Beasuke
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Akuma no mi
Varios
Era un día lluvioso, aunque con poco viento. Hacían ya dos horas que habían comenzado a llover. Y yo, me encontraba camino de uno de los paraisos de los gyojins, Water Seven. Nunca antes había salido de los alrededores de la Isla Gyojin, pero tenía claro que había llegado la hora de hacerlo. Como no sabía el camino, fui todo el trayecto siguiendo a un barco , que al menos se dirigía a una isla. Iba sumergido en todo momento, pues no parecía un acorazado y podría robarlo.
Tras un muy largo viaje, se podía divisar una gran ciudad de agua, o en su mayoría compuesta por esta. Era el momento de atacar. Usando mis gran corpulencia, subí por popa al barco. Subí con cuidado y a la vez que me mantenía agachado me encontraba pegado a la pared para ocultarme. Intentaba escuchar a algún pasajero, para poder acabar con él sin llamar la atención, o al menos intentarlo. Dos personas se acercaban a mi posición, charlando y sin saber lo que les esperaba.
-Put** humanos, os vais a enterar.- Dije a la vez que me relamía solo con pensarlo.
Pasaron la esquina y llegaron donde me encontraba. Al hombre de mi izquierda, lo aguanté por la espalda con una mano, mientras que con la otra le di un fuerte empujón por la cabeza, provocándo así que desnucara. En cambio, al otro hombre, le di un fuerte golpe en la zona de los pulmones, provocando así que este se quedase asfixiado y haciendo que muriese. Tras esto, cogí sus cuerpos en los tiré por la borda.
Tras esto, me dirigí a proa, en busca de más personas, para asesinarlas y que no quedase ningún testigo. A la vez que me acercaba, podía ver como llegábamos a Water Seven. Debía darme prisa, pues si no esos asesinatos habrían sido en vano.
Tras unos minutos, conseguí despejar el barco de personas, y tiré todos los cadáveres al fondo del mar. Unos diez cadáveres, estaban ahora situados en el fondo del mar.
Tras un muy largo viaje, se podía divisar una gran ciudad de agua, o en su mayoría compuesta por esta. Era el momento de atacar. Usando mis gran corpulencia, subí por popa al barco. Subí con cuidado y a la vez que me mantenía agachado me encontraba pegado a la pared para ocultarme. Intentaba escuchar a algún pasajero, para poder acabar con él sin llamar la atención, o al menos intentarlo. Dos personas se acercaban a mi posición, charlando y sin saber lo que les esperaba.
-Put** humanos, os vais a enterar.- Dije a la vez que me relamía solo con pensarlo.
Pasaron la esquina y llegaron donde me encontraba. Al hombre de mi izquierda, lo aguanté por la espalda con una mano, mientras que con la otra le di un fuerte empujón por la cabeza, provocándo así que desnucara. En cambio, al otro hombre, le di un fuerte golpe en la zona de los pulmones, provocando así que este se quedase asfixiado y haciendo que muriese. Tras esto, cogí sus cuerpos en los tiré por la borda.
Tras esto, me dirigí a proa, en busca de más personas, para asesinarlas y que no quedase ningún testigo. A la vez que me acercaba, podía ver como llegábamos a Water Seven. Debía darme prisa, pues si no esos asesinatos habrían sido en vano.
Tras unos minutos, conseguí despejar el barco de personas, y tiré todos los cadáveres al fondo del mar. Unos diez cadáveres, estaban ahora situados en el fondo del mar.
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