¿ una comida entre familia ? (Privado) (pasado) (Sarah Foxxx - Ikaruga D. Kraken)

Después de sus palabras me he puesto roja como un tomate, me ha empezado a acariciar, y me ha acercado a el, tan cerca que casi se podrían rozar mis labios y los suyos, yo me acerque un poco mas, deje los ojos cerrados...

Antes de que hiciera nada le pregunte, -¿Porque me quieres a mi?...

-Tu espíritu es fuerte y me ha logrado cautivar… tus ojos me han revelado lo maravillosa que eres, negarme a ti en este momento para mí sería un error muy grande, y no soy de los que le gusta cometer errores.-

Dicho eso Ikaruga cerró sus ojos para luego darle un tierno beso en los labios a Sarah, rodeando su espalda con sus brazas para jalarla y que cayera sobre de él, era pesada pero el no le resultaba un problema podia con ella. Después de besar sus labios se retiró solo un centímetro para abrir sus ojos y mirarle con cariño. Se acercó a su oído derecho para susurrarle unas palabras.

- Además… si te soy un poco sincero - se puso muy rojo en ese momento - siempre me han gustado las mujeres altas, siempre me que querido sentir mimado por alguien más alta que yo, y tú eres la primera que me hace esto… además es de confesar que tú me haces sentir bastante – se pone aún más rojo- lindo.-

La verdad es que no esperaba en absoluto que hiciera eso, aunque ha sido el quien ha querido que me echase sobre el, me he levantado para no aplastarlo, por mucho que pueda conmigo eso no puede ser cómodo, aunque midas la mitad que yo.

-Ika, no esperaba esto, la verdad es que se me hace extraño, primero luchas contra mi, sin medir fuerzas, y luego me deseas, ciertamente eres un hombre de lo mas curioso, -digo esto último levantándome de encima de el, le doy un beso en la frente, y me dirijo a mi cama...

-Si quieres dormir mas cómodo puedes venir a mi cama, hay sitio de sobra para los dos, -digo mirándolo de reojo, mientras echo una ligera mirada hacia donde esta.

Finalmente hemos dormido juntos, obviamente no ha pasado nada, puesto que la altura de uno y otro no es la adecuada, físicamente sería imposible. Pero me he levantando con un dulce sabor de boca.

Obviamente no se negó a dormir a su lado, fue una noche muy placentera para él ya que durmió en compañía de una hermosa mujer como Sarah. Despertó abrazado a ella, le miró tiernamente a los ojos y le dio un tierno beso en los labios dándole unos buenos días. Aún estaba adormilado, lo primero que notó fue que el dolor en su cuerpo ya se había calmado. Estaba totalmente satisfecho con eso, acto seguido lo primero que siguió después del cariñoso saludo fue sentarse colocando su espalda contra el borde de la cama quedando sentado. Mirándole, acarició con lentitud su cabello para luego realizar una pregunta.

- Creo que deberías tomar baño tu primero hermosa – dijo esto sonriendo – normalmente suelo apoderarme mucho de el rato cuando entro en las mañanas, ¿quieres que use el den den mushi  y llame a recepción para que nos traigan un café?

Cuando lo veo a mi lado entiendo por que tenía ese dulce sabor, sonrío antes el comentario de que se echa horas en el baño, o así lo he entendido yo, me levanto desperezándome, estirando mi cuerpo, voy hacia mi bolsa, donde llevo algunas pertenencias, cojo la ropa necesaria para ir a la ducha, y mi peine con una goma del pelo, me fui a la ducha...

-En ese caso, mejor entro yo primero, -le dije sonriendo, al menos avisa, podría dejarme sin agua caliente.

Después de 10 minutos aproximadamente salí ya vestida, peinada, y arreglada.

-Te toca, yo pediré, tu aun tienes que arreglarte, y no es bueno que lleguen los cafés, te metas a la ducha, y que se congelen de esperarte, -le dije riéndome, la verdad, si iba a ducharse etc, no tenía sentido pedir los cafés para tomarlos fríos...

Levantándose de la cama después de que Sarah tomará su ducha. Su primera acción fue sonar los huesos de su cuello, mirando de reojo a la dama presente, le sonrió. Luego se dirigió al baño tomando su mismo conjunto de vestimenta. Al entrar al baño lo primero que se dispuso a hacer fue abrir el agua de la regadera, a diferencia de muchos a Ikaruga le gustaba mucho el agua fría.

Aproximadamente una hora transcurrió mientras él se encontraba dentro del baño. Al salir, ya vestido y preparado para desayunar observo como Sarah se encontraba hablando por el Den Den Mushi. Lentamente Ikaruga se acercó a ella desde atrás y le dio un cálido abrazo desde su retaguardia. Le dio un tierno beso por el cuello, para luego escuchar con mucha tranquilidad lo que ella hablaba por instrumento de comunicación.