Lee mis movimientos, lee mi mente [Rol Maestro-Alumno Alex y Dark]

Ya iba siendo hora de que Dark aprendiera el Haki. Según todo lo que el "hombre luciérnaga" le había contado, era un gran guerrero y en el pasado fue toda una bestia. Su poder era comparable al de los más poderosos del planeta y Alex lo creía. Pero era extraño que nunca hubiera aprendido a usar el haki. Quizás se debía a que su fuerza era tan impresionante porque el resto eran demasiado débiles. Es decir, una exageración involuntaria que explicaría el por qué nunca aprendió dicho poder. Porque tampoco lo necesitó. Alex sonrió pensando en ello. Creía en las palabras de su amigo, pero ¿cuántas serían verdad y cuantas serían mentiras que él consideraba ciertas?

Testuda surcaba el mar con tranquilidad, no había ninguna prisa y la brisa marina era agradable. El cazador fue hasta la habitación de Dark y picó a la puerta antes de abrir. La habitación estaba vacía, cosa que parecía extraño, ¿dónde se había metido? Salió del lugar y fue a buscarlo. Miró en el exterior y, aunque tardó en encontrarlo, allí estaba. Se subió al tejado del edificio central y vio al hombre luminoso "volando". Estaba utilizando sus plataformas para flotar en el aire. Quizás se estaba entrenando o intentando mejorar su técnica. Aunque, conociéndolo, quizás era uno de esos momentos de locura en los que Dark hacía tonterías solo por divertirse.

-¡Dark! ¡Ven!- Gritó.

Esperó a que su amigo se posicionara frente a él y se sentó. Permaneció uno segundos en silencio. No se consideraba un maestro y no sabía cómo lo haría. A lo mejor su inexperiencia lo convertía en un profesor nefasto y su compañero no aprendía nada. Pero no podía rendirse, debía intentarlo, al menos, y utilizar las mismas técnicas que su padre usó alguna vez con él. Ese hombre era ducho en la materia y repetir sus clases era la mejor opción para que Dark despertara el Haki. Después de pensarlo, Alex se levantó y miró al hombre de arriba a abajo. Nunca lo había tratado mal y siempre había sido agradable, pero ahora le tocaba ser estricto.

-Prepárate, vas a aprender a usar el Haki de Observación. Lo que vamos a hacer será difícil, doloroso y muy duro. Pero creo que estás preparado- Le dijo seriamente.

Estaba claro que Dark aceptaría, cualquier cosa que le ayudara a ser más fuerte siempre sería bienvenida y siempre cabía la posibilidad de que el entrenamiento despertara el verdadero potencial, el que perdió durante todos esos años que estuvo en coma. "Me da igual que hayas estado en coma, el entrenamiento será tan intenso como considere oportuno y espero que tu cuerpo lo aguante" le explicó. Casi se sentía mal por ello. Lo hacía por su bien pero tenía la sensación de que se estaba pasando y no sabía cómo se lo tomaría su amigo. Quizás se sentía ofendido o atacado y prefería no realizar en entrenamiento. Pero esperaba que no fuera así.

Dark se dedicó a dar una charla conmovedora a Alex. De haber sido en otro momento, el cazador lo habría abrazado y le hubiera devuelto el discurso con otras palabras similares. Pero ahora no era ese momento, no había tiempo para "cursilerías" ni amistad. Era momento de entrenamiento y todo lo que dijera cualquiera de los dos sería tan inútil como innecesario. Aun así se sentía agradecido por esas bonitas palabras y debía hacer saber a su amigo que él sentía lo mismo y que podía contar con él. ¿Pero cómo hacerlo sin perder la seriedad y la disciplina que quería mostrar? Pocas eran las ideas que rondaban su mente, pero se decidió por una en especial.

-Es recíproco, y te considero un buen amigo. Pero ahora no me veas como a alguien así, ahora soy tú maestro. Olvídate del Alex que conoces- Le explicó con seriedad.

Acto seguido comenzó a imbuir el puó izquierdo con el poder de la Gura Gura. Lo hacía lentamente y sin moverse demasiado para que Dark pudiera percatarse de ello. Estaban totalmente claras sus intenciones pero, pro si no era suficiente, hizo retroceder el brazo y después lo "disparó" hacia adelante. Hizo una curvatura y ascendió para encontrarse con el rostro del alumno. Era un ataque bastante triste y fácil de esquivar, por lo que el hombre de luz lo evitó echándoselo a un lado. Lástima que aquello fuese un señuelo... Antes de que pudiera darse cuenta, Alex dirigió su puño derecho desde el costado encajándolo en la mandíbula de su compañero.

-Siempre has confiado en tu velocidad, pero alguien que te conozca o que sepa hacer una buena finta tendrá ventaja contra ti. Es por eso que necesitas el haki de observación- Le aclaró mientras ofrecía su mano para ayudarle a levantarse.

Tras eso se sentó de nuevo y le instó a hacer lo mismo con una señal de la mano, un solo gesto que podía comprenderse a la perfección. No era necesario decir nada para que Dark entendiera y acatara la orden. En cuanto ambos estuvieron sentados Alex cerró los ojos. "Cierra los ojos y despeja tu mente. Debes mantenerla en blanco y escuchar todo lo que yo te diga. Intentaré despertar tu mantra con el mío, aunque no será sencillo y, seguramente, no funcionará. Pero no desesperes, será solo una prueba y el comienzo de todo el entrenamiento." Le dijo. Era cierto, aquello no iba a ser tan rápido ni fácil, pero estimularlo era la mejor forma de empezar.

Una vez estuvo como él pidió, liberó su haki de observación e intentó estimular el de Dark mediante "envíos" de dicho poder a la cabeza del alumno. Eran como ligeros ataques de mantra que tenían intención de despertar el del "enemigo". Tardarían semanas e incluso meses antes de lograr un avance, pero con suerte esto agilizaría el proceso. Mientras tanto le iba diciendo cosas. sobre su pasado para desconcentrarlo. Podía resultar algo cruel pedirle concertarse y distraerlo, pero si era incapaz de mantenerse sereno también lo sería de despertar ese haki. Debía controlarse completamente si quería lograrlo. Y Alex sabía que era capaz de ello.