Dretch
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Bajo la tenue luz de un candil de luz titilante que hacía las veces de una original farola callejera, el agente depositó su maleta en el suelo e inspiró profundamente dejando que sus fosas nasales se inundaran de todos los matices de aquel paradisiaco lugar. Así mismo, se llevó su mano siniestra hacia el bolsillo trasero de su pantalón, del cual sobresalía un papel de llamativos colores. Al desplegarlo frente a su rostro, en la parte superior de este podía leerse “Circuitos, grandes viajes y experiencias temáticas: Todo lo que necesitas para pasar unas vacaciones de ensueño en Pucci”.
La isla de Pucci en el Paraíso se trataba de una de las islas más cotizadas por los activos del Cipher Pol como lugar de vacaciones ¿Por qué sería? Tal vez por sus playas de arena blanca como Lubina Beach, el verde intenso de sus selvas en el Parque Nacional de Cilandro Oriental, la infinita variedad de restaurantes o las diferentes excursiones programadas por los lujosos e inconmensurables complejos hoteleros de la isla. Al final del folleto podía leerse lo siguiente: “Escoge playa o lago, visita algún volcán o, incluso, aprovecha para casarte ¡Pucci es la isla de los dioses culinarios!
Con una sonrisa de oreja a oreja, Dretch miró de reojo la vieja cámara de fotografía instantánea Dioralod con intención de documentar toda la experiencia gastronómica. Sin embargo, una tenue lluvia le sacó de su ensoñación y comenzó a empaparle de una serie de gotas de lluvia que apenas sentía. Quizás aquel no hubiese sido el mejor día para iniciar sus vacaciones, pero por fortuna tenía un largo mes por delante para disfrutar de la vida sin preocupaciones.
Dispuesto a pasarlo bien desde el primer día, plegó el folleto nuevamente en su bolsillo y, expirando muy relajadamente, cogió de nuevo su maleta. O, mejor dicho, lo habría hecho si esta siguiera en el lugar donde la había depositado hacía apenas unos segundos. Extrañado, miró hacia ambos lados de la calle en busca de algún amable botones que se hubiese hecho cargo de ella en su ausencia, pero no fue ello lo que se encontró. Un vivo relámpago seguido de un potente trueno le sirvieron al agente para darse cuenta que ese lugar definitivamente no era Pucci y que o se ponía a cubierto pronto o no tardaría en quedar calado hasta los huesos con la tormenta que se avecinaba.
La isla de Pucci en el Paraíso se trataba de una de las islas más cotizadas por los activos del Cipher Pol como lugar de vacaciones ¿Por qué sería? Tal vez por sus playas de arena blanca como Lubina Beach, el verde intenso de sus selvas en el Parque Nacional de Cilandro Oriental, la infinita variedad de restaurantes o las diferentes excursiones programadas por los lujosos e inconmensurables complejos hoteleros de la isla. Al final del folleto podía leerse lo siguiente: “Escoge playa o lago, visita algún volcán o, incluso, aprovecha para casarte ¡Pucci es la isla de los dioses culinarios!
Con una sonrisa de oreja a oreja, Dretch miró de reojo la vieja cámara de fotografía instantánea Dioralod con intención de documentar toda la experiencia gastronómica. Sin embargo, una tenue lluvia le sacó de su ensoñación y comenzó a empaparle de una serie de gotas de lluvia que apenas sentía. Quizás aquel no hubiese sido el mejor día para iniciar sus vacaciones, pero por fortuna tenía un largo mes por delante para disfrutar de la vida sin preocupaciones.
Dispuesto a pasarlo bien desde el primer día, plegó el folleto nuevamente en su bolsillo y, expirando muy relajadamente, cogió de nuevo su maleta. O, mejor dicho, lo habría hecho si esta siguiera en el lugar donde la había depositado hacía apenas unos segundos. Extrañado, miró hacia ambos lados de la calle en busca de algún amable botones que se hubiese hecho cargo de ella en su ausencia, pero no fue ello lo que se encontró. Un vivo relámpago seguido de un potente trueno le sirvieron al agente para darse cuenta que ese lugar definitivamente no era Pucci y que o se ponía a cubierto pronto o no tardaría en quedar calado hasta los huesos con la tormenta que se avecinaba.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.