Steve
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fuerza
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Agilidad
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Akuma no mi
Varios
Límite de tiempo : Sin fecha límite.
Escenario : Villa de Syrup, una pequeña villa en lo alto de una meseta, donde la única entrada a la aldea son dos cuestas al lado norte y sur de la isla.
Turnos : Kaín- Iku-Kaín...
Condiciones :
- El ganador se lleva 1500 de Exp
- El perdedor 700 y en caso de empate ambos 800.
- El combate sera a KO
- Sin límite de tiempo
- La victoria sera decidida por moderador
- Los daños son Offrol. Los daños no existirían fuera de la pelea
Invitado
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Kaín se encontraba apoyado contra un árbol en la cima del acantilado de la isla, muy cerca de la cuesta, situada al sur de la isla, que llevaba al pueblo. Se encontraba allí por una razón muy simple: Estaba siguiendo a alguien. Más concretamente a la líder de su nuevo gremio. Se había unido a ellos sin pensárselo demasiado tras la misteriosa desaparición de todos los miembros de Fox Hound, pero luego se había arrepentido y ahora se había propuesto seguirla para ver que tipo de persona era.
El cazador iba vestido como siempre. Camisa negra abierta, pantalones del mismo color y botas a juego. Las botas tenían los cordones de color rojo, combinando con la corbata que descansaba sobre el torso de Kaín, visible por la camisa abierta. Sus ojos también eran rojos, pero de un tono más vivo y brillante. Su blanco pelo caía en suaves ondulaciones hasta sus hombros. Era alto y de complexión ligera, pero sus músculos estaban perfectamente definidos y advertían de una gran fuerza física.
Kaín se habían enterado de que su nueva jefa se encontraba en aquella isla, pero no la había encontrado por el pueblo, por lo que supuso que estaría en algún otro lugar, así que decidió esperar en una de las dos cuestas. No era nada seguro, pero tampoco tenía demasiada prisa. Si no la encontraba, siempre podía volar y buscarla desde el aire, pero prefería ser algo más sutil por si ella no se lo tomaba bien. Lo único que sabía de ella era que era fuerte, aunque tampoco sabía cuanto. De todos modos, pensó el cazador mientras sonreía y hacía sonar sus nudillos, lo sabría antes de acabar el día.
El cazador iba vestido como siempre. Camisa negra abierta, pantalones del mismo color y botas a juego. Las botas tenían los cordones de color rojo, combinando con la corbata que descansaba sobre el torso de Kaín, visible por la camisa abierta. Sus ojos también eran rojos, pero de un tono más vivo y brillante. Su blanco pelo caía en suaves ondulaciones hasta sus hombros. Era alto y de complexión ligera, pero sus músculos estaban perfectamente definidos y advertían de una gran fuerza física.
Kaín se habían enterado de que su nueva jefa se encontraba en aquella isla, pero no la había encontrado por el pueblo, por lo que supuso que estaría en algún otro lugar, así que decidió esperar en una de las dos cuestas. No era nada seguro, pero tampoco tenía demasiada prisa. Si no la encontraba, siempre podía volar y buscarla desde el aire, pero prefería ser algo más sutil por si ella no se lo tomaba bien. Lo único que sabía de ella era que era fuerte, aunque tampoco sabía cuanto. De todos modos, pensó el cazador mientras sonreía y hacía sonar sus nudillos, lo sabría antes de acabar el día.
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