como comenzaba a sobrepasarme, giraba mi cuello para mirar hacia arriba –por donde estas pasando- y vigilar sus movimientos con mi ojo izquierdo. El enemigo mientras pasaba por encima de mí, se giraba levemente para estirar su pierna derecha e intentar golpearme la cabeza por la parte izquierda, yo me encontraba de medio lado dejando a la izquierda el punto al que se dirigía mi enemigo con dicho salto. La mano que tenia mas suelta y colgando, la zurda; la elevaba rápidamente, pocos eran los rivales que me obligaban a usar una segunda extremidad, pero por ahora no la usaba de forma dual en mi espadón, por ello elevé dicho brazo a la altura de mi cara por la izquierda cubriendo con el antebrazo para que el impacto de aquella patada no me diera directamente en la cara, pero si reducir el daño recibiéndolo en una extremidad, pero a pesar de mi resistencia no sentiría mucha penalización.

-Pero no lo suficientemente bueno…- Continuaba la frase dicha anteriormente, en el momento en que sentiría él como el tobillo del golpeo de aquel payaso chocaría con mi antebrazo y por la inercia de su movimiento seguiría alejándose, pero no iría muy lejos. En el momento en que impactaba, mi brazo retrocedía ligeramente y comenzaba a alejarse, yo estiraría lo más rápido que pudiera dejarme mi clase, para abrir la mano e intentar aferrarme a su tobillo en pleno vuelo para cortar sus movimientos y dejarle comodidad, que sintiera quien era aquí la Justicia. Manteniendo la diestra en la espada, la clavaría ligeramente con la punta en el suelo para hacer presión tipo palanca y ayudarme, ya que tendría que hacer fuerza contraria al peso de mi enemigo, para ejercer lo máximo posible un movimiento en dirección contraria, es decir tratar de lanzarlo de forma giratoria a la izquierda para soltarlo y enviarlo hacia la puerta, con la posibilidad de atravesarla y romperla.

Spoiler:

Al Joker le salió mal la jugada ya que aquel marine le cogió en el aire del tobillo lanzándole hacia la puerta. Por suerte para El Joker al impactar con aquella puerta, esta no se abrió. Entonces El Joker cayó al suelo aunque se levantó rápidamente mientras miraba al marine con una gran sonrisa y le decía:

-Eres fuerte, sinceramente, tengo muchas ganas de matarte, pero no ahora.-hizo una breve pausa mientras sacaba más cuchillos-Veras ahora seguramente los marines que baya ahí afuera no tardaran en entrar por todo el jaleo que estamos montando, así que te tendré que matar otro día, pero no olvides que tenemos esto pendiente.

Entonces El Joker dejó caer una carta al suelo en la que ponía "joker", la típica de las barajas de cartas. Entonces El Joker empezó a correr hacia su derecha para precisamente tener ángulo hacia el jefe de los carpinteros que todavía estaba de pie asustado, es verdad que estaba un poco agazapado pero no lo suficiente para que El Joker no pudiese darle lanzándole una cuchilla. Entonces cuando consiguió ángulo, al correr rápidamente como ya he dicho hacia un lado, le lanzó una cuchilla al jefe de los carpinteros. El Joker suponía que aquel marine intentaría parar aquel cuchillo para salvarle, por lo que lanzó otro a la posición en la que iba a estar aquel marine si intentaba parar la cuchilla, es decir, que si paraba la cuchilla tenía riesgo de salir herido, aunque seguramente nada grave, ya que como había dicho El Joker todavía no quería matarle. Entonces acto seguido de haber lanzado esas dos cuchillas, El Joker salió corriendo en dirección opuesta, es decir, para coger ángulo había salido corriendo hacia la derecha, pues según tira los cuchillos sale corriendo ahora hacía su izquierda y para dirigirse hacia la ventana. Era imposible que aquel marine consiguiese salvar al jefe de los carpinteros, a él mismo y encima que le diese tiempo a pararle, por lo que la huida estaba asegurada.

OFF-ROL:

Aquel sujeto recibía un buen impacto contra la dura puerta que me sorprendía no fuese destruida, quizás no tenía la fuerza suficiente para lograrlo, aunque tampoco era mi especialidad luchar a puños pero si sabía lo básico. El payaso se recuperó rápidamente para levantarse e inmediatamente dirigirse por mi izquierda –su derecha- lanzando de manera hábil un cuchillo que sorprendentemente no iba hacia mí, sino buscando mis espaldas para alcanzar al jefe de los carpinteros. –¡¡Noo!!- Grite como si fuese el grito desesperado de un padre por proteger a su hijo, aunque no fuese literalmente así. Agarrando con la diestra el mango de la espada arrastre por todo el suelo con la máxima fuerza que pudiera realizar para un corte ascendente por mi izquierda para intentar bloquear en mitad del camino aquel cuchillo y redirigirlo hacia el techo.

Ni si quiera me fije en que era lanzado un segundo cuchillo pues la necesidad de proteger al civil me cegó en exceso, en el momento en que cruzaba mi brazo derecho y daba un giro de cintura para golpear aquel cuchillo, sentía como era clavado un objeto punzante en mi costado derecho. –Uaghh…- Sentí el dolor del objeto afilado a medio clavar, pues en dicha zona tenía un chaleco de cuero que serbia de protección básica, aquello no provocaría que la herida fuese profunda, pero si me molestaría en esos momentos para intentar contraatacar al adversario. Tras ello el pirata se dirigía lo más rápido posible hacia la ventana para huir. Ante aquello el jefe de los carpinteros se metió totalmente en la mesa al ver como por su culpa al dejarse expuesto yo recibí una puñalada.

-No habrá tierra en este mundo para que puedas huir de mí…- Declaraba aquellas palabras, dirigiendo mi zurda hacia el mango del cuchillo y sacarlo de una forma poco cuidadosa y sin importar mucho, acto seguido lo arrojé la derecha hasta caer al suelo. Daba igual lo que ya hiciese, era tarde y el enemigo podría haber huido perfectamente, pero al menos me habría escuchado.

Off-rol:

Al parecer el plan del Joker había tenido éxito, hiriendo en el costado a aquel marine, pero no de gravedad ya que tampoco es lo que quería el peliverde. Entonces se asomo a la ventana con la intención de espaciar, sin duda iba a conseguirlo tras dejar herido al marine y que el jefe de los carpinteros se escondiese del todo debajo de su mesa. Nadie excepto ellos tres se había enterado de lo que había pasado en aquella habitación por lo que una vez saliese por la ventana no iba a tener problemas para escapar totalmente de la ciudad. Antes de bajar por la ventana miró al marine y le dijo para sentenciar aquella escena y despedirse:

-Nos volveremos a encontrar, y cuando lo hagamos conocerás el verdadero caos.

Entonces empezó a reír, se rió tan fuertemente que se oyó en toda la mansión para de repente desaparecer, esfumandose con el humo de un cigarrillo que descansa en un cenicero de la barra de un bar.