El comienzo de un prospero acuerdo. [Úrsula Vander Decken XIII y Guldrik]

El sonido de los pasos en la noche quebraba el ambiente, el mar fluía cerca de las verdes laderas cubiertas de coloridas flores y frondosos árboles. Se podía escuchar el tenue sonido de los grillos, ligeros cantos de pájaros que resultaban irritantes para la figura que caminaba en la noche. Su paso firme y decidido rompía con la armonía del lugar, se dirigía hacia una pequeña posada en el cruce de los dos caminos. Esta apenas tenía dos pisos, de aspecto bastante antiguo. En el exterior un establo y un molino dando al rio formaban una plaza en la que se encontraba una pequeña fuente.

Lo que me faltaba todo en este Sitio parece ser pequeño. ¿Acaso no piensan en las personas de huesos anchos?

Dijo nada más poner sus tentáculos en el centro de la plaza, su orondo cuerpo lleno de sensuales curvas invadía casi por completo el lugar, con un andar que transmitía seguridad en sí misma se abalanzo hacia la posada con intención de encontrarse con el representante del gremio de cazadores Samurái: Legendary Hunters. Si quería hacerse con el poder de su hogar de nacimiento necesitaría tener aliados fuertes que la ayudaran, pero para ello tendría que ganarse su confianza, su amistad y entonces podría usarlos en su propio beneficio, ellos la ayudarían a crecer y una vez que fuera reina les daría una recompensa digna. Al entrar en la posada, la encontró totalmente vacía a excepción de la posadera, una mujer fea y que competía con Úrsula en peso. Esta se encontraba detrás de la barra limpiando unas jarras de cerveza, al levantar la cabeza y verla dio una especie de gritito, como si de un cerdo se tratase.

Menudo sitio más raro para encontrarnos pensó para sí misma. Se sentó en la mesa más cercana ocupando tres de sus diminutos taburetes. Mientras esparaba al representante del gremio Úrsula se decidió a pedir algo para comer.

Una jarra de cerveza y pescado fresco mujer. Rapido!

La posadera medio camino entre asustada e intrigada, tardo poco en preparar el pedido de su clienta. La miraba con recelo pues había escuchado historias de los gyojines que odiaban a todo ser viviente.

Úrsula ni corta ni perezosa dirigió una mirada inquisitiva a la camarera. Dándole a entender que no le gustaban que la observaran tan detenidamente. Sin darle las gracias cuando trajeron su bebida y comida Úrsula empezó a comer el pescado con los cubiertos, demostrando una educación y unos modales que contrastaban con su brutal apariencia. Al cabo de unos minutos había dado buena cuenta de su comida y ya solo quedaban las espinas tan limpias que parecían ser de decoración.

Juraría que solo llevaba 15 minutos en la taberna, pero parecía como si hubiera pasado la noche entera esperando por su contacto. No le gustaba que la hicieran esperar, la sacaba de quicio y un mal humor estaba empezando a apoderarse de ella, justo en ese momento la puerta de la posada se abrió de golpe y entraron cuatro hombres de aspecto fornido pero desharrapado, sin lugar a dudas debía de tratarse de piratas. Nada más entrar se dirigieron a su mesa, la codicia se podía observar en sus ojos. Cada uno se puso en un lateral de la mesa rodeándola.

Mirad chicos, lo que tenemos aquí, que cosa más grotesca, cuando me dijeron que había un gyojin no me esperaba que se tratara de algo tan asqueroso como esto. Ya estas levantado tu enorme culo de las sillas “foca” te vie…..

Los gritos de los 3 piratas se pudieron escuchar a más de 100 metros de distancia. Con una velocidad que no hubieran creído normal para algo de su tamaño, Úrsula se había levantado de la mesa, desplegando la totalidad de sus tentáculos y había aprisionada al pirata que se encontraba hablando, estrangulándole y asfixiándole, causándole el aplastamiento sistemático de sus costillas por el masivo peso de los tentáculos.  

Con una arrogancia proporcionada por su enorme cuerpo, Úrsula se dirigió a los piratas.

Si hay algo que detesto en este mundo casi tanto como a mi padre, es a los esclavistas. Creo que os tendré que recordar por que se teme tanto a mi pueblo. Pero no pienso mancharme más los tentáculos.  Dundee, te los dejo a ti.

Apoyada en la pared, había pasado desapercibida el hacha de la tritón, la cual cayó provocando un ruido sordo justo cuando Úrsula pronuncio su nombre. Lentamente el hacha se transformaba parcialmente en un cocodrilo gigante, el cual al crecer rompió las paredes y el techo de la posada, provocando que esta se callera en pedazos. De un salto Úrsula se monto en Dundee, el cual tenía a un pirata entre sus dientes. Los otros dos aterrorizados salieron huyendo en busca de su capitán.

Desde su posición Úrsula observó como Dundee se comía a uno de los piratas, al crecer había causado un gran estropicio rompiendo parte de la posada, no se arrepentía de su decisión esta diminuta posada estaba pidiendo a gritos que la tiraran abajo, además con suerte la marina compensaría a la posadera por el ataque de los piratas.

Al ver correr a los piratas Úrsula bajo de su posición y volvió le ordeno a Dundee volver a su forma de hacha. Lentamente el gran cuerpo del magnífico ejemplar de cocodrilo Bananawani que era, se fue transformando en un hacha de color dorado recordando la hoja a un plátano como el que porta en su cabeza, de aspecto amenazador. Cuando bajó hecho una mirada a su alrededor y para su sorpresa un hombre se encontraba observando los restos de la posada. No se parecía en anda a los piratas pues su aspecto era mucho más limpio y pulcro. De piel y pelo blanco el chico poseía un porte fornido que se veía reforzado por los músculos que se observaban en sus brazos descubiertos, una camisa sin mangas y un pantalón del mismo color complementaban el vestuario del hombre. El cual se dirigía hacia ella mientras le hablaba.

No deberías haber dejado que esos dos se fueran, a no ser lo que hayas hecho a propósito para ponerte un reto....- ¿Por casualidad no serás Úrsula, verdad?

Para sorpresa de la gyojin el hombre dijo su nombre, parece que era el contacto que estaba esperando. No se arrepentía de su decisión el hombre tenía aspecto de ser alguien muy capaz. Además parece que la había felicitado, los halagos era algo que le encaba a Úrsula, no había placer capaz de superarlo.

-Efectivamente Soy Úrsula Vander Decken XIII, descendiente del legendario pirata y legítima heredera al trono del reino Ryuugu. Y vos caballero ¿Quién sois? ¿Venís de parte del gremio, o acaso quieres emular a estos malnacidos e intentar capturarme? Porque si es así os aseguro que venderé cara mi vida.

En la mirada de Úrsula se podía observar el orgullo al pronunciar su nombre, para finalmente mientras decía sus últimas palabras mostrar una cara de total convicción.

La masiva Gyojin escuchaba las palabras que pronunciaba el hombre, el cual parecía impresionado por las acciones de Úrsula pues esta había sometido al pirata asfixiándole con sus tentáculos y su compañero Dundee dándose un buen atracón gracias al otro pirata. Al observar a su alrededor Úrsula fue realmente consciente del destrozo que habían ocasionado, la taberna parcialmente derruida a causa de Dundee y los escombros por los que se escabullía la pobre tabernera la cual estupefacta salía corriendo ante el ataque pirata.

- Encantado de conocerte Úrsula, me has impresionado de cómo has despechado a los piratas, si no te importa te echare un mano cuando vengan con los demás. oh! perdona no me he presentado, mi nombre es Guldrik, uno de los miembros de Legendary Hunters y tu reclutador.

Así que estaba en lo cierto el hombre era el reclutador del gremio y su nombre era Guldrik, se permitió un segundo para dedicarle una mirada escrutiñadora, parecía que los estudiaba como si quisiese saber si el hombre era de fiar, pero hasta que no lo conociera lo suficiente no sería capaz de dilucidar eso. Acto seguido el joven le entrego las normas del gremio invitándola a unirse formalmente.

Mientras leía las condiciones del gremio estudiaba si estas interferirían con su destino, pero estaba segura que haciendo aliados que confiaran realmente en ella lograría su objetivo. No había terminado con ellas cuando su compañero se puso en estado de alerta, había escuchado algo que a ella se le había escapado, rápidamente miro a su alrededor intentando percatarse del sonido que su compañero si había sido capaz de captar. Guldrik le dijo que ya estaban aquí y que se pusiera detrás de él.

No es que desprecie tu caballerosidad, pero no me cubres ni dos tentáculos….

Dijo Úrsula mientras se colocaba de espaldas a su nuevo camarada el cual cambiado de color su piel, paraba las balas que había salido desde detrás del muro. No estaba segura de cómo había hecho eso pero no tuvo tiempo ni de pensarlo pues su reclutador le dio órdenes de ir a por dos piratas que venían justo por el lado que estaba cubriendo. Raudamente Úrsula recorrió la distancia para descubrir que sus enemigos eran dos espadachines, los cuales cagaron hacia ella confiados dado que ella no portaba su hacha.

Úrsula astuta como ella sola, segregó en dirección a los piratas un enorme chorro de tinta el cual cubrió a ambos espadachines de una espesa tinta negra. Dentro de sus tentáculos la Gyojin portaba sus ocho pistolas las cuales cogió con sus apéndices y apunto hacia ambos rufianes desplegando una pequeña lluvia de balas que se incrustaron en los cuerpo de los ahora caídos piratas, confiada Úrsula se dio la vuelta para mirar a su compañero solo fue consciente de su error cuando uno de los sables de los piratas corto superficialmente la piel de uno de sus tentáculos. Enfadada y superficialmente herida lo remato con un disparo en la cabeza asegurándose que no había ninguno más cerca de ella, cuando comprobó que los demás se dirigían hacia su compañero, se dispuso a cubrirlo desde su retaguardia.

Úrsula no salía de su asombro su compañero estaba parando las balas con su propia piel la cual únicamente se tornaba de color negro. Desconocía que técnica era esa pero sin duda debía de ser muy poderosa. Observó como su nuevo aliado acababa rápidamente con sus rivales.

En estos momentos se encontraba con sentimientos encontrados, pues sentía cierta simpatía por Guldrik pero a la vez sentía unos celos inmensos de su poder, debían ser de más o menos la misma edad, pero la diferencia de fuerza era abismal. Se había pasado gran parte de su vida preparándose para ser reina no para ser una luchadora. Ahora lo tenía claro no volvería a ser la princesa débil sino que se ganaría su trono mediante su fuerza costara lo que le costara.  

Cuando volvió en sí de sus pensamientos todos los piratas habían fallecido a excepción de dos hombres que no tenían pinta de ser meros subordinados. Uno de ellos era un hombre alto musculoso, con un traje realmente llamativo de varios colores y en su mano portaba una espada que parecía poseer características especiales. Junto a él se encontraba otro pirata, este de aspecto regordete y más bajo que el primero llevaba el pelo por la cintura, además portaba unos guantes de boxeo negros como la noche.

Espero que después de esto podamos tomarnos algo juntos todo buen trato se a de cerrar con una buena copa.

Un escalofrió recorrió su espalda cuando el gordo se lanzó a por ella, velozmente la Gyojin recogió su arma y la empuñó con el brazo derecho. Sus tentáculos se preparaban para hacer saltar el masivo cuerpo de Úrsula cuando su enemigo estuviera cerca de ella para así intentar sobresaltarlo. Cuando estuvo lo suficientemente cerca saltó hacia el pirata lanzando con corte descendente con su hacha. Al mismo tiempo que vaciaba su saco de tinta sobre su enemigo para  que así este tuviera menos tiempo para evitar su golpe.

Es cierto que aun no era una combatiente experimentada, dominaba los principios básicos de Karate Gyojin lo cual la convertía en alguien más fuerte de lo normal.  

Spoiler:

El hombre de baja estatura consiguió esquivar el golpe en el último segundo, provocando una herida moderada en el muslo en vez de una crítica en el pecho. Seguramente fuera por el susto de verse cubierto de tinta lo que le hizo reaccionar así pensó Úrsula. El hombre contraataco a la tritón, en su rostro se podía observar la ira y el odio que solo un desalmado puede transmitir. Su cuerpo se tenso llevando toda la fuerza a su brazo derecho, condensando energía en torno al puño, lanzo un golpe en dirección a la Gyojin, pero no era un golpe normal, el puñetazo desplazo el aire y formo una onda de choque que se dirigía volando por el aire hacia Úrsula la cual se encontraba a unos escasos tres metros.    

En cuanto noto la energía acumularse en torno al brazo de su oponente, instintivamente los cromatóforos de la piel de la tritón cambiaron de color mimetizándose con el fondo, lo que provoco que su piel se adaptara al suelo desapareciendo parcialmente su silueta, esto sumado a la tinta que poseía el pirata hicieron que no lanzara un golpe directo. Ursula no estaba orgullosa de esta habilidad pues revelaba cuando estaba realmente asustada, una desgracia genética que tenía que aprender a controlar si no quería demostrar debilidad ante los demás.

El Golpe aun así consiguió impactan en dos de los tentáculos de la masiva Gyojin. Esta salió disparada varios metros en el aire hacia detrás pero en medio del aire su orgullo la hizo lanzar lo que sería su golpe final, arrojó su hacha hacia el cielo en dirección al pirata, el cual para su asombro se encontraba caído en el suelo pues se debía haber resbalado con el charco de tinta que se encontraba a sus pies.

Escoria... no me llevaras a ningún sitio!

Mientras era desplazada en el aire, Úrsula pudo ver como Dundee se transformaba nuevamente en su forma completa mientras caía encima de su rival. Estaba segura que su fiel compañero aplastaría el cuerpo caído de su enemigo. Lo último que pudo hacer fue alzar la mano en dirección a Guldrik Levantando los dedos en V en señal de victoria antes de caer al suelo. Si bien el golpe no la había debilitado tanto necesitaba algo de tiempo para descansar.

Con los dedos en alto en señal de victoria, Úrsula vio como Dundee caía sobre su enemigo aplastándolo. Observo como el cuerpo de su mascota se movía levemente arriba y abajo por culpa de los últimos estertores del pirata. Antes de poder levantarse Guldrik se acerco a la tritón y le examinó las heridas. Por primera vez en mucho tiempo se sentía orgullosa de si misma pues desde que su familia la repudió no había tenido muchas victorias personales. Pero no era momento de dormirse en las algas, pues era posible que el capitán de esos piratas estuviera cerca.

Sin escuchar nada, la masiva Gyojin vio como su acompañante se ponía serio otra vez. Tal vez su enemigo estaba cerca y sus privilegiados sentidos habían vuelto a sentir algo que ella no era capaz de notar. Pasaron los segundos y nada ocurrió, ningún enemigo se dirigió hacia ellos, mas una nota hecha de papel cayó enfrente de ellos. Su compañero la leyó y luego se la paso a ella.

Veo que mis subordinados han caído, nunca me cayeron bien. Pero sé que no soy rival para vuestra fuerza combinada, así que no hare acto de presencia por ahora. Eso sí, no olvidare esta ofensa realizada por ti, Guldrik y por la Gyojing, Úrsula. Cuando tenga más poder os buscare y acabare con vosotros, es algo personal así que tened cuidado.
Atentamente El capitán Garra Azul.

-Ahora que tenemos tiempo te tratare el golpe, para que se cure con más rapidez y así no tengas esta marca tan fea. Por cierto, ¿Qué me dices, te unirás a nosotros?

Parecía que no iban a tener más combates por hoy con una sonrisa Úrsula cayó al suelo despreocupada y se empezó a reír.

Bohahahaha, Bohahahaha, Guldrik amigo mío creo que nos hemos ganado una buena bebida ¿Qué me dices? Y Claro que me uniré a ustedes, si todos en tu gremio son tan fuertes como tu estoy segura de que podre recuperar mi hogar gracias al crecimiento que experimentare acompañándoles. ¿Dónde tengo que firmar?