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![El barrio Oscuro de Water Seven [Pasado Privado (Neliel , Nemonic] Empty](https://2img.net/i/empty.gif)
Por fin Water Seven, ya era hora de que llegara, llevaba un par de dias embarcado y ahora estaba en el lugar por el que pasaron Luffy y su banda. En algunos sitios, hacian visitas guiadas de como Luffy ayudo al alcalde a solucuionar unos problemas con el gobierno, eramos un grupo de 8 personas con 2 mujeres. El precio era muy barato y aunque la persona que nos guiaba no me daba muy buena espina, estaba siendo un dia entretenido.
Cuando llevabamos un rato caminando, mi estomago empezo a rugir tanto que se escuchaba en mitad del jolgorio de la calle. Cosa que escucho el guía y comento que hariamos una parada para comer algo, algo que estaba deseando. El lugar por que el que habiamos ido no me gustaba mucho, las limpias y luminosas calles, pasaron a se estercoleros con pasillos estrechos, por los que apenas pasaba la luz. No le dí especial importancía, pensando iriamos a algun lugar donde luffy comio o algo así
- Hemos llegado - dijo el guia.
La taberna no era gran cosa, un cuchitril en el que estabamos un poco apegotonados, un poco sucio y con poca luz, pero si se comía bien, ese era mi sitio. Empezaron a traer algo de comida y bebida, una música empezo a sonar por todo el local , cosa que empezo a animarnos, comenzando a cantar y bailar un poco. De repente noté que se me nublaba la vista y caia al suelo mareado, mire hacia la puerta de la taberna y la habían cerrado, solo escuche a un hombre decir que ya había llegado la nueva remesa, antes de caer insconciente en el suelo.
Cuando llevabamos un rato caminando, mi estomago empezo a rugir tanto que se escuchaba en mitad del jolgorio de la calle. Cosa que escucho el guía y comento que hariamos una parada para comer algo, algo que estaba deseando. El lugar por que el que habiamos ido no me gustaba mucho, las limpias y luminosas calles, pasaron a se estercoleros con pasillos estrechos, por los que apenas pasaba la luz. No le dí especial importancía, pensando iriamos a algun lugar donde luffy comio o algo así
- Hemos llegado - dijo el guia.
La taberna no era gran cosa, un cuchitril en el que estabamos un poco apegotonados, un poco sucio y con poca luz, pero si se comía bien, ese era mi sitio. Empezaron a traer algo de comida y bebida, una música empezo a sonar por todo el local , cosa que empezo a animarnos, comenzando a cantar y bailar un poco. De repente noté que se me nublaba la vista y caia al suelo mareado, mire hacia la puerta de la taberna y la habían cerrado, solo escuche a un hombre decir que ya había llegado la nueva remesa, antes de caer insconciente en el suelo.
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Hacia varios días que había llegado a la gran Isla de Water Seven y mi único entretenimiento era observar desde los tejados a los pequeños grupos de gente que venían ha hacer guías turísticas, por una simple razón, los guías siempre terminaban llevando a la gente a tabernas bastante económicas y eso a mí me interesaba bastante ya que podía comer por un precio muy económico. Hoy al grupo que seguía era más reducido de lo normal, tan solo eran 8 personas, eso me llamo la atención ya que cuanta menos gente hay en el grupo mas barato es el lugar donde les llevan a comer.
Hubo un momento en la ruta que no me daba mala espina, ya que las calles empezaban a ser oscuras, y la ruta no era la que suelen tomar, pero eso rápido se me olvido cuando vi que llegaban a una taberna. Como siempre espere a que todos entraran, y a que nadie pasara por la calle y empecé a descender escalando la fachada del edificio, pero cuando estaba abajo y fui a entrar me encontré que me cerraban la puerta. Mi reacción en ese momento fue instantánea, ni lo pensé un segundo. Corrí hacia la puerta y primero la intente abrir normal y cuando vi que no había manera me quite las tres katanas dejándolas al lado de la puerta, apoyadas en la pared, volví a coger carrera y esta vez le atice una patada tirándola al suelo. Se levanto un poco de polvo al caer la puerta al suelo, cosa que hizo que tardara un poco en ver que la gran mayoría de la gente que había ahí dentro estuviera dormida, o mejor dicho desmayada.
En la puerta se veía una figura de mujer, atlética y muy hermosa, con pelo verde y largo, llegándole hasta la cintura, y con unos ojos negros como la noche, en cambio su tez es pálida como la nieve. Cuando me di cuenta de que un 95% de la gente que había ahí dentro estaba dormida mire a los que no estaban dormidos, extrañada y con un toque de inocencia
- ¿Qué ha pasado aquí?
En ese momento mi tono de voz podía llegar a ser dulce eh inocente como mi rostro y como mis katanas estaban apoyadas en la pared, de tal manera que desde dentro no se veían nadie podría llegar a sospechar que esa muchacha lleva malas intenciones con esa pregunta, buscando obtener una respuesta ya que comida parecía que no conseguiría, por desgracia para mí no todos los que habían hecho dormir a los turistas estaban dentro de la taberna. Uno de ellos aun faltaba por llegar, y como no, cuando me vio en la puerta con las katanas cerca mío, y la puerta tirada se acerco despacio por detrás y me cogió acercándome un pañuelo a la boca que intente que quitara, pero los de dentro le ayudaron a sujetarme y finalmente consiguieron que la sustancia que tenía ese pañuelo hiciera que perdiera la consciencia.
Hubo un momento en la ruta que no me daba mala espina, ya que las calles empezaban a ser oscuras, y la ruta no era la que suelen tomar, pero eso rápido se me olvido cuando vi que llegaban a una taberna. Como siempre espere a que todos entraran, y a que nadie pasara por la calle y empecé a descender escalando la fachada del edificio, pero cuando estaba abajo y fui a entrar me encontré que me cerraban la puerta. Mi reacción en ese momento fue instantánea, ni lo pensé un segundo. Corrí hacia la puerta y primero la intente abrir normal y cuando vi que no había manera me quite las tres katanas dejándolas al lado de la puerta, apoyadas en la pared, volví a coger carrera y esta vez le atice una patada tirándola al suelo. Se levanto un poco de polvo al caer la puerta al suelo, cosa que hizo que tardara un poco en ver que la gran mayoría de la gente que había ahí dentro estuviera dormida, o mejor dicho desmayada.
En la puerta se veía una figura de mujer, atlética y muy hermosa, con pelo verde y largo, llegándole hasta la cintura, y con unos ojos negros como la noche, en cambio su tez es pálida como la nieve. Cuando me di cuenta de que un 95% de la gente que había ahí dentro estaba dormida mire a los que no estaban dormidos, extrañada y con un toque de inocencia
- ¿Qué ha pasado aquí?
En ese momento mi tono de voz podía llegar a ser dulce eh inocente como mi rostro y como mis katanas estaban apoyadas en la pared, de tal manera que desde dentro no se veían nadie podría llegar a sospechar que esa muchacha lleva malas intenciones con esa pregunta, buscando obtener una respuesta ya que comida parecía que no conseguiría, por desgracia para mí no todos los que habían hecho dormir a los turistas estaban dentro de la taberna. Uno de ellos aun faltaba por llegar, y como no, cuando me vio en la puerta con las katanas cerca mío, y la puerta tirada se acerco despacio por detrás y me cogió acercándome un pañuelo a la boca que intente que quitara, pero los de dentro le ayudaron a sujetarme y finalmente consiguieron que la sustancia que tenía ese pañuelo hiciera que perdiera la consciencia.
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- Que horrible dolor de cabeza- pensaba mientras empezaba a recuperar poco a poco la conciencia. La boca me sabía a calcentín sucio y sentía mi cuerpo sobre un suelo que estaba muy frio. Poco a poco abrí los ojos, que me dolian mientras se adaptaban al entorno, comprobando que no seguía en aquella taberna. El cuerpo me empezo a responder vagamente y cada movimiento era un suplicio - ¿Que demonios he tomado? me duele todo el cuerpo - murmure mientras me sentaba casi extenuado.
Comencé a mirar donde me encontraba, era un conjunto de celdas individuales, en las cuales estabamos todos los que estaban haciendo el turismo mas una muchacha con el pelo verde, que no había visto antes. Me lleve la mano rapidamente a la cara, para comprobar que no me habían descubierto la cara, algo habria desatado mi ira inmediatamente, para mi cubrirme la cara era algo casi sagrado. LLevaba mi ropa puesta, una camista sin mangas y un pantalon azul, dejando ver en mi brazo izquierdo una serie de tatuajes. Me sacudí mi pelo blanco de punta para quitarme el polvo de haber estado en el suelo y comprobe con algo de dificultad en mi movimiento que los barrotes de la celda eran simplemente de hierro - bien, cuando me recupere sera sencillo - dije en voz baja.
Tras un rato y estando todos depiertos ya, un hombre gordo y con apariencia de ser bastante fuerte empezo a dirigirse a nosotros.
- jejejeje, os explicare que os ha pasado , ahora sois propiedad de la banda water down, así que como propiedad nuestra que sois, vamos a venderos al mejor postor - dijo con un tono algo macabro, - y por cierto, no intenteis escapar, subiendo esas escaleras hay 4 guardias, que no dudaran en dispararos si por casualidad salis de las celdas. - cuando termino de hablar subio las escaleras y desaparecio.
En ese momento estaba un poco aletargado y atrudido, hasta que no se me pasaran los efectos de lo que había tomado, no podria actuar al 100 %, aunque si veía complicaciones tendría que golpear primero. Observé a las personas con las que había caido en la trampa, para encontrar a algun aliado de pelea, todos eran simples civiles, a excepción de la muchacha del pelo verde, que parecia bastante atletica, como si ya hubiera estado en problemas antes, asi que la vigilaría para ver si podría hacer equipo con ella
Comencé a mirar donde me encontraba, era un conjunto de celdas individuales, en las cuales estabamos todos los que estaban haciendo el turismo mas una muchacha con el pelo verde, que no había visto antes. Me lleve la mano rapidamente a la cara, para comprobar que no me habían descubierto la cara, algo habria desatado mi ira inmediatamente, para mi cubrirme la cara era algo casi sagrado. LLevaba mi ropa puesta, una camista sin mangas y un pantalon azul, dejando ver en mi brazo izquierdo una serie de tatuajes. Me sacudí mi pelo blanco de punta para quitarme el polvo de haber estado en el suelo y comprobe con algo de dificultad en mi movimiento que los barrotes de la celda eran simplemente de hierro - bien, cuando me recupere sera sencillo - dije en voz baja.
Tras un rato y estando todos depiertos ya, un hombre gordo y con apariencia de ser bastante fuerte empezo a dirigirse a nosotros.
- jejejeje, os explicare que os ha pasado , ahora sois propiedad de la banda water down, así que como propiedad nuestra que sois, vamos a venderos al mejor postor - dijo con un tono algo macabro, - y por cierto, no intenteis escapar, subiendo esas escaleras hay 4 guardias, que no dudaran en dispararos si por casualidad salis de las celdas. - cuando termino de hablar subio las escaleras y desaparecio.
En ese momento estaba un poco aletargado y atrudido, hasta que no se me pasaran los efectos de lo que había tomado, no podria actuar al 100 %, aunque si veía complicaciones tendría que golpear primero. Observé a las personas con las que había caido en la trampa, para encontrar a algun aliado de pelea, todos eran simples civiles, a excepción de la muchacha del pelo verde, que parecia bastante atletica, como si ya hubiera estado en problemas antes, asi que la vigilaría para ver si podría hacer equipo con ella
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Habían pasado varias horas desde que me durmieron en la entrada de la taberna, y mi cuerpo empezaba a moverse y reaccionar, escuchando lo que a mi alrededor pasaba pero sin lograr despertar. Mi instinto me decía que me despertara, y ganas no me faltaban, pero fuerzas si, esa sustancia que me hicieron inhalar me dejo sin fuerzas en absoluto. Tras unos ocho minutos de empezar a escuchar lo que a mi alrededor pasaba a mis oídos llego la voz de un hombre, el que nos informaba de nuestra situación. Cuando ese sujeto casi terminaba de hablar fue cuando mis ojos al fin pudieron abrirse, y con muy pocas fuerzas me ponía en pie, apoyándome a la pared que había detrás de mi.
Gire la cabeza de lado a lado, a la izquierda barrotes y una celda con alguien dentro, a la derecha lo mismo, y delante barrotes, un pasillo y mas celdas. De mientras un hombre gordo y que parecía tener cierta fuerza caminaba de arriba abajo de ese pasillo que había entre las dos fileras de celdas, que por un lado terminaba con escaleras y por el otro con pared. Mis piernas querían correr hacia los barrotes y estrangular al gordo cuando paso por delante de mi celda ya que no paraba de mirarme como una propiedad, o así decía el que ahora era, claro esta que eso no lo aceptaría ”Cuando salga de aquí te voy abrir esa barriga que tienes y sacarte todas las viseras mientras te las enseño” pensaba mientras mi mirada cada vez se volvía mas sádica y violenta por momentos, hasta que ese personaje desapareció subiendo por las escaleras.
Nos dijo que éramos propiedad de water down, y que nos venderían. A demás fue tan tonto de decirnos cuanta gente había arriba armada, eso sería una información valiosa enseguida que me recuperara, pero la verdad es que cuatro armados y arriba de una escalera no serian presa fácil para una sola persona. Era ágil, muy ágil, cosa que me permitía esquivar las cosas con facilidad, pero no a cuatro tiradores que lo más seguro mientras me centraba en uno los demás seguirían disparando, por la cual cosa necesitaba encontrar un aliado.
- Mierda gordo… ¿Quién se ha pensado que soy? Ese no sabe quién soy yo, pobre inocente. –Murmure desde lo mas oscuro de mi celda.
Ahora de nuevo miraba de lado a lado, mirando la gente que había en las demás celdas, poco a poco empezaba a recuperar mis fuerzas y me encamine hacia los barrotes que tenia delante para poder ver mejor a la gente que había en la otra filera de celdas, en esa filera pude ver alguien que me llamo la atención ya que tenía un pequeño toque de misterio, estaba en la otra filera de celda una a la derecha. Era un muchacho con el pelo blanco y que cubría medio rostro, con algo de musculatura, eso me bastaba para ver en el un posible aliado. Una vez me aparte de la reja se me podía ver con mas claridad, llevaba unos pantalones militares cortos, una camisa de tirantes blanca y unas botas militares.
Mis ojos en ese momento estaban clavados en el chico de pelo blanco a la vez que me quitaba la suciedad que podría haber cogido en el suelo por la ropa y el pelo ”Es misterioso… me gusta” pensaba mientras parecía como si le escaneara con la mirada. No le perdería ojo, pero antes debía mirar como salir de esa celda así que aun sin haberme recuperado intente agrandar dos de los barrotes, pero mas que eso simplemente comprobaba su resistencia, luego me fui a la cerradura mirando por el agujero, los engranajes y demás detalles que me pudieran ser de utilidad, mientras, cuando no, de reojo miraba al peliblanco.
Gire la cabeza de lado a lado, a la izquierda barrotes y una celda con alguien dentro, a la derecha lo mismo, y delante barrotes, un pasillo y mas celdas. De mientras un hombre gordo y que parecía tener cierta fuerza caminaba de arriba abajo de ese pasillo que había entre las dos fileras de celdas, que por un lado terminaba con escaleras y por el otro con pared. Mis piernas querían correr hacia los barrotes y estrangular al gordo cuando paso por delante de mi celda ya que no paraba de mirarme como una propiedad, o así decía el que ahora era, claro esta que eso no lo aceptaría ”Cuando salga de aquí te voy abrir esa barriga que tienes y sacarte todas las viseras mientras te las enseño” pensaba mientras mi mirada cada vez se volvía mas sádica y violenta por momentos, hasta que ese personaje desapareció subiendo por las escaleras.
Nos dijo que éramos propiedad de water down, y que nos venderían. A demás fue tan tonto de decirnos cuanta gente había arriba armada, eso sería una información valiosa enseguida que me recuperara, pero la verdad es que cuatro armados y arriba de una escalera no serian presa fácil para una sola persona. Era ágil, muy ágil, cosa que me permitía esquivar las cosas con facilidad, pero no a cuatro tiradores que lo más seguro mientras me centraba en uno los demás seguirían disparando, por la cual cosa necesitaba encontrar un aliado.
- Mierda gordo… ¿Quién se ha pensado que soy? Ese no sabe quién soy yo, pobre inocente. –Murmure desde lo mas oscuro de mi celda.
Ahora de nuevo miraba de lado a lado, mirando la gente que había en las demás celdas, poco a poco empezaba a recuperar mis fuerzas y me encamine hacia los barrotes que tenia delante para poder ver mejor a la gente que había en la otra filera de celdas, en esa filera pude ver alguien que me llamo la atención ya que tenía un pequeño toque de misterio, estaba en la otra filera de celda una a la derecha. Era un muchacho con el pelo blanco y que cubría medio rostro, con algo de musculatura, eso me bastaba para ver en el un posible aliado. Una vez me aparte de la reja se me podía ver con mas claridad, llevaba unos pantalones militares cortos, una camisa de tirantes blanca y unas botas militares.
Mis ojos en ese momento estaban clavados en el chico de pelo blanco a la vez que me quitaba la suciedad que podría haber cogido en el suelo por la ropa y el pelo ”Es misterioso… me gusta” pensaba mientras parecía como si le escaneara con la mirada. No le perdería ojo, pero antes debía mirar como salir de esa celda así que aun sin haberme recuperado intente agrandar dos de los barrotes, pero mas que eso simplemente comprobaba su resistencia, luego me fui a la cerradura mirando por el agujero, los engranajes y demás detalles que me pudieran ser de utilidad, mientras, cuando no, de reojo miraba al peliblanco.
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La muchacha del pelo verde se había despertado y pude ver que tenía razon, era una mujer bastante atletica y fuerte. Sería util como aliada, estaba en una celda en diagonal a la mia, por lo que procedí a hablar con ella.
- Parece que mi estomago a echo que caiga en esta estupida trampa - dije mirando a aquella muchacha y proseguí, - Veo que no eres como una civil, por tu rapida recuperación o al menos por levantarte del suelo - dije estó observando a las demas personas de allí que a duras penas podian tener los ojos abiertos. - Te propngo algo, ayudarnos mutuamente a salir de aquí, sin pactos ni nada, cuando salgamos cada uno tirara para su lado. - tras decir eso me levanté algo mas recuperado, ya notaba que las fuerzas me llegaban. - Por cierto mi nombre es Guldrik -. dije con una mueca amable.
Durante las siguientes horas , busque la mejor manera de salir de allí, ví que el timepohabía echo estragos en aquella puerta y aunque eran de hierro, un golpe muy fuerte, podría derribarlas sin problemas. Nos trajeron algo de comida, si se podia llamar así y aunque mi estomago rugía no me la comí, por que seguro tenía aquella sustancia de nuevo. En ese rato noté que mis fuerzas se recuperaban al 100 %, esperaba tener que pelear contra unos cuantos matones , si no aquello sería muy aburrido.
Me comence a transformar a mi forma completa que era un escarabjo hercules, de 5 metros de largo y 3 a de alto, la propia presión de mi transformación doblo la puerta y la tiro al suelo, cosa que hizo mucho ruido, pero que me dio la libertad. Estaba esperando si aquella muchacha del pelo verde, aceptaría mi proposición o si escaparía por su cuenta, una ayuda nunca vendría mal
- Parece que mi estomago a echo que caiga en esta estupida trampa - dije mirando a aquella muchacha y proseguí, - Veo que no eres como una civil, por tu rapida recuperación o al menos por levantarte del suelo - dije estó observando a las demas personas de allí que a duras penas podian tener los ojos abiertos. - Te propngo algo, ayudarnos mutuamente a salir de aquí, sin pactos ni nada, cuando salgamos cada uno tirara para su lado. - tras decir eso me levanté algo mas recuperado, ya notaba que las fuerzas me llegaban. - Por cierto mi nombre es Guldrik -. dije con una mueca amable.
Durante las siguientes horas , busque la mejor manera de salir de allí, ví que el timepohabía echo estragos en aquella puerta y aunque eran de hierro, un golpe muy fuerte, podría derribarlas sin problemas. Nos trajeron algo de comida, si se podia llamar así y aunque mi estomago rugía no me la comí, por que seguro tenía aquella sustancia de nuevo. En ese rato noté que mis fuerzas se recuperaban al 100 %, esperaba tener que pelear contra unos cuantos matones , si no aquello sería muy aburrido.
Me comence a transformar a mi forma completa que era un escarabjo hercules, de 5 metros de largo y 3 a de alto, la propia presión de mi transformación doblo la puerta y la tiro al suelo, cosa que hizo mucho ruido, pero que me dio la libertad. Estaba esperando si aquella muchacha del pelo verde, aceptaría mi proposición o si escaparía por su cuenta, una ayuda nunca vendría mal
Neliel
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El muchacho al que había estado observando termino por ser el que empezó a hablarme, y sus palabras eran similares a las que yo tenía en mente para él. Me pedía básicamente una unión para salir de ese lugar. Sabía bien que sola no podría hacerlo, y lo de aceptar ayuda no era lo mío, pero aun así, no estaba en una situación como para rechazar ayuda pues sabia bien que lo que arriba me esperaba yo sola no podía combatirlo.
Mi mirada a pesar de haber escuchado con claridad al muchacho seguía puesta en la puerta de la celda, más bien en su cerradura. Estuve observándola varios minutos hasta que en mi rostro se dibujo una ligera sonrisa. Avance hacia las rejas, y mirando hacia el joven que me hablo separe mis labios para dejar escapar una voz, algo dulce y inocente, podría decirse que hasta demasiado para lo que podía llegar a hacer y por la poca inocencia que había en mi.
- Mi nombre es Neliel… -Dije como primera cosa asegurándome luego de que nadie venia- Acepto… Ayudémonos -Afirme ante su petición cuando de golpe escuche pasos bajar por la escalera y me aleje de la reja apoyándome de nuevo en la pared, mis fuerzas casi estaban al cien por cien, mas no quería que esos tipejos del water down lo supieran, así que ahí, apoyada en la pared represente a la perfección el papel de alguien que apenas tenía fuerza, como la mayoría que estaban en esas celdas.
Quien bajaba era el mismo que antes nos advirtió de que hacíamos en esas celdas y que nos esperaba, acompañado de un par más. No se cuantos eran, quizá 4 o 3, quien sabe, lo importante es que tan solo venían para traernos comida y no para llevarnos a vender, cosa que en parte deseaba que fuera pues si me sacaban de ahí me ahorraría el tener que abrir la celda por mi misma. Cuando se fueron me acerque a la bandeja con la comida y la olisquee un poco, mi estomago se quejaba, pero a mi nariz el olor que le llego no era muy agradable, por la cual cosa aparte la comida de la puerta una vez esos brutos desaparecieron.
De pronto vi como el joven de pelo blanco se transformaba en un especie de escarabajo gigante, cosa que me sorprendió en exceso, no esperaba que ese muchacho hubiera consumido una akuma, aun así, aproveche el estruendo que hizo al reventar la celda con su transformación para transformarme yo en mi forma hibrida. Mis manos se convirtieron en zarpas de tigre, en mi cabeza aparecieron orejas de tigre, en mi boca colmillos, en mis mejillas bigotes, y del final de mi columna surgió una cola atigrada. Sonreí de medio lado, y sacando al máximo una de las zarpas la metí en la cerradura, girando de lado a lado hasta escuchar el ruido de cómo se abría, y acto seguido le di un pequeño empujón a la puerta, la cual se abrió sin problemas.
Tras eso mis ojos miraron hacia ese escarabajo gigante hacia el cual ahora me dirigia- Mas ruido no podías hacer ¿no? –pregunte algo “burlona” mientras veía como por la escalera empezaban a bajar hombres del llamado grupo water down, sentí tentación de transformarme, pero si lo hacia nei cabríamos en ese sótano, a demás de que haríamos demasiado estruendo y probablemente terminaría viniendo la marina, por la cual cosa, use simplemente mi forma hibrida para combatir a los que venían hacia mi.
Mi mirada a pesar de haber escuchado con claridad al muchacho seguía puesta en la puerta de la celda, más bien en su cerradura. Estuve observándola varios minutos hasta que en mi rostro se dibujo una ligera sonrisa. Avance hacia las rejas, y mirando hacia el joven que me hablo separe mis labios para dejar escapar una voz, algo dulce y inocente, podría decirse que hasta demasiado para lo que podía llegar a hacer y por la poca inocencia que había en mi.
- Mi nombre es Neliel… -Dije como primera cosa asegurándome luego de que nadie venia- Acepto… Ayudémonos -Afirme ante su petición cuando de golpe escuche pasos bajar por la escalera y me aleje de la reja apoyándome de nuevo en la pared, mis fuerzas casi estaban al cien por cien, mas no quería que esos tipejos del water down lo supieran, así que ahí, apoyada en la pared represente a la perfección el papel de alguien que apenas tenía fuerza, como la mayoría que estaban en esas celdas.
Quien bajaba era el mismo que antes nos advirtió de que hacíamos en esas celdas y que nos esperaba, acompañado de un par más. No se cuantos eran, quizá 4 o 3, quien sabe, lo importante es que tan solo venían para traernos comida y no para llevarnos a vender, cosa que en parte deseaba que fuera pues si me sacaban de ahí me ahorraría el tener que abrir la celda por mi misma. Cuando se fueron me acerque a la bandeja con la comida y la olisquee un poco, mi estomago se quejaba, pero a mi nariz el olor que le llego no era muy agradable, por la cual cosa aparte la comida de la puerta una vez esos brutos desaparecieron.
De pronto vi como el joven de pelo blanco se transformaba en un especie de escarabajo gigante, cosa que me sorprendió en exceso, no esperaba que ese muchacho hubiera consumido una akuma, aun así, aproveche el estruendo que hizo al reventar la celda con su transformación para transformarme yo en mi forma hibrida. Mis manos se convirtieron en zarpas de tigre, en mi cabeza aparecieron orejas de tigre, en mi boca colmillos, en mis mejillas bigotes, y del final de mi columna surgió una cola atigrada. Sonreí de medio lado, y sacando al máximo una de las zarpas la metí en la cerradura, girando de lado a lado hasta escuchar el ruido de cómo se abría, y acto seguido le di un pequeño empujón a la puerta, la cual se abrió sin problemas.
Tras eso mis ojos miraron hacia ese escarabajo gigante hacia el cual ahora me dirigia- Mas ruido no podías hacer ¿no? –pregunte algo “burlona” mientras veía como por la escalera empezaban a bajar hombres del llamado grupo water down, sentí tentación de transformarme, pero si lo hacia nei cabríamos en ese sótano, a demás de que haríamos demasiado estruendo y probablemente terminaría viniendo la marina, por la cual cosa, use simplemente mi forma hibrida para combatir a los que venían hacia mi.
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Aquella muchacha había aceptado y se llama Neliel, -bonito nombre - pensé, para a continuación tirar la puerta de la celada abajo, en mi forma completa. La sutileza no era lo mio y saltaba a la vista, aunque en esta ocasión, creo que había echo demasiado ruido. Observe que mientras mi puerta provocaba un estruendo enorme, Neliel se convertía en medio perra o medio loba. Bueno daba igual en que tipo de canido, la cuestión es que pudo abrir la puerta con cierta facilidad, por lo que estabamos listo para escapar o eso creía. Hice una mueca amable tras oir el comentaria de Neilel, para depues escuchar al principio de la escalera como bajaba alguien, asi que tenía que actuar rapido.
Me empece a transformar en mi forma hibrida, en la forma semihumana media dos metros y medio de altura,me empezaron a salir cuernos, uno en la cabeza en punta y otra en el pecho en forma de "Y". El cuerpo se volvio mas resistente, gracias al exoesqueleto de mi zoan y con cuatro brazos, dos mas que salían del torso. Tambíen aparecierón cuatro caparazones del tamaño de rodelas que me salieron de los antebrazos, en forma de escudo. Otra parte de la tranformación, era la espalda, que se recubrio casi en su totalidad de un caparazon bastante duro, escondiendo en su interior las alas.
Ya estaba preparado para el combate, por lo que esperé a la izquierda de la puerta de bajada a la gente que bajaba, estando Neilel al frente de la puerta. Bajaron cuatro hombres vestido de verde oscuro con capuchas , los cuales no se dieron cuenta de mi presencía, por que se quedaron fijamente mirando a Neilel y empezaron a gritarle.
- Tu zorra, arriba las manos, no vamos a dejar que una gatita como tu se escape - dijo uno de ellos.
- Ahora vamos a jugar a un juego que te va a gustar - dijo lascivanmente otro.
Esos comentarios no me gustaron nada y menos a una señorita, me movi un poco para coger impulso y choque contra una piedra. Por lo que uno de los que estaban mas cerca de mi, me miro dandose cuenta de mi presencía, pero en ese momento le propine un enorme puñetazo de 10 toneladas de fuerza. Me lleve delante a otro tipo mas aparte del que golpee, chocando vilentamente contra la pared. Los dos tipos que quedaban empezaron a apuntarme con las armas y a gritarme, casi me iban a disparar, por lo que le pedi algo de apoyo Neliel.
- Todo tuyos - dije con una mueca burlona, mientras los tipos me apuntaban al cuerpo y yo esperaba alguna reacción de Neliel
Me empece a transformar en mi forma hibrida, en la forma semihumana media dos metros y medio de altura,me empezaron a salir cuernos, uno en la cabeza en punta y otra en el pecho en forma de "Y". El cuerpo se volvio mas resistente, gracias al exoesqueleto de mi zoan y con cuatro brazos, dos mas que salían del torso. Tambíen aparecierón cuatro caparazones del tamaño de rodelas que me salieron de los antebrazos, en forma de escudo. Otra parte de la tranformación, era la espalda, que se recubrio casi en su totalidad de un caparazon bastante duro, escondiendo en su interior las alas.
Ya estaba preparado para el combate, por lo que esperé a la izquierda de la puerta de bajada a la gente que bajaba, estando Neilel al frente de la puerta. Bajaron cuatro hombres vestido de verde oscuro con capuchas , los cuales no se dieron cuenta de mi presencía, por que se quedaron fijamente mirando a Neilel y empezaron a gritarle.
- Tu zorra, arriba las manos, no vamos a dejar que una gatita como tu se escape - dijo uno de ellos.
- Ahora vamos a jugar a un juego que te va a gustar - dijo lascivanmente otro.
Esos comentarios no me gustaron nada y menos a una señorita, me movi un poco para coger impulso y choque contra una piedra. Por lo que uno de los que estaban mas cerca de mi, me miro dandose cuenta de mi presencía, pero en ese momento le propine un enorme puñetazo de 10 toneladas de fuerza. Me lleve delante a otro tipo mas aparte del que golpee, chocando vilentamente contra la pared. Los dos tipos que quedaban empezaron a apuntarme con las armas y a gritarme, casi me iban a disparar, por lo que le pedi algo de apoyo Neliel.
- Todo tuyos - dije con una mueca burlona, mientras los tipos me apuntaban al cuerpo y yo esperaba alguna reacción de Neliel
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Estaba preparada para el combate cuando vi bajar a cuatro hombres. Esos hombres iban vestidos con de un verde oscuro y con capucha. Los cuatro directamente se centraron en mi ya que el joven de pelo blanco se había transformado en una especie de forma hibrida entre escarabajo y persona de tal manera que cabía en el espacio que quedaba en la pared entre el agujero de la escalera y la celda de la izquierda. Cuando los hombres bajaron lo primero que se les ocurrió fue insultarme, acción que en mi simplemente provoco una sonrisa de medio lado, quizá algo… sádica y violenta, pero por desgracia si sirvió para provocar al hombre-escarabajo que casi de un golpe dejo a dos medio moribundos.
Ahora solo quedaban dos, que al haber visto que yo nada hacía y el supuesto peligro de verdad estaba en Guldrik pero se ve que o ese muchacho no podía o no quería acabar con ellos, por la cual cosa me los “cedió” a mi. Al escuchar di un salto con el cual me situé con un pie en cada hombro de uno, al ver eso el otro me apunto inmediatamente mientras al que me subí intentaba bajarme, pero por desgracia para ese hombre saque las uñas de los pies y se las clave en los hombros cogiéndome mejor a el, para luego, cuando el otro me disparo echarme hacia atrás, como si hiciera un puente, con las manos estiradas, mero llevándome conmigo al que había cogido. Di completamente la vuelta, poniendo las manos en el suelo y soltando al miembro de water down cuando tenía los pies en el aire, haciendo que cayera con fuerza en el suelo.
Ya solo quedaba uno, que me disparo varias veces, pero yo, con cuatro saltos y enganchándome a los barrotes de las celdas las esquive todas hasta que se canso y decidió atacar cuerpo a cuerpo, eso fue lo peor que se le podía haber ocurrido para decir verdad. Le estuve troleando un par de veces, simplemente esquivándole hasta que decidí atacar y peque un salto hacia el sacando las uñas de las zarpas de las manos y clavándoselas en el pecho para luego bajar, dejándole así unas buenas rajas de arriba abajo en todo el pecho y abdomen. Luego hice lo mismo en la espalda y finalmente lo abrace por detrás clavándole de nuevo las zarpas y le di un bocado en el cuello, como si de una vampira se tratara hasta que el pobre cayo inconsciente en el suelo.
Los cuatro hombres que bajaron ya estaban fuera de combate y mi mirada se dirigió hacia el joven de ropas azules, mis ojos que eran negros habían tomado un tono rojizo, similar al de la sangre, sangre que estaba presente en mis zarpas y en mi boca, lugar del que ahora me la estaba quitando con el lomo de la mano mientras volvía a mi forma original - Arriba habrá mas ¿no? -pregunte de nuevo con esa voz algo dulce, interesada y con una mirada algo sádica de nuevo.
Ahora solo quedaban dos, que al haber visto que yo nada hacía y el supuesto peligro de verdad estaba en Guldrik pero se ve que o ese muchacho no podía o no quería acabar con ellos, por la cual cosa me los “cedió” a mi. Al escuchar di un salto con el cual me situé con un pie en cada hombro de uno, al ver eso el otro me apunto inmediatamente mientras al que me subí intentaba bajarme, pero por desgracia para ese hombre saque las uñas de los pies y se las clave en los hombros cogiéndome mejor a el, para luego, cuando el otro me disparo echarme hacia atrás, como si hiciera un puente, con las manos estiradas, mero llevándome conmigo al que había cogido. Di completamente la vuelta, poniendo las manos en el suelo y soltando al miembro de water down cuando tenía los pies en el aire, haciendo que cayera con fuerza en el suelo.
Ya solo quedaba uno, que me disparo varias veces, pero yo, con cuatro saltos y enganchándome a los barrotes de las celdas las esquive todas hasta que se canso y decidió atacar cuerpo a cuerpo, eso fue lo peor que se le podía haber ocurrido para decir verdad. Le estuve troleando un par de veces, simplemente esquivándole hasta que decidí atacar y peque un salto hacia el sacando las uñas de las zarpas de las manos y clavándoselas en el pecho para luego bajar, dejándole así unas buenas rajas de arriba abajo en todo el pecho y abdomen. Luego hice lo mismo en la espalda y finalmente lo abrace por detrás clavándole de nuevo las zarpas y le di un bocado en el cuello, como si de una vampira se tratara hasta que el pobre cayo inconsciente en el suelo.
Los cuatro hombres que bajaron ya estaban fuera de combate y mi mirada se dirigió hacia el joven de ropas azules, mis ojos que eran negros habían tomado un tono rojizo, similar al de la sangre, sangre que estaba presente en mis zarpas y en mi boca, lugar del que ahora me la estaba quitando con el lomo de la mano mientras volvía a mi forma original - Arriba habrá mas ¿no? -pregunte de nuevo con esa voz algo dulce, interesada y con una mirada algo sádica de nuevo.
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No me había equivocado con Neliel, aunque pareciera que no hubiera roto un plato en su vida, disfrutaba desgarrando la piel de sus enemigos con sus garras. - Me gusta tu estilo - le dije haciendo una mueca alegre hacía ella. Ya nos habiamos ocupado de 4 hombre de waterdown, pero no sabíamos en que parte de aquel sitio nos encontrabamos. Podiamos estar a 100 metros bajo tierra perfectamente sin saberlo, así que para no levantar demasiadas sospechas y tener mas oportunidades, hable con Neilel.
- Vamos a quitarle la ropa a los dos que no la tienen manchada de sangre y nos las ponemos, con la capucha tapandonos la cara- dije haciendo una pausa y proseguí - no sabemos donde estamos y el tiempo que podamos evitar las peleas, sera mejor para nosotros - dije mientras colocaba los cuerpos ensangrentados, que había dejado Neliel en una de las celdas.
Cogí la ropa de uno de los vigilantes y le di la otra a Neliel, en mi caso estaban un poco justas, pero me valían. Empezamos a subir en sigilo, no se escuchaba ningun ruido en la parte de arriba, algo que me extraba,- ¿solo 4 guardias?- murmure pensativo. Llegamos a lo alto de la escalera, donde había una puerta cerrada y la cual no se podia abrir. Los guardias que habiamos dejado abajo no tenían llave ninguna, asi que probe a llamar y de repente se abrio una escotilla en la misma puerta, me tape la cara casi por reflejo y menos mal, si me abría descubierto.
- ¿Ya habeís acabado abajo?- me dijo el guardia de la puerta.
- S..si - dije titubeando un poco y proseguí - hemos dejado a dos vigilando abajo, un esclavo estaba formando escandalo tirando la comida y le hemos dado un escarmiento, jajajaj- dije con risa algo macabra, para que colara.
El guardia se quedo en silencio, algo que me hacía sentir incomodo, pero prosiguio hablando - bien hecho, os abro la puerta, ya subiran aquellos dos- dijo con un tono algo perverso. Antes de entrar me tape la cara dejando solo los ojos visibles.
Pasamos la puerta, entrando en una habitación en la que había unos 8 guardias, 4 de ellos estaban jugando a la cartas en una mesa echa con cajas, 2 en la puerta por la que habiamos entrado y otros 2 en otro puerta al final de la estancía. En la parte derecha de la habitación, estaban los baños y las duchas, que se veían que nunca se habian limpiado.
- Vamos a salir afuera - le dije al guardia de la puerta por la que habiamos entrado.
Él me miro raro y me dijo - hasta que no acabe el turno no sale nadie de aqui, asi que sientate o haz lo que quieras, pero tenermos que evitar que los esclavos salgan - dijo en tono algo autoritario.
Le hice una señal a Neilel, para ir adonde estaban los baños y las duchas. Al llegar allí abri el grifo y la ducha para simular que estabamos dentro. - Bueno tu decides, ¿o esperamos o peleamos? a mi me da igual,- dije mientras me hacía crujir los nudillos.
- Vamos a quitarle la ropa a los dos que no la tienen manchada de sangre y nos las ponemos, con la capucha tapandonos la cara- dije haciendo una pausa y proseguí - no sabemos donde estamos y el tiempo que podamos evitar las peleas, sera mejor para nosotros - dije mientras colocaba los cuerpos ensangrentados, que había dejado Neliel en una de las celdas.
Cogí la ropa de uno de los vigilantes y le di la otra a Neliel, en mi caso estaban un poco justas, pero me valían. Empezamos a subir en sigilo, no se escuchaba ningun ruido en la parte de arriba, algo que me extraba,- ¿solo 4 guardias?- murmure pensativo. Llegamos a lo alto de la escalera, donde había una puerta cerrada y la cual no se podia abrir. Los guardias que habiamos dejado abajo no tenían llave ninguna, asi que probe a llamar y de repente se abrio una escotilla en la misma puerta, me tape la cara casi por reflejo y menos mal, si me abría descubierto.
- ¿Ya habeís acabado abajo?- me dijo el guardia de la puerta.
- S..si - dije titubeando un poco y proseguí - hemos dejado a dos vigilando abajo, un esclavo estaba formando escandalo tirando la comida y le hemos dado un escarmiento, jajajaj- dije con risa algo macabra, para que colara.
El guardia se quedo en silencio, algo que me hacía sentir incomodo, pero prosiguio hablando - bien hecho, os abro la puerta, ya subiran aquellos dos- dijo con un tono algo perverso. Antes de entrar me tape la cara dejando solo los ojos visibles.
Pasamos la puerta, entrando en una habitación en la que había unos 8 guardias, 4 de ellos estaban jugando a la cartas en una mesa echa con cajas, 2 en la puerta por la que habiamos entrado y otros 2 en otro puerta al final de la estancía. En la parte derecha de la habitación, estaban los baños y las duchas, que se veían que nunca se habian limpiado.
- Vamos a salir afuera - le dije al guardia de la puerta por la que habiamos entrado.
Él me miro raro y me dijo - hasta que no acabe el turno no sale nadie de aqui, asi que sientate o haz lo que quieras, pero tenermos que evitar que los esclavos salgan - dijo en tono algo autoritario.
Le hice una señal a Neilel, para ir adonde estaban los baños y las duchas. Al llegar allí abri el grifo y la ducha para simular que estabamos dentro. - Bueno tu decides, ¿o esperamos o peleamos? a mi me da igual,- dije mientras me hacía crujir los nudillos.
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Cuando yo acabe con los dos hombres que el chico de pelo blanco me dejo el fue a los suyos y les quito la ropa, dándome uno de los trajes a mi. Yo cogí la camisa por los hombros, extendiéndola delante mio y torciendo leve el labio. Esa camisa me iría grande, pero aun así los pechos se me notarían por la cual cosa tras ponerme ese traje camine hacia los hombres que yo mate y cogí una sudadera que me metí debajo de la camisa, a la altura de la barriga para nivelarlo un poco y que no se me notara en exceso el pecho.
Una vez vestida así vi como el muchacho empezaba a subir las escaleras y yo fui detrás de el, ocultando así mi físico, que aun que las camisas lo disimularan un poco se me seguía notando que era una chica. Cuando al fin nos abrieron el joven dijo de salir pero nos dijeron que no podíamos hasta que no nos relevaran. En ese momento el me dijo que fuéramos al baño, y ahí abrió el grifo y me ofreció dos ofertas que me hicieron quedarme pensativa varios segundos.
- Si hacemos barullo vendran mas...-dije con una sonrisa algo sadica- Mas sangre... -mis ojos se volvian de nuevo con ese tono rojizo mientras me sacaba de debajo la camisa la que me meti ensangrentada mirando hacia el chico de pelo blanco.
-Ademas no podria aguantar mucho con esto metido...-afirme mientras caminaba hacia la puerta, mas antes de salir eche un vistazo hacia atras- Vamos... -tras esas palabras camine hacia afuera sin dudarlo ni un segundo.
Cuando salí camine hacia la mesa donde jugaban un par de miembros de esa banda y puse mi mamo en su hombro, el enseguida noto que esa mano no era de un hombre y yo me quite la capucha. Le mire con una amplia sonrisa sádica y mi cuerpo empezó a transformarse en mi forma híbrida, le clave las zarpas en el hombro y le puse la otra zarpa en el otro hombro. Una vez ambas zarpas clavadas en los hombros de l hombre lo lance contra una pared, pero ahí no termino.
Me lance con un salto sobre el, clavándole las zarpas en el pecho y hundiendo mi rostro en su cuello susurrándole - Has topado con la "esclava" errónea - con un tono algo burlón para luego separar los labios clavándole mis colmillos de tigre hasta que se desmayo. Una vez inconsciente me puse en pie buscando al siguiente objetivo mientras el primero se desangraba.
Una vez vestida así vi como el muchacho empezaba a subir las escaleras y yo fui detrás de el, ocultando así mi físico, que aun que las camisas lo disimularan un poco se me seguía notando que era una chica. Cuando al fin nos abrieron el joven dijo de salir pero nos dijeron que no podíamos hasta que no nos relevaran. En ese momento el me dijo que fuéramos al baño, y ahí abrió el grifo y me ofreció dos ofertas que me hicieron quedarme pensativa varios segundos.
- Si hacemos barullo vendran mas...-dije con una sonrisa algo sadica- Mas sangre... -mis ojos se volvian de nuevo con ese tono rojizo mientras me sacaba de debajo la camisa la que me meti ensangrentada mirando hacia el chico de pelo blanco.
-Ademas no podria aguantar mucho con esto metido...-afirme mientras caminaba hacia la puerta, mas antes de salir eche un vistazo hacia atras- Vamos... -tras esas palabras camine hacia afuera sin dudarlo ni un segundo.
Cuando salí camine hacia la mesa donde jugaban un par de miembros de esa banda y puse mi mamo en su hombro, el enseguida noto que esa mano no era de un hombre y yo me quite la capucha. Le mire con una amplia sonrisa sádica y mi cuerpo empezó a transformarse en mi forma híbrida, le clave las zarpas en el hombro y le puse la otra zarpa en el otro hombro. Una vez ambas zarpas clavadas en los hombros de l hombre lo lance contra una pared, pero ahí no termino.
Me lance con un salto sobre el, clavándole las zarpas en el pecho y hundiendo mi rostro en su cuello susurrándole - Has topado con la "esclava" errónea - con un tono algo burlón para luego separar los labios clavándole mis colmillos de tigre hasta que se desmayo. Una vez inconsciente me puse en pie buscando al siguiente objetivo mientras el primero se desangraba.
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Seguiamos en el baño y estaba esperando una respuesta de Neilel, ella con una mirada fria y como con ansias de sangre me dijo que si formaba barullo vendrian mas. Tras decir esto se quito una camiseta que tenía del disfraz y se fue hacia la habitación de los guardas, indicandome que fuera con ella. Cuando llegamos a ella, Neliel le puso la mano a uno de los guardas en el hombro, en ese momento la miro sabiendo que no era un guarda, pero antes de que pudiera actuar, Neliel se tranformo en su forma hibrida.
Agarro a uno de los guardas por los hombros con sus zarpas y lo lanzo contra la pared, para depues saltar sobre él y clavarle las zarpas en el pecho, terminando con un bocado en el cuello. Había acabado con el aquel guardia en un abrir y cerrar de ojos, los guaridas empezaron a reaccionar pero sus rifles estaban en el armero, a expceción de sus espadas que empezaron a desenvainarla. - No esta mal, es decidida y no teme a nada, aunque algo sadica , me gusta - pense mientras analizaba la situación.
La situación me pillo un poco por sorpresa, pero en el momento en el que Neliel se empezo a transformar, sabía que tendría que actuar. Me transforme en mi forma hibrida, creciendo a dos metros y medio de altura y me empezaron a salir cuernos, uno en la cabeza en punta y otra en el pecho en forma de "Y". El cuerpo se volvio mas resistente, gracias al exoesqueleto de mi zoan y con cuatro brazos, dos mas que salían del torso. Tambíen aparecierón cuatro caparazones del tamaño de rodelas que me salieron de los antebrazos, en forma de escudo. Otra parte de la tranformación, era la espalda, que se recubrio casi en su totalidad de un caparazon bastante duro, escondiendo en su interior las alas.
Los guardas empezaron que estaban pendientes de Neliel, se asustaron cuando vieron que tambien me transformaba y antes de que pudieran actuar, me lance contra los dos de la puerta por la que habiamos subido. En un rapido movimiento los cogi por el cuello y los estampe contra la pared, haciendo un pequeño detrozo con ellos, quedando insconcientes y dejandolos caer abriendo la mano. Ya solo quedaban 5 guardas que se habían replegado en una esquina asustados, pero uno de ellos empezo a hablar por un Den-Den Mushi, - Señor , dos esclavos han escapado y son usuarios, mande refuerzos o no podremos con ellos- grito algo desesperado.
Eso no me habia gustado nada y pagaria haberlo hecho, mire a Neliel - ¿como quieres repartir, tu 2 y yo 3 o al reves? - dije mientras miraba de reojo friamente a los guardas asustados, contra una esquina de la habitación.
Agarro a uno de los guardas por los hombros con sus zarpas y lo lanzo contra la pared, para depues saltar sobre él y clavarle las zarpas en el pecho, terminando con un bocado en el cuello. Había acabado con el aquel guardia en un abrir y cerrar de ojos, los guaridas empezaron a reaccionar pero sus rifles estaban en el armero, a expceción de sus espadas que empezaron a desenvainarla. - No esta mal, es decidida y no teme a nada, aunque algo sadica , me gusta - pense mientras analizaba la situación.
La situación me pillo un poco por sorpresa, pero en el momento en el que Neliel se empezo a transformar, sabía que tendría que actuar. Me transforme en mi forma hibrida, creciendo a dos metros y medio de altura y me empezaron a salir cuernos, uno en la cabeza en punta y otra en el pecho en forma de "Y". El cuerpo se volvio mas resistente, gracias al exoesqueleto de mi zoan y con cuatro brazos, dos mas que salían del torso. Tambíen aparecierón cuatro caparazones del tamaño de rodelas que me salieron de los antebrazos, en forma de escudo. Otra parte de la tranformación, era la espalda, que se recubrio casi en su totalidad de un caparazon bastante duro, escondiendo en su interior las alas.
Los guardas empezaron que estaban pendientes de Neliel, se asustaron cuando vieron que tambien me transformaba y antes de que pudieran actuar, me lance contra los dos de la puerta por la que habiamos subido. En un rapido movimiento los cogi por el cuello y los estampe contra la pared, haciendo un pequeño detrozo con ellos, quedando insconcientes y dejandolos caer abriendo la mano. Ya solo quedaban 5 guardas que se habían replegado en una esquina asustados, pero uno de ellos empezo a hablar por un Den-Den Mushi, - Señor , dos esclavos han escapado y son usuarios, mande refuerzos o no podremos con ellos- grito algo desesperado.
Eso no me habia gustado nada y pagaria haberlo hecho, mire a Neliel - ¿como quieres repartir, tu 2 y yo 3 o al reves? - dije mientras miraba de reojo friamente a los guardas asustados, contra una esquina de la habitación.
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Mire unos segundos hacia Guldrik cuando escuche ruido por detrás, viendo que ya se había transformado en la misma criatura hibrida que cuando estaban a bajo y como no, ya se había encargado de dos guardias, aun que la verdad es que no me convencía su método de dejarlos con vida, pero imagine que mucho no podrían hacer después del golpe así que no les preste mas atención. Mi mirada ahora volvía de nuevo a los guardias que estaban agrupados en la esquina para así “protegerse” mejor de nosotros, pero uno me hizo un gran favor… pidió refuerzos por un Den-Den Mushi, claro está, ese favor se lo devolvería a ese pobre inocente.
De nuevo mis ojos enfocaron la figura del escarabajo cuando les escuche hablar y una sonrisa sádica se dibujo en mis labios- ¿No está claro? Para mi tres… -Tras esas palabras no me lo pensé ni un segundo y di un salto no muy alto, lo suficiente como para que no me tocaran las espadas, pero si muy largo hasta situarme detrás de los guardias. Una vez ahí, como un animal que esta cazando, cogí al guardia que había avisado y di otro salto para alejarlo de los demás, tirándolo contra la pared enseguida que toco el suelo con los pies.
- No toques a los míos -le dice a Guldrik mirándolo de reojo para luego caminar hacia el que había tirado poniéndole la zarpa en el cuello mientras las uñas salían y se clavaban en su cuello. De mientras la otra zarpa se clavaba con fuerza en el pecho y descendía, rasgándole todo el abdomen hasta el punto que de cada corte salía tanta sangre que parecían cataratas. Tras eso le solté dejando que sufría el poco tiempo que le quedaba de vida, al menos la muerte no era tan lenta como las demás.
Ya solo quedaban 4 guardias, la cuenta era fácil, dos para cada uno, así que sin importarme ya si me daban o no, me agache apoyando las dos manos en el suelo y me transforme en mi totalidad. Mi cuerpo paso a ser completamente el de un tigre, con el pelaje de color amarillo dorado y rallas marones, un cuerpo más robusto que el de los tigres habituales y alargado, con unas patas fuertes y bien robustas rematadas con unas garras excepcionalmente largas, de dos metros de alto y casi 6 de largo.
Después de esa transformación los hombres me miraban aun con más miedo y corrí hacia donde ellos estaban cogiendo al primero que vi con la boca, mientras recibía algún que otro corte a los cuales no hacía caso por mucho dolor que me causaran, y me aleje de nuevo del grupo para empezar a “disfrutar del manjar”, desgarrándolo de tal manera que no muriera al instante, si no que sufriera, tanto que los gritos resonaban por la habitación e incluso, quizá llegaban al piso de abajo.
De nuevo mis ojos enfocaron la figura del escarabajo cuando les escuche hablar y una sonrisa sádica se dibujo en mis labios- ¿No está claro? Para mi tres… -Tras esas palabras no me lo pensé ni un segundo y di un salto no muy alto, lo suficiente como para que no me tocaran las espadas, pero si muy largo hasta situarme detrás de los guardias. Una vez ahí, como un animal que esta cazando, cogí al guardia que había avisado y di otro salto para alejarlo de los demás, tirándolo contra la pared enseguida que toco el suelo con los pies.
- No toques a los míos -le dice a Guldrik mirándolo de reojo para luego caminar hacia el que había tirado poniéndole la zarpa en el cuello mientras las uñas salían y se clavaban en su cuello. De mientras la otra zarpa se clavaba con fuerza en el pecho y descendía, rasgándole todo el abdomen hasta el punto que de cada corte salía tanta sangre que parecían cataratas. Tras eso le solté dejando que sufría el poco tiempo que le quedaba de vida, al menos la muerte no era tan lenta como las demás.
Ya solo quedaban 4 guardias, la cuenta era fácil, dos para cada uno, así que sin importarme ya si me daban o no, me agache apoyando las dos manos en el suelo y me transforme en mi totalidad. Mi cuerpo paso a ser completamente el de un tigre, con el pelaje de color amarillo dorado y rallas marones, un cuerpo más robusto que el de los tigres habituales y alargado, con unas patas fuertes y bien robustas rematadas con unas garras excepcionalmente largas, de dos metros de alto y casi 6 de largo.
Después de esa transformación los hombres me miraban aun con más miedo y corrí hacia donde ellos estaban cogiendo al primero que vi con la boca, mientras recibía algún que otro corte a los cuales no hacía caso por mucho dolor que me causaran, y me aleje de nuevo del grupo para empezar a “disfrutar del manjar”, desgarrándolo de tal manera que no muriera al instante, si no que sufriera, tanto que los gritos resonaban por la habitación e incluso, quizá llegaban al piso de abajo.
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Le había preguntado a Neliel, que cuantos enemigos quería de los 5, contestandome que era obvio, que para ella 3 de los guardias. Aquel comentarío hizo que reflejara una mueca alegre, parecía que llevaba tiempo sin pelear y quería hacerlo hoy de golpe. A mí no me importaba que ella quisiera darle zurra a mas guardias, siempre y cuando no tuvieran algun tipo de recompensa, entonces esa presa sería mía.
Ví como Neliel saltaba por encima de los aterrados guardias, hasta caer detras del que tenía el Den Den Mushi, que cuando la vío dejo de hablar petrificado. Lo cogío y lo tiro contra la pared, del otro lado de la habitación, alejandolo del resto de los guardias. Tras eso Neliel ,me miro de reojo con los ojos de predador y dijo que no tocara a sus presas, cosa que no iba a hacer, no quería que me diera un zarpazo "sin querer". - Tranquila tus 3 son solo tuyos - le dije con tono medio burlon.
Uno de los guardias grito - oye que no somos caramelos para que nos repartaís, ahora os vaís a enterar - dijo dando algunos pasos hacía mí temblando.
En ese momento Neliel atacó al guardia desplazado y le clavo las zarpas, una en el cuello y otra en el pecho, desgarrandolo en ambos sitios, por lo que empezó a desangrarse a gran rapidez, teniendo una muerte mas rapida que sus otros compañeros. El guardia que venía por mí al ver la escena se quedo en el sitio, ni avanzaba ni volvía a donde estaba, la mueca de sus rostro lo reflejaba todo, terror.
De repente Neliel se transformó en su forma completa, con el pelaje de color amarillo y rayas marrones, era un tigre muy robusto con patas fuertes y uñas largas. Lo que no se sí había calculado la muchacha, es que aquella habitación no era muy grande, así que al transformarse, ocupó gran parte de ella, empujandome contra la pared de mi lado. Los guardias la miraron los ojos como platos, creo que incluso alguno se meo encima.
- Neliel como hemos dicho 2 para mí que no se te olvide - le dije , no quería quedarme sin diversion.
Atacó a uno de los guardias agarrandolo con la boca, mientras los 3 que quedaban haciendo un esfuerzo de voluntad impresionante , le atacarón clavandole sus espadas en las patas. Ignorando el ataque de los guardas, Neliel desgarro con la boca al guardia que tenía en sus fauces, haciendo que gritara de dolor, con un grito tan fuerte que se hubiera escuchado desde abajo. Los tres guardias corrieron hacía la puerta del fondo para escapar, viendo que la tigresa estaba entretenid,a comiendose a uno de ellos. Eso era algo que no iba a permitir, así que era hora de que actuara.
Me moví con rapidez y viendo que los tres guardas corrían en paralelo hacía la puerta, se me ocurrío una idea. Con toda mi fuerza, golpeé al que estaba mas a la derecha en la cara, escuchando un crugir de huesos al instante, pero eso no era todo, la fuerza de mi golpe empujó al primero contra el segundo, y al segundo contra el tercero. - Ups parece que me he pasado - dije en voz baja, al ver al guardia de la derecha con el craneo hundido, al segundo insconciente o muerto, no lo sabía y al tercero, que aun seguía respirando, esforzandose por levantarse para escapar.
- Ves al final te he dejado los tres, bueno vamos a dejarlo que hemos hecho dos y medio cada uno - dije en tono burlon viendo la situación.
De repente se escucho por el Den-Den Mushi la voz del gordo de las celdas. - ¿Habeís podido con ellos?¿Hola? Mierda seguro que han caido, bueno da igual, los esperaremos aqui arriba jajajjaja,- dijo con una carcajada mientras se escuchaba otra voz - señor ¿no debería de apagar el Den-Den Mushi al decir eso? - dijo en tono observador. Se hizo el silencio un momento y se escucho un golpe con un - Ahí y por que a mí - y depues se colgó. Al parecer nos estaban esperando arriba, terminariamos con el que quedaba y trazariamos un plan.
- Termina con este, vamos a ver lo que hacemos, tenemos que tramar un plan antes de subir o nos masacraran - dije en tono serio.
Ví como Neliel saltaba por encima de los aterrados guardias, hasta caer detras del que tenía el Den Den Mushi, que cuando la vío dejo de hablar petrificado. Lo cogío y lo tiro contra la pared, del otro lado de la habitación, alejandolo del resto de los guardias. Tras eso Neliel ,me miro de reojo con los ojos de predador y dijo que no tocara a sus presas, cosa que no iba a hacer, no quería que me diera un zarpazo "sin querer". - Tranquila tus 3 son solo tuyos - le dije con tono medio burlon.
Uno de los guardias grito - oye que no somos caramelos para que nos repartaís, ahora os vaís a enterar - dijo dando algunos pasos hacía mí temblando.
En ese momento Neliel atacó al guardia desplazado y le clavo las zarpas, una en el cuello y otra en el pecho, desgarrandolo en ambos sitios, por lo que empezó a desangrarse a gran rapidez, teniendo una muerte mas rapida que sus otros compañeros. El guardia que venía por mí al ver la escena se quedo en el sitio, ni avanzaba ni volvía a donde estaba, la mueca de sus rostro lo reflejaba todo, terror.
De repente Neliel se transformó en su forma completa, con el pelaje de color amarillo y rayas marrones, era un tigre muy robusto con patas fuertes y uñas largas. Lo que no se sí había calculado la muchacha, es que aquella habitación no era muy grande, así que al transformarse, ocupó gran parte de ella, empujandome contra la pared de mi lado. Los guardias la miraron los ojos como platos, creo que incluso alguno se meo encima.
- Neliel como hemos dicho 2 para mí que no se te olvide - le dije , no quería quedarme sin diversion.
Atacó a uno de los guardias agarrandolo con la boca, mientras los 3 que quedaban haciendo un esfuerzo de voluntad impresionante , le atacarón clavandole sus espadas en las patas. Ignorando el ataque de los guardas, Neliel desgarro con la boca al guardia que tenía en sus fauces, haciendo que gritara de dolor, con un grito tan fuerte que se hubiera escuchado desde abajo. Los tres guardias corrieron hacía la puerta del fondo para escapar, viendo que la tigresa estaba entretenid,a comiendose a uno de ellos. Eso era algo que no iba a permitir, así que era hora de que actuara.
Me moví con rapidez y viendo que los tres guardas corrían en paralelo hacía la puerta, se me ocurrío una idea. Con toda mi fuerza, golpeé al que estaba mas a la derecha en la cara, escuchando un crugir de huesos al instante, pero eso no era todo, la fuerza de mi golpe empujó al primero contra el segundo, y al segundo contra el tercero. - Ups parece que me he pasado - dije en voz baja, al ver al guardia de la derecha con el craneo hundido, al segundo insconciente o muerto, no lo sabía y al tercero, que aun seguía respirando, esforzandose por levantarse para escapar.
- Ves al final te he dejado los tres, bueno vamos a dejarlo que hemos hecho dos y medio cada uno - dije en tono burlon viendo la situación.
De repente se escucho por el Den-Den Mushi la voz del gordo de las celdas. - ¿Habeís podido con ellos?¿Hola? Mierda seguro que han caido, bueno da igual, los esperaremos aqui arriba jajajjaja,- dijo con una carcajada mientras se escuchaba otra voz - señor ¿no debería de apagar el Den-Den Mushi al decir eso? - dijo en tono observador. Se hizo el silencio un momento y se escucho un golpe con un - Ahí y por que a mí - y depues se colgó. Al parecer nos estaban esperando arriba, terminariamos con el que quedaba y trazariamos un plan.
- Termina con este, vamos a ver lo que hacemos, tenemos que tramar un plan antes de subir o nos masacraran - dije en tono serio.
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Me había entretenido quizá demasiado con mi segunda presa, de tal manera que cuando me gire pude ver como Guldrik había matado, o casi, a los dos que le tocaban, pero a demás había dejado al mio medio tonto. Y encima "bromeaba" sobre el tema. Lo mire con mala cara unos segundos mientras el guardia se ponía en pie y de mis labios salio un pequeño gruñido. El guardia estaba tan asustado que al ver que el albino estaba cerca de la puerta no supo siquiera que hacer, quedándose casi petrificado.
En ese momento volví a mi forma de humana y con una ligera sonrisa inocente me acerque al guardia que aun permanecía sin poder reaccionar, puse mi mano sobre su rostro que estaba ligeramente manchado de sangre, y acerque mis labios a su oído- Tranquilo, la agonía ya termina... -le susurre con un ligero tono de diversion para luego morderle el cuello hasta que el solito fue cayendo hasta tumbarse en el suelo. Y una vez así me gire dejando al muchacho que se desangrara mientras escuchaba de fondo lo que se oía por el Den-Den Mushi. Mis ojos observaban de reojo a ese cacharro para luego dirigir la mirada hacia Guldrik.
- ¿Se te ocurre algo? Jo generalmente simplemente uso mi aspecto... No suelo ir en equipo. - Afirme algo dudosa mirando al albino mientras el guardia estaba creando un charco de sangre, color de la cual hacia ya bastante que se reflejaba en mis ojos. Mi mirada se fue por unos segundos al techo mientras escuchaba corretear de arriba a bajo a los guardias preparándose por si subíamos- Los de aquí abajo no hacían tanto ajetreo como los de arriba... Son unos exagerados. -
Me gire observando a todos y cada uno de los guardias que había tirados por el suelo y camine hacia los que Guldrik había matado. Me acerque al segundo que era el que estaba menos dañado y me agache apartándolo del ultimo mio para evitar que el charco de sangre le llegara- Hacerse pasar por uno de ellos no colaría ya ¿no? -Pregunte curiosa mirando a Guldrik.
De mientras esperaba una respuesta del albino y pensaba en alguna otra opción me acerque a una silla y me senté en ella observando a los muertos con una pequeña expresión seria.
En ese momento volví a mi forma de humana y con una ligera sonrisa inocente me acerque al guardia que aun permanecía sin poder reaccionar, puse mi mano sobre su rostro que estaba ligeramente manchado de sangre, y acerque mis labios a su oído- Tranquilo, la agonía ya termina... -le susurre con un ligero tono de diversion para luego morderle el cuello hasta que el solito fue cayendo hasta tumbarse en el suelo. Y una vez así me gire dejando al muchacho que se desangrara mientras escuchaba de fondo lo que se oía por el Den-Den Mushi. Mis ojos observaban de reojo a ese cacharro para luego dirigir la mirada hacia Guldrik.
- ¿Se te ocurre algo? Jo generalmente simplemente uso mi aspecto... No suelo ir en equipo. - Afirme algo dudosa mirando al albino mientras el guardia estaba creando un charco de sangre, color de la cual hacia ya bastante que se reflejaba en mis ojos. Mi mirada se fue por unos segundos al techo mientras escuchaba corretear de arriba a bajo a los guardias preparándose por si subíamos- Los de aquí abajo no hacían tanto ajetreo como los de arriba... Son unos exagerados. -
Me gire observando a todos y cada uno de los guardias que había tirados por el suelo y camine hacia los que Guldrik había matado. Me acerque al segundo que era el que estaba menos dañado y me agache apartándolo del ultimo mio para evitar que el charco de sangre le llegara- Hacerse pasar por uno de ellos no colaría ya ¿no? -Pregunte curiosa mirando a Guldrik.
De mientras esperaba una respuesta del albino y pensaba en alguna otra opción me acerque a una silla y me senté en ella observando a los muertos con una pequeña expresión seria.
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