[Empieza una nueva era] Garland VS Sharp D Drake

Como me esperaba, el marine detuvo mi golpe, para que luego nos echáramos atrás mutuamente. Al parecer, según sus palabras corrían rumores sobre mi por los mares. Eso hizo que me picara la curiosidad por conocerlos, y al parecer la mejor manera de hacerlo sería luchando contra aquél marine.- Por lo visto no hará falta que me presente.- Dije mientras relajaba mi katana sobre mi hombro.- Disculpa, pero a diferencia de los demás marines tú tienes un… Aroma diferente. Sospecho que no eres un mero recluta, y si lo eres, se han equivocado de rango contigo, amigo.- Dije sonriente, mientras que haciendo un giro sobre mi mismo acababa con otro par de reclutas que me intentaron atacar por detrás.- Me gustaría saber tu nombre.- Le dije mientras me volvía para mirarle.- Si me das un buen espectáculo, lo recordaré.
Era extraño, yo quería acabar con esto rápido, pero tenía una extraña sensación, como si ese hombre pudiera significar algo en mi vida. Si le estuviera subestimando, podría acabar entre rejas, así que decidí no subestimarle ni derrochar ninguna posibilidad. Así pues me puse en posición. No me gustaba hacer el primer movimiento, pero me iba a tocar a mi ya que fui yo el que “ha insistido” en luchar con él. Katana firme, posición segura. Si iba a ser el primero en atacar, tendría que hacerlo bien. Esa es una de las claves para ganar una batalla, hay que asentar el primer golpe. Había ahora algo raro en el ambiente. Los marines empezaron a hacer hueco, formando un pequeño círculo para que batallemos. Aunque alguno que otro quería incordiar. Podía escuchar como todos gritaban cosas en plan “¡Adelante Teniente!”. ¿Un Teniente? Interesante, esto prometía. No sabía si sería Teniente normal, primero o segundo, pero la última vez que me enfrenté a un Teniente a secas me había costado bastante dejarle cao. La adrenalina empezaba a fluir en mi interior. No me gustaba luchar de manera excesiva, sin embargo había ocasiones, y ocasiones. Sonreí.

Rápidamente me impulsé para empezar a correr hacia él. Empecé a mover mi katana de un lado a otro, así intentaría hacerle dudar sobre la dirección de mi ataque. También que tenía que tener cuidado con mi retaguardia, no estaba sólo en un uno a uno, tenía a toda una tripulación de marines que me rodeaban, y eso era peligroso. Tenía ojos en todas partes, aunque no podía dejar de mirar aquél martillo que portaba, me preguntaba de qué material estaría hecho, parecía pesado. También me deslumbraba la luminosidad de su calva y el peliazul de su pecho. Era un personaje peculiar.
Cuando llegué a un metro de distancia de él, decidí agacharme con una zancada para adelantarme un poco más y decidí hacerle un corte diagonal de izquierda a derecha para arriba. Si me salía bien, ese color peliazul de su pecho acabaría siendo pelirrojo y es posible que le hiciera una buena herida. Ahora era el momento de ver de qué pasta estaba hecho realmente aquél marine.- Empieza el juego.- Mascullé para mi, mientras se dibujaba una sonrisa en mi rostro.

Ya conocía el nombre del marine, Garland. El rango era el de Teniente Primero, me impresionaba. Al parecer mi intento de que no supiera mi movimiento final dio resultado, dejando que pudiera realizar el corte que andaba buscando. Y como pensé, el color bermellón de la sangre que se mezclaba con el tono azulado del pelo de su pecho, acababa por quitarle su color original, y dejarlo tenue y oscuro. Al parecer mi corte también hizo que le dividiera su pelaje en dos partes. Y una ya era negra, me faltaba ponerle la otra blanca para simular el ying y el yang. O al menos eso estuve pensando durante unas décimas de segundo mientras reía por dentro. Sin embargo, algo no fue bien. Con ese corte debería de haberse echado para atrás, sin embargo siguió de pie, firme, y en esa posición tras de mi ataque, no podría defenderme, o al menos no bien. El marine retorció su brazo y lo dirigió contra mi. Intenté interceptarlo con mi acero, pero no pude llegar a tiempo, definitivamente me comería ese puñetazo.
Pero hubo algo más que un puñetazo, hubo una explosión. Sí, cuando su puño estuvo por tocarme… Explotó, cosa que hizo que cayera de cara al cielo, soltando inconscientemente mi katana. ¿Qué había sido eso? El dolor que sentía era indescriptible. ¿Usuario? Ya dije de no quitar ninguna posibilidad, pero no pensaba en serio que sería un usuario. También estaba la posibilidad de que hubiera utilizado alguna clase de truco… Aunque no sabría cuál. Mientras pensaba en aquellas cosas, pude ver como ahora se abalanzaba contra mi para poder darme con su martillo. Reaccioné rápidamente rodando hacia la derecha para esquivarlo, donde aproveché para recoger de nuevo mi katana. Menos mal que esquivé ese golpe, pues pude sentir como temblaba la cubierta del barco.

Me levanté y recobré mi compostura.- Vale.- Me introduje mientras me quitaba algo de polvo de mis ropas, jadeante.- Ese corte debería de haberte echado para atrás, pero no fue así, resististe como un machote, como todo un…- Le miré por un momento.- Machoman.
A partir de ahora creo que le apodaría así. Tan sólo debíamos mirarle, musculoso, portentoso y resistente a los golpes, este tío era todo un Machoman.- La cosa.- Continuaba.- Es que ahora me voy a poner en serio.- Dije mientras cogía la cinta de mi brazo y me la ataba en la cabeza.- Y cuando peleo en serio, es difícil ganarme.- Dije con una sonrisa pícara, que a los segundos se cambió por una expresión seria, mientras miraba fijamente al objetivo. Pero algo me distrajo de mi concentración, escuché el sonido que hacían los marines al apuntar con armas de fuego, y me giré. Y parece ser que cuatro valientes intentarían dispararme. Y ellos al notar que yo me iba a girar, decidieron apretar el gatillo antes de que pudieran arrepentirse. Paré dos balas con mi katana, sin embargo las otras dos me dieron en el pecho… En un pecho de ceniza que se tragó las balas. Estaba de espaldas a Garland, y esperaba que no me hubiera visto. Si no sabía que era un usuario, podría darle la sorpresa. Como hice esos movimientos con la katana podría pensar que las paré todas. Pero los marines de enfrente no pensaban igual y me miraban aterrorizados. Decidí noquearles y después sacarme esas balas del pecho.
Ahora sí, volviendo la vista a mi objetivo principal, decidí que ya era hora de subiendo el nivel de mi ataque. No tenía todo el día y si hiciera otros cortes iguales podría seguir resistiéndolos este Machoman.- ¿Alguna vez has estado en un remolino?- Le dije mientras empezaba a mover mi katana, haciendo cortes en el aire.- Itorryu… ¡Tenpesuto!- Dije mientras maniobraba con mi espada. Hice giros en semi circunferencia con mi espada, para luego hacer un corte fuerte. Así pues, acabé formando un torbellino que me superaba en altura y anchura, y que lo dirigí hacia Garland. El torbellino el absorbería a él, y a todos los marines que se encontrase, y a menos que pudiera evitarlo, Garland se encontraba a mi merced, pues dentro del torbellino apenas podría tener movimiento, mientras que yo, le podría seguir realizando cortes. Si funcionada, el Machoman estaría casi en la estacada, o eso pensaba.

Itorryu… ¡Tenpesuto! [AIF]