Encuentro de aliados. [Privado] [Yuu - Kedra]

En uno de sus viajes por el East Blue, el cyborg había atracado en el puerto de la isla Yotsuba, sobre la cual estaba edificada la ciudad de Shellstown, en aquella ciudad se comentaba que el antiguo Rey de los Piratas, Monkey D. Luffy, había tenido sus primeros encontronazos con la marina. El afán de conocimientos del cyborg le hizo llegar a esa ciudad, quería saber como había sucedido todo aquello y como recordaban por aquel lugar esa hazaña que él creía muy importante en la historia de la piratería. Era un día fresco para lo que él estaba acostumbrado, hacía tanto aire que si no fuese por su gran peso no podría andar con normalidad. El cyborg sabía que se arriesgaba mucho al ir a esa isla, ya que había una pequeña base de la marina, pero eso a él no le importaba, sabía que le conocerían ya en muchos lados. Era un ex-barba rubia y tenía gran recompensa por su cabeza, él sabía que tenía muchas posibilidades de que le reconocieran y avisasen a la marina pero aún así estaba decidido a investigar la historia de ese lugar.

-Vaya, parece que el tiempo acompaña perfectamente mi andanza, con este viento casi nadie saldrá a la calle y podré andar tranquilo.

El cyborg bajó de su pequeño barco de un salto,por el chapoteo que hizo el barco debía agradecer que le quitasen tal peso de encima. Al tocar tierra firme el cyborg confirmó su teoría, no había casi nadie en el puerto, estaba todo vacío salvo por unos mercaderes que descargaban peces a la lonja, por suerte para el cyborg estos estaban en la parte contraria al puerto que él por lo que podría escabullirse sin ser visto por nadie.

-Que poco me gusta esconderme. –Susurró.

Una vez que se aseguró que el barco había quedado bien amarrado, el cyborg comenzó su andanza por las calles de Shellstown, de vez en cuando tenía que esconderse en los callejones perpendiculares a las calles ya que pasaban patrullas de marines. Toda persona que se cruzaba con el cyborg se le quedaba mirando, su físico llamaba demasiado la atención, en momentos como aquel desearía ser más discreto, más menudo.

-Verás como al final me descubren…

Tras una larga caminata por las calles de Shellstown llena de incontables momentos en los que se tenía que esconder, llegó la noche, el cyborg ya estaba cansado por lo que se deshizo de un grupo de niños que le llevaban siguiendo un buen rato señalándole y murmurando para llegar a un callejón algo ancho donde hizo dos pequeñas paredes verticales y otra horizontal en la cual se tumbó para descansar esa noche.

-Bueno, tras un largo día toca descansar un poco.

Concluyó su pensamiento con un amplio bostezo y cerró los ojos intentando dormir.