Deathstroke
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Es un día agradable en la isla de Panapple, con un par de nubes, pero en general un cielo despejado, con una temperatura agradable incluso llevando esa armadura tuya. La isla sabes que está deshabitada, y no has venido para comenzar a poblarla, sino, porque has escuchado unos rumores, rumores de que un gran poder, que quizás puedas usar, y que se encuentra en la isla.
Tu barco ancla en una de las pocas costas en las que se puede, sin quedar encallados. La marea alta favorece su entrada en la cala y cuando esta baja te permite el acceso, junto a un destacamento de treinta reclutas, a la isla caminando y sin necesidad de bote, por lo que si queréis volver al barco os tocará esperar a que la marea se encuentre baja. O pedir a los que se queden en el barco que os vayan a buscar, eso a tu elección.
Ahora podéis avanzar hacia el interior de la isla en busca de la certeza de los rumores que habéis oído o quedaros en la playa haciendo una barbacoa, el tiempo lo merece. Si avanzáis, quien sabe si conseguiréis descubrir la verdad sobre los rumores, pero sin duda promete ser una pequeña aventura en la que deberéis estar atentos, nunca se sabe quién podría estar mirándoos en este mismo instante, o si hay algo interesante que os pueda servir.
Tu barco ancla en una de las pocas costas en las que se puede, sin quedar encallados. La marea alta favorece su entrada en la cala y cuando esta baja te permite el acceso, junto a un destacamento de treinta reclutas, a la isla caminando y sin necesidad de bote, por lo que si queréis volver al barco os tocará esperar a que la marea se encuentre baja. O pedir a los que se queden en el barco que os vayan a buscar, eso a tu elección.
Ahora podéis avanzar hacia el interior de la isla en busca de la certeza de los rumores que habéis oído o quedaros en la playa haciendo una barbacoa, el tiempo lo merece. Si avanzáis, quien sabe si conseguiréis descubrir la verdad sobre los rumores, pero sin duda promete ser una pequeña aventura en la que deberéis estar atentos, nunca se sabe quién podría estar mirándoos en este mismo instante, o si hay algo interesante que os pueda servir.
Katharina von Steinhell
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Dirigió la mirada hacia el cielo y se llevó la mano al cabello plateado que se agitaba por el pasar de la refrescante brisa marina. El sol iluminaba su rostro y las aves cantaban y paseaban de un lugar a otro, con la vista fija en el vasto océano. Aquella isla no era precisamente lo que quería cuando les dijo a sus superiores que quería algo de diversión, pero le terminó interesando debido a los rumores. Entonces, ¿cuál era la razón de que Katharina haya viajado a esa isla? Poder. Su intención no era quedárselo para ella, sino que el gusto de conocer y obtener nuevas experiencias estaba sobrepasando todos sus demás intereses. Es que ya el mero hecho de oír un rumor le daba ánimo para embarcarse a una peligrosa aventura.
Descendió del barco y se encontró en la playa, una extensión de arena fina y prácticamente blanca. Por medios normales no podía volver al barco, a menos que le pidiera a sus compañeros que la recogieran, pero no estaba dentro de sus intereses. “¿Para qué quiero volver al barco? Allí no hay nada interesante, por el contrario, esta isla huele a misterios que desvelar”, pensó mientras su vista estudiaba los primeros árboles que se asomaban a la playa. Katharina ya tenía la intención de adentrarse hacia el centro de la isla, pero primero debía recibir un par de órdenes y asegurarse de que todos estaban listos. Por otra parte, para cualquier expedición la Marina se encargaba de entregar unas cuantas provisiones.
Una vez estuviera todo en orden y con unas cuantas provisiones para no preocuparse del alimento, propondría la idea de seguir hacia delante y comenzar a explorar la isla. Le urgía verificar los rumores de la isla. “¿Qué clase de poder será este? ¿Es acaso un libro de conjuros? ¡Espera! ¿Y si se trata de una fruta del diablo? Esto último sería fascinante, pero no me serviría en lo absoluto. Ya tengo una… ¿De qué me serviría otra?”, pensó mientras esperaba a sus compañeros.
Katharina no era de esas personas sociables amantes de hacer nuevas amistades, por el contrario, la bruja amaba el silencio y por sobre todas las cosas amaba leer. Pasaba todo el día metida en su libro de conjuros, a veces leía el Necronomicón mientras que otras simplemente se limitaba a crear conjuros, o al menos bosquejarlos. Sin embargo, ya no podía pasarse la tarde leyendo. Era consciente de que cualquier isla podía significar peligro de muerte y si no era lo suficientemente precavida, terminaría muriendo. A penas diera un paso hacia el interior de la isla, dejaría activo su mantra durante un rato, escuchando las voces del lugar.
Descendió del barco y se encontró en la playa, una extensión de arena fina y prácticamente blanca. Por medios normales no podía volver al barco, a menos que le pidiera a sus compañeros que la recogieran, pero no estaba dentro de sus intereses. “¿Para qué quiero volver al barco? Allí no hay nada interesante, por el contrario, esta isla huele a misterios que desvelar”, pensó mientras su vista estudiaba los primeros árboles que se asomaban a la playa. Katharina ya tenía la intención de adentrarse hacia el centro de la isla, pero primero debía recibir un par de órdenes y asegurarse de que todos estaban listos. Por otra parte, para cualquier expedición la Marina se encargaba de entregar unas cuantas provisiones.
Una vez estuviera todo en orden y con unas cuantas provisiones para no preocuparse del alimento, propondría la idea de seguir hacia delante y comenzar a explorar la isla. Le urgía verificar los rumores de la isla. “¿Qué clase de poder será este? ¿Es acaso un libro de conjuros? ¡Espera! ¿Y si se trata de una fruta del diablo? Esto último sería fascinante, pero no me serviría en lo absoluto. Ya tengo una… ¿De qué me serviría otra?”, pensó mientras esperaba a sus compañeros.
Katharina no era de esas personas sociables amantes de hacer nuevas amistades, por el contrario, la bruja amaba el silencio y por sobre todas las cosas amaba leer. Pasaba todo el día metida en su libro de conjuros, a veces leía el Necronomicón mientras que otras simplemente se limitaba a crear conjuros, o al menos bosquejarlos. Sin embargo, ya no podía pasarse la tarde leyendo. Era consciente de que cualquier isla podía significar peligro de muerte y si no era lo suficientemente precavida, terminaría muriendo. A penas diera un paso hacia el interior de la isla, dejaría activo su mantra durante un rato, escuchando las voces del lugar.
Deathstroke
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
El desembarco es normal, sin ninguna incidencia, los reclutas que te acompañarán tardan un poco más para coger unas pocas provisiones para el día, incluso las tuyas. Por otra parte, uno te da un pequeño caracol que se pone a sonar justo cuando el recluta te alcanza.
-Oficial Katharina, sus órdenes son las de verificar si los rumores de lo que hay en la isla son ciertos, y en caso de serlos, evitar que caigan en manos de otros. – te dice una mujer al otro lado del Den Den Mushi bastante seria – Según nuestros últimos informes no somos los únicos que vamos tras los rumores de la isla. Realice esto con la mayor presteza que pueda.
Mientras escuchas estas órdenes, los marines que te acompañarán se colocan en formación delante de ti dándote a entender que están listos para emprender la marcha. Y una vez lista ponéis rumbo hacia la maleza que os introduce en la isla. Activas tu mantra, pero parece que no detectas nada aparte de tus soldados.
-Oficial Katharina, sus órdenes son las de verificar si los rumores de lo que hay en la isla son ciertos, y en caso de serlos, evitar que caigan en manos de otros. – te dice una mujer al otro lado del Den Den Mushi bastante seria – Según nuestros últimos informes no somos los únicos que vamos tras los rumores de la isla. Realice esto con la mayor presteza que pueda.
Mientras escuchas estas órdenes, los marines que te acompañarán se colocan en formación delante de ti dándote a entender que están listos para emprender la marcha. Y una vez lista ponéis rumbo hacia la maleza que os introduce en la isla. Activas tu mantra, pero parece que no detectas nada aparte de tus soldados.
- off:
- Los 30 marines son reclutas y puedes darles ordenes (ponerlos en formación que quieras y esas cosas)
Katharina von Steinhell
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Las órdenes siempre eran sencillas, pero el proceso para cumplirlas siempre resultaba ser complicado. Según la información recién obtenida, Katharina y su pelotón no eran los únicos que estaban detrás de dicho misterioso poder, lo que significaba problemas. ¿Quiénes eran las criaturas que también estaban interesadas? La respuesta para eso solo la encontraría en el interior del bosque. La peliblanca miró a su alrededor y se fijó en los hombres que la acompañaban. “Inexperiencia”, pensó, pero tras unos segundos recordó que también había estado en su lugar, aunque eso fue hace ya muchos años.
La bruja pensó en cómo distribuir a los hombres que la rodeaban. Necesitaba a exploradores que pudieran moverse sigilosamente entre los arbustos, marines formados y fuertes que se encargaran de proteger la primera línea defensiva, y tiradores expertos que protegieran desde la retaguardia. Katharina les encargó a los hombres que se veían fuertes físicamente a cubrir la línea periférica de la formación; tras un momento de investigación acerca de sus hombres, les ordenó a unos cuantos marines (a decisión del moderador) explorar el bosque manteniéndose alejados a lo más trescientos metros del pelotón. Los hombres y mujeres que llevaban un fusil en mano tuvieron la orden de posicionarse en la retaguardia para cubrir la línea defensiva.
–Yo iré detrás –dijo finalmente la bruja– y analizaré la formación en todo momento.
A través de su mantra podría detectar alguna presencia hostil y así alertar a todos sus hombres. No era una formación perfecta, pero si los hombres cumplían con sus respectivos roles, todo indicaba que saldría bien… de momento. El factor sorpresa siempre resultaba ser problemático.
La bruja pensó en cómo distribuir a los hombres que la rodeaban. Necesitaba a exploradores que pudieran moverse sigilosamente entre los arbustos, marines formados y fuertes que se encargaran de proteger la primera línea defensiva, y tiradores expertos que protegieran desde la retaguardia. Katharina les encargó a los hombres que se veían fuertes físicamente a cubrir la línea periférica de la formación; tras un momento de investigación acerca de sus hombres, les ordenó a unos cuantos marines (a decisión del moderador) explorar el bosque manteniéndose alejados a lo más trescientos metros del pelotón. Los hombres y mujeres que llevaban un fusil en mano tuvieron la orden de posicionarse en la retaguardia para cubrir la línea defensiva.
–Yo iré detrás –dijo finalmente la bruja– y analizaré la formación en todo momento.
A través de su mantra podría detectar alguna presencia hostil y así alertar a todos sus hombres. No era una formación perfecta, pero si los hombres cumplían con sus respectivos roles, todo indicaba que saldría bien… de momento. El factor sorpresa siempre resultaba ser problemático.
Deathstroke
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Los reclutas comienzan a moverse según las ordenes que vas dándoles, cuatro de los marines aligeran un poco sus bultos para moverse mejor entre la maleza del bosque y comienzan a avanzar. Los exploradores son tres mujeres y un hombre, todos ellos tienen una estatura media y no son demasiado corpulentos, van armados con las armas convencionales (fusil, y espada) junto a esta cogen un puñal de caza y una pistola de bengalas.
Por otra parte, uno de los marines que pones en vanguardia no parece gustarle esa posición por la cara que pone, pero la obedece sin rechistar. En lo que los reclutas y tú os habéis colocado en formación habéis ido avanzando hacia el bosque y os encontráis en la linde de este, la presencia de los exploradores ya no la sientes, han salido de tu rango, o no, quien sabe, tu no has notado nada raro de momento, es hora de dar comienzo a la aventura.
Por otra parte, uno de los marines que pones en vanguardia no parece gustarle esa posición por la cara que pone, pero la obedece sin rechistar. En lo que los reclutas y tú os habéis colocado en formación habéis ido avanzando hacia el bosque y os encontráis en la linde de este, la presencia de los exploradores ya no la sientes, han salido de tu rango, o no, quien sabe, tu no has notado nada raro de momento, es hora de dar comienzo a la aventura.
- off-rol:
- perdón por tardar tanto he tenido una semana un poco liada
Katharina von Steinhell
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Los hombres siguieron mis órdenes y se posicionaron según mi estrategia; realmente esperaba que esa fuese la mejor forma de avanzar. Recién estábamos partiendo en nuestra aventura y por lo mismo no nos podíamos permitir ningún error, así que avanzar con precaución era lo suyo. No estábamos apresurados, al menos yo no, y podíamos permitirnos explorar con cuidado el terreno por el que caminábamos. En cualquier caso, era innecesario continuar avanzando sin la información recopilada por los exploradores.
–Avanzaremos en línea recta hasta llegar una fuente de agua y un terreno plano que podamos proteger –le dije a uno de los hombres para que diese las órdenes–. De nada sirve avanzar estando a ciegas, después de todo, los exploradores nos indicarán el camino.
Lo más preocupante era que los marines que envié a explorar no regresaran así que de alguna forma dependíamos netamente de ellos. Tampoco podía enviar y enviar marines a la selva para que se adentrasen en un mundo de peligros desconocidos. Montar campamento parecía, de momento, la mejor opción. Una vez hayamos llegado a un lugar con fuentes de agua y zonas de protección esperaríamos a la llegada de los exploradores. “Necesito saber si aquí hay una ruina, un templo, cualquier cosa… Un poder así por lo normal se encuentra en algún tipo de estructura, no en medio del bosque”, pensé mientras observaba a mis hombres.
–Avanzaremos en línea recta hasta llegar una fuente de agua y un terreno plano que podamos proteger –le dije a uno de los hombres para que diese las órdenes–. De nada sirve avanzar estando a ciegas, después de todo, los exploradores nos indicarán el camino.
Lo más preocupante era que los marines que envié a explorar no regresaran así que de alguna forma dependíamos netamente de ellos. Tampoco podía enviar y enviar marines a la selva para que se adentrasen en un mundo de peligros desconocidos. Montar campamento parecía, de momento, la mejor opción. Una vez hayamos llegado a un lugar con fuentes de agua y zonas de protección esperaríamos a la llegada de los exploradores. “Necesito saber si aquí hay una ruina, un templo, cualquier cosa… Un poder así por lo normal se encuentra en algún tipo de estructura, no en medio del bosque”, pensé mientras observaba a mis hombres.
Deathstroke
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Notáis como el suelo comienza a tener pendiente, la cual se incrementa bastante si seguís avanzando. Los reclutas comienzan a subir por esta cuando de pronto a uno de los que va en cabeza le cae algo a la cabeza. Si te acercas podrás ver que tan solo es una piña, una piña que parece haber caído de un árbol y que le ha abierto la cabeza a tu subordinando, dejándolo inconsciente y con una herida bastante grande y fea en la cabeza. Por cierto, sangra mucho, quizás necesite un médico.
Hay que ver con que fuerza caen estas piñas. Tras el pequeño incidente escucháis todos, el ruido del follaje de un árbol moviéndose, hay dos opciones, o bien se ha levantado un viento muy fuerte o alguien os está observando. Los jóvenes reclutas no lo piensan y los que van armados con fusil apuntan a la copa del árbol esperando tu orden para disparar. Mientras tanto tú, notas con tu mantra la presencia de algunos animales en tu radio de acción, las más cercanas son dos en el árbol al que apuntan tus hombres.
Además, puede que te interese, que acaba de llegar uno de los exploradores, tiene algo de sangre en sus manos, aunque no parece suya. Si le preguntas, te dirá que subiendo la cuesta hay un pequeño lago y un compañero con un golpe en la cabeza similar al que tenéis ahí.
Hay que ver con que fuerza caen estas piñas. Tras el pequeño incidente escucháis todos, el ruido del follaje de un árbol moviéndose, hay dos opciones, o bien se ha levantado un viento muy fuerte o alguien os está observando. Los jóvenes reclutas no lo piensan y los que van armados con fusil apuntan a la copa del árbol esperando tu orden para disparar. Mientras tanto tú, notas con tu mantra la presencia de algunos animales en tu radio de acción, las más cercanas son dos en el árbol al que apuntan tus hombres.
Además, puede que te interese, que acaba de llegar uno de los exploradores, tiene algo de sangre en sus manos, aunque no parece suya. Si le preguntas, te dirá que subiendo la cuesta hay un pequeño lago y un compañero con un golpe en la cabeza similar al que tenéis ahí.
Katharina von Steinhell
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
La caminata se volvía más tediosa con cada segundo que pasaba y nos cansaba más y más. La pendiente cada vez se inclinaba más lo que hacía que nuestra marcha fuera más lenta. Sin embargo, ese no era uno de nuestros mayores problemas porque de un momento a otro uno de nuestros hombres cayó inconsciente al piso con una profunda herida en la cabeza. “¿En serio? ¡¿En serio una piña es la responsable de esto?”, pensé con un poco de indignación. No podíamos fiarnos de que esta cayera por accidente. Como sea miré a mi alrededor y pregunté al marine más cercano si alguno de nuestros hombres era médico; en caso de ser así, dejaría que él se hiciera cargo del hombre herido. De lo contrario usaría mi conjuro Sanación para que el hombre no muriese desangrado.
Dirigí rápidamente la mirada hacia el árbol y sentí la presencia de dos animales… Ellos podían ser los responsables de que uno de mis hombres cayese al suelo, pero no podía simplemente asesinar a unos animales por sospechas. Deshacerme de personas era fácil, unos cortes por aquí y por allá, pero cargarme a un animal… Ya casi estaba pensando en volverme vegetariana. En fin, le pedí a los hombres que no dispararan y tuvieran cuidado.
–Pensaré que esto es únicamente por accidente –les dije, pero sabía que no era así–. A la próxima que caiga uno de nuestros hombres tienen absoluta libertad para disparar.
Finalmente llegó uno de los exploradores que confirmó que más adelante había un lago, pero uno de los hombres que mandé tenía una herida parecida a la del hombre que recién cayó. “Necesitaremos más de un doctor… Esto ya comienza a tornarse raro. Esto ya no es accidente ni casualidad, hay alguien que intenta deshacerse de mis hombres y no tengo la intención de permitir que siga pasando”, pensé. Miré el árbol del cual había caído la piña, levanté mi mano y lancé una bola de fuego con la intención de destruir todo lo que había ahí. Animales o no, habían dañado a mis hombres y esto ya comenzaba a molestarme. “Supongo que aún no podré volverme vegetariana”, concluí.
De todas formas, esa bola de fuego solo era una advertencia para mis supuestos enemigos. Les pedí a algunos marines que cargaran al hombre herido y a un doctor que corriera con el explorador para asistir al hombre herido. Acamparíamos en el lago y elaboraríamos un plan para deshacernos de nuestros supuestos enemigos. Con tan poca información no podía hacer nada más.
Dirigí rápidamente la mirada hacia el árbol y sentí la presencia de dos animales… Ellos podían ser los responsables de que uno de mis hombres cayese al suelo, pero no podía simplemente asesinar a unos animales por sospechas. Deshacerme de personas era fácil, unos cortes por aquí y por allá, pero cargarme a un animal… Ya casi estaba pensando en volverme vegetariana. En fin, le pedí a los hombres que no dispararan y tuvieran cuidado.
–Pensaré que esto es únicamente por accidente –les dije, pero sabía que no era así–. A la próxima que caiga uno de nuestros hombres tienen absoluta libertad para disparar.
Finalmente llegó uno de los exploradores que confirmó que más adelante había un lago, pero uno de los hombres que mandé tenía una herida parecida a la del hombre que recién cayó. “Necesitaremos más de un doctor… Esto ya comienza a tornarse raro. Esto ya no es accidente ni casualidad, hay alguien que intenta deshacerse de mis hombres y no tengo la intención de permitir que siga pasando”, pensé. Miré el árbol del cual había caído la piña, levanté mi mano y lancé una bola de fuego con la intención de destruir todo lo que había ahí. Animales o no, habían dañado a mis hombres y esto ya comenzaba a molestarme. “Supongo que aún no podré volverme vegetariana”, concluí.
De todas formas, esa bola de fuego solo era una advertencia para mis supuestos enemigos. Les pedí a algunos marines que cargaran al hombre herido y a un doctor que corriera con el explorador para asistir al hombre herido. Acamparíamos en el lago y elaboraríamos un plan para deshacernos de nuestros supuestos enemigos. Con tan poca información no podía hacer nada más.
- Cosas usadas:
- Bola de Fuego: Forma un pentáculo rojo frente a su mano y posteriormente lanza una bola de fuego del tamaño de una rueda de un camión. Esta bola tiene una velocidad inicial de 90 m/s + 10 m/s por cada 5 niveles. Al recorrer veinte metros esta se desvanece. Al impactar contra un cuerpo u objeto, causa una explosión con un radio de 1’5 m. + 0’5m. por cada diez niveles. Tiempo de recarga: 1 turno. Necesita de un alma pequeña o dos insignificantes.
Nivel 40: Los conjuros son un 75% más poderosos.
La Bola de Fuego (por mi nivel y el nivel de la tabla) tiene una velocidad de 315 m/s y la explosión cubre un radio de + 6.125 metros.
Deathstroke
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Tras escuchar tus palabras, los reclutas que apuntaban al árbol bajan las armas y se relajan un poco sabiendo que posiblemente no haya sido nada lo del hombre. Además, tienes suerte, uno de ellos tiene ligeras nociones de medicina y sabe cómo detener el sangrado, aunque para curarle va a ser necesario descansar en algún sitio. De momento, le venda la cabeza al herido con unas gasas sobre la herida, haciendo que el hombre deje de sangrar casi por completo.
La bola de fuego que lanzas a la copa del árbol hace que un par de bolas caigan al suelo, tienen bastante pelo y están envueltas en llamas, comienzan a gritar de forma bastante potente y a correr cuesta arriba, en la misma dirección que te han dicho que está el lago. Puedes ver que esas criaturas van corriendo a cuatro patas, tienen la cabeza un poco pequeña y cola, además su pelaje es de color beige. Por otra parte, los hombres que designaste para cargar al hombre herido lo cogen y comienzan a avanzar, el explorador coge al médico y avanza más rápidamente para atender al otro explorador. Mientras, tú y los hombres que quedan contigo os ponéis en camino llegando al lago cuando el explorador herido ya está atendido y curado, aunque sigue inconsciente, y al lado del lago los cuerpos inertes de los bichos que salieron corriendo, parece que no llegaron a tiempo (ahí tienes un par de almas).
Parece un buen momento para reorganizarse, aunque tan solo dispones de un par de minutos, ya que de pronto suenan un par de cañonazos seguidos de sus respectivas explosiones, no muy lejos de la zona en la que estáis, podríais pensar que son los que quedaron en el barco, pero, que raro, el sonido de cañones ha sonado en una zona opuesta a la que estaba el barco, ¿qué podría ser?.
La bola de fuego que lanzas a la copa del árbol hace que un par de bolas caigan al suelo, tienen bastante pelo y están envueltas en llamas, comienzan a gritar de forma bastante potente y a correr cuesta arriba, en la misma dirección que te han dicho que está el lago. Puedes ver que esas criaturas van corriendo a cuatro patas, tienen la cabeza un poco pequeña y cola, además su pelaje es de color beige. Por otra parte, los hombres que designaste para cargar al hombre herido lo cogen y comienzan a avanzar, el explorador coge al médico y avanza más rápidamente para atender al otro explorador. Mientras, tú y los hombres que quedan contigo os ponéis en camino llegando al lago cuando el explorador herido ya está atendido y curado, aunque sigue inconsciente, y al lado del lago los cuerpos inertes de los bichos que salieron corriendo, parece que no llegaron a tiempo (ahí tienes un par de almas).
Parece un buen momento para reorganizarse, aunque tan solo dispones de un par de minutos, ya que de pronto suenan un par de cañonazos seguidos de sus respectivas explosiones, no muy lejos de la zona en la que estáis, podríais pensar que son los que quedaron en el barco, pero, que raro, el sonido de cañones ha sonado en una zona opuesta a la que estaba el barco, ¿qué podría ser?.
Katharina von Steinhell
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Unas esferas peludas envueltas en llamas cayeron del árbol y comenzaron a gritar y correr cuesta arriba, en dirección hacia donde estaban esperando nuestros hombres. Me causó cierta vergüenza que algunos de los míos hayan sido gravemente heridos por criaturas con ese aspecto, aunque estaba claro que no podía confiarme. Necesitaba conocer un poco más de nuestro extraño enemigo. Por otro lado, uno de los marines a cargo mío tenía leves conocimientos de medicina y pudo vendar correctamente al hombre herido, deteniendo el sangrado. Algunos marines cogieron al herido y lo cargaron cuesta arriba, donde supuestamente debía esperar el explorador junto al médico que se llevó.
Comenzamos a caminar cuando de repente me encontré con los cadáveres de las criaturas que nos atacaron varios minutos atrás. “Vaya... Qué interesante, no sabía que estas cosas eran criaturas pensantes”, pensé mientras me agachaba para colocar mi mano sobre el cadáver de una de ellas. Tenía su alma y un cuerpo relativamente intacto, sin contar con las feas quemaduras, claro está. Obtener información era esencial y ya tenía la forma de cómo hacerlo, además siempre era bueno contar con un poco más de tropas. Cerré los ojos y concentré el poder de la magia en mi mano para liberarla sobre el cuerpo inerte de una de las alimañas, luego deposité su alma y pronto sería una de mis marionetas. Finalmente repetí el mismo proceso con el otro cadáver.
–¿Qué son y por qué nos atacaron? –Les pregunté cuando ya estábamos junto al lago– Quiero que me pongan al día sobre esta isla y lo que le habita.
Ninguna de mis criaturas no muertas podía negarse a responder, aunque si estas no hablaban mi idioma las cosas se complicaban. Aún no desarrollaba una mera conexión psíquica con mis no muertos para comunicarme sin necesidad de palabras. Solo quedaba esperar a que hablasen mi idioma y así obtener la información para prevenir ataques sorpresas y prepararnos para lo que fuera. Por otro lado, mis hombres estaban ayudando a los heridos, los cuales no me servirían de mucho, pero tampoco podía dejarlos tirados como si no valieran nada. Todo tenía su valor, tanto vivo como muerto.
Después de unos pocos minutos se escucharon cañonazos y por consiguiente explosiones. Alguien (o algo) estaba atacando y necesitábamos investigar. No era buena idea enviar a todos los hombres al mismo tiempo, primero guiaría un pequeño escuadrón de no más de cinco personas para ver qué estaba pasando y luego, en caso de ser necesario, llamaría al resto del grupo. Estaba más que claro que esas dos criaturas peludas se irían conmigo, pues debían ser las que mejor conocían la isla.
–Reúne a un tirador, un experto en comunicaciones y tres de los hombres más ágiles y veloces del pelotón –le ordené a uno de los marines–. Ustedes estén atento a mi llamado, pronto les informaré lo que está pasando aquí.
Comenzamos a caminar cuando de repente me encontré con los cadáveres de las criaturas que nos atacaron varios minutos atrás. “Vaya... Qué interesante, no sabía que estas cosas eran criaturas pensantes”, pensé mientras me agachaba para colocar mi mano sobre el cadáver de una de ellas. Tenía su alma y un cuerpo relativamente intacto, sin contar con las feas quemaduras, claro está. Obtener información era esencial y ya tenía la forma de cómo hacerlo, además siempre era bueno contar con un poco más de tropas. Cerré los ojos y concentré el poder de la magia en mi mano para liberarla sobre el cuerpo inerte de una de las alimañas, luego deposité su alma y pronto sería una de mis marionetas. Finalmente repetí el mismo proceso con el otro cadáver.
–¿Qué son y por qué nos atacaron? –Les pregunté cuando ya estábamos junto al lago– Quiero que me pongan al día sobre esta isla y lo que le habita.
Ninguna de mis criaturas no muertas podía negarse a responder, aunque si estas no hablaban mi idioma las cosas se complicaban. Aún no desarrollaba una mera conexión psíquica con mis no muertos para comunicarme sin necesidad de palabras. Solo quedaba esperar a que hablasen mi idioma y así obtener la información para prevenir ataques sorpresas y prepararnos para lo que fuera. Por otro lado, mis hombres estaban ayudando a los heridos, los cuales no me servirían de mucho, pero tampoco podía dejarlos tirados como si no valieran nada. Todo tenía su valor, tanto vivo como muerto.
Después de unos pocos minutos se escucharon cañonazos y por consiguiente explosiones. Alguien (o algo) estaba atacando y necesitábamos investigar. No era buena idea enviar a todos los hombres al mismo tiempo, primero guiaría un pequeño escuadrón de no más de cinco personas para ver qué estaba pasando y luego, en caso de ser necesario, llamaría al resto del grupo. Estaba más que claro que esas dos criaturas peludas se irían conmigo, pues debían ser las que mejor conocían la isla.
–Reúne a un tirador, un experto en comunicaciones y tres de los hombres más ágiles y veloces del pelotón –le ordené a uno de los marines–. Ustedes estén atento a mi llamado, pronto les informaré lo que está pasando aquí.
- Cosas usadas:
- Reanimación I: Conjuro de nivel experto. Solo necesita el alma del cuerpo que revivirá. Forma un no muerto con todas sus características y debilidades. Obedece completamente la voluntad de la bruja, pero es consciente de sus actos. Posee recuerdos y sentimientos así como una alineación; posee todas sus características que tuvo en vida. Tiene un alcance de 1 metro. Puede usarse siempre y cuando se posea el alma de la persona en cuestión.
Deathstroke
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Tu hechizo funciona y los monos que habías matado vuelven a la vida bajo tus órdenes. Cuando les hablas estos te empiezan a mirar expectantes, y cuando terminas tus preguntas y tu orden estos empiezan a aullar y chillar a la vez realizando gestos con las manos. Mientras realizan los gestos con las manos señalan hacia el interior de la selva, pero no en la misma dirección, sino más bien en la que han sonado los cañonazos.
Tras las explosiones, la mayoría de tus hombres parecen inquietos, como si estuviesen asustados por el ataque a la isla que ha sucedido. Sin embargo, una vez empiezas a dar órdenes llamando a algunos de estos, parecen que se tranquilizan un poco viendo que te manejas. En un par de minutos aparecen ante ti el recluta que mejores marcas de disparo tuvo, el que mejor controlaba los caracolófonos, y tres hombres ágiles entre los que está uno de los exploradores.
Los monos que están bajo tu control parecen ir hacia donde te señalaban antes, concretamente hacia una enorme piedra que está en la linde entre el lago y la selva. Estos te la señalan. Nuevamente, se vuelven a escuchar cañonazos, y esta vez tras las explosiones producidas por el impacto mucho ruido, como si la selva se estuviese moviendo o algo estuviese pasando por todos los árboles de esta. Ahora te toca decidir qué hacer, seguir a los monos o ir a explorar quien provoca las explosiones, aunque de momento parecen estar por el mismo lugar.
Tras las explosiones, la mayoría de tus hombres parecen inquietos, como si estuviesen asustados por el ataque a la isla que ha sucedido. Sin embargo, una vez empiezas a dar órdenes llamando a algunos de estos, parecen que se tranquilizan un poco viendo que te manejas. En un par de minutos aparecen ante ti el recluta que mejores marcas de disparo tuvo, el que mejor controlaba los caracolófonos, y tres hombres ágiles entre los que está uno de los exploradores.
Los monos que están bajo tu control parecen ir hacia donde te señalaban antes, concretamente hacia una enorme piedra que está en la linde entre el lago y la selva. Estos te la señalan. Nuevamente, se vuelven a escuchar cañonazos, y esta vez tras las explosiones producidas por el impacto mucho ruido, como si la selva se estuviese moviendo o algo estuviese pasando por todos los árboles de esta. Ahora te toca decidir qué hacer, seguir a los monos o ir a explorar quien provoca las explosiones, aunque de momento parecen estar por el mismo lugar.
- off:
- perdón por la tardanza
Katharina von Steinhell
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Tal y como sospechó: las criaturas no podían comunicarse con ella, al menos no como esperaba. Sin embargo, sí que parecieron entender su lenguaje, pues escandalosamente señalaron hacia el interior de la selva, precisamente donde sonaban los cañonazos. Katharina tragó saliva y parpadeó, sabiendo que si seguía el consejo de sus no muertos, los hombres bajo su cargo no se pondrían muy felices. Sin embargo, debían investigar la isla y hasta ahora no habían conseguido información útil, aunque las señales de los monos no eran precisamente informativas…
Tras dar las órdenes pertinentes para que el grupo comenzase a trabajar, varios hombres se presentaron ante la mujer de cabellos plateados. Todos parecían ser lo suficientemente capaces para desempeñar majestuosamente la labor, pero eso estaría por verse. Por otra parte, si Katharina decidía marcharse, no podía dejar a sus hombres sin alguien a cargo ni vagando de aquí por allá, necesitaba darles algo qué hacer.
—Mientras estoy fuera, buscando quién sabe qué, ustedes se encargarán de proteger el campamento. Buscarán todo lo necesario para sobrevivir: leña, alimentos, carne de mono —comentó mirando a sus reanimaciones—, lo que sea que tenga alguna utilidad. Si encuentran algo sospechoso, no guarden silencio e informenme inmediatamente.
La bruja siguió a las criaturas hasta llegar a una enorme roca que parecía ser la divisoria entre el lago y la selva. Por como los monos la señalaban, Katharina pensó que podía tratarse de algo realmente interesante, posiblemente les diera alguna información de algo. Por sus conocimientos de historia, sabía de sobra que los antiguos hombres tallaban o pintaban las rocas y paredes de cuevas y así registraban su conocimiento. Era posible que algo así estuviese en aquella roca, por lo que era necesario explorarla.
Sin importar si encontró algo o no en la roca, la bruja seguiría avanzando. No había tiempo para dudar, sin importar lo que estuviese al frente debía seguir avanzando. Pronto, nuevamente el sonido de las explosiones erizó los cabellos de la bruja. No quiso dar un salto del susto para no ser el hazmereír de sus hombres, aunque era bastante entendible que se asustara por un ruido tan repentino. Katharina debía decidir qué hacer… Seguir a los monos que estaban bajo su control o investigar el origen de las explosiones, aunque de momento todo indicaba el mismo lugar.
—Estas criaturas no poseen voluntad, si así quiero que sea —comenzó a decir Katharina—. No importa cuánto nos odien, no podrán desobedecer ninguna orden mía. Si les digo que se decapiten en este momento, lo harán, y de la misma forma, no nos traicionarán. Quiero que me guíen por el camino más seguro de la selva —les ordenó a los monos—. Necesito saber qué están señalando. O a quién.
Tras dar las órdenes pertinentes para que el grupo comenzase a trabajar, varios hombres se presentaron ante la mujer de cabellos plateados. Todos parecían ser lo suficientemente capaces para desempeñar majestuosamente la labor, pero eso estaría por verse. Por otra parte, si Katharina decidía marcharse, no podía dejar a sus hombres sin alguien a cargo ni vagando de aquí por allá, necesitaba darles algo qué hacer.
—Mientras estoy fuera, buscando quién sabe qué, ustedes se encargarán de proteger el campamento. Buscarán todo lo necesario para sobrevivir: leña, alimentos, carne de mono —comentó mirando a sus reanimaciones—, lo que sea que tenga alguna utilidad. Si encuentran algo sospechoso, no guarden silencio e informenme inmediatamente.
La bruja siguió a las criaturas hasta llegar a una enorme roca que parecía ser la divisoria entre el lago y la selva. Por como los monos la señalaban, Katharina pensó que podía tratarse de algo realmente interesante, posiblemente les diera alguna información de algo. Por sus conocimientos de historia, sabía de sobra que los antiguos hombres tallaban o pintaban las rocas y paredes de cuevas y así registraban su conocimiento. Era posible que algo así estuviese en aquella roca, por lo que era necesario explorarla.
Sin importar si encontró algo o no en la roca, la bruja seguiría avanzando. No había tiempo para dudar, sin importar lo que estuviese al frente debía seguir avanzando. Pronto, nuevamente el sonido de las explosiones erizó los cabellos de la bruja. No quiso dar un salto del susto para no ser el hazmereír de sus hombres, aunque era bastante entendible que se asustara por un ruido tan repentino. Katharina debía decidir qué hacer… Seguir a los monos que estaban bajo su control o investigar el origen de las explosiones, aunque de momento todo indicaba el mismo lugar.
—Estas criaturas no poseen voluntad, si así quiero que sea —comenzó a decir Katharina—. No importa cuánto nos odien, no podrán desobedecer ninguna orden mía. Si les digo que se decapiten en este momento, lo harán, y de la misma forma, no nos traicionarán. Quiero que me guíen por el camino más seguro de la selva —les ordenó a los monos—. Necesito saber qué están señalando. O a quién.
Deathstroke
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Llegas a la piedra que señalan los monos, es una piedra, más alta que tú, era una bonita piedra, que bonita piedra. Cuando las has observado detenidamente has podido ver algo en ella, parecía un mensaje.
Interesante, enigmáticas palabras para una piedra ¿qué querrán decir?, sigues avanzando gracias a que tus pequeñas marionetas decapitables te han entendido, te guían por un estrecho camino, o eso parece ya que la densa selva lo oculta bastante bien. Los cañonazos parecen haber cesado, ¡qué bien!, o no, quien sabe. Los monos no van muy rápido, y puede ser estresante, pero quizás sea bueno para la salud de todos.
“A grandes velocidades salta de un objetivo a otro, quizás no mate cuando salte, pero su temperatura quemará a todo aquel al que toque. Zig-Zig”.
Interesante, enigmáticas palabras para una piedra ¿qué querrán decir?, sigues avanzando gracias a que tus pequeñas marionetas decapitables te han entendido, te guían por un estrecho camino, o eso parece ya que la densa selva lo oculta bastante bien. Los cañonazos parecen haber cesado, ¡qué bien!, o no, quien sabe. Los monos no van muy rápido, y puede ser estresante, pero quizás sea bueno para la salud de todos.
Katharina von Steinhell
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Los monos terminaron enseñando una enorme piedra, mucho más alta que la marine. Decidió inspeccionarla, pues por algo las criaturas se esforzaron tanto en guiarla hasta ella. En un principio no encontró nada particularmente interesante, pero tras observarla con más detención encontró algunas runas grabadas en ella, además de una inscripción. ¿Qué significaba? Así de primeras no parecía tener mucho sentido…
La bruja se quedó pensando durante unos minutos, pensando de qué podía tratarse. ¿Acaso era un arma? ¿O una técnica secreta? Podía ser ambas. La inscripción aclaraba que se trataba de algo, un rayo tal vez, que rebotaba de un “objetivo” a otro. Si se estaba usando esa palabra, claramente debía ser un arma o una técnica.
—Dudo mucho que sean capaces de explicarme qué significa esto —susurró Katharina para sí misma—. Si es una técnica, de seguro encontraremos más pistas a medida que avancemos.
Antes de retomar la caminata, Katharina comprobó que no se le había pasado nada. Observó detenidamente la piedra, espacio por espacio, y una vez estuvo segura de que no había nada, comenzó a caminar.
Katharina activó su haki de observación para estar segura de lo que había a sus alrededores. Por suerte los cañonazos habían cesado y ahora lo único que escuchaban eran sus propios pasos. Los monos guiaron a su maestra por un camino bastante estrecho, caminaban a una velocidad endemoniadamente lenta. De momento la bruja solo seguiría a las criaturas traídas de vuelta a la vida e intentaría encontrar otra inscripción como la que encontró anteriormente.
La bruja se quedó pensando durante unos minutos, pensando de qué podía tratarse. ¿Acaso era un arma? ¿O una técnica secreta? Podía ser ambas. La inscripción aclaraba que se trataba de algo, un rayo tal vez, que rebotaba de un “objetivo” a otro. Si se estaba usando esa palabra, claramente debía ser un arma o una técnica.
—Dudo mucho que sean capaces de explicarme qué significa esto —susurró Katharina para sí misma—. Si es una técnica, de seguro encontraremos más pistas a medida que avancemos.
Antes de retomar la caminata, Katharina comprobó que no se le había pasado nada. Observó detenidamente la piedra, espacio por espacio, y una vez estuvo segura de que no había nada, comenzó a caminar.
Katharina activó su haki de observación para estar segura de lo que había a sus alrededores. Por suerte los cañonazos habían cesado y ahora lo único que escuchaban eran sus propios pasos. Los monos guiaron a su maestra por un camino bastante estrecho, caminaban a una velocidad endemoniadamente lenta. De momento la bruja solo seguiría a las criaturas traídas de vuelta a la vida e intentaría encontrar otra inscripción como la que encontró anteriormente.
Deathstroke
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
La piedra parece limpia de más inscripciones, por lo que puede seguir el camino tranquila, por que como bien has deducido, los monos no te van a saber explicar en qué consiten esas palabras, en caso de que les preguntases se rascarían la cabeza.
La jungla parece estrecharse por momentos, aunque tan solo son enormes hojas que caen sobre el camino. Parece que a tus marionetas les importan poco, sin embargo, hay un momento en el que estos saltan hacia la copa de un árbol y comienzan a moverse por las pequeñas lianas que hay entre árboles, ¿qué raro no? Como si se hubiesen cansado de caminar, o quizás sea por algo, aunque lo único que se ve delante es un pequeño palo y el suelo cubierto en un par de sitios por hojas secas. Mientras van por las lianas, te sacan algo de ventaja, sin embargo, cuando llegan a cierto punto se detienen a esperarte, parece un enorme tronco de una forma extraña cubierto por lo que parece musgo verde.
Si llegas hasta este tronco, podrás notar un par de presencias, aunque estas no están muy cerca (en el límite de rango de tu haki), lo curioso es que no están de donde vienes, sino hacia donde te diriges.
La jungla parece estrecharse por momentos, aunque tan solo son enormes hojas que caen sobre el camino. Parece que a tus marionetas les importan poco, sin embargo, hay un momento en el que estos saltan hacia la copa de un árbol y comienzan a moverse por las pequeñas lianas que hay entre árboles, ¿qué raro no? Como si se hubiesen cansado de caminar, o quizás sea por algo, aunque lo único que se ve delante es un pequeño palo y el suelo cubierto en un par de sitios por hojas secas. Mientras van por las lianas, te sacan algo de ventaja, sin embargo, cuando llegan a cierto punto se detienen a esperarte, parece un enorme tronco de una forma extraña cubierto por lo que parece musgo verde.
Si llegas hasta este tronco, podrás notar un par de presencias, aunque estas no están muy cerca (en el límite de rango de tu haki), lo curioso es que no están de donde vienes, sino hacia donde te diriges.
Katharina von Steinhell
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Ahora solo quedaba descifrar el significado de la inscripción de la roca... ¿A grandes velocidades salta de un objetivo a otro? ¿Qué quería decir? Sin duda alguna podía tratarse de una bestia muy rápida, pero ¿su temperatura quemará a todo aquel al que toque? ¿Acaso aludía a una criatura en llamas? ¿Un dragón, tal vez? No, no tenía mucho sentido. Katharina pensó que simplemente debía tratarse de un arma o una técnica secreta que los originarios poseían, de lo único que estaba segura era que descubriría su significado y, en caso de ser una poderosa habilidad, la aprendería.
De pronto las marionetas de la bruja cambiaron su método de avance, prefiriendo las lianas en vez del suelo. ¿Acaso había algo allí? Katharina había superado muchas aventuras y obstáculos y una de las cosas que aprendió fue a fijarse en los detalles. No tenía certeza de si había una especie de trampa o algo similar, pero no se arriesgaría a comprobarlo por su cuenta. Los monos le guiaban el camino, ella lo interpretaba. Cogió una roca del porte de su mano y la lanzó hacia donde estaban las hojas secas. En caso de que no sucediera nada, volvería a intentarlo para asegurarse y si obtenía los mismos resultados, continuaría su camino. Sin embargo, en caso de que fuese una trampa o algo por el estilo, usaría la telequinesis para hacerse levitar y atravesar flotando el sendero.
Los estúpidos monos le sacaron mucha ventaja, pero al menos se dignaron en esperarla en un tronco cubierto por musgo. En ese punto Katharina se detuvo en seco al percibir presencias, parecían lejanas y lo curioso de todo era que provenían de hacia donde la bruja se dirigía. No era de extrañar que hubiera gente en la isla, después de todo si la Marina se enteró de que había una especie de súper poder, ¿por qué no se enterarían bandidos y piratas? De momento no había certeza alguna acerca de las presencias, bien podían ser enemigos o amigos, ¿quién lo sabía? Solo había una forma de comprobarlo: avanzando.
De pronto las marionetas de la bruja cambiaron su método de avance, prefiriendo las lianas en vez del suelo. ¿Acaso había algo allí? Katharina había superado muchas aventuras y obstáculos y una de las cosas que aprendió fue a fijarse en los detalles. No tenía certeza de si había una especie de trampa o algo similar, pero no se arriesgaría a comprobarlo por su cuenta. Los monos le guiaban el camino, ella lo interpretaba. Cogió una roca del porte de su mano y la lanzó hacia donde estaban las hojas secas. En caso de que no sucediera nada, volvería a intentarlo para asegurarse y si obtenía los mismos resultados, continuaría su camino. Sin embargo, en caso de que fuese una trampa o algo por el estilo, usaría la telequinesis para hacerse levitar y atravesar flotando el sendero.
Los estúpidos monos le sacaron mucha ventaja, pero al menos se dignaron en esperarla en un tronco cubierto por musgo. En ese punto Katharina se detuvo en seco al percibir presencias, parecían lejanas y lo curioso de todo era que provenían de hacia donde la bruja se dirigía. No era de extrañar que hubiera gente en la isla, después de todo si la Marina se enteró de que había una especie de súper poder, ¿por qué no se enterarían bandidos y piratas? De momento no había certeza alguna acerca de las presencias, bien podían ser enemigos o amigos, ¿quién lo sabía? Solo había una forma de comprobarlo: avanzando.
Deathstroke
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Cuando ves que la roca golpea la primera zona cubierta por hojas secas notas que suena a cristal roto, de hecho, el mismo ruido cuando se rompe una bobilla. Además, genera su mismo sonido al estallar el cristal. En la segunda zona pasa lo mismo.
De pronto, desde un lateral, justo cuando vas a comenzar a cruzar, sale una pequeña bola que emite un ruido electrizante desde un lateral, pasa por delante de ti, cuando llega a otro extremo del sendero rebota de nuevo hacia el otro lado y comienza a avanzar hacia los monos como haciendo un zig-zag, aunque no les llega a dar pues se desvanece. Parece que te has librado de una trampa, avanzas sin más problemas hasta los monos, y cuando llegas hasta ellos siguen avanzando.
El camino de pronto parece cambiar, las hojas desaparecen casi por completo para ser hojas pequeñas que ocultan tras ellas y lianas rocas bastante lisas; el suelo ahora es más firme y recto, el cual va descendiendo adentrándose en el interior de la isla. Mientras, notas que algunas de las presencias han desaparecido, sin embargo, no notas que el grupo haya descendido. El ruido en la selva que escuchaste hace un rato ahora es más fuerte y ves que tus monos a medida que avanzas rascan en la pared de lianas y hojas.
De pronto, desde un lateral, justo cuando vas a comenzar a cruzar, sale una pequeña bola que emite un ruido electrizante desde un lateral, pasa por delante de ti, cuando llega a otro extremo del sendero rebota de nuevo hacia el otro lado y comienza a avanzar hacia los monos como haciendo un zig-zag, aunque no les llega a dar pues se desvanece. Parece que te has librado de una trampa, avanzas sin más problemas hasta los monos, y cuando llegas hasta ellos siguen avanzando.
El camino de pronto parece cambiar, las hojas desaparecen casi por completo para ser hojas pequeñas que ocultan tras ellas y lianas rocas bastante lisas; el suelo ahora es más firme y recto, el cual va descendiendo adentrándose en el interior de la isla. Mientras, notas que algunas de las presencias han desaparecido, sin embargo, no notas que el grupo haya descendido. El ruido en la selva que escuchaste hace un rato ahora es más fuerte y ves que tus monos a medida que avanzas rascan en la pared de lianas y hojas.
- off:
- perdón por tardar tanto me despisté en hacer la moderación
Katharina von Steinhell
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Una esfera electrizante y rebotadora... Interesante, ¿eh? Era una trampa de alta tecnología, aunque si su verdadero propósito era impedir el acceso de intrusos, era completamente inútil. No obstante, le dio una buena idea a la bruja. Cualquier idea podía ser replanteada por la magia y usada para el propio beneficio de la bruja. La inscripción de la roca fue el primer indicio de aquello, el cual quedó comprobado con la aparición de la esfera. Katharina en todo momento quería volverse más fuerte y aprender nuevas cosas, ya sea adquirir conocimiento histórico o desarrollar algún conjuro. Seguramente detenerse en medio del sendero para tomar un descanso no era la mejor de las ideas, pero le permitiría a la albina pensar con claridad.
Les ordenó a los monos que se mantuvieran alerta, vigilando la zona circundante en un radio de 10 metros en torno a Katharina. Sacó un bolígrafo marrón y con algunos relieves dorados, además de un libro de tapa de cuero con inscripciones que solo ella podía leer; claro, pues habían sido inventadas por ella. Podía decirse que era una especie de diario de vida, aunque no hacía relación a citas amorosas o peleas con los padres. Estaba lleno de bosquejos y extraños símbolos, además de garabatos y fragmentos de textos, algunos citados y otros creados por la peliblanca. En ese libro escribía todas sus ideas, ya fuese para desarrollar técnicas o liberarse de cargas emocionales. Buscó una página en blanco y comenzó a escribir rápidamente, diseñando un bosquejo del conjuro que tenía en mente.
Se acomodó, pues estar sentada sobre una dura roca no era lo más cómodo del mundo. Cerró los ojos y se concentró, reuniendo energía mágica y visualizando su objetivo. «La esfera electrizante me ha dado una buena idea para crear esto. Poseo ya varias técnicas basadas en calor, pero ¿acaso sé de alguna que electrocute a mis oponentes?», pensó. Colocó algunas piedras separadas las unas de las otras por un espacio de un metro y medio. Se ubicó a unos diez metros y llevó la energía mágica a sus manos. Lo que tenía en mente era lograr una especie de látigo manipulable con suficiente temperatura para fundir las rocas y, además, dotarlo de electricidad. Respiró profundamente y luego descargó su magia sobre la roca más lejana, pero ¿lo había conseguido...?
Después de varios intentos y, si lo conseguía o no, seguiría su camino. De pronto el camino cambió y las hojas fueron reemplazadas por un sendero firme y recto. Evidentemente podía existir una especie de peligro en él y era sensato tomar preocupaciones. Les ordenó a los monos que comprobasen la estabilidad del sendero y verificaran que no hubiese ninguna trampa. En caso de que estos diesen su visto bueno, Katharina caminaría hacia delante, aunque no sin estar alerta ante alguna trampa.
Les ordenó a los monos que se mantuvieran alerta, vigilando la zona circundante en un radio de 10 metros en torno a Katharina. Sacó un bolígrafo marrón y con algunos relieves dorados, además de un libro de tapa de cuero con inscripciones que solo ella podía leer; claro, pues habían sido inventadas por ella. Podía decirse que era una especie de diario de vida, aunque no hacía relación a citas amorosas o peleas con los padres. Estaba lleno de bosquejos y extraños símbolos, además de garabatos y fragmentos de textos, algunos citados y otros creados por la peliblanca. En ese libro escribía todas sus ideas, ya fuese para desarrollar técnicas o liberarse de cargas emocionales. Buscó una página en blanco y comenzó a escribir rápidamente, diseñando un bosquejo del conjuro que tenía en mente.
Se acomodó, pues estar sentada sobre una dura roca no era lo más cómodo del mundo. Cerró los ojos y se concentró, reuniendo energía mágica y visualizando su objetivo. «La esfera electrizante me ha dado una buena idea para crear esto. Poseo ya varias técnicas basadas en calor, pero ¿acaso sé de alguna que electrocute a mis oponentes?», pensó. Colocó algunas piedras separadas las unas de las otras por un espacio de un metro y medio. Se ubicó a unos diez metros y llevó la energía mágica a sus manos. Lo que tenía en mente era lograr una especie de látigo manipulable con suficiente temperatura para fundir las rocas y, además, dotarlo de electricidad. Respiró profundamente y luego descargó su magia sobre la roca más lejana, pero ¿lo había conseguido...?
Después de varios intentos y, si lo conseguía o no, seguiría su camino. De pronto el camino cambió y las hojas fueron reemplazadas por un sendero firme y recto. Evidentemente podía existir una especie de peligro en él y era sensato tomar preocupaciones. Les ordenó a los monos que comprobasen la estabilidad del sendero y verificaran que no hubiese ninguna trampa. En caso de que estos diesen su visto bueno, Katharina caminaría hacia delante, aunque no sin estar alerta ante alguna trampa.
Deathstroke
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Los monos obedecen rápido tus órdenes y comienzan a dar vueltas en círculos alrededor de ti a unos 10 metros, parándose un par de segundos de vez en cuando para otear el horizonte detenidamente, aunque no parecen ver nada en principio. Por otra parte, tu energía la manejas bastante bien, aunque un primer intento no sirve para conseguir lo que deseas. Parece magia bastante avanzada, por otro lado, tu perseverancia es digna de elogio y parece que poco a poco comienzas a lograr algo, pero no se parece a un látigo, que raro, estaba seguro de que había escrito látigo en el cuaderno. Quizás quieras revisar lo que encontraste por si anotaste algo mal, aunque el principio mágico parece correcto.
De tus manos salió una especie de barra cilíndrica que voló hasta las piedras y luego rebotó hacia una de las paredes de plantas, calcinando las plantas y dejando al descubierto la pared, parece que está caliente el rayo además de que la pared parece resistente para aguantar eso. Vuelves a probar más veces, sin embargo, en las diez primeras veces no te sale dos veces igual. En algún intento casi le das a uno de tus monos quien se sube asustado a la copa de un árbol, para luego bajar y seguir con su ronda. Sí, parece ser que necesitarás mucha práctica.
Prosigues tu avance, y tus monitos se adelantan con cuidado para que no te hagas pupita en el proceso, tras un poco, comienzas a escuchar voces, en un tono muy bajo, vaya, o tienes alguien cerca susurrando o está bastante lejos, por lo que sabes de tu haki de observación puedes descartar una de las dos opciones.
De tus manos salió una especie de barra cilíndrica que voló hasta las piedras y luego rebotó hacia una de las paredes de plantas, calcinando las plantas y dejando al descubierto la pared, parece que está caliente el rayo además de que la pared parece resistente para aguantar eso. Vuelves a probar más veces, sin embargo, en las diez primeras veces no te sale dos veces igual. En algún intento casi le das a uno de tus monos quien se sube asustado a la copa de un árbol, para luego bajar y seguir con su ronda. Sí, parece ser que necesitarás mucha práctica.
Prosigues tu avance, y tus monitos se adelantan con cuidado para que no te hagas pupita en el proceso, tras un poco, comienzas a escuchar voces, en un tono muy bajo, vaya, o tienes alguien cerca susurrando o está bastante lejos, por lo que sabes de tu haki de observación puedes descartar una de las dos opciones.
Contenido patrocinado
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.