!Defended ese pueblo¡ (privado pasado Corvo y Fear Liath)

Estaba en un pequeño pueblo junto a un grupo de marines luchando contra piratas que invadían la isla. Estábamos en una posición de desventaja, con los piratas atrincherados en la única salida del ayuntamiento. El fuego invadía varias zonas del edificio, y se acercaba nosotros. En la posición enemiga también había varios fuegos pero podían huir no como nosotros, tenía que hacer algo rápido.

-Teniente cúbrame, necesito legar hasta esa habitación.

En cuanto los marines comenzaron a disparar corrí hasta una habitación contigua, recorrí la pared hasta estar cerca de la zona de la puerta y empecé a concentrar el hidrógeno del aire a una altura de siete metros, no quería que las llamas lo tocaran aún. Tardé varios minutos en conseguirlo, pero al fin junto la cantidad suficiente como para que al hacerlo bajar provocará un deflagración de llamas invisibles a excepción de alguna con tono azulado.

- ! Avanzad ¡-grite a los marines, que corrieron hasta la nueva posición preparados para continuar con la lucha.

-Teniente.- le dije mientras me acercaba a él.- no podré hacer mucho más que disparar hasta dentro de un rato, ¿Cómo ve la situación?

-Si aguantamos hasta que lleguen los refuerzos podremos reconquistar la ciudad, el resto de la isla no sé cómo esta. Gracias por su ayuda corvo su superior se enterar de esto.

Mientras conteníamos a los piratas logramos apagar alguna de las llamas más cercanas y formar un perímetro relativamente seguro.

Un par de lo que parecían misiles estallaron en las posiciones piratas que nos asediaban, parecía que venían refuerzos y bien armados. Aprovechando la confusión generada acabamos con los más cercanos y avanzamos a su posición. Ahora teníamos más campo de acción y ellos más objetivos. En cuanto llegamos a la nueva cobertura observé a nuestro alrededor, solo había piratas, ¿Se estarían matando entre ellos? Pero no, el grupo de nuestra derecha miraba al cielo, donde un hombre suspendido en lo que parecían cohetes estaba suspendido. Si eso eran los refuerzos no teníamos muchas opciones de reconquistar.

Genere hidrogeno sobre nosotros, además de acumular el atmosférico. Luego despacio lo moví hasta dos de las zonas de más piratas. Una vez lo tenía todo preparado le pedí a los marines que dispararan balas píricas, cuantas mejor al suelo, a los pies de los piratas. Esto desencadeno una reacción que quemó rápidamente el hidrogeno desde el suelo hacia arriba, no como en la puerta que hubo una explosión por la llegar a una concentración critica. Esta vez el hidrogeno estaba más expandido, para provocar un azulado incendio y que los piratas salieran de sus coberturas con bastantes quemaduras. Cayeron rápido bajo el fuego de los rifles y fusiles, tenía que hacerme yo con munición especial. O modificar mi arma para mejorar sus prestaciones.

Si aquel tipo conseguía acabar con los de la derecha tendríamos la plaza libre y un respiro para descansar, porque poco sacaríamos de los cuerpos quemados de aquellos piratas, si tenía Wanted no serían reconocibles para cobrarlos. También deberíamos buscar civiles por la casas cercanas y luego recuperar el pueblo.

Una vez terminado nos volvimos contra el otro grupo de piratas, justo a tiempo para ver como el hombre que volaba los masacraba con un arma en su brazo. Por la forma en que combatía debía ser un agente del CP, no sabía porque pero últimamente estaba conociendo a muchos de ellos. Quizás fuera porque los mandan siempre que un científico esta en problemas, y a mí parece que estos me persiguen allá donde valla.

Cuando salimos al a plaza lo pude ver mejor, no usaba técnicas del gobierno, si no que el mismo era el que se impulsaba, por fin conocía a uno de los famosos cyborg del gobierno. Tendría muchas preguntas para aquel hombre, pero lo principal ahora era recuperar el pueblo y la gente, además de eliminar a los malditos piratas.

-Teniente,-llamé al marine- organicé a sus hombres para recuperar el pueblo y únase a mí para hablar con ese agente.- tras una contestación afirmativa del marine me alejé hasta la zona donde debía de aterrizar el agente.

El cyorg descendió a tierra hasta quedar justo a mi lado, también iba enmascarado de más o menos su altura, me habló nada más llegar a su lado.

-Corvo Shadowwalker ,¿Verdad?. Mi nombre es Fear y ahora está bajo mi custodia, me tíene que acompañar a puerto para sacarlo de aquí.

-Vaya, ¿Me venía buscando señor…..?, y no tengo mucha intención de irme a pesar de sus ordenes. He dejado parte de una investigación escondida y necesito recuperarla. Además hay mucho pirata que liquidar.- en ese momento llegó el teniente- Agente le presento al teniente Ranblone, está al mando de estos marines. Deberíamos discutir como limpiar la isla y no como evacuarme.

El teniente que ya conocía mi cabezonería asintió con la cabeza. Lo de la investigación no tenía mucha relevancia ya que estaba muy bien escondida y tenía todos los datos en la cabeza, pero me serviría para intentar obligar a aquel agente a quedarse y ayudar. Además no pensaba que los piratas estuvieran allí por él había algo más y quería saberlo. Mientras esperaba la respuesta del agente se escucharon varias explosiones en dirección al puerto.

Que agente tan extraño, bueno había conseguido lo que quería así que no me quejaría. Pero el hecho de que el puerto estuviera bien protegido no me hacía pensar nada bueno, quizás esto era una conquista, si era así deberíamos pararla cuanto antes.

-Teniente por donde continuamos, al fin y al cabo usted es el militar de más rango aquí.

-Bueno, deberíamos abrir una ruta al puerto, pero parece que ya va ese agente- tras unos segundos pensando- el cuartelillo y el polvorín deberían ser los siguientes objetivos, quizá todavía resista alguno de los dos.

-Muy bien Teniente, le sigo.

Cargue el arma y me dispuse a unirme al pelotón del teniente. Avanzamos sin mucha oposición por las calles, dejé que ellos fueran delante pues estaban más entrenados que yo, y así descansar y recuperar un poco mi energía. El cuartelillo estaba cerca, a un par de manzanas o tres. Según nos fuimos acercando más piratas aparecían en las calles y más lento fuimos. Tras luchar calle a calle al fin llegamos al cuartelillo que aun poseía la bandera de la marina.

Los piratas casi habían pasado las defensas exteriores, pero nuestro ataque por su retaguardia los destrozó. Por suerte no tuve que usar mis habilidades y solo con el fusil y mi puntería valió para repeler el ataque, pero debíamos irnos de allí. Si tenían armas pesadas pronto las traerían y no era bueno quedarse en un sitio sin escapatoria. Aunque primero deberíamos entrar y ver que fuerzas quedaban.

Entramos al cuartelillo, no habían producido casi destrozos dentro y aún había muchos marines, aunque en su mayoría reclutas, solo quedaban un par de cabos con ellos. Nos dijeron que el resto de tropas, que no eran muchas, estaban en el polvorín. Su ultimo reporte era de hacia casi uno hora, pero que no lo estaban pasando mal. El teniente ordenó a unos de los cabos que contactara, yo mientras me puse a mirar por allí a ver que encontraba. Las defensas parecía que resistirían bien si tenían el suficiente personal, la parte más delicada era el portón que estaba bastante dañado. Pedí al sargento un grupo de hombres para trabajar en algo para la defensa de esa zona.

Apilamos cajas de materiales diversos que había en el patio, mientras otros llenaban sacos con tierra. La zanja de la que sacaban la tierra estaba posicionada justo delante de las cajas que apilábamos y tras la puerta, por lo que serviría de fosillo defensivo, mientras que las cajas y sacos actuarían de muralla. Dejamos varios huecos entre las cajas y sacos, lo justo para sacar el arma y ver donde se dispara, en angulo decreciente, es decir, en el lado hacia la puerta más ancho y en el interior mas estrecho, lo que dificultaría mucho que las balas dieran a los defensores. Trabajamos en ello durante varias horas hasta que el teniente aviso de que partiríamos al polvorín en unos minutos, y naturalmente me apunte a la expedición. En ese rato además varios grupos de aldeanos habían conseguido llegar al cuartelillo, lo que era una gran noticia, aunque aun faltaba mucha gente.

Avanzábamos bastante despacio, comprobábamos cada casa para evitar emboscadas y muertes innecesarias. Estábamos encontrando bastante poca resistencia en nuestro avance por esa zona. Las casas parecían intactas y no había mucho signo de lucha, quitando las puertas derrumbadas. No había cadáveres y las casas no parecían desvalijadas, serian las personas los objetivos, o solo era un cuestión para sacarlos y desvalijar más fácilmente.

Cuando llegamos al polvorín este ya no existía, era un gran cráter humeante en medio de la ciudad. Lo extraño es que no había muchos cuerpos de dispersos por el suelo, ni muchos restos que parecieran humanos o animales. Aunque si muchos piratas muertos sin signos aparentes de violencia quitando la sangre de sus bocas. Posiblemente consecuencia de la explosión, más bien de la onda expansiva siguiente a esta. Nos abrimos en abanico para buscar pistas, en dirección al a ciudad no había más que cadáveres de piratas, pero los que fueron a la parte que daba hacia el bosque encontraron numerosas huellas, no sabrían decir si de piratas o de marines, junto con la de muchos aldeanos.

El sargento nos dividió en dos grupos, yo me adentraría en el bosque con algunos que decían conocer esa parte y él seguiría limpiando la ciudad. Aparentemente ya solo quedaba la zona del puerto sin investigar, pero el agente dijo que era suya. Nos adentramos en el bosque siguiendo las huellas atentos de no caer en una emboscada, mandé a los marines que conocían la zona un poco separados por entre los árboles para evitar que nos cogieran desprevenidos, y a un par más de los mas rápidos por delante de exploradores.

Las huyas se internaban en una zona de claros, cada vez parecía más claro que no eran de piratas, o al menos no solo ya que pudieron distinguir los exploradores huellas de niños entre los arboles. Tras varios minutos más escuchamos voces, al parecer los exploradores habían dado con algo, y al no sonar disparos pensamos todos que no serian enemigos. Uno de los exploradores regresó corriendo, era la gente del pueblo y la mayoría de los marines del arsenal, habían escapado antes de volar el mismo. Habían sacado todo lo que pudieron y ahora se dirigían hacia un puerto, en el que había una seria de grutas conectadas donde se pensaban esconder. Estábamos terminando de ponernos al día con ellos cuando sonó mi DDM.

-Corvo, el puerto esta tomado por los piratas y necesito todo el apoyo que pueda recibir. Tienen gran potencia de fuego, cañones, rifles y bombas, por lo que sería recomendable traer algo para hacerles frente de igual a igual. Intentaré retenerlos el mayor tiempo posible, pero la situación se esta complicando por momentos.

-El teniente estaba de camino, ahora mismo contacto con él. Yo parto hacia ya desde el bosque, están todos los civiles bien. Lograron sacar bazucas del arsenal antes de volarlo, partimos hacia tu posición.- colgué al agente y llamé al teniente para avisarle de la situación.- Teniente, los piratas tienen el puerto y armamento pesado, los marines del arsenal están bien y sacaron bastantes armas antes de volarlo.

Una vez informado el teniente reuní a los marines, tan solo unos pocos se quedarían con los aldeanos, el resto con las armas pesadas vendrían conmigo hacia el puerto para ayudar al agente y al teniente. Una vez organizado partimos al puerto, me acompañaban uso veinte espadachines, diez bazucas y quince tiradores. No se cuantos piratas habría pero que podríamos dar buena cuenta de todos ellos entre nosotros y los hombres del teniente más el agente.

El avance por el pueblo fue rápido, no encontramos oposición alguna hasta llegar a las cales que daban al puerto, donde el teniente había sido retenido por fuego de cañón. No fue mucho problema acabar con él, y los piratas que estaban alrededor una vez reunidos todos los marines. Una vez eliminados continuamos nuestro avance, que se vio interrumpido solamente al encontrarnos con el agente que parecía haber sufrido… ¿Daños? ¿Heridas? No sabría cómo decirlo muy bien.
-Ya me estaba aburriendo solo en esta fiesta, menos mal que habéis llegado antes de que acabara – me comento cuando estuve a su lado - Necesito algunas herramientas y alguna lamina de metal para reparar momentáneamente mi cuerpo, mientras, avanzad lo que podáis. Me reuniré con vosotros en cuanto esté listo.

-Bien chicos la le habéis oído, traerlo algunos restos del cañón que destruimos antes. Teniente, ¿Estamos listos para tomar el puerto?

-Sí, soldados, sr valientes, no flaqueéis en estos momentos y sobre todo recordar, si se rinden esposarlos y seguir no somos asesinos.

Tras un sonoro vitoreo al teniente por parte de los marines estos se lanzaron al combate, los animo crecidos, junto con la retirada de efectivos piratas y que los bazucas dieron cuenta de los cañones activos rápidamente tardamos muy poco en limpiar el puerto de piratas. Pocos se rindieron a pesar de estar en desventaja numérica y armamentística. Con el puerto tomado solo nos quedaba una cosa, el barco que se aproximaba a nosotros y que muy posiblemente fueran más piratas.

Selecciones a un grupo de marineros, mientras yo intentaba reparar los cañones menos dañados para poder usarlos ellos le daban la vuelta a los cañones en perfecto estado y que solo habían perdido a los artilleros. Además mande traer una caja de uno de los almacenes del puerto, parecía que no habían intentado abrirla, que estuviera tras varas cajas de fruta seguro que haba ayudado.

El agente me comento algo sobre un pirata que no encontraba entre los muertos o capturados, que era el que daba las ordenes al parecer. Y si faltaba uno podían faltar más. Me pidió discreción con el asunto, por lo que llame a uno de los soldados con los que había estado desde el principio, uno de los rastreadores, y le comunique debía revisar el pueblo en busca de piratas rezagados e informar antes de comenzar ninguna acción contra ellos. Para ello podía escoger a cinco soldados que supieran que eran sigilosos y bien mandados, además de no comunicar la naturaleza de la misión. Tras ello contacte con los guardias que se habían quedado con los aldeanos, para avisarles de que se mantuvieran alerta y no se fiaran de nadie, si mandábamos a alguien a su posición les avisaríamos con antelación.

Ahora quedaba el asunto del barco, cuanto más se acercaba más grande se volvía y más misterioso. No se podía ver a nadie en su cubierta, por lo que pensaban usar como arma o intentar tendernos una emboscada, en cualquiera de los casos lo mejor posiblemente era hundirlo antes de que llegara. De cualquier forma hable con el teniente para que dispusiera unas barricas en torno a la zona de atraque y que preparan aceites u otros líquidos inflamables para la defensa en caso de ser necesaria. Tras dar tanto paseos me acerque a la caja que había mandado traer, dentro debía tener varios cofres cerrados y armas experimentales, estas ultimas no me preocupaban demasiado pues lo más seguro es que explotaran al tratar de usarlas, pero los cofres si me interesaban más. Por suerte todo estaba en su sitio, aunque para esa situación no no sirvieran de nada ni los cofres ni las armas. Llamé al agente y al teniente, teníamos que discutir que hacer ahora.

-Bien caballeros, he aquí el dilema ¿Hundimos el barco o esperamos a que llegue?

De momento no diría nada pero la palabras del agente no me gustaban nada, el no era quien para castigar o sancionar a la marina, al igual que yo tampoco podía. Lo que me pareció interesante fue la idea de regar a los soldados, eso sería buena idea y más teniendo en cuenta que podía ser algo tremendamente horrible. Pero bueno lo primeo era la decisión de hundir o no el barco, y dándole la razón al agente de nuevo lo mejor sería no hundirlo por si acaso, y el teniente estuvo de acuerdo.

Las barricadas ya estaban casi listas y los cañones posicionados apuntando hacia el puerto, se echaron varios barriles de brea al final del muelle, listos para arder si era necesario. Reparamos las barricadas exteriores para evitar que nos atacaran por sorpresa desde la ciudad si se nos habían escapado algunos piratas en la ciudad aparte del que echaba en falta el agente. Además en las playas y partes bajas de los muelles reforzamos las posiciones y preparamos las zonas para poner tropas que luego atacaran por sorpresa, además el teniente hizo caso al agente y se puso a dar un discurso.

Cuando el teniente termino el discurso las tropas se dividieron cada uno en sus posiciones, cuidadosamente colocadas, esperando a que llegara el barco hasta nosotros. Pero este era muy lento y la calma que nos invadía ahora no era un buen presagio.