El mundo es un pequeño papel [Privado][Pasado de Wert y Bleyd]

La campanilla de la puerta suena cuando un pony rosa seguido de un guerrero de armadura completa y capa negra entran en la tienda . la puerta se cierra con un susurro pero la campanilla sigue sonando una y otra vez, el pony rosa salta y le da con la patita tan solo para disfrutar de su suave tintineo, el guerrero le deja hacer mientras pasa a la librería y comienza a seleccionar una cantidad ingente de tebeos, cómics, y mangas. El sonido de la caja registradora hace que el pequeño pony no mayor que un chiquillo de 12 años corra hacia su amigo y compañero que le acaricia la cocorota con cariño. Juntos pasan a la zona de lectura en donde se acomodan. El guerrero saca uno de los mangas “todos los días hay una chica monstruo” y comienza la lectura con el pony puesto encima suyo, lamentablemente entre la lectura en voz alta y las pedorretas y risas del pony parece que la tranquilidad se ha terminado.

“Hala todo por el suelo a ver si tiene un poco de cuidado señor aquí hay personas que intentamos leer con tranquilidad sin que un bestia tire todo por el suelo, debería avergonzarse comportarse de esa manera en un sitio publico. Tendría que aprender mas modales incluso mi pony sabe que no ha de derramar las cosas” me tomo unos momentos para achuchar a Fluffle la verdad es que el pony es súper adorable y súper esponjoso. “De todas formas simplemente limpie su desastre y mantenga la compostura caballero.
Volví a mi lectura tranquilamente señalando viñetas y riéndome con Fluffle  la verdad es que hay gente demasiado agresiva por el mundo incapaz de relajarse ni un instante con lo fácil y bonito que es tener un amigo y disfrutar de su compañía sin más.

- Ts..Será mal educado, ha llegado aquí armando jaleo y ahora me echa las culpas. Discúlpese - Ordenaba el enfadado rubio mientras se levantaba a cojer el libro que acababa de lanzar. - Un pony en estos lugares no es que sea muy bien bienvenido y menos gente como usted, irrespetuosa y irónica con los demás - Le volvía a reprochar mientras se agachaba a por su libro y mantenía la mirada en su titulo.

-Gracias por joderme, literalmente, el momento de tranquilidad tan pequeño que tenía - Volvía de nuevo a reprocharle, se notaba el enfado a distancia. Con tanto estrés y ahora con ese enfado era normal que pudiera meterle un tortazo a cualquiera que se le cruzase por medio. El bipolarismo de Wert, de nuevo hacia estancia en momentos oportunos.

'Me quedo..Me voy...No se que sería mejor, a lo mejor si salgo me encuentro con algún marine que quiere que le haga el trabajo sucio...' Se preguntaba Wert a sí mismo mientras se volvía a sentar y se colocaba otra taza de té sin haber limpiado la otra.

Suspiraba Wert mientras volvía a abrir "su libro" por donde lo había dejado.

“Como que le hecho a usted la culpa y que soy maleducado, estará usted de guasa señorito, pero que desfachatez habrase visto el individuo este, por que esto es una sala de lectura que si no le reviento. ¡¡oh!! Como vuelva a meterse con Fluffle no vas a tener mundo para correr por que te voy a dar tal ostia que te va a parecer un cañonazo.
Sobre su momento de nada me gusta sentirme útil haciendo feliz a la gente espero que usted lo disfrute.” Recojo los libros y los guardo en el pelaje de Fluffle. “vamos chiquitín que te parece si nos ponemos morados de muffins y pasteles de chocolate.” Ante mi propuesta Fluffle soltó un adorable ¡¡Gashp!! Llevándose las patitas delanteras a la cara mientras sus adorables ojitos se luminaban volviéndole totalmente kawai. Instantes después nos encontrábamos camino a la salida mientras mi pequeño compañero caminaba a saltitos entusiasmado por la idea de los dulces y caramelos.